Había empezado mal la semana, sentía que veía en todas partes a la persona con la que menos me quería encontrar, no quería continuar con las extrañas coincidencias así que decidí no salir de casa no quería verlo hasta el próximo fin de semana pero nuevamente el universo se negó a darme algo de tranquilidad y es que todo empezó por una simple llamada, al ver un número desconocido supe de inmediato que no debía responder pero a veces el abuelo olvidaba su celular y pedía prestado uno a alguno de los chicos así que por eso le di la oportunidad al número desconocido y respondí nunca pensé escuchar aquella voz tan alegre y entusiasma por mi simple existencia, de alguna forma le agradaba mucho a la tía de Eliot de hecho creo que más de la cuenta y no sabia el porqué pero me asustaba, me admiraba como algún tipo de animal en peligro de extinción y no sabía como reaccionar a ello en especial a su tan inesperada invitación a cenar, fue bastante sorpresivo de hecho y muy insistente de su parte al notar cierto rechazo de mi parte, quería negarme o al menos aplazar esto por un largo tiempo al final termine aceptando y ya no había vuelta atrás.

Así que, aquí estaba frente a uno de los restaurantes más lujosos de la ciudad y con precioso tan elevados que hasta respirar te hace sentir que cuesta mucho, me alegra tanto haber buscado con anticipación el nombre de lugar y que tipo de restaurante es porque de lo contrario habría venido en unos jeans oscuros, mis tenis favoritos y una blusa blanca para aparentar elegancia cuando no tengo ni una pizca de eso, cuando regrese a casa le voy a agradecer a la abuela por haber comprado este vestido en mi cumpleaños, pensó que era bonito y que se vería bien en mi pero nunca había tenido razón de ponerlo hasta ahora, aunque meditando un poco se veía muy feliz al verme por fin el vestido lastima que pensó que iría con Bennet a algún lugar espero que nunca se de cuenta de esta mentira, en fin que esto sea rápido, recuerda Flynn ve adentro come algo rápido y vuelve a casa. Entre al restaurante topando con el personal que vestían un uniforme que los hacía ver más como un par de corporativos que meseros si no fuese por sus identificación que parece una placa de oro con sus nombres creería que son comensales, la iluminación blanca, los muebles negros, los elegante adornos, quiero volver a casa si termino rompiendo algo jamás podré pagarlo, le diré que tuve algún tipo de indigestión, di la media vuelta para marcharme pero me detuve al escuchar mi nombre.

—Flynn, pero que chica tan más puntual—gire para ver a Mindy con un elegante vestido negro—mírate, te ves preciosa, eres como una linda muñeca. Vamos adentro, prepare una linda mesa solo para nosotros, espero que te guste la vista con la terraza pero si no es así podemos cambiar la mesa.

Me miró y yo solo asentí, nunca antes me había dejado sin habla como ella. La seguí por el restaurante para dirigirnos a una terraza cuando abrió la puerta observe a Eliot con los pies sobre la mesa, mientras comía uvas para luego escupir las semillas sobre el suelo, este chico no tiene respeto a nada ni nadie.

—Eliot, comportarte, baja los pies de la mesa y arregla tu ropa. Deberías darle una mejor impresión a Flynn.

—¿Vas a echarme? —pregunto con burla mientras se levantaba para acomodarse su camiseta, me miró y luego a su tía para volver su mirada a mi—. Estoy sorprendido eres la primera chica que llega puntual y aparte de eso se ve hermosa.

—Ese halago hubiera quedado bien si no fuese porque estas metiendo tu camiseta sobre el pantalón —mencionó Mindy para acercarse y acomodar su corbata—. Ahora, se un buen chico tengo que arreglar algunas cosas pero volveré cuando menos lo esperes así que espero que estés haciendo sentir bienvenida a Flynn. Los dejo muchachos, pueden ordenar lo que gusten.

—En verdad te quiere impresionar si te invito a su restaurante.

—¿Su restaurante? —pregunte un tanto impresionada esta bien estoy muy sorprendida.

—Siéntate mientras tu mente procesa ese hecho—Eliot recorrió la silla donde antes estaba sentado él y me ayudó a sentarme—. Si soy rico pero por favor que ese hecho no cambie ningún pensamiento sobre mi.

—Créeme que no lo haré, tu actitud opaca todo lo bueno material que podrías brindar.

—Me alegra saber que esto no cambiará nuestra relación.

—No puedes cambiar algo que no existe.

Me miró, comenzó a reír para comer una uva para seguir observandome.

—¿Que?

—Te ves bien, sabes pensé que te vería no se, algo diferente.

—¿A que te refieres con eso?

—Superaste mis expectativas.

—Oh vaya, me alegra tanto haber superado tus expectativas —solté sarcástica.

—No lo digo con el afán de ofender es solo que, bueno sinceramente pensé que eras de esas chicas que tienen algún tipo de problema con el maquillaje y que solo dan discursos sobre la belleza interior.

—Uno, eso fue muy clasista de tu parte, segundo si soy de las personas que creen que la bella interior es más importante que la exterior pero no por eso no significa que no sepa cómo usar un peine y tercero todo lo que sale de tu boca sin el afán de "ofender" siempre es ofensivo.

—En verdad me agradas.

—Me gustaría poder decir lo mismo.

—¿Siempre eres así con las personas nuevas? Porque de ser así entiendo tu falta de amigos.

—¿Y tu siempre eres así de lilipendo? Porque se ser así entiendo tu falta de intelecto.

—Oh no, podrías haber usado un mejor insulto, que tal hablar sobre mi falta de tacto, mi sarcasmo, mi malos chistes o incluso mi belleza que te deslumbra pero no mi intelecto, podría sorprenderte de alguna forma.

—Dudo que eso algún día pase.

—Nunca digas nunca.

Creo que prefiero estar en silencio y un poco abrumada por escuchar hablar sin parar a la tía Mindy que tener que soportar a este chico, tomé el menú para ver los platillos pero no tenía ni la más mínima idea de que era lo que realmente servían o si iba a ser de mi agrado, seguí leyendo en busca de algo apetitoso hasta que mi vista se desvío a los precios me alegra no haber tenido algo en la boca o lo hubiera esculpido también me alegra el ser una invitada de la dueña porque de lo contrario hubiera saltado de la terraza para huir de esta lugar, bueno no hasta ese grado de saltar pero si me hubiera marchado.

—¿Que opinas de escapar de aquí?

—¿Que?

—La comida de aquí no digo que sea mala pero prefiero una pizza y puedo asegurar que tu también.

—¿Que te hace pensar eso?

—Arrugas la frente cuando algo no te agrada.

—Eso no es cierto.

—Lo es, y se que es verdad porque cada vez que digo algo que no te agrada o cuando me ves en algún lugar arrugas tu frente.

—Yo no...—lleve mis manos a la frente para luego verlo—no es cierto. Además tu tía me invitó a este lugar y es una descortesía salir de aquí sin más.

—Bueno podríamos hacer algún escándalo y...

—No. Lo que va a pasar es que vas a tomar el menú vas a ordenar algo aunque no sea de tu agrado y vas a comer en silencio.

—Pero que actitud —dijo tomando el menú para luego verme, soltó un quejido para lanzar su cabeza hacia atrás se volvió a quejar mientas se acomodaba en la silla, se estiró para tomar una pequeña campana la cual sono y a los pocos minutos un hombre en traje apareció —. Roberto, amigo, que bueno que eres tu el que vino, que tal si vas a la cocina a sobornar a Claudia para que me haga una pizza.

—Sabes que lo haría con gusto pero Mindy fue clara en cuanto a mantener cómoda a tu invitada, ¿le sería de su agrado una pizza, señorita?

—Anda señorita Flynn—soltó burlón Eliot—es eso o comer hígado de cerdo y otras parte de algún otro animal, como la parte íntima de algún borrego.

—Me quedo con la pizza—confesé dejando el menú.

—Genial, ya señorita a hablado, lo dejo a tu cuidado Roberto—palmero su espalda antes que se retirara así que ambos volvimos a quedar solos—¿alguna vez has pensado como sería el mundo si las personas no tuvieran la emoción de la tristeza?

—¿Que?

—Tan solo imagina, puedes procesar todo, alegría, enojo, desagrado pero no la tristeza, ¿como  sería la reacción humana ante los momentos trágicos?

—Entonces no existirían esos momentos trágicos, es decir la tristeza proviene de esos momentos así que creo que sería un mundo en el cual me gustaría estar.

—Normalmente pregunto cuáles son esos momentos pero tengo una idea de cual es el tuyo, ¿fue algo trágica la muerte de tu padre?

Preguntó y yo le mire eso era algo de lo cual no hablaba con nadie, lo entere en lo más profundo de mi ser, mis abuelos no tocan el tema, la persona que fue mi psicóloga ni siquiera se percató de ese trágico momento y en cuanto a Bennet bueno el nunca lo menciono y yo tampoco. Es que ese recuerdo aunque trato de ignorarlo a veces solo sale a frote, ese momento, ese olor a sangre, la sensación, verlo a él, me levante de golpe al sentir náuseas, sentía como sudaba y el pánico me invadía.

—Voy al baño.

Salí de la terraza sin darle la oportunidad de decir algo, necesito ir al baño para evitar el llorar o entrar en pánico en cualquiera de los casos necesito estar sola.
Entre al baño para abrir el agua del lavabo para lavar mis manos sin parar si me mojaba la cara iba a arruinar el maquillaje.
Concéntrate Flynn, no es el momento de entrar en pánico, tampoco de llorar no puedes darle el gusto a ese chico de verte débil ya bastante fue el tener que mostrarle un momento de humillación, piensa en cosas alegres como en gatitos, la lectura clásica sólo piensa en otra cosa, esto no está tan mal, sólo regresa y dile cualquier cosa para desviar la conversación como el tener una indigestión, no eso no suena bien como sea yo solo, quiero volver a casa.
Me mire en el espejo por un momento, y tal como lo sospeche que veía más cansada de lo que me sentía, creo que es hora de volver a casa, cerré la llave, seque mis manos y me marque para regresar mientras pensaba en alguna excusa para irme acompañado de una disculpa y un tal vez nunca se vuelva a repetir esto. Mire a mi alrededor para contemplar el diseño elegante del lugar pero algo captó mi atención o más bien una persona, ese cabello, esa silueta no podía creerlo apresure el paso para evitar ser vista pero lo único que sentí fue como mi rostro golpeo contra algo, acto seguido escuché la risa de Eliot abrí la puerta con la intención de pedirle que parara pero lo próximo que pasó fue que mi pie ser torció debido a mi mal equilibrio con el tacón en un pésimo intento por evitar caer tome a Eliot de la corbata ahocandolo en el proceso, aún tambalee y bueno en un tonto intento de mantenerme de pie y de Eliot en evitar ser extrangulado por mi, el mantel fue arrastrado provocando un gran estruendo escuche como muchas cosas cayeron el quejido de Eliot y a pesar de todo yo no salí herida aunque si provocando un gran desastre, aunque eso no evitó tenerme en una situación incomoda.

—Si quería estar así conmigo al menos invitame un café primero.

Se burló pues él estaba en el suelo y bueno yo sobre él con mi mano sobre su pecho y la otra sobre su cuello, sinceramente no se como pasó esto pero quiero llevar mi otra mano a su cuello para terminar de extrangular su cuello.

—Escuche un fuerte golpe, ¿Están bien? —me levante para girar a ver a Mindy quien parecía intentar analizar la situación —. Oh yo, lo siento no quise interrumpir.

—¿Que? No, no es lo que parece.

—Soy yo o la luna se dividió en dos o marte se esta acercando a nuestro planeta y es el fin del mundo.

—¿Que? —gire para verlo llevar su mano a su cabeza para ver un poco de sangre de inmediato me levante para ver su cabeza —Oh, Dios, oh Dios, espera un momento, llamaré a tu tía no mejor una ambulancia.

Lo vi acercarse con su mano ensangrentado y en este momento recordé el momento por el cual nunca seré médico y es que la sangre me da terror. Era consiente de que necesitaba un médico y ayudar a Eliot pero lo próximo que supe es que me todo se volvió oscuro, creo que termine desmayada.

🐭🐭🐭

Me levante de golpe al recordar que debía llegar temprano a casa, mire el reloj notando que había pasado veinte minutos desmayada comparada a otros desmayos, me levante de la cama pero me quedé sentada al notar que no tenía mis zapatilla.

—Voy a confesar que pensé que terminaría siendo peor el día de hoy—Eliot mordió un trozo de pizza para luego extenderme la caja con las demás rebanadas.

—¿Que sucedió?

—En resumen, te desmayaste y bueno te traje al hospital.

—Si, yo, ¿como estas? Recuerdo haber visto mucha sangre.

—La verdad no fue nada grave, solo un pequeño golpe tu por otro lado te veías pálida, por un momento pensé que tendría que enterarte en el jardín de mi casa.

—Es una lastima que ese golpe no arreglara tu sentido del humor.

—Pensé que serias un poco más agradecida, te traje al hospital a pesar de que me ahorcarte con mi propia corbata para luego golpear mi cabeza.

—No fue mi intención, yo lo siento si, y si te agradezco mucho que me trajera al hospital.

—No suena muy sincero de tu parte.

—No hagas esto más difícil de lo que ya es.

Aquello lo hizo reír mientras comía un pedazo de pizza. Levante la vista al observar a un médico entrar quien al ver a Eliot cruzó sus brazos.

—Eliot Lara, nos volvemos a encontrar y en estas circunstancias, otra vez.

—Camila, mi médico favorito. En mi defensa fue culpa de la chica.

—¿Que? Yo no...no fue mi intención y lo sabes.

—Pienso usar la culpa para que se quede y molestarla.

—Pues si esos son tus planes voy a arruinarlo porque me voy—me levante para tomar mis zapatilla y bolso que estaban en la silla a un lado de Eliot para dirigirme a la salida pero tras recordar lo sucedido y del hecho de que él me trajo al hospital me regrese para sentarme donde estaba—De acuerdo si tengo algo de culpa pero no me quedó por eso y tu, no eres más que un manipulador.

—Por fin una chica consiente de cómo eres en realidad, suerte para ti pero no tanto para ella, huye mientras puedas querida.

—Como siempre un encanto—solo sarcástico Eliot.

—Ajá, tienes suerte que solo fueron unos cuantos puntos. En fin, llamaré a tu tía para decirle que ambos están bien y puedan irse a casa.

La doctora salió y yo gire a ver a Eliot notando que su camiseta tenía unas pequeñas gotas de sangre, él me miró para acercarse pero solo para tomar otro pedazo de pizza.

—Antes de continuar con mi manipulación, quiero decirte que lo siento.

—¿De qué hablas?

—Lamento si de alguna forma te hice revivir algún mal recuerdo con mi pregunta respecto a su padre, lo cierto es que trato de ver con quien verme identificado. Sabes cuando mi madre murió yo pase un tiempo en el orfanato, mi madre de joven huyó con mi padre así que no había mucha información respecto a mi familia,  del orfanato pasé a muchos hogares temporales y bueno después de un tiempo mi tía me encontró... Y lo reconozco no tengo tacto para muchas cosas y lo cierto es que tampoco me agradan mucho las personas así que supongo que puedo ser algo molesto cuando alguien me agrada de verdad, así que, lo siento.

—Esta bien, solo, no vuelvas a mencionarlo.

—No lo haré.

—Bien.

Un silencio se formó, yo no espera tal disculpa y tampoco escuchar esa parte de su historia de su vida, tomé una rebanada de pizza para comer un poco.

—¿Y mañana haremos algo divertido?

—¿Que?

—Serás mi guía turística, recuerdas.

—Claro, haremos algo muy divertido... De hecho te va a encantar, será algo muy jocoso.

—Vaya, te habías tardado en decir una de tus palabras mágicas... Y dime, ¿que es jocoso?