—Mckeyla —

Había llegado el momento y todo estaba listo para cuando llegasen, sería la primera  vez que mostraríamos la academia a gente del exterior.

—¿Nervioso?— le pregunté a James que llevaba puesta ropa de la academia

—¿Debería?— me preguntó con esa máscara de frío hielo que había empezado a utilizar en el campamento— Tengo claro lo que me interesa aquí y mira por donde no son sus opiniones— me dijo él seco y no pude evitar sentir cierta pena por él

—Cornamenta...

—¿Umm?

—He estado pensando y creo que deberías pensar en hablar con ellos, intentar llevarte bien, después de todo son tu familia.

—Que comparta sangre con ellos no les da pasaje para entrar y salir de mi vida a placer

—Sabes tan bien como yo que ellos no eligieron mandaros allí... os secuestraron y ellos no pudieron hacer nada— dije yo acercándome para poner una de mis manos en su  brazo— hay momentos en los que lo mejor que podemos hacer es respirar e intentar reparar los daños...— dije yo con la voz lo más dulce que pude poner para que notase que no lo estaba obligando a nada.

—No necesito una familia, no los necesito a ellos, estoy bien con lo que tengo— me dijo él distante intentando no demostrar ninguna emoción pero yo lo conozco demasiado como para eso

—¿Por eso amenazante a aquellos Slytherin en el primer año de Albus?— y su máscara de hielo se rompió en ese instante

—Nadie tiene derecho a hacer daño a otros por su casa, sus características ni su familia, esas cosas no se eligen— dijo él entre dientes

—Pero podrías haber mirado para otro lado por venganza a los Potter...

—Seré muchas cosas pero no soy de los que permiten que les hagan daño a los más débiles y me duele que creas que por ser un Potter iba a permitir que le hicieran daño.— me dijo él apartándose y comenzando a caminar hacia la cafetería para ir a una de las máquinas expendedoras.

—No he dicho que crea que lo ibas a permitir — dije yo acercándome a él con tranquilidad para que supiera que no tenía planes de discutir— solo digo que lo protegiste más que a cualquiera de los que hemos salvado del acoso y pasó lo mismo con Lily, cuando la llamaron pelo de zanahoria misteriosamente esos chavales acabaron con el pelo rojo chillón y verrugas

—No tengo ganas de discutir, Mal— me dijo él en el tono de advertencia que siempre lograba que las personas sintieran miedo pero eso a mí no me afectaba, James podría afectarme de muchas formas pero jamás me daría miedo.

—Y yo tampoco, ¡solo estoy intentando que no cometas el mismo error que yo!— respondí enfadándome

—¿Qué error?!¡¿No hablar con tu padre?¡—levantó la voz

A no perra, a mi no me levantas la voz Potter, guerra quieres, guerra tendrás.

—¡No! ¡Mi error es el de no...!— me interrumpí al escuchar el sonido de las voces provenientes de fuera, respiré hondo y miré al azabache que había cambiado su mirada enfadada por una de preocupación por mi— solo date cuenta de que muchos pagaríamos millones por tener una familia relativamente normal que se preocupe por nosotros— murmuré yo antes de chocar mi hombro con el suyo al pasar por su lado para salir.

...

Después de nuestra pequeña discusión James no tardó en salir detrás de mí a recibir a nuestros invitados.

—Bienvenidos  a la academia para monstruos o Monster academy para los amigos  — dije yo intentando sonar amable.

—El plan de crear esta academia está basado en ayudar a las personas que no necesitan varita para hacer magia, a los hombres lobos  o a cualquier criatura que quiera entrenarse. — siguió James y me sorprendió lo amable que sonó su voz

—¿Entrenarse para qué?— preguntó despectiva Rose y James respiró hondo conteniendo sus ganas de atacarla

—¿Habrá Draconos en la academia?— preguntó Dominique Weasley interrumpiendo y James sonrió

—Hemos hablado con viejos amigos, la academia contará con dos draconos más a parte de nosotros, padre e hijo, uno será instructor de historia de la magia y el otro estudiará aquí— le sonrió el azabache y me pareció curioso como todos los que no sé llevaban con él se sorprendían ante una reacción tan cálida

—¿Dónde firmo para unirme?— preguntó Nique fascinada— puedo venir como alumna si lo preferís— dijo ella emocionada y Fleur empezó a murmurar algo que preferí no escuchar

—Eres bien recibida si quieres, tenemos a toda la plantilla docente pero estamos buscando a personas interesadas en aprender y enseñar— habló James— solo tienes que mandar la solicitud

Nique pareció encantada con la idea pero Fleur tenía una mirada de "esto lo vamos a hablar a solas"

...

La visita pasó entre preguntas, comentarios y caminatas por todas las instalaciones, por suerte estaban los merodeadores que no dudaban en animar el ambiente y en sonreírle a todos los que nos cruzamos y que serían sus compañeros de trabajo.

La visita estaba acabando y ya solo nos faltaban dos salas, la del tiempo y la de la fama.

—¿Cuál preferís ver primero?— pregunté yo

—¿Qué es la sala del tiempo?— preguntó la señora Potter

—Es una sala vinculada al poder de ver presente, pasado y futuro de Mckeyla,  aunque principalmente las dos primeras porque ver el futuro es mucho más complicado que ver sucesos ya acontecidos—  explicó James

—Increíble...— murmuró Hermione— ¿podemos ver esa primero?— James y yo asentimos y empezamos a caminar hacia la sala.

Una vez todos estuvimos dentro todos los invitados se sentaron en los sillones para ver mejor.

La habitación no tardó en quedarse oscura y empezar a proyectar recuerdos.

Esa fue la proyección y en cuanto terminó pudimos escuchar cosas como "eso nunca pasó" por parte del señor Potter o un "mierda" común de la primera generación.

—La sala también muestra realidades alternativas— explicó James— existe todo un multiverso fuera de aquí...

—Por favor dime que no soy el único que a sentido esa familiaridad, como si lo hubiera vivido— me dijo la voz de mi amigo en la cabeza

—Yo también lo sentí y por los campos de emociones de la segunda generación sé que ellos también

—¿Qué mierdas sucede?

—Créeme que yo tampoco lo sé...