Capitulo 4: Sombras y juramentos
En el Castillo de las Sombras, una fortaleza envuelta en la oscuridad de las pesadillas, Killer, Dust y Horror se encontraban reunidos alrededor de una mesa de madera tosca. La atmósfera del lugar estaba cargada de tensión y desesperación, reflejando el estado de ánimo sombrío y pesimista de los presentes tras el reciente fracaso en la batalla.
Killer: (frunciendo el ceño con disgusto) Este lugar... se ha vuelto aún más oscuro desde la última vez que estuvimos aquí. Nightmare ha dejado su marca en cada rincón, convirtiendo lo que alguna vez fue un bastión de poder en un refugio de desesperación.
Dust: (con una risa siniestra) Parece que la decadencia ha encontrado un hogar aquí. Y con razón, después del espectáculo que dimos contra esos malditos Star Sanses, no me sorprende que Nightmare esté más irritable de lo habitual.
Horror: (con una mirada sombría) Nuestra derrota no ha pasado desapercibida para nuestro señor. Podemos esperar consecuencias desagradables si no encontramos una forma de redimirnos ante él.
Killer: (con determinación) Sea lo que sea que Nightmare esté tramando, debemos estar preparados para ello. Pero no olvidemos que estamos aquí por nuestro propio beneficio. No tenemos lazos más allá de la conveniencia.
Dust: (asintiendo con una sonrisa inquietante) Así es, hermanos. Nosotros somos leales a nuestra causa, no a Nightmare. Si él nos necesita, estaremos aquí, pero no vamos a arriesgar nuestras vidas por su capricho.
Horror: (con un gruñido gutural) Estoy de acuerdo. Mientras no se interponga en nuestro camino, no habrá problema. Pero si nos lleva a la ruina, no dudaré en abandonarlo.
En medio del tenso ambiente, una figura oscura emergió de las sombras, su presencia envuelta en una aura de poder y autoridad. Era Nightmare, el Rey de las pesadillas, cuya presencia llenaba la habitación con una sensación de opresión y malestar.
Nightmare: (con una voz gélida y penetrante) ¿Qué es esto que escucho? ¿Acaso mi lealtad se ha vuelto tan endeble que incluso los más fieles entre mis subordinados comienzan a dudar?
Killer, Dust y Horror se enderezaron en sus asientos, sintiendo el peso de la mirada de su señor sobre ellos. Sabían que su fracaso en la batalla no había pasado desapercibido, y ahora debían enfrentar la ira de Nightmare.
Killer: (manteniendo la compostura, pero con un dejo de tensión en su voz) Mi señor, nuestra retirada no fue por falta de lealtad. Los Star Sanses demostraron ser más difíciles de lo que esperábamos.
Nightmare: (con un gesto de desdén) Las excusas son irrelevantes. Lo que importa es el resultado. Y su fracaso me ha dejado en una posición comprometida. ¿Cómo puedo confiar en ustedes para proteger mis intereses si no pueden manejar una simple confrontación?
Dust: (levantando la mirada con una expresión desafiante) No se preocupe, señor. Siempre hemos sabido cómo dar cuenta de nuestros enemigos. Esta vez fue solo un contratiempo menor.
Nightmare: (con una risa fría) Un contratiempo que no puedo permitirme repetir. A partir de ahora, espero resultados. Y si no pueden entregármelos, entonces quizás sea hora de encontrar sustitutos más competentes.
La amenaza implícita en las palabras de Nightmare hizo que Killer, Dust y Horror se estremecieran, conscientes de las graves consecuencias de su fracaso. Sabían que debían redoblar sus esfuerzos y demostrar su valía si querían mantener su posición en el círculo íntimo de su señor.
Killer: (interviniendo con un gesto de urgencia) Mi señor, no fuimos nosotros los que planeamos la retirada. Fue Error quien abrió el portal y nos retiramos en su estela.
Nightmare: (frunciendo el ceño con aún más intensidad) ¿Error? ¿Se atreve a retirarse sin mi permiso?
Dust: (asintiendo con vehemencia) Así es, señor. Error actuó por su cuenta. Ni siquiera está aquí para enfrentar las consecuencias de sus acciones.
Horror: (con un gruñido de frustración) Ese niño loco siempre ha sido una carga para nosotros. No deberíamos sorprendernos de que nos traicione de esta manera.
Las palabras de Horror resonaron en el aire, llenas de resentimiento y desconfianza hacia Error. Mientras tanto, Killer, Dust y Horror se preparaban para enfrentar las consecuencias de su fracaso, conscientes de que su lealtad estaba siendo puesta a prueba como nunca antes.
En medio de la tensa conversación en el Castillo de las Sombras, Killer y Dust se quedaron en silencio, conscientes de la amenaza implícita en las palabras de Nightmare. Mientras tanto, Horror, aunque también sintió el peso de la ira de su señor, permaneció en su lugar con una determinación inquebrantable.
Horror: (levantando la mirada con firmeza) Mi señor, aunque nuestra retirada fue una decisión estratégica, aceptamos la responsabilidad por cualquier consecuencia que haya causado. Pero quiero que sepa que mi lealtad hacia usted sigue siendo inquebrantable.
Nightmare: (con un gesto de sorpresa) ¿Lealtad? ¿Acaso crees que tus palabras pueden ocultar tus dudas, Horror?
Horror: (con un gruñido bajo) No son dudas, mi señor. Es una realidad que he aceptado desde hace mucho tiempo. En mi AU, la debilidad es castigada y la fuerza es recompensada. Y aunque nuestras victorias pueden ser escasas, su protección me brinda una oportunidad que de otro modo no tendría.
Nightmare: (con una voz gélida) Entiendo tu perspectiva, Horror. Pero no olvides que en este mundo, la lealtad es una moneda de doble filo. Si quieres seguir recibiendo mi protección y apoyo, tendrás que demostrar que eres digno de ella. El fracaso no será tolerado.
Horror: (asintiendo con seriedad) Lo entiendo, mi señor. Haré todo lo que esté a mi alcance para cumplir con tus expectativas y asegurar nuestra victoria en el futuro.
Nightmare: (con un gesto de aprobación) Así me gusta escuchar. Ahora, ve y descansa por hoy. Pero recuerda quién es tu verdadero protector y benefactor.
Con estas palabras, Nightmare indicó a uno de sus sirvientes que trajera un trozo de carne para Horror como una recordatorio sutil de su poder y dominio sobre su subordinado. Horror aceptó el gesto con gratitud, pero también con una chispa de temor en sus ojos, recordando quién era realmente el amo de las pesadillas. Mientras tanto, Killer y Dust permanecieron en el castillo, conscientes de que tendrían que redoblar sus esfuerzos para mantenerse en el favor de Nightmare, el Rey de las pesadillas.
Nightmare: (con un gesto de desdén) Bien, ya han oído lo que tenían que escuchar. Ahora, fuera de mi vista. Descansen y prepárense para lo quve viene.
Con un ademán de su mano, Nightmare abrió un portal oscuro que conducía fuera del castillo. Horror cruzó el umbral, sabiendo que su tarea aún no había terminado y que debía enfrentarse a las consecuencias de su fracaso.
Killer y Dust, por otro lado, se despidieron de Nightmare con una inclinación de cabeza y se dirigieron cada uno a sus habitaciones en el castillo. Allí, tendrían tiempo para reflexionar sobre lo ocurrido y planificar su próximo movimiento en privado.
Mientras tanto, Nightmare permaneció en la sala del trono por un momento, recogiendo sus pensamientos antes de tomar una decisión importante. Sabía que era hora de hablar personalmente con Error, para asegurarse de que el caos no se saliera de control y para reafirmar su autoridad sobre sus subordinados.
Nightmare se levantó de su trono con gracia, su figura imponente destacando en la penumbra de la sala del trono. Con cada paso, su determinación se fortalecía, su mente trabajando en estrategias para abordar la situación con Error.
Cuando llegó a la entrada del castillo, levantó una mano y conjuró un portal oscuro con un gesto elegante. El portal tembló y se retorció, como si luchara contra las fuerzas del caos que lo rodeaban, pero finalmente se estabilizó, listo para llevar a Nightmare a su destino.
Con un último vistazo a la sala del trono, Nightmare cruzó el umbral del portal, adentrándose en la oscuridad mientras se dirigía hacia donde sabía que encontraría a Error. No importaba cuán impredecible fuera, Nightmare estaba decidido a mantener el control sobre su reino de pesadillas, cueste lo que cueste.
Nightmare avanzó con paso firme por el interminable vacío del Anti-Void, con cada paso resonando en el silencio opresivo que lo rodeaba. A su alrededor, el paisaje era una extensión interminable de blanco, sin forma ni estructura, como si estuviera inmerso en un mar de pureza corrompida por la oscuridad.
Al llegar a una pequeña isla de sombras en el vasto mar blanco, Nightmare encontró a Error. Este estaba rodeado por sus títeres, sus marionetas y su puff, sus hilos colgantes ondeando en la nada mientras realizaba sus movimientos erráticos. Nightmare observó con una mezcla de fascinación y cautela mientras Error parecía hablar con la nada, como si estuviera sintonizando una frecuencia invisible.
"Error", dijo Nightmare con una voz que resonaba con una autoridad gélida. "Necesito hablar contigo".
Error se detuvo en su danza caótica y se giró hacia Nightmare, sus ojos brillando con una chispa de reconocimiento. "Ah, el Rey de las Pesadillas", murmuró con un tono de burla. "¿Qué trae al gran Nightmare a mi modesto rincón del Anti-Void?"
Nightmare no mostró ninguna reacción ante la insolencia de Error. "Tu retirada en la batalla reciente no pasó desapercibida", declaró con frialdad. "Debes entender que tu imprudencia puede tener consecuencias graves".
Error dejó escapar una risa estridente, como el chirrido de metal contra metal. "¿Consecuencias? ¿Acaso crees que me importa lo que pienses, Rey de las Pesadillas? Soy libre como el viento, no estoy atado por tus reglas o tu autoridad".
Nightmare apretó los dientes, conteniendo su ira. "No subestimes mi paciencia, Error", advirtió con voz tensa. "Tu comportamiento podría poner en peligro a todos nosotros, incluido tú mismo".
Error se acercó un paso más hacia Nightmare, su forma distorsionándose en las sombras que lo rodeaban. "Entonces, ¿qué? ¿Vas a castigarme? ¡Ja! Eres patético, Nightmare. No tienes el poder para controlarme".
Nightmare mantuvo su mirada imperturbable, aunque sus puños se apretaron con furia contenida. "No subestimes mi poder, Error", repitió con voz fría. "Y no olvides quién es el verdadero amo de este reino".
Error soltó una carcajada discordante, sus ojos brillando con una mezcla de diversión y desdén. "Oh, lo recuerdo muy bien, Nightmare", respondió con sarcasmo. "Pero eso no significa que tenga que seguir tus reglas. Soy libre de hacer lo que quiera, cuando quiera".
Sin esperar más respuesta, Error se sumergió en la distorsión del Anti-Void, dejando a Nightmare solo con sus pensamientos oscuros. Sabía que la confrontación con Error era solo el comienzo de una lucha mucho más grande por venir, una en la que la lealtad y la traición se entrelazarían en una danza mortal.
De vuelta en el castillo, Nightmare avanzaba por los pasillos, su mente no podía evitar rememorar las historias que había escuchado sobre el Arbol de la realidad. Recordaba las escasas veces que había oído hablar del árbol y su conexión con los sentimientos positivos y negativos del multiverso.
Aunque la búsqueda de pistas sobre el Arbol de la realidad había sido una tarea ardua y sin éxito durante años, algo en la oscura corriente de pensamientos le decía que estaba más cerca que nunca de descubrir la verdad detrás de la leyenda.
Con cada paso, la determinación de Nightmare crecía, alimentada por la promesa de poder y la esperanza de encontrar respuestas que lo llevaran al Arbol de la realidad y a su dominio final sobre el multiverso.
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¡La historia ya está tomando forma! 😄 Sé que en la historia anterior no tenía mucho contexto, así que he trabajado en mejorar eso. Creo que avanzar paso a paso es la mejor manera de desarrollar los ships que tengo en mente. ⛵💞
📝 Edit 1: A partir de ahora, publicaré los capítulos todos los domingos a las 6 de la tarde. ¡Así que ya saben cuándo esperar novedades! 🌟
¡Gracias por leer, personitas lindas! 🌈 Nos vemos el próximo domingo. 📅
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