𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼#5.

Inglaterra, Londres./ 04 de abril.
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𝐆𝐚𝐥𝐢𝐚 𝐑𝐨𝐨𝐬.

La vida es ese transcurso de emociones.Un día puede estar sufriendo y al otro sintiéndote por primera vez con vida.

Muchas veces sentimos que no hay motivos para seguir .Mientras otras veces sentimos que tenemos muchas razones para hacerlo.

No específicamente tenemos que tener razones para vivir o existir. Porque yo jamás he tenido una razón en específico para hacerlo y aún así lo intento todos los días.

La vida es apreciar cada pequeño instante, porque quizás ya no habrá más segundos por contar, o por ver.

Yá que el tiempo en éste mundo es demasiado limitado y cortó.

Y lastimosamente no tenemos toda una vida, tenemos solo momentos que se convierte en recuerdos y esos pequeños recuerdos. Son esos pequeños instantes qué nos hacen valorar la vida.

Quizás no soy la persona más adecuada para hablar de la existencia. Cuando he querido acabar con la mía, en más de una ocasión. Debo de admitir que aveces los peores errores de nuestras vidas se convierte en nuestros mayores favores.

Porque a la final todos tenemos esa capacidad de cometer errores una y otra vez. Hasta que nos volvemos capaces de afrontarlos y corregirlos.

Por eso hoy aquí esperando mi turno para entrar al consultorio con la psicóloga. De todas la veces que he venido, hoy amanecí con una nueva perspectiva del mundo y la vida.

No hay razones para seguir, pero la razón de seguir sanando. Es más que suficiente para una persona que ha vivido con dolor.

Porque no importa cuánto tardemos en afrontar nuestro errores, o en sanar cualquier situación,lo importante es que intentemos hacerlo.

-Galia Roos.-Escucho el llamado dé mi psicóloga desde el otro extremo del pasillo

Y ese preciso momento tengo dos emociones demásiado diferentes. Miedo y valentía.

-Miedo de tantas cosas.
-Y valentía de soportar cada una de ellas.

Aún así apesar de todo aquello que me domina. Me levanto y me dirijo al consultorio.

Y por primera vez no quiero que el miedo me venda. Estoy un poco nerviosa. Pero hoy no quiero estar aterrada si no todos lo contrario

"Me quiero sentir valiente".

Me encamino por los pasillos y me adentro al último consultorio que está en la esquina. Al ingresar veo a la mujer que ha hecho todo por ayudarme a sanar. "Mi psicóloga".

-Hola Galia.-Dice ella amigablemente.
-¿Como estás?.

Esa pregunta tiene tantas respuesta y para muchos no siempre será la correcta.

A todos en algún momento nos han preguntado cómo nos sentimos y muchas veces hemos respondido :"Bien estando mal".

Pero quizás sea porque una persona que está sufriendo jamás sería capaz de decir que se siente mal, aún cuando se sienta muerta y vacía por dentro.

No somos capaces de hacer Sufrir a otros por nuestros propios problemas, aúnque muy tarde entendímos qué, el reservarlo nos hacía más daño a nosotros mismos.

-Estoy mal y creo que todos lo saben a la perfección, y yo no puedo seguir ocultandolo más de la cuenta. Porque el dolor realmente llega al límite dónde no soy capaz de soportarlo más.
-Me concentró en mirarla a sus ojos avellanas qué me miran con compresión.

-Es la primera vez que eres del todos sincera conmigo, Galia.-Dice ella con sinceridad.-Y está bien que reconozcas que no estás del todo bien.

-Todos tenemos pruebas,obstáculos, y
exámenes distintos. La vida de nadie es fácil, cada persona tiene sus propios caos y guerras por pelear. Y créeme que ninguna es fácil o sencilla.-Me dice ella con toda la sabiduría del mundo.
- Pero apesar de lo complicada que son todas esas guerras. Cada uno de nosotros, somos guerreros capaces de vencerlas.

Me quedo concentrada procesando sus palabras. No sé que decir o que debería.

Vaya hay personas que te dicen palabras en el momento adecuado. Creó que eso era justo lo que necesitaba escuchar mi corazón, para seguir adelante con todo lo que me toca por afrontar.

-Gracias, Luz.- No eres la mejor psicóloga, pero eres la psicóloga capaz de motivar a otros.

Ella me mira con nostalgia y algunas lágrimas resbalan de sus párpados.

-En la vida conseguirás personas que te harán daño y muchas otras que te harán feliz. Créeme que tú eres de esas que te hacen feliz, aún cuando ni tú misma lo esté.-Y sin duda eso es admirable.
-Dice mi psicóloga limpiando su resto de lágrimas.

-Jamás imaginé hacer felices a otros.
-Le digo frunciendo el ceño.

Ella analiza mis palabras, como en muchas ocasiones lo ha hecho.

-¿Tienes algún amigo cercano a tí?.
-Inquiere ella.

Su pregunta me toma de sorpresa y pienso una y otra vez , en que responder.

-Sí, Emiliano y Layla.-La miró confusa. Porqué no entiendo a que vino su pregunta.

-Te sientes cómoda a su lado.

-Mas de lo que debería.-Le confieso.

-Entonces no dudes cuando te digo que ellos también se sienten cómodos a tu lado.-Me dice con una sonrisa genuina.

-Como eres capaz de decir aquello, sobre dos personas que no conoces del todo.-Le digo incrédula.

Ella no se inmuta de mis palabras.
Al contrario me regala una sonrisa.

-Tienes razón no los conozco, pero si te conozco lo suficiente a tí, para saber que es verdad.-Dice ella y me quedó sorprendida sin saber que decir.

-Crees que hago felices a otros.
-Le preguntó esperanzada.

-No lo creo.-Dice ella y mi corazón sufren como un mini infarto.
-Estoy demasiado segura de que eres capaz de hacer felices a otros.

-Encerio lo crees.-Inquiero aún dudosa.

-Lo creo.-Me asegura.-Pero ahora es él momento de hacerte feliz a ti mismas.

-¿Y como haré eso?.-Le preguntó mirándola directamente a sus ojos.

Ella me sonríe genuinamente.

-La gran pregunta sería, ¿Estás dispuesta a hacerlo?.-Dice ella retandome.

Su revelación me sorprende de inmediato. Pienso en una repuesta.
¿Y no la tengo?

Hasta que por primera vez en mucho tiempo le regaló una media sonrisa a alguien.

-Jamás he estado prepara.-Le digo con honestidad.-Pero también sé que es el momento de empezar hacer feliz.

Ella me sonríe orgullosamente.

-Entonces es el momento de empezar a sanar, Galia Roos.

-Y yo estoy dispuesta a empezar a hacerlo.-Le digo con seguridad.

Alrededor de todo estos años sufriendo. Me han preguntado tantas cosas y me han dicho muchas otras. Nunca tuve la valentía de responder alguna o almenos ser capaz de cambiar la opinión de esa persona.

Pero un día alguien me dijo:

-Todos merecemos sanar aquello que nos atormenta, alejar aquellos que nos lástima, y soltar todo aquello que nos provoca caos .

¿Porque?

Porque comprender como las heridas que llevamos. Nos han limitado tanto tiempo. Nos motiva a buscar la curación necesaria

Ya que sanar es la única forma de alejar.

Pero para hacerlo debes vencer a aquél pasado que hoy nos convirtió en quiénes somos.

-No será fácil.

-Ni si quiera sencillo.

-Pero tampoco es imposible.

El miedo siempre estará en cada uno de nosotros.

Así que dejemos el miedo de un lado.

" Dejemos de vivir por vivir y empecemos a vivir de verdad ".

_____+_____

Estoy de camino a la preparatoria. Marcus está conduciendo y yo leyendo por (PDF). El viaje se hace más largo de lo previsto, terminó leyendo tres capítulos de un libro.

Cuando de repente llegamos a la preparatoria. La mayoría de los estudiantes están afuera en ese momento siento que mi corazón se va a salir en cualquier instante y el nerviosismo me empieza a invadir.

La ansiedad empieza a darme tan repentinamente. Entonces recuerdo lo que me digo Luz .

Nuestra mente es una computadora, entre más te dejes llevar por la emociones ellas te contralaran a tí.
Por lo tanto trata de tú controlarlas a ellas.

Y eso hice,lo primero fue relajarme para luego comenzar a hacer algunos ejercicios de respiración.

Respiró y exhalo. Así seguidamente hastá que me siento mucho mejor.

Salgo del vehículo después de controlar aquel ataque de ansiedad. La brisa me pega en el rostro, veo a mi alrededor y todavía hay estudiantes aquí afuera. Me encamino a los casilleros y saco mis libros y cuadernos necesario.

-Hola, chica boba.-Dice aquella voz dulce y amigable.

No necesito voltearme para ver al causante de aquella voz.

Aún así no resisto más y lo hago.

Mis ojos verdes se centra en la profundidad de aquellos ojos marrones. Que me hacen olvidar la realidad instantáneamente.Y como siempre mi corazón late a la velocidad de la luz.

-Hola, chico engreído.

El me mirá con cara asesina a lo que yo bajo mis manos a modo de rendición.

-Ahora soy un chico engreído.
-Inquiere él.

Realmente no lo es, de hecho es la persona más amigable y tierna que conozco. Pero claramente no le diré eso.

-Pues sí. -Me limitó a decirle.

-Mala educada.-Contraataca.

-Eso es mentira.-Me hago la ofendida.

Me doy la vuelta y me encamino al salón de clase. Aunque soy tan estúpida que se me olvidó el pequeño detalle de que el estudia conmigo.

Así que técnicamente sale corriendo detrás de mí.

-¡Oye!,eso que hiciste es de mala educación.-Dice molesto con los brazos cruzados, caminando en reversa.

-Puedes caminar como una persona normal.-Lo reprendo.

Porque muy dentro de mí tengo miedo de que se lastimé.

El me mira y deja de estar molesto.

-Esta bien lo haré, sólo porque yo si tengo sentimientos.
-Dice el dramáticamente.

Aveces me preguntó cómo logro soportarlo. Es que parece un niño en ocasiones qué sin duda dejaría de ser Emiliano sino se comportará de esa manera.

-Ya lo superadas.
-Le digo sarcásticamente.

Él se ríe a carcajadas y un huracán de maripositas se apodera de mi. Cada vez tengo más miedo a esto que siento cuando estoy con él.

-Aun la propuesta de enviárte un vídeo sonriendo, sigue en pie.-Me asegura.

Dejo de mirarlo y lo fulminó con la mirada y el muy engreído se vuelve a reír.

Pero lo ignoró completamente. Seguimos caminando hasta que inglesamos a nuestra primera clase. "Historia".La profesora es una mujer mayor de cabello negro y lentes, tiene algunas arrugas en su cara, pero es demasiado amigable para ser cierto.

Tomamos asiento en los últimos puesto.Y así continúo nuestra clase, sin contratiempos o problemas. Al Culminar todos los estudiantes salen apresurado mientras yo decido darme mi tiempo.

Después de recoger mis cosas, agarró mi mochila y salgo del salón. Cuando mis ojos conectan con los de él. Mi cara de sorpresa debe ser tan evidente.

Me estaba esperando.

¿Que si me emocioné?

-Sí, mucho más de lo que alguna vez imaginé.

-¿Me esperabas?.-Le pregunto directamente.

Se centra en mis ojos verdes y me regala una sonrisa de lado.

-Si tengo una debilidad por las chicas que quieren matarme.-Dice él con una sonrisa genuina.-Y para tu mala suerte eres la única que quieres hacerlo.

Por cosas como estás es por la que aveces digo que no lo soporto.

-Bueno no te preocupes, quizás después se te pasa el encanto.-Le digo en broma.

-Lo dudó mucho.-Asegura.

-Cambiando el tema.-Digo de repente.-Vamos a comer.

- Ere buena arruinando los grandes momentos.-Dice anotado por la situación.

-Eres mi guía, me tienes que soportar.
-Le recuerdo.

-Lastimosamente.-Y le doy un codazo antes de que diga algo más, el se queja pero no dice nada.

Después de ese pequeño momento. Ambos nos fuimos por caminos diferentes el fue a la cafetería y yo a la biblioteca.

Me encamino a los extensos pasillos, la biblioteca como de costumbre está vacía ya nadie leé. Pero yo sí y me encanta hacerlo. Me siento en una mesa y me devoro mi deliciosos panqueques. Minutos después voy a las estanterías y hay diversos temas así que agarro uno llamado inteligencia emocional.

Leo y todo lo que dice están profundo.
Te explican el porque de cada emoción, y como ellas están relacionadas con tú mente. Terminó tan entretenida en el libro que se me olvida que el tiempo sigue.

Hasta que escuchó la voz que desenvuelve mil emociones en mi interior.

-Te gusta leer.-Me pregunta él, curioso por la respuesta.

Mis ojos conectan con los de aquél chico castaño.

-No me gusta , me encanta.
-Le digo como niña pequeña emocionada y Emiliano me sonríe.

-Ya me di cuenta, sé te olvido la segunda clase y para la tercera falta menos de tres minutos-Me recuerda.

Mi cara de sorpresa e incrédubilidad debe ser tan notable. Emiliano se ría a carcajadas y mi cara empieza a ponerse roja como un tomate.

-Tranquila ya me encargue de todo.
-Me dice con tranquilidad.-Nos vamos.
-Me pregunta, y yo me limitó a asentir aún con la cara rojiza y la vergüenza recorriendome en cada esquina de mi ser.

Nos encaminamos a nuestra última clase.
La profesora nos regaño por llegar retardados, aún así nos dejó entrar.

La clase de religión empieza con temas interesantes. La profesora hace algunas preguntas todos las respondemos. El tiempo pasa más rápido de lo previsto.
Y sin darme cuenta será por finalizada la clase.

Cómo siempre espero que todos salgan del aula. Después de algunos minutos salgo y me encuentro al castaño más amigable del mundo.

Nos miramos y ninguno dice nada. Pero aún así nos ponemos a caminar a los extensos pasillos repletos de estudiantes.
El nerviosismo empiezas y entonces recuerdo que yo debo tener el control de mis emociones.

Entonces empiezo a pensar que estoy sola y sin darme cuenta, y sin creerlo aún, llegué a los casilleros pero no junto a Emiliano. Al parecer lo deje atrás.

Entonces sin más opción guardé mis libros y mi cuadernos.

Me encamine a la salida de la preparatoria. Sacó mi teléfono del bolsillo de mi jean y busco el número de Marcus, cuando estoy a punto de enviarle un mensaje tropiezo con alguien.

Al levantar la vista, mis ojos buscan a la persona con la que choque. Y si era nada más y nada menos que Emiliano.

-Esto de que tropieces conmigo, me está gusta más de lo que debería admitir.
-Dice el con una sonrisa y yo ruedo mis ojos.

Sinceramente no sé cómo logro soportarlo.

-Eres él único ser capaz de decir aquello.-Le aseguro y el se encoge de hombros.

-La locura es parte de cada uno de nosotros sólo hay que saber descifrarla.
-Me dice con honestidad.

-Por lo menos, tú si disfruta la vida.

-La vida es muy limitada para no disfrutarla.-Me asegura.-Galia es el momento de que empieces a valorar tú vida.

-Es lo que intento hacer.-Le recuerdo.

-Entonces te gustaría escaparte de tus problemas por un instante.
-Me pregunta directamente.

-Mejor por un segundo.-Le respondo y el me sonríe genuinamente.

Y juntos nos encaminamos a la final de la preparatoria. Dónde se encuentra el extenso jardín de flores.

Mis ojos captan los diversos colores de cada una de aquellas flores. Pero recuerdo que nada puede ser color de rosa, porque también hay oscuridad en el mundo. Y mucha más de la que somos capaces de visualizar.

Entonces le pregunto al chico a mi lado lo que mi mente acaba de procesar.

-En un mundo de mil colores, porque una persona no puede volverse tu oscuridad.-Inquiero dudosa.

-Porque esa persona quiere que seas ese contraste de colores que están ocultos en ella.

Y por primera vez en mucho tiempo sonrió. Si sonreí de felicidad.

-Es la primera vez, desde que te conozco que te veo sonreír sin limitarte.
-Dice el sorprendido.

-Era el momento perfecto para hacerlo.
-Me limitó a responderle.

-Aun tienes miedo.-Me pregunta y yo frunso ligeramente el ceño.

No entiendo específicamente a qué se refiere.Lo miró esperando una explicación.

-Te acuerdas la vez que te perdiste en las flores.-Me pregunta Emiliano y yo asiento.-Me dijiste que te sentías afortunada de muchas cosas. Pero que el sanar no era un de hechas.-Dice él recordándome aquel suceso.

No con lastima, al contrario con compresión.

Vaya sinceramente no me acordaba de haberle mencionado aquello. Pero si tenía la repuesta a esa pregunta.

-El miedo vive en cada uno de nosotros.
-Le digo.-Le tenemos miedo a tantas cosas que nos olvidamos de aquellas que valen la pena. Y aunque tenía miedo de sanar en algún momento quedó en el olvido cuando recordé que todo en algún momento se aleja, se olvida y se pierde.

El me mira con un expresión de sorpresa y al mismo tiempo de orgullo.

-Empezaste haber tú mundo de otra manera.- Me asegura.

-Siempre tuve esa perspectiva de mi mundo. Pero no estaba segura si en verdad la vida era así de sencilla.-Le aseguro con honestidad.

-Te entiendo. -Se limita a decir.

Y nos quedamos en silencio, no uno incómodo de hecho me hacia sentir bien.

Dicen que sabes cuándo estás con la persona apropiada. Si puedes quedarte en silencio y no sentirte incómodo.

Así que caminando hasta perdernos entre aquellas flores con él ami lado, supe que estaba con la persona correcta en el lugar correcto.

Y no deseaba más nada sino aprovechar este momento.

Seguimos caminando por algunos minutos hasta que nos sentamos en el piso rodeado de todas las flores.

-¿Sabes?,mi tiempo desde hace años es limitado, pero cuando estoy contigo soy capaz de apreciar los pequeños instante.
-Dice el con sinceridad y por primera vez siento que sus palabras tienen un mensaje oculto.

-El tiempo de todo es limitado.
-Le aseguro.-Hoy estamos mañana no sabemos.Quizás no es el momento de irnos pero en algún momento lo será
y todos lo sabemos bien.

-Bueno el mío está más limitado aún, porque tú me quieres matar.-Dice el dramáticamente y yo me río a carcajadas.

En mi vida me había reído tanto con alguien. Cómo lo hago con él.

-Deberías reírte más seguido.- Me asegura.-Me encanta tu sonrisa.

Yo lo miro perpleja.

-Apenas me he reído dos veces hoy.

-Pues yo quiero ser él causante de cada una de tus sonrisa apartir de ahora.
-Dice mirándome con ternura.-Porque ya tú te volviste mi fuente de felicidad.

-Es bueno saberlo, pero es casi imposible que me hagas reír, siempre.
-Le digo muy segura de mi respuesta.

-Entonces hagamos que lo imposible, juntos lo volvamos posible.

-Me encanta la idea.

-Y a mí me encantas tú.

Vuelvo sonreír como una boba.

Para luego los dos sumergirnos en un profundo silencio dónde los latidos de mi corazón lo llamaban a él.

No era incómodo, era especial, porque estaba con la persona ideal.

En ese pequeño lapso de tiempo los dos nos quedamos perdido en la belleza de aquel campo inmenso de flores. Donde ambos éramos ese contraste de colores que estaban ocultos en la oscuridad.

El conmigo y yo con él.

Mirando al horizonte, perdidos en la belleza de un corto momento dónde nos volvimos inseparables.

Hay aprendí que los pequeños instante de la vida, se vuelven segundo y cada uno de ellos se vuelve tiempo.

¿Que formamos el y yo?.

No tenía idea.

Éramos algo imposible, pero acá estábamos siendo imposible juntos y dejando lo posible para otro momento.

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Nota de la autora: ¿Que les pareció el capítulo de hoy?.

Yo me emocioné por todo así que espero que ustedes también.

Los quiero 💘
Nos vemos en un próximo capítulo :')

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