Narra Joel.

—Muy dulces días —Me desea él con una sonrisa. Yo junto con fuerza mis labios y lo observo, no puedo creer que haya sido capaz de pedirle que me besara anoche.

—Son las seis —Veo el reloj del teléfono y noto un par de llamadas perdidas de Oriana —Si quieres vete a bañar... yo haré una llamada —Digo mientras me levanto.

—¿Te sientes mejor?

—Aja —Respondo sin mirarlo.

—Ya yo me bañé... —Se para frente a mi mientras yo le escribo un mensaje a mi madre y Oriana, pero siento cómo sus manos acarician mi cabello —Veo que quieres estar solo —Asiento mientras hago como si estuviera súper concentrado —Me voy... —Oigo que dice segundos después cerrando la puerta.

Dejo que todo el peso de mi cuerpo caiga encima de la cama y tapo mi cara con la cobija. Allí me quedo, inmóvil, pensando qué hacer.

«Es lógico que le gusto, y mucho, pero esto no puede ser, nada puede pasar, debo hacer las cosas como deben hacerse, no quiero pasar por lo mismo que Elio»

Mi madre responde mi mensaje y me ducho; me coloco uno de mis oufits favoritos: playera de colores, jean negro y un sombrero negro, sin olvidar las pulseras y mis anillos.

Aun desorientado por el problema salgo de la habitación y escucho susurros, y ya que siento curiosidad me asomo por las escaleras y veo que en dos pisos más abajo se encuentra Erick hablando por teléfono.

Presiono el botón del ascensor varias veces, no quiero que piense que estaba escuchando toda su conversación.

El ascensor se tarde un poco, lo suficiente como para que Erick ya esté aquí, y ya que no lo veo llegar vuelvo a asomarme y esta tan cerca que puedo escuchar perfectamente lo que dice.

—¿Cómo sabes que pasé la noche con él? ¡No jodas! no pasó nada, nada de nada, es mas... no deberías interesarte tanto en esto, recuerda que tú y yo tenemos un trato... —Vuelvo a presionar el botón del ascensor, estoy desesperado —No...Tn... —Dice en lo que el ascensor abre las puertas y entro con prisa.

—Estuvo cerca. Oh fuck! —Me pongo colérico, sin sentido, o tal vez con mucho sentido.

«¿Un trato? ¿Hablaban de mí? Estoy seguro que él estaba hablando con Tn. Me mintió, me dijo que ya no tenía contacto con ella pero no es así, si lo tiene ¡Me mintió!»

Al llegar a recepción trato de pasar desapercibido, pero es imposible; algunos empleados se me acercan y piden autógrafos e intento sonreír para ellos, mando saludos y busco con la mirada a los chicos del equipo que se quedaron con nosotros.

—¡Joel! —Me llama Erick —Carlos y Alfredo ya bajan, ven a desayunar —Se me hace inevitable no sonreír, pues trae puesto un gorro, y se ve muy tierno.

«Me mintió, ¿qué parte de que mintió no quiero entender?»

—I'm not hungry —Digo borrando la sonrisa, haciendo una expresión fría.

Él parece querer hablar pero al igual que a mi le rodean chicas, así que vuelvo a hacer lo mismo que antes. Luego, Carlos y Alfredo llegan y nos informan que debemos estar para la presentación de hoy en Quito, así que tratando de no apresurarme mucho ya que me canso, acumulo mi ropa y Erick lo hace igual.

—Esto es injusto... —Expresa él.

—No te quejes, seguramente hizo lo que pudo —Opino —Además es nuestro deber esto —Culmino cerrando la última maleta para salir de la habitación y presionar el botón del ascensor.

—Pero tú estás enfermo —Dice él mirándome.

—Pero tú no, no tenías que quedarte, no es tu obligación —Desvío la mirada.

—Yo no lo hago porque sea obligación, ni siquiera porque te lo prometí —Lo veo a los ojos nuevamente y levando una ceja —Lo hago porque es lo quiero hacer, porque si no estás conmigo yo no podría hacerlo, no me puedo presentar si tú no estás —Explica viéndome con un brillo en sus ojos verdes.

Habla como si eso no lo hubiera hecho antes, así que no digo nada. Él se cansa de esperar respuesta, escucho cómo suelta un gruñido y lo veo de reojo sosteniendo con fuerza mis maletas; siento que me falta un poco de aire pero respiro profundo.

—Todo estaba tan bien hace unas horas... —Susurra, y siento una mezcla de compasión combinada con furia, no puedo creer que sea tan buen mentiroso.

El ascensor llega y abre sus puertas; entro y espero que él lo haga, pero solo me ve negando con la cabeza y toma el camino hacia las escaleras.

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Bajamos del taxi, Alfredo me ayuda con las maletas y pasamos rápidamente por recepción, hay algunas fans así que por tercera vez en el día sonrío para ellas, y vamos al living donde se encuentran los chicos.

—¿Cómo te sientes? —Me pregunta Zabdiel y como me siento un poco agitado y cansado le hago una expresión de más o menos.

—Tú te quedas acá, pero Erick si se va con nosotros —Indica Renato.

—¡¿Qué?! —Exclama Erick, ¿Qué le pasa? —¿Osea que hicieron que Joel saliera de allá así como se siente solo para traerme a mí? —Pregunta con rapidez, molesto —¿Y si le hubiera pasado algo en el camino? —Renato intenta calmarlo pero lo que consigue es que este le siga gritando —¿Qué les pasa a todos? ¡Son unos desconsiderados! ¡Su puto padre! —Yo me congelo, jamás lo había visto actuando así, y menos por mí. Christopher me da un codazo y me ve, imagino que tratando de decirme que haga algo, pero estoy tan impactado por su actitud que mis músculos no responden —Coño de la madre... —Susurra entre gimoteos.

—Oye bro, hermano... —Se le acercan Christopher y Richard para luego susurrarle algo en el oído y juntos se van.

—Se volvió loco —Susurra Renato negando severamente —Tengo que decirte algo —Me dice. Veo a Zabdiel, este encoge los hombros, y sigo los pasos de Renato.

—Lo lamento —Expreso apenado ya en la habitación.

—Tienen que tomar distancia —Siento algo extraño en mi pecho —Mira Joel, yo sé que ustedes dos son muy unidos, pero esa unión nos está trayendo problemas, incluso más que antes —Lo veo frunciendo el ceño —Todo esto... solo son sentimientos wey y todo cambia, ¿me entiendes? Me refiero a que no es bueno que pasen cosas así. Toma cartas en el asunto wey porque cada día anda más dramático —Asiento y se forma un nudo en mi garganta. Esto era lo que quería, esto es lo que tengo que hacer —Y del berrinche de Erick se encargará Daysi —Dice lo ultimo saliendo de mi habitación.

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Estando en Guayaquil, ya que los chicos han despertado busco a Zabdiel para que juguemos play en su habitación, y después de tocar la puerta un par de veces él abre y al verme sonríe.

Nos damos un apretón de manos seguido de un corto abrazo: —¿Y cómo estás?

—Mucho mejor —Respondo entrando —¿Y tu mamá?

—Desayunando con los demás —Responde —esto me lo presto el negro —Dice mientras intenta desconectar algunos cables de la tv —Oye Joel...

—¿Qué? —Rio por la cara que tiene ya que hace fuerza para quitar los cables.

—Deberías hablar con Erick —Sugiere —no sé si viste la presentación de anoche pero él... estaba realmente mal hermano, muy mal.

—No la he visto, y no puedo hablarle, tiene que entender que esto ya se acabó, que ya no podemos tratarnos igual que antes —Digo mientras elijo mi personaje en el juego.

—Ah... —Lo veo —Te dio la misma lora que a mi eh —Hago una mueca con mis labios —Hablo de Renato... digo que a mí me dijo que debería tomal distancia y que Yenny se encargaría de Chris —Abro los ojos como platos —Sí, no es la primera vez que lo hace, pero esto solo es una etapa Joel —Sí, claro —luego él va a madural y... —Para de hablar, creo que se dio cuenta que sus palabras me están hiriendo.

—Luego olvidará todo lo que hemos vivido, y tendrá su propia vida, sin mi... y yo me conseguiré a una bella mujer, ya lo sé, lo sé y así deben ser las cosas —Musito.

En silencio jugamos por más de media hora, y al incitarlo a jugar una ronda más escucho que tocan la puerta.

—Ya abro —Dice él para abrir.

Y allí esta Christopher, hablando entre risas con Erick. Richard carraspea la garganta haciendo que el par nos miren y dejen de reír, Erick me ve fijamente, puedo notar la aflicción en su rostro, y nos mantenemos así algunos segundos.

—Miren locos, yo creo que hay que bajar para ir a la entrevista —Habla Richard. Zabdiel asiente y veo como Chris se lleva a Erick mientras agarra sus hombros sacudiéndolo y ambos vuelven a reír —Los esperamos —Dice Richard con una media sonrisa para irse y cierro la puerta.

—¿No y que estaba triste? —Es lo que digo al girarme para ver a Zabdi.

Este recuesta su mano de la pared y bufa: —Eso que acabas de vel no es nada hermano, sabes cómo es Chris cuando alguno se siente mal por algo —Me recuerda.

—Bueno, you're right —Admito ya que Chris varias veces me ha hecho sonreír en momentos difíciles.

N/a: ¿Les gustó? ahhhh

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