Capítulo 2

Despertó.

Cuando abrió sus ojos, no estaba en otro lugar que fuese su departamento. Estaba confundido, extrañado y se sentía demasiado raro, creyendo que lo de hoy a la mañana había sido un muy mal sueño, uno que sigue sin entender para nada.

—... oh, no fue un sueño

Recordó todo al lujo de detalles.

02:00AM – Ayer

Mirando las cámaras para ver si no había nada raro, John decidió simplemente dejar de hacer esto y ponerse a revisar su lugar de trabajo. Una oficina algo pequeña, pero contiene todo lo necesario para poder hacer su trabajo. Contaba con un baño, eso era impresionante. Tenía un sofá, una pequeña mesa de té y el resto de la decoración eran posters de los animatrónicos, así como miles de dibujos por los niños. Había unos dibujos de un conejo dorado junto a un oso dorado. Se parecían a Freddy y Bonnie. ¿Quiénes son?

Saliendo de eso, miró el escritorio.

Todo parecía normal. No había nada raro. Al revisar sus cajones, tampoco encontró nada fuera del otro mundo. Había un manual de cómo hacer su trabajo de guardia... bah, más que manual era un cuaderno con algunas anotaciones de Jeremy, suponiendo que era su letra.

"Si es que lees esto, déjame decirte: ¡bienvenido a la familia! Sé que trabajar de noche es tedioso. Lo sé, yo antes trabajaba en el turno nocturno. Tienes que saber que tu trabajo es asegurarte que el lugar esté en óptimas condiciones para los empleados que llegarán mañana por la mañana..."

Parecía divagar un poco. No es algo malo. Se notaba que había hecho esto con muchas ganas.

Entr4e que pasó página para seguir leyendo, frenó. Volvió hacia atrás. Miró bien lo escrito. Se refregó sus ojos varias veces. Miró fijamente lo que decía.

"Tal vez te has unido porque te gustan los animatrones y quieres hacerles cosas. Hehe, ¿sabías que están diseñadas para matar en caso que eso suceda? Puede que no lo parezcan, ¡pero pueden moverse y pensar por sí mismas! ¡¿No es grandioso eso?!"

—... ¿cómo?

"Sí, complicado de creer ¿verdad? Su creador las diseñó de tal manera, pero en el momento que le pongan un dedo encima, morirás. Hemos perdido varios guardias nocturnos así por lo que, si deseas vivir, has caso... o pagarás las consecuencias..."

¿Matar?

¿Cómo que matar?

¿Otros guardias han intentado hacerles algo y han sido asesinados? ¿No tendría que eso salir en las noticias o algo por el estilo? ¿Cómo es que se entera ahora?

Entre más pasaba páginas, más cosas le sorprendían de leer como, ejemplo, lo bueno y lo malo en sentirse atraído a los animatrones que más allá de ser robots, ¿por qué limitarse a humanos nada más?

Cerró el libro. Lo colocó en donde estaba y cerró el cajón. Cerró sus ojos. Sacudió su cabeza y tras eso, centró su vista una vez más en los monitores.

—... Jeremy... si has escrito eso... no estás bien...

12:24AM – Actualmente

Sí, se acordaba de todo lo que había leído y no sabe si sentirse bien o mal por ello.

¿De verdad pasó que algunas personas tocaron de formas indebidas a los robots y estos fueron asesinados? Si más mujeres reaccionasen de esa manera, sería un mundo ideal... pero, oigan, no todos deben ser robots que pesen demasiado... o que tengan armas... ¿tendrán armas equipadas con en las películas?

No sabe, ahora no quiere saberlo.

Su curiosidad es enorme... pero es mejor no pensar en ello.

15:46PM – Freddy Fazbear's

Para antes de hacer esta parada en el restaurante, aprovechó el teléfono que había fuera del establecimiento, haciendo una llamada al teléfono de su ex pareja, contándole que había conseguido un trabajo y que de alguna manera, intentará arreglársela para conseguir otro y ver si puede pasar de mejor manera el dinero.

Tras eso, obviamente recibiendo la contestadora, colgó y se adentró al local.

Esquivó a los niños. Casi choca a un par de ellos.

Fue directo hasta la oficina de seguridad.

Allí vio a Jeremy

—... —este estaba centrado. Miró detenidamente a las cámaras. Los niños, al menos hoy, no están orinando en cualquier lado dentro del baño. Parece ser que han aprendido. De reojo creyó que vio algo hasta que notó a John—. Ah, John... ¿qué haces?

—Vine a... ¿ver?, un poco el lugar.

—¿Te ha ido bien anoche? ¿Algo raro?

—¿Raro? Ahora que lo dices... dime... —quería saber si tener tacto o no. Bueno, no pierde nada de nada—. ¿Has... tienes idea de lo que ha sucedido a los guardias anteriores?

—¿Antes de ti? —asintió. Jeremy trata de hacer memoria—. Déjame ver... algunos han aceptado el trabajo, obviamente por las chicas, para luego llevarse una grata decepción lo que conllevó a que renuncien. Otros fueron despedidos... y otros simplemente dejaron de venir. Creí que ayer te conté todo...

—Es que... —se acercó hasta el escritorio. Jeremy se apartó con su silla al ver lo brusco que había sido, quejándose en el proceso. Este abrió uno de los cajones del mismo—. Hay un cuaderno y... —cuando él encontró dicho cuaderno y lo abrió para mostrarle a Jeremy, no encontró nada—. ...y había algo escrito...

—¿Algo escrito?

Jeremy tomó el cuaderno de las manos de John.

Al ver página por página, se sorprendió. Era suyo... no, no era suyo. Era el cuaderno de alguien más, un antiguo compañero. Lo que sí, no había nada escrito, solamente habían dibujos.

—Dibujos... de las chicas —y miró detenidamente a John—. ¿Los has hecho tú?

—Anoche cuando no sabía qué hacer, me puse a mirar todo el lugar. Cuando revisé los cajones del escritorio, me encontré con ese cuaderno... —y cuando él miró también, no había nada de lo que ha leído ayer. Eran dibujos. Debe admitir que son buenos... pero no viene al caso—. ...juro que decía algo...

—Viejo, apenas un día... ¿estás bien? ¿Realmente puedes con este trabajo?

—Yo... —sacudió su cabeza. ¿Tal vez ha tenido una mala noche?—. Creo que estoy bien... quizás deba dormir mejor... entre eso y ganar más dinero...

—Todos estamos iguales...

—Lo sé...

El cuaderno... preguntó si estaba mal si se lo quedaba. Jeremy dijo que no habría problema, el dueño nunca ha venido a buscarlo por lo que, puede hacer lo que quiera con el mismo.

John se lo iba a guardar. Quizás... por las noches aparecerá algo. Está seguro que leyó lo que leyó, se niega a creer que ha alucinado algo tan importante como eso.

—Oye, John —cuando sintió que le tocaron el hombro, el hombre se volteó—. Ya que estás, ¿no comerás algo? Dentro de todo, el contrato cubre la comida de aquí... comer pizza siempre no es bueno, pero, oye, ahorrar...

—... es buena idea

Al menos una buena pizza y el show de los animatrones ayudaría un poco a calmar sus preocupaciones...

21:30OPM – Gran Salón

—... ¿eres casado?

—Era, pero, sí...

—¿Qué pasó...?

—Eh... las cosas no salieron tan bien...

—... no preguntaré, pero, ¿fue por algo serio? —John asintió—. Vaya... sea lo que sea, espero que puedas seguir adelante con esta nueva vida —le contó muy por encima lo que pasó. Cometió un error y por ende terminaron y se divorciaron. Jeremy solo puede especular—. Sé que este no será el trabajo, pero te servirá de alguna manera...

—Y veré si puedo conseguir otro en el día —dejó de lado el café que amablemente alguien de cocina le hizo antes de retirarse—. Si la paga es mala como dices, entonces no me sirve esto solamente...

—¿Has probado en cocina? No es lo más lindo, pero, seguro alguna cafetería busca gente...

—Lo pensaré. Gracias, esta charla me ha servido bastante... y más la compañía...

—Te ves como una buena persona

—Creo que no lo soy, pero supongo que gracias...

—Ante malas situaciones, hay que apoyarnos. Después de todo, nunca tuve la chance de conocer a los otros guardias y hablar... además, es lindo ver cómo también las chicas ayudan...

John no sabe cómo comportarse.

¿Es normal ver tanta libertad en los animatrones? ¿No se van a rebelar? Los otros animatrones de otros lugares no son así... bah, no cree que alguien tenga la mente de crear un robot con un cuerpo como ese.

Alabado, y esto es por parte de la persona que escribe, sea el que haya creado tales robots.

—¿Son así... siempre?

—Lo son. Es más, mira esto —dijo con una sonrisa—. ¡Chica! ¡Ven!

La gallina amarilla, o dorada o como gustes, escuchó su nombre. Reconoció totalmente el tono de voz. Era el guardia que siempre les cuida durante el día. Ella se giró y fue hasta donde él se encontraba, no siendo consiente que, debido a la figura que tiene así como esos dos enormes pechos, cayeron encima de la cabeza de John quien, se quedó totalmente estático ante esto.

—¡Guardia Jeremy! ¡Hola! ¡Gracias por tus servicios como guardia!

—Vamos, no es nada —replicó—. Sabes muy bien que adoro mi trabajo y adoro cuidarles. Ustedes también hacen un excelente trabajo al cuidar a todos los niños

—¡Haha, gracias! Hemos sido programadas para eso. Cuidar, entretener y enseñar a los niños es nuestra misión —¿era normal que un animatron tenga un tono de voz incluso? Última generación, señores—. Pero, nada de esto se lograría sin ti... aunque... dime, ¿te ha gustado la comida de hoy? ¡Yo misma la preparé!

—Es estupenda —sonrió. Chica ama cocinar. Es muy buena. Debe seguir así. Por algo es la favorita de todos los niños—. Pero, no te llamé para eso sino para que conozcas a mi nuevo amigo

—¿Tienes amigos? Vaya, eso es interesante... —aunque con la sonrisa en rostro, el tono era de sorpresa. Hasta Jeremy resopló al escuchar esto. Estaba muy acostumbrado a este tipo de cosas—. Y... ¿dónde está? —cuando el peli rojo señaló hacia abajo, ella bajó su mirada. Solo veía sus pechos. Creyó por un instante que era una broma de mal gusto, pero Jeremy no era así. En su lugar, retrocedió. Ahí pudo ver entonces al amigo en cuestión—. ¡Ay! Perdona. No te había visto... juro que ha sido sin querer...

—...

Suaves.

¿Cómo mierda eran suaves? Pensó nuestro protagonista.

Grandes y suaves.

Pero, su shock venía más que nada por lo humano que sonaba.

Sí, ha visto que han dado una mano y les ha escuchado cantar. No fue la gran cosa, pensaba que esto era... programado o algo así. Pero, ahora, tenerla cerca, haberle sentido, así como incluso escucharle hablar como si nada... era humana...

—Perdona si no dice nada, es algo tímido... además, es la primera vez que te debe ver de cerca...

—¿Nunca has escuchado de mí? ¡Soy Chica! Aparte de tocar la guitarra junto con mi hermana Bonnie, me gusta cocinar a los niños. Dicen que mi pizza es la mejor, ¡y eso me alegra mucho!

—... un gusto —habló. Tragó saliva—. Soy... Soy John Blackwood —se presentó, girándose un poco para verle mejor. Agradece que haya retrocedido. Sus grandes pechos no le dejaba ver su cara—. ...

—Chica, John es el nuevo guardia nocturno. Espero que sepan cuidar de él tú y las chicas...

—¿Guardia nocturno? —dijo, algo perpleja. La misma lo miró detenidamente. Miles de datos a través de su vista podían verse al observar el rostro de John. Bonnie, que estaba un tanto lejos, escuchó esto con una de sus orejas—. Tú... ¿vas a cuidarnos?

—... esa... es la idea... haré lo mejor que pueda...

—...

Chica solo observó un rato más a John en silencio antes de retirarse.

Cuando pasó esto, John sacó una gran bocanada de aire. La presión que sintió de hablar tan de cerca con una de ellas... ¿por qué? Se tomó el pecho. Estuvo bastante nervioso.

—¿Te pone nervioso?

—... sí —respondió. Lo miró de vuelta—. No... no esperaba... es como si hablase con una persona... ¿seguro que no...?

—Te puedo asegurar que yo me desmayé la primera vez que me habló de la nada —confesó. De hecho, en su momento tuvo que usar una máscara pensando que le harían algo. Estuvo al borde del infarto aquella vez—. Te acostumbrarás... te lo prometo.

—Okey... es alentador pensar que no me desmayé...

—Procura descansar un poco. Te espera una larga noche, viejo...

Realmente iba a ser una larga noche...

00:30AM

No había un punto fijo hoy en su rutina.

No, de hecho, quería ver algo.

Con el cuaderno en manos, ya portando ahora el uniforme de su trabajo como guardia, esa vestimenta morada, John se dispuso a ver el cuaderno y su contenido. Efectivamente, estaban los dibujos. Pero, el detalle era que entre más pasaba las hojas, descubrió que de nuevo, esas palabras aparecían.

La letra era exactamente la misma que leyó ayer.

"[...] y un gran detalle. Podrán verse hermosas, pero te matarán. Chica, es la más dulce y amable de las tres, tanto que es verla y no te darán ganas de hacerle nada. Adora cocinar y hacer muy feliz a los niños. Eso sí, ella se pondrá algo triste si dices que su comida no es buena... y ni hablar si dices que detestas las pizzas..."

Habían algunos dibujos, consejos de cómo evitar a la misma en caso que ella se enoje al punto que quiera matarte. Como ha leído ayer esto, o algo parecido con el tema de ser asesinado, no fue el choque emocional tan fuerte. Seguía algo impactado, de hecho.

"Ah, Bonnie. La coneja más dulce y buena de todas. Claro, eso es lo que parece. En realidad, es alguien que no se anda con rodeos. Lo que quiere, lo obtiene. Deberías de tener cuidado, de por sí es muy agresiva, pero de ver que su hermana Chica es molestada o algo parecido, es tu final. ¿Mi consejo? Si te ganas a Chica, te la ganas a ella... aunque, es obvio que no es tan sencillo... los conejos pelean... y a veces sucio..."

Y para cuando pasó la siguiente página tras leer detenidamente más instrucciones de los animatrionicos, llegó a un dibujo de Freddy.

"... no la provoques"

—... ¿eso solo?

No había nada más. Entre más buscó, menos encontró. No había absolutamente nada de nada dentro. Es como si de las otras dos, y es verdad, hay información hasta el más mínimo detalle... y por Freddy, no hay nada.

—No hay nada...

Ahora se cuestiona seriamente si hizo bien al estar aquí...

01:50AM

Noche normal... bah, "normal" es la palabra que necesitas usar para esta situación.

No ha sucedido nada fuera de lo previsto.

Limpiar, asegurarse que todo esté en orden, revisar los baños para que no haya ningún niño escondido, mirar las cámaras de afuera del local en caso que ronde una persona, mayormente de color, peligrosa y que decida entrar a robar el establecimiento, mirar que los animatrones no tengan ninguna mancha, cosas de su trabajo.

Tuvo que encender de nuevo el generador.

Tuvo un apagón de la nada.

—... un momento. ¿Qué es esto? —se agachó al notar una mancha frente al interruptor. Tocó dicha mancha. No es un experto, pero esto lo reconoce de arriba abajo—. ...¿aceite? —era negro, sí. Además, vio algunos papeles. No entendía nada—. ...

Dejó de lado esto.

Al menos hay luz nuevamente.

Revisando todo que no haya nada raro, encontró un camino de aceite que, primero tomó un trapeador junto con un balde de agua con algunos productos para limpiar el suelo. En lo que iba limpiando el rastro, iba siguiendo el mismo. Tras unos minutos, el mismo rastro lo terminó llevando hacia el salón principal, lugar donde se encontraban aquellas tres chicas en la misma pose de siempre.

El aceite llevaba directamente hacia la coneja Bonnie.

—... —con el trapeador a un costado, este levantó la cabeza. Joder, eran altas. Tenía... ¿aceite?, en su cabeza o en una pequeña parte. No es mecánico, al menos de robots, y tampoco sabe de robótica... pero, ¿no estaría sangrando?—. ...sangrando, está sangrando... joder, si no sintiese que hablan como si fuesen humanos... —se tomó la cara. Negó. Subió al escenario. Se fijó si tenía algo para limpiar a Bonnie o algo por el estilo. Era una servilleta. No era mucho, pero algo sirve—. ...

Tuvo que subirse al escenario y buscar una silla de allí. No llegaba. ¿Quién lo manda a ser algo bajo? ¿Quién le manda a que ellas sean altas?

Accidentalmente, tras querer limpiar aquello, sí que rozó los pechos de la misma. Cerró sus ojos al haber hecho esto, apenado. Al suceder esto, pensó en eso sobre sentir atracción, además que horas antes sintió de primera mano los enormes pechos de Chica. Terminó de limpiar lo que sería "la herida" de la coneja.

—... —primero, tras terminar, dejó la silla donde estaba. Luego se puso a admirar el trabajo hecho... que era limpiar la disque herida que tenía. Bah, solo limpiar. No es que haya hecho más ¿no?—. ...son altas...

Admirando de cerca... lo son.

Habrá llevado tiempo en hacerlas... ¿verdad?

Cuando John, entonces, admiró de cerca a Bonnie o lo suficiente para que su cara no de contra los pechos de la coneja, esta reaccionó de la nada. Movió sus ojos para verle fijamente, algo que puso de los pelos de punta a John quien, se quedó en shock.

—¡BUU!

—...

No reaccionó ni nada. Solamente dio un paso hacia atrás, cayendo del pequeño escalón del escenario y cayendo al suelo, golpeándose la cabeza en el proceso en lo que impactó en el suelo.

¿Se murió?

No, pero a nada.

El susto ocasionado por Bonnie conllevó a que retroceda y con eso, se cayó... y perdió el conocimiento tras su cabeza impactar el suelo.

—... —y la coneja vio esto y tampoco es que haya hecho algo o se preocupe—. Vaya...

—¿Se murió? —Chica fue la segunda en reaccionar. Miró en dirección a John que, bueno, estaba tirado en el suelo—. No, todavía hay pulso. Bonnie, ¿qué has hecho?

—¿No has visto? Lo asusté. Se acercó demasiado. Creí que iba a hacerme algo

—¿Hacerte algo? No... no parece ser...

—Siempre queriendo defender a los guardias... pero bien que eres la primera en hacerles algo. ¿Qué pasa hermanita? ¿Te he ganado?

—¡No estoy hablando de eso! ¡Me refiero a que...!

Freddy, quien estaba "apagada" tuvo que meterse en la conversación, poniendo un dedo en boca de ambas, apoyar mejor dicho, para que se callen. Ya ha tenido que lidiar con esto millones de veces, no quiere que suceda de nuevo.

—¡¿Qué estás...?!

—... —les pidió que guarden silencio. Bonnie no quería, pero tuvo que acceder. Chica en su lugar, calló al instante que ella hizo esto—. Por fin tenemos guardia nocturno... ¿y haces esto? —sacó sus dedos de las bocas de sus compañeras. Miró a Bonnie, molesta—. ¿No dije que esperemos una semana a ver qué hace este guardia?

—Me tocó

—Más bien, te limpió... y viendo lo que te pasó en la frente, debo asumir que has sido tú la del generador de energía... —la coneja evitó la mirada de la osa, chistando en el proceso—. Ah, debí suponerlo —era ahora mirar al guardia. Lo ha visto antes. Sabe de sobra cuándo este mira en las cámaras. Había un hombre lleno de dudas más que lujuria. Aun así, nunca debe fiarse—. Ahora, vas, lo llevarás hasta su oficina y lo dejarás en el sofá.

—¿Por qué yo? —se quejó—. ¿Por qué no lo haces tú? ¿Por qué no lo hace Foxy? ¡Por su culpa casi que tuvimos que ser encerradas y desmanteladas!

—Aprendió su lección. Vive encerrada en su cueva. Ahora, no me hagas repetir dos veces lo que te pedí...

—... —hizo varias muecas, señas, de todo. Pero sin abrir en un momento la boca. Maldijo por debajo para aceptar esto de muy manera—. ...¡bien! ¡Pero me las vas a pagar!

La coneja, molesta por esto, bajó del escenario como si nada. Levantó como si fuese nada a John, cargándolo encima de su hombro para llevarlo hasta su oficina y ser... "considerada" con el nuevo guardia nocturno.

Chica, mirando esto, miró a Freddy luego, algo preocupada.

—Creí que...

—No lo sabemos. Este no mostró nada de lo que han mostrado antes

—Jeremy habló bien de él

—Lo sé

—¿Lo sabes?

—Sé todo, Chica —contestó. La mirada no era muy amigable que digamos—. Por eso, a veces es mejor controlar lo que uno dice... ¿no te parece? —Chica dejó de mirar a Freddy por temor. Esta volvió a su lugar—. Bien. Cuando vuelva Bonnie, dile que actuaremos como he dicho que íbamos a actuar antes de hacer lo que hizo

—¿Por...?

—Es tu hermana ¿no? Te escuchará a ti antes que a mí. Anda, retoma tu lugar. Mañana vendrán muchos niños...

Ambas retomaron las mismas posiciones de siempre cuando se encuentran arriba del escenario en lo que hizo esto Bonnie una vez dejó "muy amablemente" en el sofá, esta escuchó de Chica que debe volver a su posición.

Menos mal que se lo dijo ella, de haber sido Freddy, estaría muy dispuesta a pelearse ahora mismo con ella.

Chica vio a Freddy de reojo, tenía razón.

Las tres tomaron nuevamente su lugar y se quedaron allí sin hacer nada hasta nuevo aviso de la líder Freddy. Solamente era ella, la osa, quien movía sus ojos en estos momentos en dirección a donde estaría la oficina de seguridad.

Ya demostró ser diferente, es un punto a favor.

Solo espera que no sea como los anteriores.