Mild está en la cocina cuando recibe una llamada de su novio.

—Hola.— Ella responde con una sonrisa.

—Al fin alguien contesta.— Zee suspira en la otra línea.

—¿Estás bien?

—El ex de tu sobrino mató a Tarius.

Mild respinga cubriéndose la boca.

—Gulf no contesta su teléfono así que no le he podido decir pero he capturado al maldito. Lo tengo aquí.

—A--A Gulf le quitaron el teléfono unos hombres pero ahora mismo está en una misión de su jefa y no ha vuelto.

—¿Tu estás bien?

Mild suspira con una leve sonrisa de labios. Zee siempre se preocupaba por ella.

—Yo... No estuve ahí cuando lo atacaron.

Ella dice. Él suspira del otro lado porque nada malo le sucedió a ella aunque ambos saben que Zee sigue preocupado por Gulf de todos modos.

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Gulf abrió el bar sólo para estar dentro con su abuela. Ambos estaban sentados en la barra mientras que una música relajante sonaba desde la radio del lugar.

—Tu nunca estuviste para mí.— Gulf dijo sin mirarla. —Mama siempre te llamaba cada noche y tu le gritabas. Ella siempre estaba preocupada por ti. Jamás ni una sola vez te pasaste por mi cumpleaños. Por Dios, te creía muerta.

Gulf ríe. Su risa es obviamente sarcástica.

—Lo sé... Pero ahora me arrepiento. Quiero estar junto a ti. Conocerte.

—¿Quieres dinero? Está bien. Te lo puedo dar.

—Gulf.

—No eres mi abuela. Tuve que vivir todos estos años por mi cuenta ¿Y dónde estuviste tu?

—Seguramente haciendo el amor con mi vecino veterano pero...— La anciana empieza y Gulf la mira con ojos gigantes. Ella suspira para mirarlo.  —Quiero arreglarlo. Quiero estar contigo.

Ella acaricia uno de sus cachetes con su pulgar. Gulf está al borde de llorar. Otra vez. Él suelta un sollozo antes de desvíar la mirada.

—¿Y si bailamos? La música lo está pidiendo.

—¿Encerio me darías el honor?— La anciana sonríe triste mientras que su guapo nieto se baja de la silla para posar frente a ella ofreciéndole una mano.

—Considerarlo un último baile como arreglo. Para que no nos veamos más.

La anciana se pone triste pero suelta a su chihuahua sutilmente para tomar la mano de su nieto quién los encamina al centro del lugar frente al escenario.

Ella pone una mano sobre el hombro derecho de su nieto y une su otra mano con la de él mientras que él rodea su cintura con una mano y empiezan a moverse de lado a lado lentamente pero Gulf no la está mirando.

—Lamento nunca haber saludado a tu madre. Estaba enojada con ella por embarazarse tan rápido de un borracho don nadie.

La anciana admitió su vergüenza con la mirada baja. Gulf quería llorar pero se dignó a mirar abajo a la abuela que jamás había visto en años.

—¿Sabes? Tal vez si tu te hubieses dignado a cuidarme mientras estaba solo, yo no hubiese sufrido tanto... No tienes idea de todo lo que tuve que hacer para vivir. En los problemas que me metí... En mi forma de pensar sobre la justicia...

—Lo siento, Gulf. En verdad que lo hago. Lo siento tanto. Quiero cuidarte ahora. Quiero conocerte.

La abuela le cuenta. El chihuahua les ladra felizmente a su lado. Gulf lo mira con una ceja alzada.

—¿Y tu qué?— Él le dice agresivo. El perrito le chilla triste y se va corriendo.

La anciana ríe en bajo. Gulf la toma del mentón con sus dedos para devolver la mirada de ella hacia él.

—Te dejaré conocerme. Pero todos los que me conocen salen heridos. Te lo advierto desde ya: ¿Segura que quieres esto?

Ella limpia las lágrimas que caen de los ojos de su nieto.

—Déjame cuidarte y conocerte. Aunque sea una vez.

Gulf deja caer otro par de lágrimas con una sonrisa de labios sollozando. Ella lo abraza prometiéndole que estará ahí para él. Gulf aún no confía del todo en ella pero cuando ella lo abrazó se sintió como los abrazos que su mamá o Mew le daban...

No pudo evitar mover sus manos temblorosas a la espalda de su abuela para abrazarla por completo. Olía incluso igual que su madre pero había un olor extra a flores.

Gulf hundió su carita en el cuello ajeno. Sintiéndose igual que cuando está con Mew.

—¿Puedes vivir en mi casa?— La anciana pregunta toda tímida sin despegarse del abrazo. Gulf desvía la mirada con miedo pero las lágrimas no cesan.

—¿Puede mi novio vivir ahí también?— Él pregunta.

Ella frunce el ceño antes de retroceder su rostro para ver el de su nieto con una sonrisa.

—¿Tienes a alguien en tu vida amorosa?

—¿No te incómoda que sea un hombre?

Ella niega la cabeza realmente feliz por su nieto sosteniendo ambas manos de este.

—Puedes mudarte con él. Puedes hacer lo que sea que quieras. Tu felicidad me es importante.

Ella ríe realmente amable.

—Sólo quiero que la pases bien conmigo.— Ella dice en risas con lágrimas de felicidad.

—Le diré a él entonces. Espero te agrade.

Él dice.

—Estoy segura de que lo hará.

—N--No tengo teléfono por el momento. ¿Cómo sabré cuando ir a tu casa?

—Te daré mi número.— Ella saca una servilleta elegante de su cartera para caminar a la barra elegantemente plantando su servilleta ahí para escribir con bolígrafo su número.

—Abuela, dañarás la servilleta.

—Ay, tengo un montón, no es nada.

La mujer dice despreocupadamente manchando la servilleta de alto dineral. Gulf traga hondo antes de que ella le ofrezca la servilleta.

—Llámame de dónde puedas y me dices.

—Abuela...

—¿Mm?

—Realmente me cuidarás, ¿No?— Él pregunta con los ojos llorosos.

—Realmente lo haré.

Ella promete ahora dándole un beso en la mejilla antes de irse.

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Gulf volvió a la casa de Mew y Mild. Al entrar todo emocionado con una sonrisa vio a Mew sentado en el mueble viendo otra película de terror abrazándose de las piernas contra su pecho.

—Gulf.— Él llama emocionado al ver a su novio caminar hacia él.

—Boo~.

Gulf se tira al mueble abrazándolo como si fuera un peluche.

—¿Cómo te fue en el trabajo? ¿Estás herido?

—Mm, me fue bien~.— Gulf canta con una sonrisa. Entonces se sienta en sus rodillas aún en el mueble con una sonrisa. —Mi abuela está aquí. Y nos quedaremos con ella~ ¿Qué te parece?

—Espera. ¿Encerio? ¿Tienes un familiar entonces?

Mew pregunta con igual emoción. Gulf asiente repetidas veces con su sonrisa y Mew lo abrasa feliz.

—Mi novio al fin tiene familia.— Él dice todo emocionado.

Gulf retrocede mordiéndose una sonrisa y besa a Mew a los labios. Mew le devuelve el beso apasionadamente.

Ambos intensifican el ritmo de los besos soltando gemidos.

—Mild no quiere...— Mew recalca entre besos cuando Gulf trepa su regazo.

—¿Dónde está ella?

—En el trabajo.

—Entonces...

—Entonces...

—Entonces.— Gulf enfatiza en una sonrisita que hace a ambos reír y vuelven a besarse.

Gulf se quita la chaqueta dejándola caer por sus brazos. Mew le alza la camisa y la tira al lado de ellos.

Se levanta del mueble cargando al moreno quien rodea su cintura con sus piernas soltando un par de risas entre los besos.

Mew los encamina a la habitación pero no mira y choca la espalda de Gulf contra la puerta de la habitación.

—Ay, lo siento.— Mew dice apenado.

—Tranquilo.— Gulf ríe.

—¿Estás bien?

—Sí, sí.

Mew lo coloca en la cama trepando su cuerpo a la vez. Gulf le abre la cremallera con ambas manos para bajarle el pantalón con los boxers justo debajo del trasero y agarra ambas nalgas con ambas manos en un fuerte apretón que hacer jadear a Mew.

Ambos se miran a los ojos fijamente. Mew se separa de Gulf para quitarse el pantalón por completo y quitárselo a Gulf quién se muerde otra sonrisa mirando alrededor de la habitación al estar expuesto.

Él ve los recuadros que Mew tiene en su estantería. Son fotos felices de él con Mild y de Mild con su difunta hermana sonriendo a la cámara. La mama de Mew era hermosa.

Gulf deja de sonreír un poco al ver esa foto. Se siente apenado.

—Haremos lo que quieras, Mew. Sólo dime y así será.— Gulf le dice a su novio acariciando el cabello de este con una mano desde abajo cuando este apenas ha trepado la mitad de su cuerpo.

Mew sonríe.

—Date la vuelta entonces.

Él pide con una sonrisa. Gulf alza una ceja con su sonrisa antes de darse la vuelta, quedando acostado en su estómago.

Mew le da par de besos gentiles en el cuello que lo hacen reír tímidamente antes de que Mew entré en él y Gulf se aferre al cabello de su novio con una mano ya soltando un jadeo.

Cuando las embestidas comienzan, Gulf no puede evitar gemir. Se agarra de las sábanas con su mano libre aunque Mew pone su mano derecha sobre esa cubriéndola por completo con su tamaño y haciéndola un puñado sobre la de Gulf mientras sigue las embestidas.

Gulf da la media vuelta a su cabeza como puede para mirar a su novio a los ojos quién le mira. Ambos se miran sin vergüenza alguna de cómo luzcan mientras hacen el amor.

Unen labios de nuevo durante el ritmo de la danza de los cuerpos.

*N/A: Aún nos falta mucho por ver pero ¿Confían en la abuelita de Gulf? Jiji lamento que las dos canciones del capitulo sean en francés pero es que me gustaron mucho, no sé si les hayan gustado. Y Mild no les dijo a los chicos sobre Tarius aún 💖 Espero les haya gustado el cap e hayan tenido bonita lectura~😘