🌻🌄24🌄🌻
Invitación
─── ❖ ── ✦ ── ❖ ───
Tras aquella divertida travesía en que sus penas dejaron de existir por un breve y minúsculo momento se sintió muy feliz,emocionado,confundido.
La situación donde su corazón se acelera y retumba en sus adentros sin cesar lo desquician,es como entrar en una divertida locura,una locura de amor.
Sentado en la playa,mirando el reflejo de la luna sobre las tranquilas aguas del mar tan pacífico despejan su mente,la compañía de Egipto es la combinación perfecta,una estupenda combinación de tranquilidad y pacividad sublime.
Sus penas vuelan frente a sus ojos y las preocupaciones se desvanecen mezclándose con el aroma del mar,observando que en la lejanía aquellas preocupaciones se van pata nunca más volver...jamas...
-Te sientes mejor ahora?.-con total calma pregunta,observando que Israel apoya su cabeza sobre su brazo descansando de tanta diversión.
-Gracias por todo Egipto...eres un gran amigo...-la respuesta emitida transmitía tranquilidad,poseía cierto sueño y aun así su rostro muestra esta vez una tierna sonrisa gentil.
Egipto extendía su brazo interrumpiendo el descanso de Israel para abrazarlo y dejar que el judío descanse sobre su pecho,que escuche el latido de su corazón tan armonioso que es dedicado a el,siempre ha,es y será para el.
Mirando el firmamento sobre las cálidas arenas que acompañan el mar,sintiendo el amor de la tierra por el océano que la acompaña,sintiendo el dulce abrazo de la noche y las caricias de la brisa del corazón del mar,la situación ameritaba ser recordada una y otra vez en sus mentes como recuerdo de las veces que se cortejaron para estar juntos por toda la eternidad.
-te quiero Israel...-murmuró por lo bajo,sintiendo una extraña sensación de calidez rodear sus mejillas,un extraño cosquilleo y la aceleración de su corazón.
Palabras,tiernas palabras llenas de amor que Israel no escucho y pretendió no escuchar,pensaba que era una equivocación o simplemente un amor fraternal,de ahí a ser algo más lo aterraba...Pensando que el no era bueno para nadie,por algo la mayoría que amaba se alejaba de el...
Los latidos de Egipto eran tan tranquilos como un compás de música celestial,donde su piel oscura resalta sobre las blancas arenas y brilla por la tenue luz de la luna,donde sus cabellos rojos como la sangre brillaban como el rubí,sedosos y largos,lacios y levemente ondulados,su aroma a hombre maduro que conoce el mar decora su cuerpo entero,la colonia que lleva puesta es tan hipnótica y agradable,sencillamente un hombre perfecto para cualquier otro ser semejante a ellos.
Levanta la mirada,observa aquellos ojos tan extraños y cautivantes,una mirada seductora.
Por su parte los pequeños charcos de miel que posee por orbes Israel atraen la atención de el,como su cuerpo descansa en paz,como sus cabellos blancos y celestina brillan con la luna y de mezclan con la arena,su cuerpo formado yace oculto en aquellas prendas tan conservadoras.
-Es hora de que regreses a casa Isarel,tu familia de seguro te están esperando y están preocupados por ti...- ayudó a Israel a reincorporarse y seguido tomó de su mano con suavidad en un tierno agarre.
-Está bien...-parecía que no quería irse del lugar,su voz con desgano emitido lo daba a entender.
Por el pasaría toda su vida en el mar,el mar curaría sus penas,alejaría sus dolores y lo resguardaria de las preocupaciones.
-Quédate por favor,ya es tarde y difícilmente encontrarás un hotel,pasa por favor...-tomó su mano con timidez y lo guió a su casa.
Egipto ya la conocía por lo cual no fue sorpresa grande ante sus ojos,pero siempre le sorprendía lo hermoso que Isarel se veía cada vez que sonreia,le daba hospedaje y sobre todo cuando bailaba tan alegre como ninguna otra persona.
Asintiendo entro,la noche transcurría veloz,acepto la invitación de Isarel pero había una cosa que lo preocupaba...muchas cosas...demasiadas.
-Isarel...quiero invitarte a que te pases por mis tierras cualquier día que se te plazca...-argumento casi timido,el judío siempre lo ponía de esa faceta,tímido y nervioso.
-Claro!...iré cuando tenga tiempo...-su respuesta parecía una típica promesa que seria inconclusa.
Pero...Isarel no dejaría aquella promesa como una vacia...el la cumpliria y que mejor aquel día tan extraño que lo invitó hace tiempo...
-Bien...entonces...em...-su nerviosismo le gana y hace que se le forme una sonrisa seguido del movimiento de sus manos sobre su cabello,despeinados con desespero.
-Tranquilo...buenas noches Egipto.-acomodo sus cabellos,tocando una vez más su rostro,aquel joven y maduro rostro tan varonil que lo inquieta de sobremanera.
Extrañas sensaciones intentan tomar control de su ser y sumir lo en la más grande de sus vergüenzas,un tierno abrazo sustituiría al beso en la mejilla que le tenía pensado dar,tal vez sería bien cursi o demasiado raro para el egipcio quien según tiene entendido alguna vez estuvo casado con Siria.
Sentir algo por alguien que tiene diferente pensamiento sobre el amor o diferente orientación sexual resulta prohibido,imposible por que de seguro para Egipto lo que pretendía hacer sería visto mal.
Temer y correr ante sus miedos,tal vez estaba confundiendo su atención y amistad hacia el con algo más y aquello lo estaba matando por dentro y era una sé sus tantas preocupaciones que lo dejaban todas las noches en vela.
Miro por última vez su mirada,sus orbes tan extraños y salio de la habitación observando o sintiendo una sensación tan extraña de soledad sobre el,una que desaparece cada vez que esta con el egipcio,es como si lo conociera de toda la vida,de toda su existencia primigenia.
Se dirigió a su habitación donde recostado en su cama se dedicó a pensar,dos cuerpos reposando,dos corazones latiendo por el contrario,dos cerebros que solo piensan en una persona.
Suspira con pesadez para pasar sus blanquecinas manos por su rostro en señal de cansancio.
-Por qué llegó a sentir estas cosas...Dios dame una señal de que no me estoy volviendo a equivocar...no quiero volver a sufrir.......no...-sus súplicas son escuchadas pero no existe manifestación alguna.
Su voz transmite tristeza y remordimiento,nostalgia total y extrema soledad y depresión.
Por otra parte alguien se queda pegado en la ventana observando pasar el tiempo frente a sus ojos,observando cada minúsculo detalle del firmamento sobre el cielo,contando las estrellas y extrañando a quien yace tan cercano y distante.
-Israel...-suspira con nostalgia.-Por qué no me recuerdas...si lo hicieras esperaría que me perdones...-argumenta dolido.
Dolido por aquel repentino olvido.
Tan cercano a el...
Tan cerca de el...y sin poder siquiera tocarlo con la yema de los dedos,siquiera pensar en el sabor de sus labios o la calidez de sus abrazos y la sensación reconfortante de su mirada paciva.
Solo esperaba que el judío aceptará su invitación.
Se olvidaba de que ya hace tiempo lo invito...Su mente esta pérdida en el pasado...
El pasado de su condena,su presente hiriente y su futuro incierto.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top