Capítulo XLVII

Ilvermorny – Estados Unidos

En este momento Peter se encontraba en el despacho del director. Mientras Felicia asimilaba la idea de que el castaño pudiera revivir.

Fontaine: Debo decir que es sorprendente ver a alguien en tu situación –dijo calmado-. Eres muy hábil.

Peter: No creo que sea por eso.

Fontaine: Como fuera. Tu presencia hizo que la señorita Watson se volviera más alegre. Cuando regresó del torneo estaba muy decaída. Es de las mejores alumnas de este colegio.

Peter: Me imagino –dijo en un susurro.

Fontaine: La MACUSA quería que te entregara a ellos. Gracias a algunos contactos logré que Ilvermorny tomé la responsabilidad de su situación.

Peter: ¿MACUSA? –preguntó sorprendido.

Fontaine: El Mágico Congreso de USA –explicó-. Puedes pensar en él como el Ministerio de magia.

Peter: Gracias por ello –dijo con una sonrisa.

Fontaine: Ni lo menciones. Es un agradecimiento por mejorar el ánimo de una mis mejores alumnas. Ahora, el punto importante, supongo que quieres llegar a Hogwarts. Puedo conseguir un traslador para que los lleve al Ministerio de Reino Unido.

Peter: Estaría bien... –dijo dudando.

Fontaine: Pero...

Peter: Pero, ya que estoy en Estados Unidos, me gustaría ir a ver a mi tía, era su único familiar.

Fontaine: La familia... una gran obra maestra de la naturaleza. Puedo arreglar algo. Pero según las órdenes de la MACUSA deberás quedarte en Ilvermorny por un tiempo. Solo el tiempo que se demore la regulación de tu identidad. Como supondrás que una persona regrese de la muerte no es algo muy común.

Peter: Entiendo.

Fontaine: Debido a que originalmente eres un estudiante, decidí que lo mejor será continuar con tu educación, al menos lo que resta del año.

Peter: ¿Puedo hacer una pregunta? –recibió un asentimiento-. ¿Qué sucederá con Felicia y su hermana?

Fontaine: Bueno... ella no es ciudadana de este país, así que será regresada a...

Peter: No puedo permitir eso. Ellas pasaron por mucho, confían en mí para que sus vidas cambien. No las puedo abandonar.

El director no se movió ni un poco, pero en su mente analizaba al castaño. Los ojos de Peter demostraban determinación y amabilidad. Al finalizar, dejó salir una pequeña sonrisa.

Fontaine: Ya veo, supongo que enviaré unas cartas para pedir algunos favores.

El castaño salió del despacho y fue a buscar a su amiga. Fontaine miraba la puerta por la cual Peter se fue y soltó un suspiro.

Fontaine: ¿Qué intentabas con este muchacho, Albus?

Con un pequeño movimiento de varita los restos de una carta salieron de un cajón. Una carta que estaba quemada.

...

Felicia: Así que... ¿Seremos estudiantes?

Peter: Sí, lo que resta del año escolar.

Felicia: Y luego...

Peter: Iremos con mi tía. Te caerá bien, es la mejor tía del mundo.

MJ: ¿Quieres que le envié una carta?

Peter: No. Quiero que sea una sorpresa.

MJ: En ese caso, que tal si les muestro el colegio.

Felicia: Sería increíble.

Las semanas siguientes fueron más tranquilas. Hubo el problema de que el año escolar ya había avanzado, pero para Peter no fue difícil igualarse, con ayuda del castaño y de MJ, Felicia también pudo igualarse con sus compañeros. Aunque el rumor de que el castaño logró revivir se propagó, era el centro de atención del colegio. En su interior, Peter pensaba si esto era lo que sentía Hadley cuando se presentaba a cualquier extraño.

Durante sus clases logró destacarse en Defensa contra las artes oscuras, aritmancia y cuidado de criaturas mágicas. Situación curiosa para el castaño, porque los animales que parecían ser hostiles con los demás alumnos se acercaban a él de manera mansa. Por otro lado, Felicia no lograba llevarse bien con las criaturas, pero era muy apta para encantamientos y transformaciones.

...

Hogwarts

Hadley se encontraba temblando por el sueño que acababa de tener. El sr. Weasley había sido brutalmente atacado. Sus dos amigas, Gwen y Hermione, se levantaron lo más rápido que pudieron. Gwen intentaba que se tranquilizara y Hermione fue a buscar a la profesora McGonagall.

La azabache necesitó ayuda para caminar hasta el despacho del director. Cuando entraron vio al director, pero él solo esquivó la mirada de la azabache.

Dumbledore: ¿Qué sucede Minerva?

McGonagall: Es Potter, dice que atacaron a Arthur Weasley.

Dumbledore: ¿En el sueño estabas junto a la víctima o la veías desde arriba? –preguntó, pero no miraba a la azabache.

Hadley: No... era como si...

La puerta fue abierta y entraron los hijos de la familia Weasley. Hadley se sorprendió al ver a su amigo pelirrojo, ya que, desde hace meses no la ha visto. Sus nervios continuaron, además que el director parecía evitar cualquier conversación con ella.

Dumbledore: Everard, asegúrate de que lo encuentren las personas adecuadas. ¡Phineas! Ve a tu retrato en Grimmauld Place. Avisa que los hijos de Arthur irán por traslador.

Hadley: ¡Escúcheme! –gritó, llamando la atención de todos-. ¿Qué me está pasando?

Dumbledore se sorprendió por el arrebato de la leona. Para evitar cualquier diálogo llegó Snape. El director lo vio con alivio.

Snape: ¿Me llamaron? –preguntó serio.

Dumbledore: ¡Severus! Es de suma importancia, no podemos esperar.

Tanto el director como Snape se alejaron de los presentes. Dumbledore le dijo unas palabras y dirigió su mirada a Hadley. Cuando Snape se acercó tomó de la muñeca a la azabache y la llevó al salón de pociones.

Snape: Existe una conexión entre tú y el señor tenebroso. Si él es consciente de esta conexión no lo sabemos, esperemos que no lo sepa.

Hadley: Pero... –dijo temerosa-. Si él lo sabe... ¿podrá leer mi mente?

Snape: Leerla, controlarla y destrozarla. Para ello, recibirás clase de oclumancia. Esa será tu única defensa contra su influencia.

Hadley: ¿Oclumancia?

Snape: La defensa mágica de la mente contra penetraciones externas. Durante estas clases, yo entraré en tú mente y tú intentarás resistirte –apuntó su varita y dijo el hechizo para entrar en la mente-. ¡Legeremens!

Muchas imágenes de su vida pasaron frente a sus ojos. Era una niña pequeña, unos cinco años, veía a su primo recibir decenas de regalos, pero ella no tenía ninguno. La imagen cambió, ahora estaba siendo molestada por su primo y sus amigos en el colegio. Finalmente, apareció el recuerdo de cuando conoció a Peter, pasó al recuerdo de ellos en la cámara de los secretos y ellos cuando estaban en callejón Diagon.

Hadley: Es personal –dijo lanzando un hechizo al profesor.

Snape: Bien... para tu primer intento –dijo serio-. Me dejaste ir muy lejos. Debes quitar todo pensamiento o emoción.

Hadley: Lo intento.

Snape: No es convincente.

Luego de esa pequeña conversación siguieron practicando hasta que la hora terminó.

Snape: Quiero que todas las noches, antes de dormir, limpies tu mente de toda emoción, ¿entendido? Sabré si no lo hiciste.

La azabache regresó a su habitación en la casa de Gryffindor.

Hermione: ¡Hadley! –gritó preocupada-. ¿Cómo te fue?

Hadley: No lo sé... creo que bien –dijo insegura-. Parece que Voldemort está buscando algo... algo que está en el Ministerio.

Hermione: Descansa, debió ser muy difícil –dijo para llevarla a su cama-. Mañana estaremos en Grimmauld Place.

...

Horas después

Grimmauld Place

Los presentes estaban colgando las decoraciones de Navidad. El ambiente era muy ruidoso, la señora Weasley estaba gritando a sus hijos para que hagan las cosas, en otras circunstancias, sería un ambiente animado y cómodo, pero la azabache se sentía fuera de lugar.

Sra. Weasley: Aquí está –dijo ayudando a su esposo a sentarse.

Molly Weasley empezó a repartir los regalos que preparó a los presentes. A los gemelos les dio bufandas idénticas, a los demás les dio el clásico jersey que les da todos los años.

Hadley siempre estaba agradecida por los regalos que le daba la pelirroja mayor, pero esta vez fue distinto, sentía que no merecía ningún gesto de aprecio, ni siquiera estar presente en la reunión.

Sr. Weasley: ¡Un brindis! –dijo alzando una copa-. Un brindis navideño por Hadley Potter, sin la cual yo no estaría aquí. ¡Por Hadley!

Todos en el comedor brindaron por Hadley. Eso solo hizo que la incomodidad en la azabache creciera.

Hadley se encontraba deambulando por la casa, hasta que en una sala vio a un elfo. Cuando empezó a hablar era obvio su rechazó por "los traidores de la sangre" y "los sangre sucia".

Sirius: ¡Kreacher! –gritó enojado-. ¡Es suficiente! ¡Retírate!

Hadley: Este lugar –dijo viendo las paredes, en las que había un árbol genealógico.

Sirius: Es mi casa –dijo con pesadez-. Lo fue durante un tiempo, como soy el único Black le ofrecí este lugar a Dumbledore. Siento que es lo único que puedo hacer. Mi familia... los odiaba... tenían una obsesión con "la sangre pura". Me fui de esta casa... mi madre... dejó de considerarme su hijo.

Hadley: ¿A dónde fuiste?

Sirius: Con tu padre. Siempre fui bienvenido con los Potter. En ti veo mucho de él.

Hadley: Yo... –dijo con temor-. No creo ser como ellos... yo... cuando vi el ataque, yo era la serpiente. ¿Qué pasa si estoy convirtiéndome en él?

Sirius: Escucha Hadley, el mundo no está dividido en buenas personas y mortífagos. Hay bondad y maldad en todos... lo que importa son nuestras acciones, eso define quienes somos.

Las palabras dadas por su padrino la tranquilizaron. La azabache fue con sus amigas para pasar el rato.

Hadley: Hola. ¿Algo nuevo?

Hermione: A parte de Ron siendo Ron, nada.

Gwen: ¿Qué sucede con él? Entiendo que no se sienta cómodo con tantas chicas, pero pensé que siendo Navidad sería distinto.

Hermione: Solo lo escuché quejándose del regalo que le dieron y se fue muy rápido.

Hadley: Supongo que ya se le pasará –dijo-. Por cierto, no les conté, pero algo muy extraño pasó cuando salía de la sala de Menesteres.

Gwen: ¿Qué pasó?

Hadley: Cuando salía me crucé con Greengrass...

Hermione: ¿Astoria?

Hadley: Daphne Greengrass –explicó-. Yo estaba saliendo de la sala y me la crucé. Estaba patrullando con los otros Slytherins, pensé que me iba a entregar, pero solo me dejó ir. Incluso le mintió a Nott.

Ambas chicas escucharon el relato y no entendían la actitud de la serpiente.

Hermione: Tal vez no sea tan mala como creíamos.

Hadley: N... –intentó negar, pero recordó las palabras de Sirius-. Tal vez.

Ese fue el momento en que Hadley pensó que tal vez sí había bondad en las chicas con las que estuvo peleando desde que entró en Hogwarts.

...

Mansión Malfoy

Darcey: ¿Lo tienen?

Pansy: Fue complicado –dijo sacando un libro-. Pero mis padres no cuestionaron cuando les dije que lo necesitaba para mis TIMO.

Daphne: Destino, determinación y desenvoltura, es lo que se necesita para poder realizar la aparición.

Pansy: ¿Estamos seguras de hacer esto? –dijo temerosa-. No me gustaría saber que tengo mi cuerpo en Hogsmeade y mi brazo en mi casa.

Solo recibió la mirada de sus dos amigas sin ninguna palabra.

Pansy: Ok... estamos seguras.

Antes de continuar la puerta fue abierta.

Lucius: Darcey, los Nott enviaron una invitación para asistir a una fiesta. Procura no avergonzar a nuestra familia y estar en buenos términos con su hijo.

La rubia solo asintió y esperó a que su padre se fuera. Sus amigas vieron que estaba temblando mientras tenía una mirada seria en la puerta.

Darcey: Esto se hace cada vez más pesado.

Daphne: Darcey –la llamó-. ¿Cómo te sientes con...? Ya sabes.

Darcey: Es muy difícil ver a mi padre –dijo temblando-. Saber que él...

El pensamiento de los secretos de su familia estaba presente. Siempre pensó que sus padres buscaban lo mejor para la sociedad mágica, pero saber que ahora apoyaban al mago oscuro que causó terror hace años era inaudito. No pudo evitar pensar que estaba mal, y con ello, varias cosas más.

Darcey: Chicas –dijo viendo su varita-. ¿Qué nos diferencia de los muggle-borns?

...

Días después

Hogwarts

Los alumnos estaban de regreso al colegio. Hadley había escuchado que Hagrid estaba de regreso, acompañada de Hermione y Gwen, fue a su cabaña. Hagrid le contó que había ido por una misión de Dumbledore. La misión se trataba de reclutar a gigantes para pelear contra Voldemort.

La azabache se sorprendió por ello. Tener a gigantes de su lado sería muy bueno, pero toda esperanza se fue cuando les dijo que los mortífagos también fueron, y al parecer, el líder gigante era alguien cruel y sanguinario.

La situación empeoró cuando en la hora de la comida les llegó un diario. El profeta anunciaba un escape en masa de Azkaban. Varios mortífagos fueron los principales. Culpaban a Sirius de ayudar a los prisioneros.

Hadley estaba enojada, no solo tenían el problema de Umbridge, ahora sabían que Voldemort estaba buscando aliados y los había conseguido. Por otro lado, ella era llamada mentirosa por los ciudadanos.

Un par de días pasó y el grupo tenía en mente organizar una reunión con el ejército de Dumbledore. Pero no lo lograron debido a que habían recibido una nota advirtiéndolas que la vigilancia sería más estricta ese día.

Las tres leonas no sabían que pensar sobre la nota, sin embargo, decidieron que no harían ninguna reunión. Con ayuda de la capa de invisibilidad, Hadley salió a ver los pasillos, y como dijo la nota, la vigilancia era mucha. Cerca de treinta alumnos de Slytherin y Ravenclaw recorrían los pasillos, todos ellos bajo mandato de Umbridge.

Las notas de advertencia llegaron por una semana hasta que finalmente llegó una avisando que no habría vigilancia porque Umbridge realizaría interrogatorios. Hadley vio que esta era su oportunidad, así que, no tardó en enviar el aviso.

...

Hadley: El patronus corpóreo es un hechizo muy complicado –dijo a todos en la sala-. Necesitarán toda la concentración que puedan reunir.

Varios alumnos demostraron tener indicios de lanzar el hechizo correctamente. Por ejemplo, Hermione logró formar una nutria y Gwen formó un lobo.

Hadley: Siempre tengan en mente su recuerdo más feliz.

De pronto, Dobby apareció. Intentó darles un aviso, pero fue interrumpido cuando se escuchó una explosión afuera de la sala. Hadley ordenó que retrocedieran, desde el otro lado se empezó a escuchar la voz de Umbridge. El muro cayó y fueron descubiertos.

La azabache logró ver a Darcey, Daphne y Pansy a la derecha de Umbridge. En su mente se decía que había sido una tonta por creer en las Slytherins. Con una orden de Umbridge, atraparon a Hadley y la llevaron al despacho del director.

Umbridge: Debo avisarle al ministro. Estará aquí en unos minutos.

Tal como dijo, el ministro no tardó en llegar, junto a él estaban dos aurores y Percy Weasley. Hadley aún tenía enojo por Darcey, pero cuando entró la rubia vio que alguien venía atrás de ella, era Cho Chang, la chica que conoció en la primera reunión.

Finalmente, el ministro obtuvo lo que quería, una excusa para deshacerse de Dumbledore. Iba a ser enviado a Azkaban, pero con ayuda de Fawkes logró escapar. El momento de alivio solo duró esa noche. En la mañana siguiente, podían ver a Filch colgar un cartel.

Decreto de enseñanza n.º 119

«Dolores Umbridge sustituye a Albus Dumbledore como director del colegio Hogwarts.»

...

Queens - Nueva York.

Felicia: ¿Estás listo?

Peter: No –dijo nervioso.

Felicia: No puede ser tan malo.

Peter: Tú no estuviste muerta durante meses.

MJ: Tú puedes tigre –dijo tocando una puerta.

Pasó unos segundos hasta que la puerta se abrió y de ahí salió una mujer que Peter conocía muy bien.

Peter: Hola May –dijo más nervioso-. Pasaron muchas cosas.

.....

Gracias por leer.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top