- ¿Aun te gusta? Pensé que ya lo habías superado.

- No me gusta.- lo fulminó con la mirada.- es solo que no me gusta estar peleada con él.

- ¿Y porque se enojo contigo?

- Por que me escuchó hablar contigo por mi celular, y pensó que me invitaste a salir. De hecho, me prohibió salir, ahora mismo no debería estar aquí...

sting se río con diversión.

- Eso me huele a celos.- canturreó.

Lucy lo miro divertida, y le dio un pequeño en el hombro a su amigo.

- Estás loco, es imposible.

- Pff....- hizo un bufido.- ¿Por qué no? por lo que yo se, él no es tu tío de sangre, ¿Verdad?

Lucy solo negó con la cabeza.

- ¿Entonces, cual es el problema? Perfectamente podrían estar juntos.

- El problema es mi papá y mi madrastra, sting. Ya sabes como es él. Lo mío con Natsu es algo imposible, por más que me guste él.

- ¡Ja! ¡Te pillé! ¡Si te gusta tu tío!- exclamo.

- ¿Qué? Yo nunca dije eso.

- Mentirosa. Admítelo, te gusta tu tío.- la molesto. Lucy rodó los ojos, fastidiada.

- ¡No, no y no! y quítate esa maldita idea de la cabeza.- dijo cruzándose de brazos.

- Esta bien.- hizo un puchero, haciéndola reír.- ahora vamos al centro comercial.- metió la llave al contacto y colocó su auto en marcha.

- ¿Ya tienes pensado como invitaras a salir a yukino?- preguntó ella.

sting se detuvo en un semáforo para mirarla a los ojos.

- No lo sé... dime tú, ¿Hablaste con ella?- Lucy asintió.- ¿Y que te dijo?- pregunto tímido.

Lucy lo observo. Sting apretaba el volante fuertemente, y movía sus manos alrededor de este nerviosamente. Su mejor amigo estaba enamorado. lucy sonrío tierna mente, conmovida por su timidez.

- Me habló maravillas sobre ti. Le gustas, sting.- afirmó con sinceridad.

Él dejó salir todo el aire en sus pulmones, aliviado. lucy río.

- ¿Tú crees?

- Si, créeme. Se cuando una chica esta enamorada.- le guiño un ojo.

- ¿Lo dices por experiencia?- se río, haciéndola enfadar.

- No.- y lo fulmino con la mirada

lucyy sting entraron al centro comercial. Primero entraron a una tienda de vaqueros y camisetas, en donde lucy escogió para él una camisa de cuadros junto con unos pantalones azul oscuro, que hacia resaltar sus piernas naturalmente bronceadas y tonificadas. sting era sin duda apuesto, con sus 17 años ya había logrado conquistar a medio instituto. Ylucy no se quedaba atrás, los dos eran inseparables, conocidos desde pequeños. Mucha gente creía que eran novios, pero la verdad es que no iban más allá de una bonita amistad.

lucy cruzó las piernas, mientras se abanicaba con una revista y bebía de su coca-cola.

- Ya esta todo listo. ¿Dónde opinas tu que la invite a salir?- pregunto sting, bebiendo de su zumo de naranja.

- Mmh... se nota que Yukino es una chica sencilla, así que te sugiero que la invites a una cena, nada formal.- sonrío.- si, muy romántico. Con eso bastaría.

Los ojos de sting se iluminaron con un brillo especial, que ella notó.

- Espero que funcione, de verdad lucy, esta chica me tiene loco.

- No te preocupes, todo saldrá bien. En menos de dos segundos tendrás a yukino bajo tus pies.- sonrío sin mostrar sus dientes.- ¿Qué hora es?

- Las diez.

- Mierda.- masculló.- que tarde es, mi tío me matara.- dijo tapándose el rostro con las manos.

- Tranquila, yo te llevo a tu casa.- se levanto de la silla y dejo un billete de 5 dólares encima de la mesa.- ¿Vamos?

Ella asintió y ambos salieron del centro comercial. Al instante lucy se coloco la chaqueta al sentir el frío de la noche rozar con su piel. Se dirigieron al estacionamiento y se subieron al auto de sting. Al llegar a la casa de lucy, se bajaron y se despidieron.

- Gracias por ayudarme con lo de yukino, lucy.- le dijo sting.

- No hay de que.- sonrío.- me llamas después para saber como te fue con ella.

- Vale.- sonrío.- cuídate pequeña.- besó dulcemente su mejilla.

- Igual, adiós.

sting se subió a su auto y lucy solo se movió cuando lo vio desaparecer por las calles. Se giró y se cruzo de brazos, tratando de contener el calor. Camino hacia la puerta principal de la casa y metió las llaves en la cerradura. Entro y la cerró. De repente, las luces se encendieron y apareció su tío al frente de ella sentado en un sillón. Tenía los puños y dientes apretados, y un músculo palpitaba en su mandíbula.

- Llegas tarde.-su voz era dura y fría.

lucy tragó saliva..

HASTA LA PRÓXIMA   ⊙ω⊙ ≧０≦