Mundo Mortal, Francia, París...

París, ciudad de la luz, un hermoso lugar con una arquitectura majestuosa y una comida de alta calidad. Y por aquellos caminos de luz, andaba nuestro querido Muerte, pasando entre la gente sin ser notado, en busca de almas listas para volver al Ithis.

La noche ya había caído, pero la luz iluminaba la ciudad en risas y alegrías, en su mayor parte:

-¿Qué es eso? -dijo Muerte mientras escuchaba varios llantos en una casa, decidió acercarse y vio la causa. Era el funeral de una persona que recogió el día de ayer.

-¿¡Porque te llevaste a mi hijo, señor?! ¡El aún tenía mucho que vivir! -lloraba sobre el ataúd del joven, su madre, desconsoladamente y sufriendo, al igual que los otros familiares, todos estaban llorando.

- ....- Muerte no dijo nada, solo observaba serio, pero no indiferente. Sentía lastima por aquellos humanos, no obstante ese era su trabajo y debía cumplirlo.

Decidió alejarse de ahí y seguir su camino, cuando vio en la oscuridad una silueta femenina. Se hallaba sentada en la cornisa de la casa, mientras mandaba unos dientes de león azules, que brillaba con una luz baja y nebulosa, hacia los corazones de los presentes del funeral.

- Hola... - dijo muerte tratando de saludar a la desconocida, pero esta se alarmo y resbalo de la cornisa, dando en unos botes de basura. Quedando la parte superior de su cuerpo atorada en un bote, que por suerte estaba vacío, y sus piernas afuera, pataleando para salir- ¿estás bien? Déjame ayudarte- dijo Muerte mientras se acercaba, sin embargo ella rodo y se paró, aun con el bote encima, y empezó a caminar sin saber dónde ir, porque literalmente no veía.

-¿Dónde están los mortales? ¿Dónde estoy yo? -se escuchó una voz joven, como de unos 16 a 17 años.

-Calma, y deja de moverte -dijo mientras trataba de agarrar el bote y sacárselo- lo tengo -había logrado agarrar el bote y ahora estaban jalando para sacárselo- está muy atorado.

-¿Quién eres?...-decía con voz precavida, como si fuera un ciervo acercándose a algo desconocido, mientras trataba de zafarse del bote de basura.

-Soy Muerte, creo que puedo decir que eres un dios como yo ¿me equivoco?-decía mientras jalaba el bote de basura-¿Y quién eres tú?

-..soy una diosa...-dijo evitando la segundo pregunta y tratando de salir del bote, pero la fuerza que ambos ejercieron fue tanta que terminaron cayendo para atrás, y sin haber logrado el objetivo, aún seguía con el bote de basura en la cabeza y ambos en el suelo.

-¿Estas bien?... -dijo Muerte, pero antes de que pudiera decir algo más vio como la chica se paraba y murmuraba algo.

-Gracias por intentar ayudarme, mas ya te expuse demasiado, adiós -dijo la chica teletransportandose, a otra parte.

-Espera-dijo Muerte muy tarde, ella ya se había ido, dejándolo en el suelo y solo- ¿quién era esa diosa? ¿Exponerme demasiado?

En alguna parte del Ithis...

-¿Falta mucho? Es incomodo estar así- dijo a una sirvienta, que estaba cortando con unas tijeras especiales el bote de basura.

-Majestad, falta un poco más para liberarla de este bote, le pido un poco de paciencia por favor- dijo la sirvienta, que en realidad era un golem de hierro, con forma de una mujer, usaba un traje de sirvienta y su cara era una máscara de una mujer sonriendo ligeramente, y llorando a la vez, dando una expresión de llorar por felicidad, su cabello era blanco y esponjado a modo de flor de pocos pétalos.

-sabes, hoy me encontré con un dios, específicamente con Muerte, aunque no lo pude ver, él me estaba intentando ayudar con este bote- dijo logrando salir del bote recién cortado.

-Significa ¿qué usted logro socializar de nuevo? ¿Tendremos visitas pronto?-dijo la señorita de hierro emocionada.

-No creo, además ya sabes mi opinión de estar cerca a otros dioses.... No quiero lastimar a nadie más- respondió con tristeza en su voz, parándose y yéndose a su jardín.

-Oh majestad, usted sabe bien que eso fue un accidente, usted es alguien buena -dijo para sí misma, mientras veía a su ama alejarse.

-Ojala el resto fuera como ustedes, poder tocarlos y no lastimarlos...- cuidando unas flores de color purpura, en su amplio jardín.

-Su majestad, disculpe la interrupción, vengo a recordarle que debe devolver el libro que tomo prestado a la biblioteca, va retrasada, y eso es de mala educación -decía un mayordomo vestido completamente de negro, también era un golem, con forma de un hombre humano, pero su máscara era de un hombre serio llorando, y su cabello estaba todo para atrás y era negro.

-Gracias por recordármelo -decía mientras se paraba, eh iba a su cuarto y alistaba un golem- ven mi otro yo, es hora de que trabajemos -saco el golem y ambos se teletransportaron junto al libro, a la biblioteca de la iluminación.

-....-comenzó a controlar al golem como si fuera una marioneta desde la distancia. Iba vestido con una gran capucha, polos de mangas largas, pantalones abultados, botas militares, guantes de cuero y una máscara sonriente, empezó a caminar por la biblioteca con el mismo sigilo con el que entro, y cuando estaba a punto de colocar el libro en la estantería, una voz lo llamo-

-¡Hey tú! ¿Quién eres y que haces aquí?-dijo Locura a modo de interrogatorio, pero con ocio en sus palabras.

-....-señalo el libro y el estante-

-No te entiendo, ¡hey! ¡Sabiduría, ven! ¡Hay alguien desconocido aquí! -subió la voz llamando a Sabiduría.

-No te tienes que subir la voz, estoy cerca de ti -decía Sabiduría molesto acercándose a Locura, para darse cuenta de su invitado- Oh ¿A qué has venido?

-....-no podía responder, ya que no fue diseñado para hablar, así que se acercó a Sabiduría y le extendió el libro.

-Ya veo, con que tú eres el prestamista de hace 6000 años, para la próxima por favor devuélvelo a tiempo- le dijo Sabiduría a modo de regaño- por cierto ¿quién eres?

-.....-saco una tarjeta de presentación y se la estiro a Sabiduría, aunque el que la tomo fue Locura.

-Sufrimiento...- leyendo la tarjeta en voz alta.

-....-estirando el libro para que lo agarren.

-...vamos tómalo...para acabar con esto de una buena vez...-murmuraba mientras veía todo a través de los ojos del golem.

-Un gusto Sufrimiento, me llamo Sabiduría, y el de aquí es Locura- dijo amablemente estirando la mano, pero en vez de recibir la mano de Sufrimiento, recibió el libro- ¿gracias?- respondió en duda, mientras Sufrimiento, empezaba a caminar hacia salida, cuando:

-Sabiduría, ¿estás aquí?- dijo Vida, abriendo la puerta de golpe y golpeando a Sufrimiento en la cara, que hizo que callera al suelo, haciendo un estrepitoso ruido.

-¡Hey vida! Ten más cuidado- dijo Sabiduría mientras se acercaba a Sufrimiento- ¿Oye estas bien?- tratando de despertarlo.

-Lo siento, no pensé que habría alguien tan cerca a la puerta- dijo Vida también acercándose a Sufrimiento.

-Creo que lo noqueaste Vida, no se mueve- dijo Locura despreocupado- creo que lo mejor es si lo llevan con Médico, ella sabrá que hacer, yo iré a dormir-dijo bostezando, mientras se retiraba al cuarto de al lado a tomar una larga siesta.

-Locura tiene razón, y eso ya es extraño- dijo Vida ayudando a levantar a Sufrimiento, con ayuda de Sabiduría.

-Ni me lo digas, mejor vamos con Medico pronto, creo que ya no está respirando-dijo mientras se teletransportaban hacia el ala médica.

En el ala médica, específicamente en el consultorio de medico...

-Esto es extraño, no percibo sus signos vitales, siento su esencia pero solo eso -dijo medico mientras revisaba a Sufrimiento.

-¡¿Tan fuerte lo golpeé?!- dijo Vida asombrado y preocupado.

-No...Esto no estaba vivo desde un comienzo, miren -Medico le había sacado la máscara a Sufrimiento para revisarlo mejor, pero en vez de mostrar un rostro normal, lo que vio fue el rostro de metal, lleno de tuercas y engranajes.

-Eso explica porque no había signos vitales- dijo Sabiduría viendo el rostro del golem, con sus engranajes salidos y rotos.

-Pero no explica porque es esto un golem y no un dios "normal' como nosotros-dijo Vida mirando el golem sospechando y dudando.

-Es posible que el verdadero Sufrimiento, haya hecho este golem, él porque es desconocido-dijo Sabiduría, tratando de dar una respuesta, mientras medico empezaba a revisar más el golem.

-Hey, ustedes dos, miren esto- señalo Medico la zona torácica del cuerpo del golem, justo en medio había un pequeño hueco, en el que había un botón dorado.

-Abrámoslo-dijo Vida apretando el botón, antes de que Sabiduría y Medico pudieran detenerlo, fue entonces que el pecho del golem se abrió, dejando salir un humo blanco misterioso.

-Vida, cabeza hueca, piensa las cosas un poco antes de hacerlas- dijo tosiendo Sabiduría, mientras el humo empezaba a dispersarse.

-Mi error- dijo Vida, cuando el humo se dispersó y en el ahuecado pecho del golem se vio...

-¿Un diente de León?- menciono Sabiduría, que en efecto era un diente de león, con la diferencia de que era azul y brillaba con una luz baja y nebulosa.

-Esto es lo que sentí, la esencia de Sufrimiento-dijo Medico agarrancandolo del pecho del golem- ustedes dos llévense a eso mientras analizo este diente de león, es la primera vez que veo una esencia de un dios así...- de pronto, el diente de León desapareció y Medico de un momento a otro, se sentó en el suelo y se puso a llorar como nunca, mientras balbuceaba unas palabras incomprensibles por su llanto.

-¡Medico! ¿Qué te sucede?- dijo Vida acercándose a Medico que seguía llorando.

-Debió ser ese diente de león- dijo Sabiduría impresionado de ver a la sádica y fría Medico en ese estado. Y como tan repentino vino, tan repentino se fue.

-¿Porque están tan cerca de mí? ¿Porque mis mangas están mojadas?-dijo Medico desconcertada.

-Estabas llorando y balbuceando unas cosas ¿acaso no te acuerdas?- dijo Vida, dándole su espacio a Medico.

-¿Yo? Pero que ridiculeces dices ahora Vida-dijo Medico como si no se lo creyera.

-No es ninguna ridiculez, después que tocaras ese diente de León te comportaste extraño-dijo Vida mientras ayudaba a Medico a levantarse.

-Como sea, ya llévense esta cosa de aquí-dijo medico agarrando el golem y, dándoselo a Vida y Sabiduría, botandolos de su consultorio.

Después de todo eso, a Vida y Sabiduría se les ocurrió (a Sabiduría) que fueran con el único dios que podría ayudarles a resolver el misterio del golem "Sufrimiento". No era más que otro que el mismísimo Tiempo.

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Hola mis queridos y queridas lectores, me disculpo por la demora, pero aquí les traigo el primer capítulo de esta historia, si tienen una sugerencia o algo que no te gusto, no duden en escribirlo en los comentarios, también agradecería los votos. Que sean más felices que una lombriz, y que les vaya bien en todo lo que hagan.

Atentamente su humilde servidora.

LunaTario.

30/09/2016