Jin

Todo está en silencio, esperamos atentos cualquier noticia, pero el silencio era ensordecedor.

La enfermera se acercó a mí, para que la acompañara a llenar los documentos de Hana, ella estaba bien, pero extrañamente, hasta ese momento me acorde de ella, mis hermanos me acompañaron, querían conocerla, yo quería presumirla, pero no me hallaba, estaba en una especie de limbo.

Cuando llegamos al cunero, vimos el nombre de mi princesa, junto a él de Hana, sentí como mi corazón se encogía y me hacía más pequeño. Me acerqué a la isla de enfermeras con Namjoon y YoonGi, empecé a escribir todos los datos que me pedían.

Nombres del padre, Kim SeokJin

Nombre de la madre, Victoria Galios

Nombre del niño o niña Kim Hana

Mis lagrimas no paraban, mis manos temblaban y todo era demasiado confuso para resolver en este momento.

Solo pasaban por mi mente los panoramas más oscuros y tristes de toda mi vida, desde que me fui y la deje, cuando la encontré y casi la pierdo por terco... y ahora que todo parece oscuro, falto de luz, de esperanza.

Ya ha pasado mucho tiempo y no tengo noticias, Hana está en mis brazos, en una habitación que veo tan espaciosa, tan grande, que me ahogo. No sé qué voy a hacer ahora... Solo me acurruco, dándole abrigo a mi pequeña, buscando consolar mi corazón.

Nam

Ya hemos realizado todas las diligencias que nos piden para poder tener a Hana ya en el cuarto donde Jin esta, todos estamos a la expectativa de lo que pueda suceder, no sé cómo más ayudar a mi hermano, sino es porque tiene a Hana en sus brazos, el estaría canalizado y dormido.

-Hobi, vamos por algo de comer, todos deberíamos de comer. -

Hobi

-Nam, todo estará bien, ¿verdad?, Victoria, ¿estará bien? -

Nam

-Claro, tenemos toda nuestra fe en ello-

Pasaron las horas, Jin duerme con Hana y todos nos hemos acomodado en los sofás de la gran habitación, siento como me levantan.

La enfermera nos pide que Jin se incorpore para llevarse a Hana, lo veo perderse en cuanto la enfermera sale, se quiebra nuevamente, se ahoga en su propio llanto, me levantó apresuradamente con Hobi, para sostenerlo y llevarlo a comer algo.

No pensé que doliera tanto ver a tu amigo, tu hermano, apagarse por algo que no tiene control.

Nos sentamos en la cafetería a comer, Jin, no sé cómo decirlo, pero si JiMin no se hubiera sentado con él a darle el almuerzo como un niño, no sería capaz de comer, le agradezco a cada uno de mis hermanos por la paciencia y la ayuda, menos mal estamos nosotros para cuidarnos, Dios no sabría qué hacer si estuviera solo con él.

Terminamos de comer, nos levantamos sosteniendo los brazos de Jin, caminábamos lento para no perder en los pasos del pasillo a nuestro Hyung, cuando llegamos a la zona VIP del hospital, escuchamos a un bebé llorar desconsoladamente.

Jin se puso alerta, como si supiera lo que venía.

Jin

-Vamos rápido, es Hana quién llora-

Escuché a mi niña llorar, solo pensé lo peor, mi princesa. Me llene de miedo y lo único que me guiaba era el llanto de Hana.

Entre a la habitación, caí de rodillas y solo escuchaba a mis hermanos gritar detrás de mí.

Nam

-Jin- Grité.

Me acerqué pensando lo peor, cuando vi a mi hermano de rodillas.

Intenté levantarlo, pero de un sobre salto, se puso de pie y trastabillando corrió hacia la cama, para caer a los brazos de Victoria.

Jin lloraba como un niño desconsolado, hipeaba y Victoria solo intentaba que llegara a ella. Caminé deprisa y le di una mano, entre lágrimas y risas, de todos, porque todos estábamos observando esa escena.

Jin
Entre a la habitación y no me contuve, ella estaba allí, en la cama, mi corazón latía tan fuerte, que caí de rodillas, daba gracias, miles. Ella estaba allí, Nam me intentó levantar, pero al verla, levantar sus manos, dándome la bienvenida a su vida, me levanté casi a rastras, llegué hasta sus pies, los besaba, los abrazaba, mientras Victoria intentaba abrazar me, Nam me dio una mano, ayudando me a llegar a sus brazos, a su boca, su gloriosa boca.

-Te amo, te amaré en esta vida y las que coincidimos. - solloce.

La abracé, volví a vivir.

La enfermera entró con Hana en sus brazos, me retiré para que Victoria la tomará, iba hacer la primera vez en darle pecho, quede embelesado mirando.

Me acorde de que todos estaban, así que me levanté y los miré con desaprobación, todos comenzaron a reír y yo hacer pataleta.

- ¿Que están mirando?, ¡¡¡salgan ya!!!

Todos estallaron en carcajadas mientras salían.

Volví a mirarla y sentí que realmente no podía vivir sin ella en mi vida, sin Sebas, sin Hana.

Después de cinco días en el hospital, por fin, pudimos volver a casa, nuestro hogar, completo con ellos.

Todo es perfecto. Ahora seguir el plan, espero que acepte, porque solo quiero que sea perfecto.