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Marinette había sido sacada de su celda y llevada nuevamente a la sala de interrogatorios, acaricio sus brazos atrayendo el calor que la habitación le brindaba, su cuerpo apenas comenzaba a desentumecerse y como si alguien hubiese leído sus pensamientos una mujer entro a la sala, en una de sus manos tenía una taza de té humeante y en la otra una sudadera que parecía ser bastante abrigada.

-Por lo general no tenemos este tipo de tratos con los presos, pero tratándose de la esposa de mi amigo, puedo hacer una excepción.

-Gracias.- Marinette al tomar la tasa entre sus manos, sintió un placer indescriptible al sentir el calor en sus manos, realmente se estaba muriendo de frio. Alya pasó posteriormente a colocar la sudadera sobre sus hombros, un aroma particular invadió sus sentidos... Adrien.

-La tome de su locker, no será mucho pero te protegerá un poco del frio, los separos parecen mazmorras de la edad media.

-Por lo menos en ese tiempo les dejaban unas tablas de madera para hacer de cama, aquí no hay ni eso y el baño ni quisiera comentarlo.- dio un sorbo a la taza sin importarle quemarse la lengua el calor poco a poco regresaba a su cuerpo y debía disfrutarlo antes de que la regresaran a ese lugar.- ¿Qué hago acá?

-Lila llamo, ya viene de regreso del hospital, de ver a Adrien y quiere hacerte un nuevo interrogatorio.- le explico.- sé que no es mi trabajo pero yo quisiera preguntarte algo ¿Tienes idea del por qué ocurrió el accidente?

-No tengo ni idea de qué demonios está pasando, mi vida era normal hasta que se me ocurrió la genial idea de casarme, supongo esta es la "feliz" vida que conlleva el matrimonio.

-Que te digo, todo matrimonio es diferente, lo digo por experiencia... aunque no fue nada planeado en un par de semanas quedare libre de ese matrimonio.

-Perdón... ¿Tan malo es?

-Malo no, lo que quiero decir es que lo que pudo haber pasado entre nosotros nunca sucedió y ambos concordamos que estamos mejor viviendo por nuestro lado así que, no podría decirte que mi matrimonio fue malo por dos años, fue raro sí, pero no malo.

La puerta se abrió de golpe, Lila ya había tenido suficiente de ese cotilleo de "amigas" sobre sus parejas, con una falsa sonrisa miro a Alya quien rápidamente salió de la sala, el semblante de Marinette cambio a uno serio, mientras se aferraba a la sudadera de Adrien. La castaña tomo lugar frente a ella, mirando ligeramente la taza de té y después a Marinette directo a los ojos.

-Por favor sé que me odias, pero entiende no hago más que mi trabajo si lo ves de ese modo no hay necesidad de estarme matando con la mirada.

-Sé qué haces tu trabajo y no me molesto por eso, lo que me molesta fue la actitud con la que llegaste, de buenas a primeras querías abrir la tumba de mi hermana y después encerrarme por no sé qué cosa hice.

-Bien, no soy una persona de mucho tacto... en fin por lo que estoy aquí es por lo siguiente, Adrien ya confeso.- la azabache alzo una ceja sin comprender nada.- Nos contó sobre él día que te ataco, y el cómo te hizo aquella marca, pero lo que más me perturba... entiendo que por miedo no dijeras nada a la policía, pero ¿Por qué regresaste con él?

-¿Psicología a la inversa? Incluso yo tengo derecho a no responder, son asuntos personales.- Lila suspiro...aquello era un buen punto, Marinette estaba en el derecho de no contar sus asuntos personales.

-Regresando a todo este asunto, más que un interrogatorio, las pruebas que tenemos de ti no son del todo claras, abriremos la tumba de tu hermana con o sin autorización mañana por la tarde, entonces ocurrirá lo siguiente: si en la tumba se encuentra el cuerpo de tu hermana serás liberada de forma inmediata, delo contrario serás trasladada a prisión sin derecho a un juicio.

-No me parece lo más justo, pero te aseguro que lo único que van a encontrar son un montón de huesos y polvo dentro de un vestido lavanda.

Sin más que decirse, Lila se levantó para sujetarla del brazo, aquel "interrogatorio" había terminado, Marinette regreso a los separos. Por otra parte en el hospital Adrien se movía un tanto inquiero en su cama, no podía quedarse quieto, Chat Noir tenía que actuar a como diera lugar. Una enfermera entro a la habitación, esta le miro de forma seria desde la puerta, el rubio dejo de moverse a aquella mujer le resultaba algo misterioso.

Ella dejo su plantilla a los pies de la cama, regreso a la puerta para colocar el seguro y después camino hasta las ventanas cerrando las cortinas dejando casi todo a oscuras.

-¿Qué está haciendo?- pregunto, ella suspiro pesadamente dando media vuelta, se quitó la peluca y coloco algo en su rostro que saco de su uniforme blanco. – Ladybug.

-Chat Noir.- respondió burlona, sin decir más se sentó a la orilla de la cama colocando sus dedos sobre la herida presionando ligeramente, haciéndole reprimir leves gemidos de dolor.

-No sé de qué me estás hablando, ¿Qué tengo que ver con ese hombre?- pregunto, la azabache chasqueo la lengua haciendo más presión.

-Te eh estado vigilando gatito, desde nuestro primer encuentro ¿Pensaste que te dejaría así de fácil? solo quería visitarte y decirte que no sirvió de nada hacerte el héroe... esa zorra de Lila va a desaparecer del mapa con o sin ayuda de Chat Noir.

-Explícate.

-Lila es una doble cara, triple si mis fuentes confirman lo que sospecho, ella no trabaja para ningún gobierno, es por cuenta propia y para otras personas.- explico.- mi trabajo es matarla y al mismo tiempo eliminar ciertas evidencias.

-Italia hace cuatro años.- ella sonrío.

-Y la existencia de dos personas más, en todo caso una si esa persona no sobrevive. Aquella mocosa Marinette, se está viendo afectada por mi culpa, Hawk Moth tiene un sinfín de contactos, en la cárcel o en la calle ya no está salvo él le matara apenas mueva un musculo en forma de señal.

-¿Por qué me estas contando todo esto?- pregunto desconfiado, no se estaba fiando mucho de sus palabras ¿Lila una doble o triple cara? La mujer no le agradaba pero tampoco era para hablar así de ella.

-Virus Akuma, tus "hakers" te hablaran sobre eso, por otro lado quiero ofrecerte un trato especial, si Chat Noir acepta trabajar para mí, Hawk Moth no podrá tocar a esa niña y todos ganamos, yo gano un par de hakers y un ladrón, a cambio tu aseguras la vida de esa mujer.

Adrien le reto con la mirada pero a ella no parecía importarle, se levantó de la cama sacando una jeringa la cual inyecto en el suelo y rápidamente Adrien se quitó aquella aguja que le conectaba, la última vez que le vio le drogo hasta dejarlo inconsciente esta ves seguramente lo mataría, su respuesta seria un definitivo no en silencio.

Ladybug rodo los ojos sacando tras jeringa e inyectándola de golpe sobre su hombros, Adrien intento gritar, más ella le tapó la boca hasta que el contenido de esa jeringa se terminara dentro de su cuerpo.

-Te necesito vivo y no tieso como al adorable de tu hermano.

-¿Conociste a Félix?

-Y a tu madre, tanto para que...-lentamente sele acerco hasta tocar su frente con la suya, sus dedos se posaron otra vez sobre su herida presionando ligeramente.- para que sus muertes a mis manos fuera rápida y sin dolor. Sorpresa mi querido Adrien Agreste, encontraste o mejor dicho el asesino de tu familia está frente a tus ojos.

Su lengua se había adormecido rápidamente y sus parpados pesaban, era la misma droga que la primera vez, en menos de tres minutos Adrien quedo inconsciente, Bridgette se colocó la peluca rubia rápidamente y se quitó el antifaz, corrió las cortinas y le coloco el suero nuevamente, engañarlo fue sumamente fácil, antes de salir de la habitación le miro por última vez.

¿Has hecho el trabajo?

Como prometí, Félix se tomó la droga...

Solo tienes dos disparos, si fallas, la tercera bala tiene escrito el nombre de tu adorada hermana.

No te fallare Hawk Moth.

De regreso en su celda Marinette regreso a acorrucarse en la esquina de tal forma que intentaba contener el calor en su cuerpo, la sudadera de Adrien el cubría, pero no le ofrecía el calor que ella quisiera, se dejó envolver por su aroma, toda estaba impregnada de él, las palabras de la agente retumbaban en su cabeza "Adrien lo había confesado"

Cerro sus ojos dejando que los recuerdos le fluyeran, no le dolía, no le aterraba, ya lo había superado era algo tan natural en ella.

*****

Después de aquella terrible noche, Adrien le miraba entre lágrimas, maldiciéndose a sí mismo por sus actos, verlo sufrir de ese modo no se comparaba a lo que su destrozado corazón sentía en ese momento, no le quería cerca, quería desaparecer, la culpa era de ella por insistir, por llevarlo, por no dejarlo tranquilo sino hasta que todo termino de esa forma. El rubio intento un par de veces acercarse a ella, pero cada movimiento le incitaba más y más a querer ser uno con la pared.

-Déjame salir.- susurro.- déjame ir, por favor.

Adrien no respondía, golpeaba el suelo con tanta rabia, con tanto coraje, que podía notar sus nudillos comenzar a raspare y sangrar por los cristales rotos... lentamente se fue poniendo de pie, sus piernas temblaban y dolían, pegada a la pared comenzó a caminar lentamente hasta la salida y él ni siquiera le miro.

-Perdóname yo no quería que esto pasara.- tras de él Marinette le abrazo por la espalda, Adrien se desconcertó, ella no tenía por qué tocarlo no tenía por qué disculparse, era un bastardo que le lastimo dela peor manera ¿Por qué ella...?- ya lo entendí, lo siento... pero ahora ya no voy a regresar a tu vida.

Los días y semanas pasaron, Marinette no salía de casa ni para ir al colegio, su padre poco se preocupaba por ese detalle, regresaba hasta la madrugada de los bares y casinos malgastado el dinero que no tenían, le aterraba dormir con la luz apaga y no podía siguiera mirar un espejo. Lo que más miedo el daba era ver por su ventana a Adrien esperarle siempre al otro lado de la calle, le esperaba para ir al colegio, cuando regresaba, pero ella nunca salía de su habitación. Su corazón solo podía comenzar a respirar cuando el reloj marcaba las diez en punto cuando él se regresaba a casa... de aquella noche ya casi se cumplía un mes.

Adrien se disponía a regresar a casa, como todas las noches desde hace un mes, no tenía el derecho de verla pero no soportaba la idea de perder a su única amiga, la que siempre ha estado a su lado a pesar de volverse aislado y frio Adrien. Se dio la media vuelta comenzando a caminar por las desoladas calles.

-¡Adrien!- se quedó helado al escuchar su nombre, rápidamente se giró encontrando a Marinette parada fuera de la puerta de su casa. Ella poco a poco se le fue acercando.- tenemos que hablar.

-Perdona, yo no... no volveré si te incomoda, perdón yo ya...

-Creo que... creo que voy a tener un bebe.- dijo de forma seca.- eso creo, por favor... solo ayúdame.

Al día siguiente, ninguno de los dos asistió al colegio, fueron a un hospital esperando no ser reconocidos por nadie, el que Marinette se hiciera la prueba de sangre fue rápido, en solo tres horas el resultado estaría listo. Esperaron en silencio, silencio eterno que los estresaba, que los llenaba de pánico ¿Qué harían si esa prueba salía positiva? Sea cual sea la decisión de Marinette, él la respetaría, lo aceptaría sin poner peros. El sobre le fue entregado ambos caminaron en dirección al estacionamiento.

-Negativo.- respiro aliviada, sus hombros se sintieron ligeros al quitarse aquella presión de enzima.

-Solo es anemia... seguro no has comido bien.

-Eso creo...

-Yo, voy a esperar a que te marches, no quiero te sientas acosada por mi presencia, ya hice mucho daño.

-Adrien, me voy a quedar a tu lado.- él se sorprendió.- puede que en este tiempo desarrollarla una especie de masoquismo o trastorno mental por tu culpa pero no dejare de hablarte, solo te pido tiempo y que no regreses a tocarme nunca más.

Los años pasaron, la relación no parcia ser la misma a la de antaño, seguían saliendo, las bromas entre ambos, pero desde entonces Adrien agreste nunca regreso a tocar a Marinette, ni un abrazo o algo parecido un muro invisible selo impedía. Pero para Marinette fue una tortura, quería abrazarlo, decirle que ya todo había terminado pero al mismo tiempo tenía miedo, miedo de que solo fuera un cruel sueño.

-Entonces, Por un largo tiempo.

Marinette le miraba sonriente, mientras esperaba su llamado para abordar el avión, unos tíos le habían conseguido entrar a una escuela de modas en Italia ellos pagarían su beca y estadía.

-Seis años, se pasaran rápido, seguro yo te abras graduado en criminología.

-Supongo.- el llamado le alerto, con un gesto de la mano se despidieron mientras ella desaparecía por aquellas puertas.

Medio año después, Adrien recibió una llamada de Marinette, tenía que recogerla en el aeropuerto, lo había dejado todo atrás, no soportaba estar en Italia, no era lo mismo, lo extrañaba quería estar con él para siempre... realmente había desarrollado el masoquismo puro, Adrien selo había dicho más de una vez, pero a pesar de todo, a pesar de lo ocurrido aquella noche, no le impidió seguir amándolo con locura y hasta la fecha se mantenía firme con ello.

*****

-Porque nunca deje de amarte.- murmuro para si abrazándose a un más a esa sudadera.

La noche llego con rapidez, era como si los días confabularan a favor y en contra de sus movimientos, algo como si la última guerra estuviera por comenzar y muy lejos de la realidad no estaba, desde el edificio al frente de la estación un par de orbes zafiros miraba un punto fijo a la nada, dejando que el viento meciera sus cabellos azabaches. En un rápido movimiento desfundo su arma del cinturón lista para ser disparada, sus ojos se entre cerraron observando a la persona tras de ella apuntándole de igual modo.

-De saber que estaríamos aquí, te hubiera matado desde hace rato.- confeso la persona, Ladybug sonrío sin quitarle la vista de encima.

-Podrías hacerlo, incluso nadie sospecharía de ti, hasta hace unos segundos me encontraba inmersa en mis pensamientos, colocar el silenciador del arma te tomaría medio segundo y otro en disparar, nos han entrenado tan bien que en dos minutos diez personas ya abrían muerto.

-Ladybug, la novata, hija de pasteleros que en poco tiempo se convirtió en la perra de Hawk Moth, y aun así sigues sin estar a mi nivel.

-Ciertamente ya pase tu nivel, por eso nunca lo estaré nuevamente, si alguna vez en tu vida Hawk Moth te conto sobre la tortuga ya la liebre sabrás que no hay acepciones no en una mariquita... y una zorra, volpina ¿O prefieres te llame Lila?

Lila guardo su arma, lo mismo hizo ladybug, ambas se miraron fijamente hasta que Bridgette le dio la espalda, aquello sería un grave error si Lila le siguiera apuntando, dio un par de pasos hacia atrás para después lanzarse contra ella sería fácil empujarla y provocar que perdiera el equilibro, más quería comprobar si las mariquitas realmente podían volar desde esa altura. Bridgette rápidamente corrió contra ella enredando su brazo alrededor de su cuello, lila se fue de espaldas por la fuerza, mientras que la azabache le aplicaba una llave que le dificultaba el respirar.

-No tengo órdenes de matarte, pero si sigues provocándome te rompo el cuello aquí y hora.

-S-si muero... tu estúpida...h-hermana... s-se m-muere conmigo.

-¿Qué?

-Y... lo mismo para... F-Félix.

Bridgette le soltó rápidamente, colocándose de pie saco su arma de su cinturón, nadie sabía que Félix seguía con vida y si Lila estaba enterada Hawk Moth... sin pensarlo dos veces se retiró del lugar, saco su móvil marcando a toda prisa al médico en Grecia, Hawk Moth no mataría a lo que ama, si ese enfermo sabía que su amado Félix seguía con vida no sería capaz de matarlo... ¿O sí?

Notas finales:

Ahora se sabe un poco más de lo que paso después de que Adrien ataco a Marinette y por qué ella regreso a su lado, Bridgette se revelo ante Adrien pues sabe que él es Chat Noir ¿aceptara el ser parte de su "trabajo"? y Lila no es una santa, sino que trabaja o trabajo para Hawk Moth y oh si lo que muchos esperaban ¡FÉLIX ESTA VIVO!

Jajaja espero les gustara el cap de hoy

Dudas, preguntas, aclaraciones lo que sea todo es bien venido

Hasta la próxima actualización