CAPÍTULO 48


POV NOAH

—Por dios Hailey, no iré... estoy muy cansado —negué por cuarta vez, pero esta mujer si que era insistente.

—No acepto un no como respuesta —se sentó en la cama, lo que me hizo fruncir el ceño de inmediato—. No conozco a nadie en esta ciudad, aparte no todo el tiempo puedo tener estas oportunidades de turistear en medio de un trabajo.

Mi ceño se frunció aún más, cuando se quitó sus sandalias y gateó hasta donde estaba, recostado en el respaldar con mi laptop entre las piernas, tenía que revisar unos documentos que Aiden me había enviado de su departamento, el área contable.

—¿No te han enseñado a respetar el espacio de las personas? —pregunté, cerrando rápidamente mi laptop cuando quiso observar lo que hacía—. Lo siento, pero es una información confidencial.

—Yo lo siento —se disculpó rápidamente—. Tiendo a exagerar algunas veces la confianza que me brindan algunas personas...pero eso significa que me caes bien, así que siéntete alagado.

No pude evitar reírme y negué levemente, levantándome y guardando mi laptop.

—¿A dónde dices que quieres ir? —pregunté, entrecerrando mis ojos.

No me gustaba mucho la idea de salir con Hailey, no quería dar un mensaje equivocado, pero si sería bueno ir y conocer, estaría muy poco tiempo aquí y dudaba que Mia estuviera libre para salir y distraerme un poco, no había tenido días de descanso hasta ahora, la verdad no podía considerar esto como descanso cuando prácticamente estaba trabajando.

—¡SÍÍÍÍ! —Se levantó gritando y corrió hacia mi para abrazarme—. Hay unos lugares estupendos, espero tengas un buen estomago...porque comeremos mucho.

—Soy deportista —me encogí de hombro mientras me separaba de ella—. Siempre tengo hambre.

Le di la espalda y caminé hasta el armario mientras me quitaba la camisa, acababa de bañarme, así que solo necesitaba ponerme algo adecuado y estaría listo.

—Noah, detente —dijo rápidamente, volteé a ver que pasaba—. Impresionante.

—¿Impresionante? —la miré confundido—. ¿De que hablas?

—Es impresionante tu físico, que buen físico tienes —se mordió el labio levemente, mientras me violaba con la mirada—. No me quejaría si tuviera que despertar todos los días de mi vida al lado tuyo.

Ambos nos miramos fijamente por varios segundos y empezamos a reírnos.

—Estas loca, Hailey —declaré y me fui de allí antes que cometiera una locura y dañara la salida.

Si Aiden supiera esto seguramente me golpearía por lo estúpido que estaba siendo. Hailey se estaba lanzando, había movido una ficha y yo simplemente no hacia nada, sin duda seria la decepción de Aiden, pero llevaba más de un año sin involucrarme sentimentalmente con alguien, me había dedicado a mis profesiones de lleno y había cerrado la puerta del amor y las relaciones, además no estaba preparado para conocer a una persona, era obvio que nadie se compararía a Alison y jamás podrían despertar un amor como el que tenía por esa pequeña Walker.

Hablando de ella, fue la única maldita razón por la que acepté venir hasta acá, estaba lleno de trabajo, los entrenamientos para la temporada habían comenzado y todo me importó una mierda en cuanto supe que tendría la oportunidad perfecta para verla, no importaba si era por unos segundos, pero tenía que, tenía que calmar la ansiedad que había tenido desde que se fue de mi vida.

No era suficiente verla tras una pantalla.

Sí, la veía tras una pantalla cuando estaba con Jayden, las veces en que había coincidido con su horario me hacia al lado de él y la apreciaba, mis suspiros los guardaba para cuando estuviera solo, me veía idiota por como la miraba, pero me era inevitable no seguir viéndola como el amor de mi vida, muchas veces estuve a punto de llorar, era una puta nena... palabras de Aiden, no mías.

Sabía que esta era la consecuencia de la decisión que tuve que tomar, aunque cuando con una sonrisa en su hermoso rostro comentaba lo bien que le estaba yendo y lo feliz que era aprendiendo todo, sabía que había valido la pena.

La relación de mejores amigos con Jay sin duda se dañó, ahora solo éramos buenos amigos y socios, no podía creer que lo diría, pero Aiden se había convertido de una forma u otra en mi mejor amigo, mi yo del pasado jamás lo creería.

Me cambié y elegí unos jeans negros, zapatos nike blancos, una camisa básica negra y una chaqueta, cuando salí no había ningún rastro de Hailey en mi habitación, así que supuse que estaría en la suya, porque sí, compartía lugar con ella, pensé que todos tendríamos nuestro espacio, pero evidentemente no fue así.

—¡Hailey! —grité, caminando hasta la salida—. ¡Estoy listo! ¡o sales ahora o me iré sin...

Ni siquiera terminé, cuando ella ya venía corriendo.

—¿Qué dijiste? —me retó con la mirada, si ella pensaba que intimidaba estaba loca, su rostro era muy angelical como para hacerlo, volví en si cuando empezó a reírse sin parar.

—¿Qué sucede? —quise saber—. También quiero reírme.

Abrí la puerta para que saliera primero y habló.

—Nosotros, nos vestimos igual... las personas pensaran que somos pareja —la miré de inmediato y sí tenía razón—. Tranquilo bombón, esto ayudara a que nadie vaya a por ti.

Negué de inmediato y fui rápidamente a cambiarme por una camisa blanca y una chaqueta de cuero. Cuando volví, se notaba un poco molesta.

—No me desagrada que sucediera esto o salir contigo vestidos casi iguales —tenía que aclararle, no quería herirla—. Pero estoy seguro que habrá paparazis, saben dónde me encuentro y la prensa creerá que eres mi novia y no te dejaran tranquila por mucho tiempo, así que te evito esas molestias, ¿ok?

Una sonrisa pequeña hizo aparición en su rostro y asintió, entrelazando nuestras manos y sacándome a jalonazos del apartamento.

Bufé sin poder entender a esta mujer, ¿acaso no había escuchado lo que le dije?

[...]

—Eres como la hermana pequeña que nunca tuve —confesé, pensé que sería desastroso salir con Hailey, pero estaba resultando de lo mejor, era una buena compañía y constantemente me hacia reír con sus locuras.

—Auch, acabas de enviarme en un jet privado a la friend zone, gracias —exclamó sarcástica, reí sin poder evitarlo y la atraje hacia mi—. Si haces esto pueden fotografiarnos y pensar que estamos saliendo.

—No veo a nadie, así que todo estará bien.

—Si tu lo dices —se encogió de hombros, de repente empezó a saltar como una niña mientras señalaba un restaurante—. Tenemos que entrar ahí y cenar, esta entre los mejores restaurantes de la ciudad, tenemos que ir.

Miré la hora en el reloj y aun teníamos tiempo, así que asentí y fuimos hasta allá, gran sorpresa que nos dimos al saber que era con reservación, pero era Noah Anderson, yo podía solucionar con mi rostro y nombre, se podría decir que mi nombre y mi rostro estaba siendo una sensación para los medios gracias a que era el quarterback de uno de los mejores equipos del futbol americano, así que el recepcionista me conocía y nos dieron la mejor mesa del lugar. Le agradecí y me tomé una foto con él, quien muy respetuosamente la pidió.

—Por dios, creo que saldré contigo a todos lados —susurró Hailey en cuanto llegamos a la mesa.

La vista era realmente hermosa, todo el lugar era muy elegante, espero que la comida sea buena o juro que Hailey tendrá problemas conmigo.

—No me gustan este tipo de lugares —confesé, mientras veíamos la carta.

—¿Por qué? —me miró expectante, mientras su ceño se fruncia poco a poco.

—Se paga mucho dinero como para que tengamos que comer tan poco, soy de comer bastante, así que siempre quedo con hambre —empezó a reírse de repente—. ¿Qué?

—Nada, nada, ¿te parece si después de aquí salimos a comer pizza? —asentí de inmediato—. Per... ay mira, allí esta Alison. Que linda pareja hacen.

En cuanto escuché la palabra Alison y pareja mi cuello se volteó tan abruptamente que traqueó, casi moría.

Tres mesas al fondo estaba Alison besándose con alguien y por cómo se veía esa escena, eran pareja.

¿Por qué rayos Mia no me lo había dicho?, ¿Por qué mierda había permitido que viniera hasta acá para ver...esto?

Mi corazón empezó a latir rápidamente y mis manos se convirtieron en puño debajo de la mesa. Quería quitar mi mirada de ellos, pero no podía, estaba ahí como un estúpido viendo como el amor de mi vida estaba con otra persona, como otro hombre probaba sus labios, como otro homb...

—¿Estas llorando? —preguntó confundida.

Salí del pequeño shock y toqué mis mejillas, confirmando lo que acababa de decir. Me limpié rápidamente.

—Eh sí, tengo un pequeño tic... cuando veo vistas como estas —señalé los grandes ventanales—. Lloro, es una mierda de tic, pero tengo que vivir con ello.

Hailey no dijo nada por varios segundos, segundos en lo que me miraba como si estuviera loco y no dejaba de parpadear.

—Jamás escuché algo como esto —dijo para si misma—. Es raro, pero cool... supongo.

En eso llegó el mesero y pedimos, pero cada tanto mi mirada iba dirigida a su mesa y entre más lo hacía, más me enojaba al ver como se reía y como el empezaba a tocarla y...

—Basta —susurré, sin poder aguantar un segundo más.

—Tengo que ir a decirle algo a Alison personal, ya vuelvo quédate aquí —señalé levantándome y caminando hasta ellos.

Tenía la necesidad de ir a interrumpirlo y evitar que siguiera tocándola. No sabía que diría, no entendía porque me estaba dirigiendo hacia ellos sabiendo los términos en los que estaba con Alison, pero tenía qué.

—Alison —llamé, un poco alto.

Ella se giró de repente, parecía asustada.

—¿Qué haces aquí? —cuestionó, mirando alrededor y deteniéndose por unos segundos, seguro había visto a Hailey—. Les dije que no podría hoy, estoy ocupada por si no lo ves.

—Tu hermano —dije rápidamente. Era pésimo para esto, ¿por qué mierdas había nombrado a Jay?, ¡¿tú hermano, qué?! —. Tú hermano me pidió que te diera algo —confirmado, era un idiota, pero uno muy enamorado—. Creo que no nos veremos más, así que mejor dártelo ahora.

Frunció su ceño demasiado confundida y asintió mientras extendía la mano.

—No puedo hacerlo aquí, vamos a la terraza, ¿te parece?

Ella volteó a ver a él tipo, quien no dejaba de mirarme de manera extraña, no entendía la puta razón, pero lo menos que quería era que me mirara.

Quería golpearlo, por mi mente pasaban varios escenarios donde terminaba por golpearlo y si decía cualquier cosa de mal gusto, lo haría sin pensarlo.

—Claro —exclamó rápidamente—. Eh Noah, ¿puedo decirte, así? —esta vez fui yo quien frunció el ceño, ¿Qué mierda?

—Sí, supongo, ¿Cómo sabes mi nombre?

—¿Quién no sabe tu nombre? —inquirió obvio y fue donde entendí, era un fanático.

El novio de mi ex, era un fan.

—Dime —respondí.

—Lo estas haciendo estupendo, serás una leyenda sin duda —bueno, al menos sabía apreciar el duro trabajo que venia haciendo.

—Gracias, eso intento —respondí sinceramente—. Me la llevaré por unos minutos, no te importa, ¿verdad?

Él no diría que no.

—Claro, si es algo de su hermano entonces es importante.

Volteé a mirarla y señalé el camino.

No dije nada mientras nos dirigíamos a la terraza y ella tampoco, no sabía que iba a decir, no pude pensar esta parte y era muy malo para improvisar, demasiado, pero valía la pena, jamás pensé que estaría a su lado, viéndola, admirándola y teniendo la oportunidad de escuchar su voz nuevamente.

—Ya estamos aquí, ahora pásame lo que Jay me envió —respondió secamente, mientras hacia lo posible para tener el mínimo contacto visual conmigo.

Solo mírame como antes, unos segundos y podré resistir un poco mas la agonía que es estar sin ti —pensé.

—No te envió nada —dije sinceramente—. La verdad es que...

—No te quiero escuchar Noah Anderson, al parecer aun sigues siendo el mismo mentiroso de siempre, que pena contigo.

Asentí lentamente. Era difícil recibir ese odio, pero lo merecía, claro que sí.

—Es bueno volver a verte y saber que estas bien y ahora muy bien acompañada por lo que veo —Decirlo fue la cosa más difícil que había hecho hasta ahora.

—Sí, demasiado. ¿Ya puedo irme?, como ven me están esperando —se cruzó de brazos mientras yo pensaba rápidamente en cualquier cosa que hiciera que se quedara unos segundos más, solo necesitaba tenerla un rato mas a mi lado.

—Alison, yo quería hablar sobre lo que pasó hace un año, la verdad es que yo...

—No quiero saber nada del pasado, Noah —me interrumpió por segunda vez—. Mira dejé todo atrás y comencé de nuevo, ahora llegas tú queriendo revivirlo y no lo permitiré. ¿Quieres saber si te guardo rencor? No, ya te perdoné, ya sané, pero el que lo haya hecho no significa que te quiera en mi vida.

Mis ojos se llenaron de lagrimas y con dolor tuve que hacerme aun lado para que pasara y se fuera, no podía retenerla más, ¿Qué se supone que haría?, ni siquiera podría decirle la verdad cuando ya tenía a alguien en su vida y lastimosamente no quería escucharme.

Oficialmente acababa de perder para siempre al amor de mi vida y me quemaba desde adentro. 


UN CAPÍTULO LARGOOOO

LAS AMOOOOO

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top