3.- La primera señal antes de la sorpresa.

Nuestra tripulación consiguió buenos avances en el creciendo del bebé gracias a su apoyo, y podría decirse, que el mismo capitán fue el que tubo más resultados.

Nuestra navegante siempre cambiaba su humor casi toooodo el tiempo, pero el hombre de goma siempre le sacaba una sonrisa dejándola en gran ánimo.

Nos encontramos en la cabeza del Sunny dónde el hombre de goma reposaba contemplando el mar con calma y tranquilidad.

Y por supuesto, no olvidó hacer de su parte.

Nami: ¡Luffy! 'Llamo a su capitán'.

Así, vemos a la pelinaranja con el vientre más abultado saliendo de su habitación después de una larga siesta.

¡Luffy! ¿Dónde estás?

Luffy: ¡Yo, Nami!

En eso, el joven salto de la cabeza del león hasta llegar donde ella.

¿Ocurre algo?

Nami: Si, necesito que hagas otro favor.

Al escucharla, el joven no le agrada a tanto la idea que no fuera otra rara.

Cómo sabrás, el bebe podría nacer en cualquier momento. Necesita que le demos calor, así que la orden... Es que no te separes de mi.

En escuchar la instrucción, el joven solo quedó confundido cuando escucho sobre... "Calor".

Luffy: ¿Calor? Pero... ¿Eso no ocurre todos los días?

Nami: Eso es distinto, el calor paternal es necesario para que el bebé sepa que estamos ahí.

Por eso, quiero que estés conmigo todo el tiempo.

Con escuchar eso, el joven solo sonrió aceptando algo que le parecía muy fácil.

Luffy: Bien, puedo con eso 'Dijo confíado'.

Nami: Bien. Recuerda, esto es por el bien del bebé. Más te vale no olvidarlo.

Luffy: Claro, claro. Yo me encargo.

Así, la pareja de futuros padres comenzó su día en familia. Por primera vez.

En la hora de almorzar, ellos se sentaban al lado del otro listos para degustar de los platillos.

Así, vemos cómo los tripulantes mirando tensos a la pareja comiendo como bestias tomando todo lo que puedan de la mesa.

Usopp: Realmente... Ambos se volvieron iguales cuando Nami comenzó su embarazo.

Chopper: Bueno, aunque esta pasando por los cambios de humor, esta en buen estado.

Robin: Si, es cierto. Además, se ven muy lindos que actúen igualmente.

Aunque la arqueóloga diga eso, el pobre cocinero solo mordía su camisa mientras lloraba de frustración como la pelinaranja se la pasaba más con su capitán.

Sanji: Maldito suertudo, Nami-san siempre esta con luffy todo el tiempo. Si yo fuera él estaría en el paraíso.

Zoro: Si, si. Ya estarías llorando en el paraíso de los idiotas pervertidos 'Dijo burlón'.

Sanji: ¡¿Ah?! ¡¿Qué dijiste, tronco con musgo?! ¡¿Quieres pelear?!

Zoro: ¡Por mi no hay problema!

Pero antes de que vuelvan a su discusión...

Nami: ¡Sanji-kun, otra más!

Sanji: Hai, Nami-swan 'Dijo al correr a la cocina'.

En eso, el rubio cocino más platos en darle con gusto a la pelinaranja quién no perdía tiempo en tomar lo que tenga.

El capitán observaba a la joven como comía igual que él con una extraña sensación en el estómago.

Por primera vez, había sentido algo como... "Mariposas en el estómago", era otra sensación que no entendía porque le ocurría.

Pero por alguna razón... Le agrada a sentirla. Peor entonces, vio como ella se había ensuciado de arroz en sus labios.

Luffy: Oye, Nami. Trata de no ensuciarme mucho, ¿Si? 'Dijo al tender la mano'.

Al hacerlo, tomo de los granos que había en su rostro para comérselos el mismo.

No sería bueno que ensucies tu sonrisa, ¿Verdad?

Esa acción hizo sonrojar a la joven y sorprendiendo al rubio quien no esperaba esa clase de movimiento.

Aún así, la joven no podía quitar su sonrojo mientras miraba a su capitán quien le dedicó una sonrisa.

Aunque él lo decía con inocencia, la joven no podía evitar sentir felicidad por dentro viniendo de él.

Nami: Amm... Gracias, t-tendre más cuidado.

Al disculparse, el pelinegro volvió a sonreír con satisfacción.

Luffy: Shishishi, me alegro 'Dijo al volver a comer'.

Por muy inesperado que parezca, los tripulantes podían decir... Que el capitán ya estaba cuidando de su navegante aunque no lo tome en cuenta.

En cuanto la joven se levantaba, la arqueóloga siempre llamaba a su capitán para que valla y cumpla la petición (orden) de la navegante.

Y en casi la mayoría de veces, la pelinaranja lo llamaba para pedirle otro favor algo... Complicado.

Vemos al hombre de goma entrar en la habitación donde esté mira como la pelinaranja trataba de quitarse sus ropas, pero no se veía muy fácil.

Nami: Ah, Luffy. Llegas justo a tiempo, necesito que me ayudes con esto.

Luffy: ¿Qué pasa ahora? ¿Quierés volver a quedar desnuda? 'Pregunto curioso'.

Nami: ¡Claro que no, idiota! Solo quiero que me ayudes, con el vientre así me es difícil quitarme la ropa.

Y era así, ya que la joven siempre se el complicaba en ponerse bien algunas camisas o pantalones debido a que su vientre ya tomo forma.

Por eso quiero que me ayudes en desvestirme, quiero ponerme una ropa más cómoda.

Luffy: ¿En serio? ¿Eso no sería más fácil si no fueras gorda?

Al decir lo último, la pelinaranja detuvo su intento de desvestirse antes de irradiar un aura de muerte dándole escalofríos al capitán.

Nami: Luffy... 'Llamo siniestramente'.

Luffy: ¿S-si...?

Nami: Si no quieres quedarte sin dientes... Más te vale quedarte callado y hacer lo que te diga, ¿Entiendes?

Luffy: Ah, si... 'Dijo a nada de hacerse encima'.

Entonces, el pelinegro solo se acercó a ella en tomar lo extremos de su camisa listo para tirar de ella.

Nami: Bien, cuando cuente hasta 3, tirá con fuerza para sacarla. Trata de no ser tan rudo para no lastimar al bebé.

Luffy: Bien, lo intentaré.

Nami: De acuerdo. 1...

(El joven apretó su agarre)

2...

(La pelinaranja levantó sus brazos)

¡3!

Entonces, el pelinegro tiro de la camisa hacia arriba haciendo que salga rápidamente y con facilidad.

Solo que al hacerlo, el capitán vio algo que no esperaba...

¡Ella no tenía sujetador!

Cuando levanto la camisa, veía aquellos pechos moverse y rebotar por la fuerza que uso para ayudarla.

Al terminar, la joven pudo suspirar de libertad al sentir mejor brisas enfriar su caluroso cuerpo.

Fua... Me siento de maravilla. Gracias, luffy. Creo que podría perdonarte por lo que dijiste-

Al voltear a verlo, vio como el no quitaba la vista de ella dejándola extrañada de ello.

¿Qué? ¿Pasa algo malo?

Al preguntar, el joven no daba ninguna respuesta. Solo no apartaba la vista de lo que tenía al frente.

La pelinaranja aún no entendía el porque su capitán no apartaba su mirar, hasta que vio hacia abajo... Y entendió el motivo.

Ella se enteró de que sus senos estaban a la mira del pelinegro haciéndola sonrojar de golpe antes de cubrirlos.

Entonces, el joven salió del trance antes de fijarse en su navegante quien lo miraba como perro furioso dejándolo confundido.

Hasta que entendió el porque de su mirada enojada antes de tratar de justificarse.

Luffy: ¡N-nami, espera! ¡F-fue solo un error!

Nami: Los viste...

Luffy: ¡N-no! B-bueno, si ¡Pero no era mi intención, lo juro!

Nami: Aún así... Los viste. Y te quedaste mirando...

Luffy: E-es que... Y-yo solo...

El joven se sentía atrapado entre enfadar a la navegante, o sentir su furioso golpe en el rostro.

Entonces, lo único que el hombre de goma podía hacer... Es ser honesto en lo que pensaba.

¡No pude evitar mirarlos, ¿Ok?! ¡Se veían lindos y atractivos! ¡Incluso se veían como si fueran gelatina! 'Dijo con prisa'.

Cuando la jóven escuchó las palabras de su capitán, lo único que sintió era que su rostro se volvía más rojo que la misma sangre.

Y no podía quitar las palabras "atractivos y lindos" de su cabeza, eso solo la hacía avergonzarse más.

Pero con lo último de que eran como gelatina... No era tan lindo para ella.

Así que solo se levantó dándole más nervios y escalofríos al capitán.

Nami: Luffy... Acabas de ver lo que es más importante para una mujer, y tú solo te quedaste en silencio mirándolos.

Todo... Todo eso... Es irremediable.

Así, la joven solo se acercaba al pelinegro mientras esté termino acorralado en la pared.

Luffy: E-espera, podemos hablar de esto. No tenemos que hacer esto... ¿No?

Pero aún así... Él no se salvaría de esta.

Así, se escucharon golpes en toda la habitación también se do escuchada en todo el barco.

Nami: ¡Largo de aquí, pervertido! 'Dijo al hecharlo a patadas'.

Así, vemos al pobre hombre de goma salir volando con un grito de dolor siendo observado por el tirador y el doctor, hasta chocar con el mástil caer en la cubierta.

Usopp: ¡Oe, Luffy!

Chopper: ¡¿Té encuentras bien?!

En eso, el joven solo se levantó dejándonos ver su cara llena de chichones y un ojo morado después de la paliza furiosa de la navegante.

Luffy: Ah, ji... Todo ejta fien... Porque joy be boma... 'Decia apenas conciente'.

Usopp y Chopper: ¡Pues la goma no te ayudo esta vez!

Así, el narizón y el reno solo empezaron a tratar los chichones de su capitán aún con preguntarse que fue lo que sucedió.

En cuanto a la navegante.

Ella solo se dispuso a a recostarse en su cama con las manos en su rostro algo arta de la tontería de su capitán.

Nami: Rayos, quedarse ahí mirándome y decir que mi pecho es lindo solo para escapar de la situación. Que idiota.

Aunque haya dicho eso, ella sabe que él no sería capaz de mentir sobre lo que dice. Y al volver a recordar lo que sucedió... Solo se sonrojo nuevamente.

Bueno... Quizás lo deje mirar... Solo un poco.

Y así, la pareja continuaba sus días. Algunas veces hablando, otras veces pelando, y algunas veces... El pobre capitán recibía una buena paliza.

Ahora, nos encontramos en el baño del Sunny dónde la pelinaranja le pidió una ropa para cambiarse antes de entrar a darse un relajante baño.

Luffy: Nami, tu ropa esta junto a los casilleros.

Nami: Gracias, Luffy.

Entonces, el joven comenzó a retirarse para no molestar a la navegante. Pero antes de que lo hiciera...

Espera... 'Llamo a su capitán' Etto... Puedes quedarte... Y entrar conmigo... Si quieres...

Las palabras dejaron entre confusión/extrañeza que solo ladeó la cabeza.

Nami: ¡N-no me hagas repetirlo! Sabes que, olvídalo.

Luffy: Espera, ¿Dices que puedo entrar... Contigo?

La joven ya no creía en lo que le había dicho, así que en respuesta, solo pudo asentir sin querer dar la cara.

Nami: ¡P-pero no te equivoques! ¡Esto es solo para darle calor al bebé, así que no esperes hacer nada raro! ¡Y ni se te ocurra mirar, ¿Entendido?!

Luffy: Ah, ya veo. Bien, si es por el bebé, haré lo que haga falta 'Dijo con su clásica sonrisa'.

La joven no podía quitar su sonrojo del rostro ahora muerta de la vergüenza por haber dicho lo de compartir baño.

Y sin más opción, ambos se adentraron en la tina con la pelinaranja entre las piernas del pelinegro dándole la espalda.

Fua... Tener un baño a veces me relaja, aunque me siento débil con el agua.

Nami: S-si, eso creo...

El capitán solo se mantenía sereno, pero la navegante sentía los nervios y la vergüenza en su piel sin dejar de cosquillear.

Ella ya no podía creer que este compartiendo un año... ¡Con un hombre!

Siendo honesta, esto no estaba en sus planes de algún futuro lejano.

Toda la habitación estaba en silencio solo acompañado por los chapoteos de la tina, hasta que el pelinegro tomo la palabra.

Luffy: Sabes, yo nunca me imaginé conocer personas tan increíbles como todos ustedes.

Nami: ¿A qué te refieres? 'Dijo confundida'.

Luffy: Me refiero... A personas que de verdad desean estar a mi lado aunque me comporté como un tonto.

Casi no sé nada de todo el mundo, pero si se que ustedes son personas únicas destinados a cumplir sus sueños.

Y tú... También eres sorprendente. Gracias a tus habilidades, pudimos ir al cielo, soportar tormentas, y sobrevivir a todo.

Eso demuestra que... Ya eres asombrosa y no lo pueden negar.

Las palabras del capitán sorprendían a la joven quien en realidad, no se sentía como lo describía.

Nami: No soy tan buena como crees. Solo soy una chica que predice el clima y dirige la navegación.

No soy tan sorprendente como dices.

Luffy: Pues... En eso te equivocas 'Dijo confundiendola'.

Tu eres increíble e incluso más que eso, yo lo sé.

Nami: ¿A si, supergenio? ¿Y como lo sabes? 'Pregunto incrédula'.

De repente, el pelinegro rodeo en brazos a la pelinaranja haciéndola saltar de sorpresa. Pero también, el joven tocó el vientre al acariciarlo con suavidad antes de dar su respuesta.

Luffy: Porque tendré un bebé contigo, y por primera vez... Estoy siendo el hombre más feliz del mundo.

La navegante no podía creer lo que escuchaba, su capitán, el hombre más fuerte y tonto que haya conocido, le esta dedicando palabras de todo el corazón.

Pero eso solo sería una pizca, lo que más le estaba dedicando... Eran palabras románticas que el joven ni sabía expresar.

Nami: *Luffy... Tu...* 'Penso sorprendida'.

Luffy: Además, también actúas como una tonta a veces.

Nami: ¡¿A quién llamas tonta?! 'Dijo al mirarlo'.

Ambos se habían quedado mirando el rostro del otro fijamente a los ojos sin saber que hacer ahora.

No podían quitarse la mirada del otro sintiendo que algo los estaba atrayendo.

Y no es que era algo, eran ellos mismos que se acercaban entre ellos antes de cerrar los ojos y...

Unir sus labios.

Por alguna razón, ambos podían sentir una conexión transmitiendose entre los labios del otro.

La pareja se separó en buscar algo de oxígeno y volver a verse en los ojos respirando agitadamente.

Luffy: Nami...

Nami: Luffy...

Entonces, ambos solo volvieron a juntar sus labios queriendo volver a sentir esa conexión y saborear los labios de su acompañante.

Luffy: *No sé que es esto... Pero se siente... Increíble*

Nami: *¿Esto es... Sentir una unión con alguien especial?*

En eso, ambos solo apretaron su agarre en unir mas sus labios en comenzar una batalla de lenguas bailando entre ellas.

Luffy: *No lo entiendo...*

Nami: *Por alguna razón...*

Ambos: *¡No quiero soltarlo/a!* 'Pensaron en conjunto'.

Al seguir con el beso, las manos de ambos se unieron entrelazando los dedos mientras el pelinegro acariciaba el vientre de la navegante.

Incluso en su interior sentían como algo comenzaba a irradiar calor queriendo que avancen aún más.

Por suerte, el pelinegro sintió ese calor antes de levantarse de la tina con la pelinaranja en brazos quien quedó confundida por ello.

Nami: ¿Luffy...?

Luffy: Descuida, lamento ti se sorprendi al cargarte. Es que... Sentí que algo estaba por despertar.

Nami: ¿Despertar? No entiendo.

Eso lo decía ya que en la parte baja del capitán algo estaba por tocar la parte trasera de la navegante.

Luffy: No es importante. Vamos, se esta haciendo tarde 'Dijo al salir de la tina'.

Al hacerlo, bajo a la pelinaranja quién sintió el frío de la nada antes de ser cubierta por una toalla de parte de su capitán.

La navegante aún tenía los problemas de poder vestirse, así que el pelinegro se ofreció y la ayudo recibiendo un beso en su mejilla como recompensa.

Ambos salieron del baño con la navegante aún avergonzada por lo que sucedió adentro, pero por dentro... Se sentía extrañamente feliz.

Así, la navegante decidió ir a su habitación para descansar despidiéndose del pelinegro.

Nami: Bueno, el baño fue agradable.

Luffy: Si, nunca me relaje tanto antes.

Los dos volvieron a mirarse a los ojos perdiéndose entre ellos con una sonrisa y un pequeño sonrojo sin poder quitar la felicidad que tuvieron hace poco.

Nami: Bien... Amm, iré a recostarme. Nos vemos 'Dijo a punto de cerrar la puerta'.

Luffy: Espera 'Dijo llamando a la joven'.

Así, el pelinegro la tomó del brazo antes de que ellos unieran sus labios nuevamente disfrutando de la conexión.

Ambos se separaron en buscar oxígeno para verse con una sonrisa.

Nami: ¡Y-yo tengo que irme! ¡Nos vemos! 'Dijo al cerrar la puerta'.

El pelinegro solo pudo mirara extrañado antes de bajar por las escaleras.

Luffy: Que raro, ¿Me equivoqué en lo que me dijo?

Y ¿Qué quiso decir con que le dijo? Pues, eso es algo de parte de una buena consejera y gran amiga de la navegante.

Flashback.

Retrocedamos media semana cuando el capitán fue hacia la arqueóloga en preguntarle algo que lo estuvo molestando todo el tiempo.

Robin: ¿Quiere saber lo que siente cuando esta con navegante-san? 'Pregunta curiosa'.

Luffy: Si, algo me estaba revoloteando en el estómago y no es hambre. No sé que me sucede, ¿Puedes hacer algo?

Ante las palabras del pelinegro, la arqueóloga solo dió una pequeña risa dejando confundido al joven.

No es gracioso, Robin. Algo me esta pasando, no se que hacer.

Robin: Descuide, capitán-san. Lo que estás sintiendo es normal 'Dijo confundiendo más al joven'.

Esta sería... ¿La primera vez que siente este revoloteo?

Luffy: Si, y es cuando estoy cerca o junto a Nami. Ahora estoy pensando que esto es culpa suya, estoy seguro.

Robin: Bueno, también es culpa suya.

Luffy: ¿Mi culpa?

Robin: Algo así, al igual que usted esta sintiendo eso, navegante-san también lo siente algunas veces.

Luffy: Pero aún no entiendo, ¿Qué es eso que siento?

Robin: Pues verá, lo que usted esta sintiendo es conocido... Cómo amor.

Al escuchar la palabra "amor", el pelinegro solo podía dar una cara de disgusto.

Luffy: ¿Qué es eso de... "Abur"? ¿Es lo que hacen los adultos? 'Dijo haciendo reír a la pelinegra'.

Robin: No, no es eso. Es cuando un hombre y una mujer sienten algo que los une y deseen no querer separarse.

Así formando un lazo inquebrantable que hace fas fuerte su relación y ser protegido por él o ella hasta el fin de sus días.

El capitán apenas entendía lo que quiso decir.

Claro que estaría dispuesto a proteger ya sus compañeros, pero jamás pensó en proteger a la navegante más que nada.

Luffy: Es muy confuso, también quiero protegerlos. Pero algo me hace hacer querer protegerla todo el tiempo.

Robin: Eso es porque la aprecia mucho, ambos sienten ese sentimiento pero no pueden o no saben demostrarlo.

En tu caso... Eres un fracaso para algo así.

Luffy: ¡Oe! 'Dijo ofendido'.

Robin: Pero... Con un corazón como el tuyo... Estoy segura que ella será muy feliz con alguien como tú. Estoy muy segura.

Al escuchar sobre darle felicidad a la pelinaranja, el joven solo sintió ese revoloteo dejando cosquillas en su estómago.

Luffy: ¿Lo ves? Es esa cosa en mi estómago que me hace hacer cosas raras cada vez que mencionas a Nami.

Y en respuesta, la pelinegra volvió a reír sobre la inocencia de su torpe capitán. Pero eso no le quitaba lo tierno que le parece a la navegante.

Robin: En verdad la aprecias... Como ella te aprecia a tí 'Dijo llamando la atención'.

Lo único que tienes que hacer, es demostrarle que de verdad te importa. Siendo unas palabras o una acción.

Y en tu caso, las palabras son mejor opción.

Presente.

El joven seguía caminando hacia la cubierta aún pensando que hizo algo mal arruinando todo... Otravez.

No lo sé, no lo comprendo. Pero también quiero entenderlo.

Quiero entender todo sobre ese "abur" o como se llame, si así puedo cuidar de Nami y la bebé, pues así será 'Dijo decidido'.

Entonces, el joven se dirigió a la habitación del reno en seguir con la lectura del embarazo y alguno que otro consejo en una revista.

Mientras la navegante.

Ella solo se quedó congelada en su cama con el rostro rojo sin creer que su capitán... Dió un gran paso.

Nami: *Luffy acaba... El también... Me besó por su cuenta*

Al volver a recordar lo de la tina y la entrada, ella solo cubrió su rostro antes de retorcerse en su cama.

*¡No puede ser! Realmente lo bese, no puedo creerlo. Y el también me besó. Ahhh, nunca sentí algo así en mi vida* 'Penso alocadamente'.

Así, ella solo dió un suspiro de felicidad antes de caer en sus sábanas lista para dormir.

Esto significa... Que talvez el... Y yo... Podríamos... Ser uno.

Entonces, ella solo volvía a sonreír con una sonrisa boba ansiosa de lo que podría pasar entre él y ella al día de mañana.

Pero su sueño sería interrumpido por sentir un extraño toquecito justo en su vientre.

La joven se levantó en ver quién más podría estar ahí, pero no había nadie más que ella. Así que solo decidió volver a dormir.

Pero el toquecito volvió a sentirse, esta vez poniéndola confundida de dónde podría ser.

Y su respuesta sería respondida... Cuando sintió el toque... Viniendo del vientre haciendo entender que...

El... Pataleo... 'Dijo sorprendida'.

Y cuando llegó el siguiente día, decidió contarles a todos en el barco... Haciendo que el reno sea el más sorprendido.

Chopper: ¡¿Dices que el bebé pateó cuando estabas a punto de dormir?!

Nami: Si, pude sentir que pateó.

Luffy: ¿Eso no es buena señal?

Robin: De hecho, significa que el bebé se esta preparando para salir muy pronto.

Chopper: Pero aún estamos medio año, que nasca antes me parece irreal.

Usopp: ¿Y eso sería preocupante?

Chopper: No, pero eso podría decir que el bebé ya quería salir.

Nami: ¿Y que podemos hacer?

Chopper: Solo esperar, si el bebé desea salir del vientre, solo hay que hacer lo posible para que nasca sin problemas.

La navegante solo podía ponerse entre miedo/preocupación por lo que podría pasar si el bebé no podría salir sin dificultades.

No te preocupes, como soy un doctor no dejaré que ninguna vida este en peligro. Lo prometo 'Dijo seriamente'.

Al escuchar las palabras, la pelinaranja dió una pequeña sonrisa de alivio sabiendo que el reno la ayudará.

Nami: Gracias, doctor Chopper.

Y con agradecerle, el reno se sonrojo antes de bailar mientras reía.

Chopper: N-no creas que decirme así... Me hará muy feliz, tonta 'Dijo haciendo reír al resto'.

Así, los tripulantes se pusieron más alertas en lo que podría pasarle a la navegante y al bebé.

Y el capitán era quien más e ponía atento, no le quitaba su ojo de encima en ningún momento... Aunque lo hacía ver algo incómodo.

Pero la joven aprecia mucho como su capitán se esfuerza para saber si ella se encontraba bien.

Un día, estaba la pelinaranja en su silla para el sol con el pelinegro acompañándola para cuidarla como un halcón.

Ambos solo contemplando la vista con las olas del mar y los rayos del sol.

Nami: Ne, Luffy 'Llamo a su capitán'.

Luffy: ¿Ah? ¿Pasa algo?

Nami: No, es solo que... Ahora que el bebé estará por nacer pronto, me preguntó si podré cuidarla bien 'Dijo confundiendo al joven'.

Un bebé es una bendición como un regalo, y eso es lo que cualquier mujer desea en la vida.

Pero... Cómo ahora seremos padres... No sé si esto es lo que merecemos.

Luffy: ¿A qué te refieres? No lo entiendo 'Dijo ladeando la cabeza'.

Con tratar de explicarle a su capitán, ella sabría que no lo entendería a la primera. Y sería todo un desafío intentarlo.

Nami: No, no es nada. Es solo una cosa sin importancia.

La navegante sabía que no podía hacerlo escuchar algo que nunca entendió, pero no podía enfadarse por algo que nunca se lo enseñaron.

En cuanto al pelinegro, este la veía más confundido y perdido sobre esos e bendiciones y regalos. Incluso pensó que le darían carne gratis.

Pero por alguna razón, su estómago volvió a revolotear sintiendo que algo la esta perturbando.

Así que decidió una cosa.

Se levantó de su asiento y se acercó a la navegante quien lo miro extrañado.

¿Luffy?

En eso, se colocó de rodillas a su lado y posó su mano en el vientre de la joven sonrojandola de sorpresa.

Así, comenzó dando caricias suaves y lentas dando un calor que relajaría al más feroz del mundo.

Con eso, la joven sentía una inmensa tranquilidad al tener su toque. Incluso sonrió de felicidad de que él haga mimos sin saber cómo.

De repente, el capitán sintió un toquecito en el vientre haciendo que detenga su caricia.

Luffy: Algo... Pateó 'Dijo sorprendido'.

Nami: Ah, ¿Lo sentiste? Ese es el bebé, te saluda con pequeñas pataditas.

Al escuchar eso, el pelinegro sonrió con una extraña felicidad que expresó de la nada. Pero eso le agradaba.

En eso, más pataditas se sentían a cada caricia que hacía en el vientre.

Jaja, creo que ya le agradas.

Con sentir esas pataditas, el pelinegro solo podía pensar "¿Cómo será? ¿Será niño o niña? ¿Le gustará ser pirata?".

Esas preguntas aparecían de la nada en su mente que por alguna razón le impacientaba saber las respuestas.

En eso, el joven acercó su rostro al vientre confundiendo a la pelinaranja hasta que comenzó a hablar.

Luffy: Hola, mi nombre es Monkey D. Luffy. Soy el hombre que será el Rey de los Piratas... Y también tu papá.

Y no solo soy yo, también hay grandes personas que estarán dispuestos a cuidarte siempre, como yo y tu mamá.

Me gustaría saber si serás un chico, pero también me gustaría saber si serás una chica ¿Sabes porqué?

Porque así serás tan valiente y fuerte como tú mamá.

Las palabras sobre ella hicieron sonrojar a la joven quien tenía un chillido interno de felicidad por saber que su capitán piensa así de ella.

Escucha, de repente siento... Que ya deseo verte, quiero conocerte finalmente... Se que te podría pasar algo malo con ser hija de uno piratas.

Pero sabes... No dejes que eso te deprima fácilmente, se que algún día tendrás grandes compañeros que estarán siempre contigo.

Y tú primer compañero... Seré yo.

Cuando dijo eso, la pelinaranja solo se sorprendió al escuchar que el será su primer amigo en todo.

Cuando tengas algún problema, sabrás que estaré ahí para tí. No importa el problema.

Y cuando crezcas, se que serás alguien increíble. Esta bien si escojes una vida normal, o ser un Marino, o... También ser un pirata.

No importa lo que elijas, tu siempre serás... Mi pequeño hijo 'Dijo al poner su frente en el estómago'.

La pelinaranja volvía a sorprenderse de que el pelinegro amará al pequeño sea lo que decida ser. Hasta que comenzó a sentir las lágrimas.

Y no solo ella, los demás tripulantes pusieron toda su atención en las palabras de su capitán sonriendo satisfechos con su respuesta.

En eso, la navegante comenzó a llorar de felicidad sin poder contenerse... Aunque asustó al capitán con verla llorar de la nada.

¡A-ah, Nami! ¿Qué pasa? ¿Te duele algo? ¿Hice algo mal? ¡Dímelo, ¿Qué pasa?! 'Pregunto en pánico'.

Nami: No... 'Dijo confundiendo al capitán'.

Entonces, la joven solo limpió sus ojos antes de sonreír con un sonrojo en su rostro.

No es nada.

El joven aún seguía confundido por el llanto repentino mientras que la navegante sonreía felizmente al saber que confiara en él.

Nos adelantamos a la noche dónde el pelinegro ayudaba a la navegante recostarse en su cama lista para dormir.

Gracias, Luffy.

Luffy: No te preocupes, Shishishi.

Con ver al capitán más atento con ella la hacía sentir protegida de toda las amenazas del mundo.

Pero en su interior... Aún le faltaba algo, o mejor dicho... Saber si "eso" era cierto...

Nami: Luffy, 'Llamo a su capitán' necesito que me respondas algo.

Luffy: ¿Eeehhh? ¿Es otro favor largo? 'Dijo sin ganas'.

Nami: No tonto, solo quiero tu respuesta.

El capitán solo ladeó la cabeza sobre la posible respuesta que deba dar de la pregunta de ella. Aunque no sabe que será.

Dime... Tú también...

La joven se sentía apenada por preguntar algo muy incómodo, pero no quería quedarse con las dudas o tener falsas esperanzas.

Tu también sientes-

De repente, la pelinaranja gimió de dolor abrazando su estómago al asustar a su capitán.

Luffy: ¡O-oe, ¿Qué pasa?!

Nami: N-no lo sé... Pasó de repente y...

En eso, las sábanas comenzaron a humedeserse por dónde estaba sentada preocupando más al joven.

Luffy: ¡Oe! ¿Qué sucedió?

La pelinaranja no decía una palabra al estar en shock, así que solo pudo pedir un favor.

Nami: Luffy... Llama a Chopper...

Luffy: ¿Chopper?

Nami: ¡Hazlo, rápido! 'Dijo gritando con dolor'.

Luffy: A-ah, si. Haya voy 'Dijo al salir de la habitación'.

La navegante solo podía quedarse ahí esperando mientras sostenía su vientre con el dolor que crecía más y más.

Nami: Maldición... ¿Porqué tuviste que salir ahora?

En eso, la puerta se abrió de golpe siendo el capitán con el reno y el resto siguiéndolos.

Chopper: ¡Nami, ¿Estás bien?!

Nami: ¡¿Creés que estoy bien?! ¡Hagan algo pronto!

¡EL BEBÉ YA VIENE!

Al decirlo, los demás se sorprendieron con los ojos a punto de salir de sus cuencas.

Chopper: ¡AAAHHH! ¡Esto es malo! ¡Un doctor, llamen a un doctor! 'Dijo alarmado'.

Usopp: ¡Tu eres el doctor! 'Dijo al darle un zape'.

Chopper: ¡Ah, es cierto!

En eso, el reno se acercó a la joven para comenzar el tratamiento.

Esto es malo, un bebé de 6 meses... Esto es muy repentino.

Franky: ¿Puedes hacer algo?

Chopper: Podemos hacer que nasca, pero necesito material y rápido.

Luffy, 'Dijo al señalarlo' necesito que traigas un balde de agua.

Luffy: ¡Entendido!

Chopper: Robin, necesito que traigas toallas para arropar al bebé y limpiar a Nami.

Robin: De acuerdo.

Chopper: Háganlo rápido, esto es un caso alarmante.

Así, el capitán y la arqueóloga salieron a tomar las cosas lo más rápido posible.

Al hacerlo, coloco el balde al costado de la cama y las toallas debajo de las piernas de la joven listos para recibir al pequeño.

Ok, necesito que todos excepto Luffy y Robin salgan para comenzar sin perder tiempo.

Sanji: ¡¿Ah?! ¡¿Porqué el maldito de goma tiene que ver a Nami-san?! 'Dijo celoso'.

Chopper: ¡No hay tiempo, necesitamos terminar pronto!

Zoro: Ya lo oíste, vámonos 'Dijo al tirar del rubio'.

Así, los demás (aunque con complicaciones de celos del cocinero) salieron de la habitación dejandolo todo al doctor.

Chopper: Ok. Nami, necesito que abras las piernas y ver si el bebé podrá salir.

Nami: E-esta bien.

La joven abrió las piernas con vergüenza aunque era necesario.

Chopper: Robin, quedate junto a mi. En cuanto veamos la cabeza del bebé, trataremos de sacarlo sin tanta fuerza.

Robin: De acuerdo.

Chopper: Ahora, Nami... ¡Puja!

Así, la navegante comenzó a empujar con fuerza aunque doliera como un infierno. Pero se detuvo al tomar más iré agitadamente.

Robin: Nami, tu puedes.

Chopper: Solo sigue pujando.

Entonces, la joven continúo con lo pedido y se detenía en tomar más aire.

Cada vez que empujaba con toda su fuerza, sentía como su corazón estaría por explotar.

Nami: ¡No puedo! ¡Duele demasiado!

Chopper: Pero tienes que hacerlo, si no el bebé tendrá problemas en salir.

Robin: Nami, no te alteres. Trata de calmarte y continúa empujando 'Dijo en intento de calmarla'.

Nami: ¡Lo siento, no puedo hacerlo! Me arde mucho, casi no siento las piernas. Pero podría lastimar al bebé si no lo hago.

A la vista del reno y la arqueóloga, la navegante derramaba lágrimas de dolor y frustración al pensar lo que sucediera en un solo error.

Tengo miedo... Quiero tenerlo pero... Ya no resisto 'Dijo a nada de desmayarse'.

Pero entonces, una mano se posó en la de la navegante. Y al mirar las manso unidad, vio que quien la tomaba... Era su capitán.

Luffy...

Luffy: Nami, no te preocupes. Se que podrás hacerlo.

Aunque el joven le diga eso, la navegante solo sentís tanto dolor y desesperación que no podía pensar bien.

Nami: Pero... Si no lo hago bien, el bebe podría morir. Lo intento, de verdad lo intento. Pero... No puedo hacerlo...

No soy como tú, luffy... No soy tan fuerte... 'Dijo frustrada'.

Al verla así, el capitán solo pudo usar su único truco. Apretar su mano con suavidad y abrazarla desde sus hombros.

Luffy: Nadie es débil en mi tripulación, eso lo se muy bien. Talvez pienses que solo por usar un baston no eres suficientemente fuerte.

Pero con ver qué puedes controlar las tormentas con el, es sorprendente.

No te preocupes, se que eres capaz de lograr más que esto. Confío en tí, Nami 'Dijo con su clásica sonrisa'.

Al ver cómo su capitán la alienta, ella podía sentir que su confianza crecía gracias a sus palabras.

Así recordaba las veces que venció a sus enemigos. Cómo en Alabasta, Enies Lobie, y todos los soldados que derrotó.

Con saber que ella pudo lograr eso y mucho más, ella pudo aclarar mejor su mente antes de asentir diciendo que esta lista.

Bien, Chopper. Sigamos.

Chopper: Ah, si. Nami, sigue pujando.

Nami: Claro 'Dijo al empujar'.

La pelinegra pudo ver cómo su amiga se llenó de valor y energía con escuchar las palabras de su capitán.

Y solo pudo dar una gran sonrisa mirando como una pareja que estaba a punto de ser padres, serán completamente inseparables.

Chopper: ¡Vamos, Nami! ¡Casi se ve la cabeza! Ya esta cerca.

Luffy: Puedes hacerlo, Nami. No te rindas.

La joven seguía sintiendo dolor y derramaba lágrimas al seguir empujando, pero no sé detendrá hasta tener a su pequeño en sus brazos.

Nami: Bien, aquí voy.

Así, los empujes continuaban al igual que las reparaciones de la navegante. Y los seg parecían una tortura eternidad.

Y en un último intento, la pelinaranja uso las mayores fuerzas que le quedaban a la vez que daba un grito.

Y así... Se escuchaba un pequeño llanto en la habitación.

Chopper: Robin, toallas.

Robin: 2 flores 'Dijo creando manos Hana Hana'.

Así, pudieron acomodar al bebé mientras la pelinegra limpiaba a su amiga quien recuperaba el aliento.

El reno ponía al bebé sobre las sábanas de la cama mientras seguía llorando a cántaros.

Chopper: Listo, estará bien. Nació sin problemas.

En cuanto a la pelinaranja, esta se recuperaba de tanta fuerza que tubo que usar.

Nami: Dónde... Esta... Mi bebé.

Robin: Tranquila, el esta a salvó.

Al escucharla, la pareja suspiró aliviada de saber que todo termino sin problemas.

O mejor dicho... Ella.

[shock]

Nami: Etto... Robin, ¿Qué dijiste?

Chopper: Como la oyeron, es una niña.

En eso, el reno camino sobre la cama cargando un pequeño bulto entre sus pesuñas.

Al acercarse a la joven, el reno le te dió la bebé quien aún lloraba buscando su calor maternal.

Adelante, es tuya.

La pelinaranja no podía creer lo que veía, una pequeña con su sangre había nacido en el mundo. Es algo que ella no pensó en tener algún día.

Aún así, levantó sus brazos en acercarse a la bebé hasta poder tocarla. Al tenerla en brazos, a acercó a ella hasta verla finalmente.

Era una adorable pequeña con mechones negros y dos ojos estaban entrecerrados que casi mostraban sus ojos chocolatados como ella.

Con solo ver a esa pequeña al fin de frente... Podía sentir sus ojos llenarse de lágrimas.

Nami: Es hermosa... Es muy bella.

Cuando la pequeña comenzó a abrir sus ojos, podía ver a su madre quien sonreía al verla. Y con ello, la pequeña comenzó a reír pidiendo que la abrazará.

Al hacerlo, la pelinaranja solo pudo responder al abrazarla con todo el cariño y amor del mundo antes de susurrarle a sus pequeños oídos...

No te preocupes, nadie te lastimara. No mientras yo esté aquí.

Pero claro, se estaba olvidando de alguien.

Ah, y también... Tu padre.

En eso, la joven volteó para ver al pelinegro quien solo se fijaba en la pequeña recién nacida.

En cuanto la pequeña lo vio, solo se le quedó mirando al igual que su padre a ella.

Ambos solo se miraban a los ojos mostrando como una reciente cuerda irrompible los uniera.

Así, la pequeña solo comenzó a reír mientras levantaba sus pequeños brazos hacia él queriendo sentir su calor.

Y sin dar palabras, el joven se acercó lentamente hacía las dos hasta quedar en frente de ellas.

En eso, levantó su mano y acarició la cabeza de la pequeña suavemente quien disfrutaba del tacto.

De repente, la puerta se abrió dejando ver al resto.

Sanji: ¡¿Qué pasó?! ¡¿Nami-san esta bien?!

Chopper: No griten, la bebé nació. Es una niña.

Así, los demás miraron a la navegante quien tenía un bultito entre las toallas para ver a la pequeña alfin.

Con solo verla, los demás sentían sus corazones derretirse de tanta ternura que sentían que se desmayarian.

Aunque el esqueleto no tenía corazón y el espadachín solo se suavizó... Solo un poco.

Usopp: E-e-es una n-n-n-ni-

Robin: Es una niña... Una adorable y hermosa niña.

Sanji: ¡Tiene la misma belleza que Nami-swan! Y por mi honor como hombre, no permitiré que nadie la lastimé.

Franky: ¡Wuuaaaaah! ¡Es una hermosura, es una verdadera belleza!

Brook: Es realmente bella, siento como mis pupilas se inundan de tanta hermosura. Ah, aunque yo no tengo ojos. Yohohohohohoho.

Todos veían a la pequeña con mucha ternura mientras que ella solo bostezo antes de caer dormida en lo brazos de su madre.

Chopper: Debe de tener sueño, ambas deben reposar hasta que tengan mejor estado de energías.

Nami: Si, pero... Me gustaría saber... ¿Cómo la llamaremos?

Todos no podían tener una idea de cómo sería llamada la pequeña, querían que su nombre fuera como un símbolo que nunca sería olvidada.

¿¿??: Luna 'Dijo llamando la atención'.

Así, todos miraron a su capitán quien sonreía satisfecho en el nombre.

Franky: ¿"Luna"? ¿Le pondrás el nombre de una piedra? 'Dijo confundido'.

Sanji: No seas tonto, cerebro de goma. El nombre de la bebé de Nami-san debe ser digno de ella.

Usopp: Es cierto, además ¿Qué quiere decir?

Luffy: Es obvio, son los iniciales de Nami y yo.

Al escucharlo, los demás se sorprendieron/confundieron con lo que decía.

Se que su nombre debe ser el mejor, y que mejor nombre que nuestras iniciales ¿No?

Al oírlo, la navegante solo se sorprendió acompañado de un sonrojo siendo una de las cosas más tiernas que su capitán dijo sin pensar.

Así que dió su mejor sonrisa antes de mirar a su pequeña quien dormía antes de dar su bautizo.

Nami: Si, se llamará...

Monkey D. Luna.

Así, contemplamos a la pequeña quien sería... La futura princesa de los piratas.

CONTINUARÁ.

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