Era otro de esas noches malas, una noche donde los recuerdos te perseguían y los arrepentimiento te atacaban sin piedad, el insomnio era tan molesto

—oh, hola —murmuraste cuando tu gato saltó sobre tu cama, se acercó y olfateo tu mano antes de empezar a ronronea — jeje eres tan lindo —acariciaste al gato hasta que se durmió y pronto te dormiste tú también 

Al abrir los ojos el mundo parecía ser peor que ayer, frunciste el ceño, hoy sería uno de esos días malos, tomaste tu celular y decidiste avisar a tus parejas que no irías a la escuela hoy, tu salud mental era importante y no estabas de ánimo para aguantar todo la responsabilidad que significa ser estudiante y manager del Nekoma, los mensajes no tardaron en llegar, todos estaban preocupados por ti y eso te hizo sonreír levemente cuando viste que todos querían venir entraste en pánico, no querías estar con tantas personas, los amabas pero tu batería social hoy estaba rota

"Los poliamor o la muerte" 

(N)- Si quieren verme, escojan solo a uno

(N) no lo sabía, pero eso hizo que los jugadores del Nekoma se declararan la guerra, hasta Kenma estaba metido 

—Soy el más alto así que debería ir yo— declaró Lev, todos lo miraron con el ceño fruncido 

—¿Cómo eso ayudará a (N) a sentirse mejor?— pregunto Kuroo con una notable vena resaltando en su frente, para gusto de todos Yaku ya había pateado al medio ruso

—Como todos queremos ir sugiero que lo hagamos de manera democrática, le diremos a (N) que escoja del 1 al 9 — ante la idea todos estuvieron de acuerdo, pronto todos los números estaban asignados 

"Los poliamor o la muerte"

Kuroo- (N), elige un número del uno al nueve

Chibi-chan- 5 

Gruñidos de frustración se escucharon por parte de los miembros del equipo y Kenma comenzó a preparar sus cosas para irse a la casa de (N)

—Me voy —murmuró antes de salir

Mientras se diría a la casa de su novia decidió pasar a la tienda de conveniencia, compro varios dulces que sabían que eran los favoritos de la chica 

"(N)💕"

Kenma- ¿(N) llevo algo para que hagamos de comer?

(N) 💕- oh podríamos hacer curry, tengo ganas de eso

El chico asintió al leer el mensaje y compró lo necesario, luego de eso se dirigió a la casa de la chica

—Kenma~ — canturreo la chica cuando vio al rubio y el chico le sonrió levemente

—(N), traje algunos dulces y mi consola, podemos jugar juntos—sugirió antes de entrar, evitó preguntar sobre cómo se sentía la chica, esta no era la primera vez que ella tenía un bajo y todos sabían que prefería no hablar de que lo había causado, así que usualmente los chicos la ayudaban a distraerse hasta que ella decidía contarselos, hasta entonces ellos simplemente se quedaban a hacerle compañía

—Eso suena como un buen plan —aprobó la joven y ambos se adentraron a la habitación de la chica

—Hola Tetsu —el rubio saludó cariñosamente al gato negro de su novia, este maullo en respuesta  

Con eso comenzó el día entre Kenma y (N), ambos pasaron la tarde jugando y comiendo porquerías, el tiempo con Kenma era tranquilo, jugabas mientras tenías recostada tu cabeza en sus piernas, cada pantalla de carga acariciaba suavemente tu cabeza, definitivamente era un buen compañero en días como hoy, días donde no quieres hacer nada

—ah, ya es tarde— murmuraste cuando levantaste tu celular —¿Hacemos la cena? —el chico asintió en respuesta y ambos detuvieron su sesión de juegos para comer algo "saludable", una vez allí pusiste música en tu celular y comenzaron a cocinar, Kenma te ayudaba a cortar torpemente las verduras mientras tú hacías el esto, sonreíste al ver al rubio tan concentrado cortando una zanahoria

Una vez preparado todo ambos se sentaron a cenar, hablaban de los nuevos estrenos de videojuegos que se venían y cuando tu le hablabas de las series que estabas viendo él te escuchaba atento, hablar trivialidades y ser escuchado te hacía sentir mejor

—Kenma ¿Te quedarías esta noche? No quiero estar sola —al decir lo último desviaste la mirada y el chico te sonrio dulcemente 

—Mañana es fin de semana así que podemos pasar la noche jugando si quieres— el chico tomo la mano que mantenías sobre la mesa — o podemos hablar de todo lo que quieras — casi como si fueran palabras mágicas cuando lo escuchaste decir aquello las lágrimas comenzaron a caer, el chico se quedo en su lugar mirándote con una sonrisa triste sin soltar tus manos

—Yo… no me he sentido bien estos días— hablaste entre sollozos — he tenido toda clase de pensamiento y no se como detenerlos, las cosas que creía que estaban bien dejaron de estarlo, de un día para otro sentí que todo el control que había logrado obtener se me fue arrebatado sin miramientos y comencé a tener mucho miedo de algo que creía tenía controlado...yo —alejaste tu mano de Kenma y este se levantó para ponerse de rodillas frente a ti— yo a veces despierto con esta clase de sensación, en la que me gustaría estar...muerta y me siento tan culpable, como una basura —confesaste mientras cubrias tu rostro con tus manos— pienso en ustedes y en lo feliz que me han hecho, me pregunto si realmente merezco todo eso y luego me siento culpable de que a pesar de toda la felicidad que me dan yo tenga esta clase de pensamiento, siento que debería disculparme por tenerlos —el chico quito suavemente tus manos de tu rostro y acaricio tus mejillas

—Sabes, no puedo decir mucho sobre lo que estás pasando, todos vivimos estas situaciones de maneras distintas, cada quien carga con su propio peso y no creo que debas disculparte por sentirte mal, todos nos sentimos mal a veces y eso está bien. Se que te cuesta pedir ayuda y te es difícil ver en estos momentos que no estás sola, pero quiero asegurarte que donde quiera que mires alguien te tenderá una mano —las lágrimas seguían cayendo mientras el chico las secaba suavemente — He estado a tu lado lo suficiente para ver como te esfuerzas cada día en seguir adelante, como te esfuerzas en tus terapias, como diligentemente tomas tus medicamentos, como a pesar de la culpa tomas días libres, sentir que damos algunos pasos atrás es normal pero creeme, he visto todo tu proceso y se que esta solo es una amarga parada antes de que sigas avanzando, se que seguirás avanzando, eres fuerte y perseverante — el chico se levantó y pegó tu cabeza a su pecho, cerraste los ojos sintiendo sus latidos, eran rápidos…eran reconfortantes — estaré a tu lado cada paso que des y si llegas a tropezar te ayudare levantarte, incluso cuando quieras detenerte porque sientas que no puedes más me quedaré contigo hasta que juntes fuerzas de nuevo y cuando seas capaz de hacer todo esto por tu cuenta...yo seguiré a tu lado —las palabras del chico te reconfortaron enormemente y le agradeciste com una sonrisa, él te devolvió eso con un cálido beso

Pasaron el resto de la noche acostados en tu cama, hablando de todo y de nada hasta que eventualmente te dormiste en sus brazos, ahora sabías que todo estaría bien y no porque el chico lo dijera, si no por que sabías que eras fuerte y que ya no estabas sola 

Weno, este es otro especial pero solo lo escribiré de vez en cuando

Atte
Cain-sama