Rayén al notar que ningún transporte pasara, decidió caminar hacia donde su hígado le indicaba. Voló bajo el agua, caminó por el cielo y nadó por la tierra hasta que llegó a un pequeño pueblo cuyo nombre no supo descifrar porque estaba en jeroglíficos.

—¡Bienvenida! —le dijo un señor ya mayor —. Hace mucho que no nadan visitantes por aquí.

—Hola, buen señor, mi nombre es Rayén.

—Rayita, que lindo nombre —se alegró el viejo —. Yo me llamo Juan Direk Thion.

—Es un lindo nombre —alagó la joven.

—Seguro querrás conocer a Yus Tinbi Ber —sonrió el hombre —. Ven, sígueme.

Mientras nadaban por las nubes camino a conocer a Yus Tinbi Ber, una canción comenzó a sonar a través de un ave.

Kiki majens tu maself
Nou maden jau jau aim trayin tuh
A wuan yuh aul tuh maself

Rayén y Juan comenzaron a cantar a ritmo la canción que después cambio a "Kilos de carne", provocando así que el viaje se hiciera más corto.

Cuando bajaron a volar a tierra, estaban a no mucho de la casa de Yus, según explicó Direk Thion. Pero en el camino se encontraron con Faith Secom O'Sammer, Lily Miss y Fifi Jarm Hony, unas conocidas de Juan y Yus con los cuales se quedaron a cacarear un rato.

Según se enteró la muchacha, Yus cantaba rancheras y su mayor éxito era "Beibi". Mientras tanto, Juan le contó que tenía 5 hijos de los cuales no quiso hablar mucho.

Al llegar a la triangular casa de Yus, tocaron la ventana y abrieron el techo informando que el caballero no se encuentraba.

Rayén triste por la noticia, decidió que mejor se iría para que su mamá no la retara. Para su suerte, se encontró con una estación espacial dónde tomó un cohete que la llevaba por el agua hasta Atlántida y desde ahí tomó un delfín volador quien lo acercaría hasta un pueblo no muy lejos de su hogar.