Hola! Antes que todo, disculpen la tremenda tardanza. Dios más de una semana los dejo esperando y me siento mal por eso 😥, pero solo quiero decirles que no estuve de flojera. 😣 Todo el tiempo me la pase escribiendo y escribiendo hasta cansarme solo para traerles un nuevo capítulo.
Bueno más de un capítulo, es que es muuuuy largo y por es me tardó tanto.
Pero mientras, acá les dejo este.
Espero terminar pronto la parte tres de nuevas integrantes.
Además les aviso que enumerare los capítulos, así pueden saber si se saltearon uno. Bye 😸 👋
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—Uf!..¡Parece que llegue a tiempo! —Con el tiempo a su favor, Tobe se acomodo con los otros participantes y escucho atentamente las reglas que dirían los chefs.

—*¡Muy bien damas y caballeros! Antes de comenzar, daremos un pequeño resumen sobre los objetivos para esta segunda competencia. Pero antes, por favor observen a su derecha!* —Cuando Linguini pronunció estas palabras, al igual que en la primera competencia, un temblor provocó una sacudida en toda la playa y después de varios sonidos de engranajes, varias superficies cuadradas comenzaban a aparecer a la vista de la multitud.

—¡Vaya estos tíos no me dejan de impresionar! —Decia Tobe boquiabierto de la sorpresa al presenciar como distintas arquitecturas seguían apareciendo por debajo de la arena.

Estuvo entrenando la mayor parte del tiempo en esta playa pero jamás se había percatado que habían cosas tan colosales debajo de esta.

Fue entonces que llegó a la conclusión que los chefs eran dueños de la playa, porque era imposible que hubieran instalado toda esta maquinaria en un plazo tan corto y menos sin una ley que apruebe la contruccion.

Entendiendo que era el único sorprendido por esto, se dio cuenta que sus años de venganza le habían quitado mucho tiempo para disfrutar de la vida y apreciar estos pequeños recuerdos de ocio y juventud.

Se encontró desolado y algo fuera de lugar por esto. No podía recuperar los años perdidos, pero desde ahora, se asegurariá de jamás perderse un evento donde pudiera pasar con todos los aldeanos un día de armonía y diversión.

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Teniendo claro este objetivo, volvió a dirigir su mirada hacia los chefs y continuar escuchando la explicación.

—*¡Como pueden ver, hay diez plataformas de combate! ¡Los cincuenta participantes que lograron pasar la primera competencia, serán distribuidos de a cinco en cada una, cuya finalidad será combatir al mismo tiempo y sacar a los otros participantes del cuadrilátero hasta que solo quede uno en pie! ¡Recuerden que las armas blancas y de fuego están prohibidas y no se permiten ataques más allá de dejar inconsciente al oponente! ¡El ganador de cada plataforma podrán pasar automáticamente a la tercera y última competencia sin necesidad de continuar con los combates. Pero el que desee continuar he intentar ganar los aretes de diamantes son libres de hacerlo, pero en el caso de ser eliminados sus derechos de pasar a la competencia final serán anulados. Así que tengan cuidado al decidir!* —Comentando las reglas hasta este punto, la pantalla detrás de ellos se encendió mostrando el nombre y el numero de cada participante. —*¡Muy bien!..sin mas contratiempos es hora de comenzar. Por favor que cada combatiente se dirija a la plataforma seleccionada de acuerdo a su numero de participante y espere al inicio de la batalla!*

—Yahoooo!!! -justo cuando los chefs habían terminado la explicación, un fuerte grito de extrema alegría se oyó entre los participantes. —Si! Si! Tengo a la diosa de la fortuna de mi lado. El premio lo tengo en la bolsa! Yahoooo!!

Este participante al mirar la pantalla, no podía parar de expresar la felicidad que sentía, no obstante sus impertinentes acciones, lo único que hicieron fue provocar la molestia y la ira de los otros participantes lo que en consecuencia produjo una cantidad ínfima de insultos y regaños.

—Tch! Ese maldito flacucho dándose aires de grandeza ¿Quien se cree que es?

—Exacto! Diciendo que el premio es suyo sin siquiera haber comenzado. Hmph! Solo es un niñato engreído!

—Gyahaha! ¡Ese maldito mocoso! Tengo suerte de tenerlo en la misma plataforma! ¡Me encargare de darle una lección que jamás se le olvidara en la vida, ya lo verá!

[Inudark25: ¡Atención que pasa un muerto!]

Evidentemente la arrogancia de este joven participante había atraído la enemistad de muchas personas. ¿Pero quien seria tan idiota para traerse el desastre así mismo sin siquiera darse cuenta?

Pues el único tan inconsciente para lograr esto y continuar con una sonrisa jovial, ignorando el aura siniestra que tenía a su alrededor, no podía ser nadie mas, que por supuesto el bueno y torpe de Dada.

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—Hah! Mi tonto discípulo realmente es pésimo para leer el ambiente. Pero bueno, supongo que tiene sentido alegrarse tanto. —Ante la insensatez de Dada, Tobe solo podía suspirar frustrado debido a que, como de costumbre, sus inocentes y sinceras palabras provocaban la disconformidad y el rencor de las personas a su alrededor.

Por supuesto que la idea de acercarse y ayudarlo a entender su error, jamás se le había cruzado por la cabeza. Podía ser su discípulo, pero también había sufrido de primera mano su naturaleza malintencionada y entendía perfectamente el enojo que sentían los otros participantes, y para no crear problemas para si mismo, cosa que Dada seguramente haría que sucediera, decidió estar lo más alejado de el y no entrometerse en sus problemas.

Simplemente se quedaría observando como festejaba por su buena fortuna.

Por supuesto que sus palabras eran presuntuosas y lo hacían ver como un hombre de lo más vanidoso. Pero lo que realmente demostraban sus palabras no era presunción sino un increíble alivio al enterarse que milagrosamente se había salvado de luchar contra su maestro.

¿Como no podía estar gritando de alegría al saber esto? Lo único que deseo durante todo el día, fue un rayo de esperanza que lo ayúdase a cumplir su objetivo, y a pesar de su incredulidad, sus rezos realmente habían funcionado.

Sintío lastima por los pobres peleadores que tendrían que luchar contra el. Ya que su destino estaba deparado a terminar descalificados, pero por su parte no podía dejar de regodearse lo aliviado que estaba por salvarse.

Si ponemos un ejemplo, Dada tendría el mismo sentimiento si por alguna razón hubiera sobrevivido al estar rodeado por veinte tiburones blancos, mientras se mantenía a flote en una tabla de madera podrida que lentamente se desintegrada en un mar de lava ardiendo.

Podía sonar exageradamente ridículo, pero así es como se sentía, ya que comparado a Tobe, los 48 participantes restantes, incluso Garu, no le provocaban ningún temor de enfrentar. Asi que si hacia todo como había practicado en el entrenamiento, verdaderamente tendría el premio en la bolsa. Por lo menos eso es lo que suponía.

Y en cuanto al ninja de coletas, al contrario que Dada, no estaba para nada satisfecho con la separación de los combatientes. Lo único que quería era tener una revancha con su antiguo nemesis para descubrir si anteriormente había sido vencido por haber bajado la guardia o si realmente tenía un mayor nivel de pelea que el suyo.

Esta era la incertidumbre que desde ese día no dejaba de pensar. Incluso le costaba conciliar el sueño debido a esto. [¡Solo perdí porque baje mi guardia. Si luchaba en serio no había forma que pudiera vencerme!] Intentaba mantenerse positivo al decirse estas palabras una y otra vez, pero durante la batalla ocurrieron muchas inconsistencias que lo hacían dudar de este hecho.

¿Para empezar, como fue derrotado? Al momento de recuperar la conciencia, había creído que Tobe fue el causante de su extremo dolor y por eso se rindió sin rechistar ni una palabra.

Pero llegada la noche y al pensarlo mejor, lo único que recuerda de esa batalla, es que justo antes de noquear a Tobe con el reverso de su espada, sufrió un repentino dolor de lo más insoportable en todo su cuerpo, provocando que perdiera la conciencia.

Durante el lapso de su ataque, Tobe no se había movido en lo más mínimo. No esquivo, no contraatacó ni se defendió, simplemente se quedó inmóvil sin ninguna intención de luchar.

Era imposible que alguien desarmado y sin ninguna posición ofensiva, pudiera provocarle un dolor tan siniestro he insufrible sin siquiera haberlo visto. Así que la única explicación que podía pensar, era que se esforzó tanto en su entrenamiento y lo fatigo tanto, que sin darse cuenta llevo sus músculos a tal extremo que en algún punto de sus movimientos sufrió un calambre devastador, provocando su desmayo.

Era una suposición demasiado rebuscada, pero es lo que sinceramente pensaba, ya que jamás creería que el enemigo que derrotó durante tantos años, repentinamente tuviera la habilidad para derrotarlo.

Prácticamente lo que estaba diciendo es que Tobe al final no le hizo absolutamente nada y había perdido por su propia mano.

Por lo menos esa es la excusa egocéntrica y complaciente que se había construido. Pero cuando los humos se le bajaron de la cabeza, comenzó a razonar correctamente y una duda comenzó a rondar por su mente.

[¿Realmente fue solo una coincidencia que justo en ese exacto momento me diera un dolor muscular?] Ahora que lo pensaba detenidamente se percató que su entrenamiento rutinario había sido como cualquier otro y no se había esforzado más de la cuenta. Además, ¿por que Tobe lucia tan satisfecho después del duelo? Garu conocía su personalidad bastante bien y jamás declaria una victoria de su parte si no hubiera participado de alguna forma.

De hecho recuerda una ocasión cuando combatían en el techo de su casa y en un reflejo involuntario piso accidentalmente una de sus propias trampas y quedo a merced de su ataque letal.

Garu pensó que sería su final y que Tobe finalmente conseguiría derrotarlo. Pero para su gran sorpresa, en vez de atacarlo, lo libero de su trampa y con gran frustración lo único que dijo antes de irse fue. —Tch! Justo cuando pensé que lograria obtener mi venganza, te caes en tu propia trampa! ¿Que sentido tiene vanagloriarse en la victoria si mi rival se perjudica así mismo antes de lograrlo? Hmph! ¡Me largo de aquí!

Al recodar esto y haber observado lo complacido que estaba Tobe cuando declaró su victoria a todos los espectadores, comprendió que la ridícula teoría de haber sido derrotado por Tobe podría ser la más acertada.

¿Pero cómo? ¿Cómo lo hizo? ¿En que momento recibió de lleno uno de sus ataques? ¿Como es posible que no pudiera verlo? Trataba esta teoría como ridícula porque al no saber que movientos utilizo, significaría que sus habilidades eran tan sorprendentes que superaban la velocidad perceptiva del ojo humano.

Esa era una técnica suprema más allá de sus capacidades, y si Tobe realmente había logrado sobrepasar la velocidad de un humano ordinario, eso significaría que se había convertido en un maestro supremo más allá de su imaginación.

Obviamente jamás podría creer eso. Sería un mal chiste decir que alguien con sus habilidades físicas ligeramente superiores a las de una persona ordinaria, tuviera un récord de victorias descomunales contra un maestro supremo. ¿Que clase de idiota se lo creería?

[Inudark25: Tu idiota! Tu deberías creerlo! (ノ_<)]

La ridícules más grande del mundo, una estúpida broma que alegremente podrías contar en un bar para romper el hielo. No obstante, Garu no había descubierto como perdió ese día y por consiguiente, a pesar de lo fantasioso que sonaba esta teoría, solo con el simple hecho de suponerlo, un pensamiento muy terrorífico comenzó a rondar por su cabeza.

[¡¿Y que tal si?!] No quería creerlo, pero sus sospechas se incrementaban aun más al no encontrar otras posibles causas para su repentino desmayo.

Incluso con el riesgo de ser tratado como un mal perdedor, decidió preguntar a los clientes que estaban en ese momento ¿si de casualidad habían notado algo fuera de lugar durante su combate?

Pero no importaba a cuantos se los preguntara, todos siempre decían lo mismo. [¡Solo vimos como Tobe te pasaba de largo y caías rendido al suelo!] Ninguna anormalidad, ninguna trampa, nadie había visto absolutamente nada extraño.

Lo que significaba que realmente había ocurrido algo, pero sus capacidades visuales era insuficientes para poder notarlo.

Esto lo llevaba nuevamente a la ridícula teoría del principio, no había ninguna prueba que pudiera verificarlo, sin embargo Garu no podía dejar de pensar en esa posibilidad.

No obstante a su vez era algo que por nada del mundo deseaba creer y negaría rotundamente, debido a que no podría soportar la idea que Tobe fuera mejor que el y que todas las batallas ganadas que tanto lo enorgullecieron, hubieran significado nada más que las falsas victoria de un farsante imitando a un verdadero campeón.

Por eso quería tan desesperadamente tener una revancha. Deseaba con toda su alma abolir esa maldita suposición que tanto lo agobiaba y demostrarse así mismo que era un verdadero ganador y que Tobe simplemente había conseguido la victoria por accidente.

Sin embargo la suerte no parecía estar de su lado. Jamás se espero perder contra el en la primera competencia. Pero a pesar de haber perdido, no lo tomo tan a pecho ya que ni siquiera se había esforzado para intentar quedar en primer lugar, y si hubiera ido con todo, estaba seguro de haber podido empatar contra Tobe, incluso ganarle.

Más que todo, pensó que Tobe había ganado por pura suerte, así que una tonta carrera de obstáculos realmente no respondía sus dudas.

[Inudark25: Hahaha! Parece que se olvido muy rápido que quedo en tercer lugar después de Dada xD]

La segunda competencia, eso era lo que más esperaba. Podría volver a luchar contra el y tener finalmente las respuestas que tanto deseaba. Sin embargo, al no ser seleccionado én la misma plataforma, sus oportunidades de conseguir esto se habían esfumado.

Esto era debido a que no podía ser en otro lugar, ni siquiera por el mismo, ya que le resultaba demasiado humillante pedirle una revancha.

No sabía cómo Tobe tenia la piel tan gruesa para cada día querer un enfrentamiento después de todas las derrotas que había sufrido, pero el era diferente, no podía hacer lo mismo que el hizo.

El gran orgullo que poseía era miles de veces más importante que rebajarse y obtener una respuesta a su incertidumbre. Así que lamentablemente lo único que podía hacer era resignarse con la idea de obtener algo fructífero, y por simple capricho ganar su aburrido combate y enfrentarlo en la última competencia.

Por supuesto que los premios no le interesaban en lo más mínimo, menos un tedioso beso de su acosadora numero uno. Además compitiendo contra el en una competencia de nado no le demostraría ninguna pista de que fuera más habilidoso que el en las artes marciales. Sería lo mismo que en la primera competencia.

Pero al menos si esta vez lo vencía, subiría algo de su baja moral por haber sido derrotado tan vergonzosamente. Por lo cual, para desgracia de Tobe, Garu seguiría participando hasta la final.

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