Escuadra de Pasión

En el capítulo anterior:

Mineta aplicó sus conocimientos adquiridos de las sagas de Rápidos y Furiosos y Need For Speed, participando en una carrera callejera para salvarle el pellejo a Husk... o bueno, a su dinero, ganándose de paso unos billetes para comprarse un auto bien chingón para sorprender a Octavia, la chica de sus sueños.

Después de recoger de la escuela a Octavia y a sus amigas en su nave recién comprada, Mineta invitó a la joven Goetia a una cita ¿Cuál será su respuesta? Veámoslo a continuación:

Mineta: Qué dices?? Aceptas??  

Una linda sonrisa se dibujó en el rostro de la chica búho.

Octavia: Mañana a eso de las 7 te parece bien?? 

Mineta: O sea que eso es un "sí"?? -preguntó emocionado-

Octavia: No lo sé, tú qué crees? -preguntó soltando una risilla-

Mineta: Okey, mañana a las 7 será! -dijo rebosante de emoción-

Octavia: Genial, hasta entonces. -finalizó volviendo con sus amigas-

Mineta: Hasta entonces... -dijo correspondiendo la despedida completamente embobado mientras entraba a su auto-

Ambos jóvenes fueron por su lado, Octavia entrando a su "casa" y Mineta encendiendo su auto para ir a su departamento. Aunque claro, la reacción de ambos en el momento en que se percataron que el otro se había ido, fue muy similar.

Con Octavia:

La joven Goetia se quedó paralizada por unos breves momentos detrás de la puerta, el chico que había llamado su atención le había pedido una cita y ella había logrado disimular su emoción lo suficientemente bien y aceptar la propuesta. Pero ya no más, tomó aire y con todas sus fuerzas pegó un grito de alegría mientras corría al comedor donde estaban sus amigas y saltar a los brazos de Helvetica quien tuvo los reflejos y fuerza suficiente para atraparla.

Iris: ¿Qué pasa? ¿Por qué gritas? -preguntó la chica tapándose lo oídos y acurrucándose del susto-

Octavia: ¡MINETA ME INVITÓ A UNA CITA! 

Meg: Wow, el tipo es rápido. -comentó algo impresionada-

Vinyl: ¿A dónde te llevará?

Octavia: A un restaurante no muy lejos de aquí. 

Vinyl: La clásica cena romántica.

Helvetica: ¿Ya decidiste que te pondrás para la gran noche? -cuestionó su amiga dejándola en el suelo-

Octavia: ¡Por Satán! Ni siquiera pensé en eso! -exclamó sobresaltada-

Iris: No te preocupes, veremos los conjuntos que tienes en tu cuarto y asunto arreglado, seguro hay algo bueno que puedes ponerte. -mencionó de forma tranquila-

3 minutos más tarde...

Iris: Via... ¿Por qué todos tus conjuntos son negros?

Octavia: Me gusta el negro. -contestó avergonzada- 

Meg: Qué importa si son negros?? Ponte algo que combine y listo, a él no le importará. -respondió algo molesta debido a que no era muy afín a este tipo de charlas-

Vinyl: Via tiene que lucir bonita para su primera cita, así que ya saben lo que significa ¿No? 

Helvetica/Iris: Sí... 

Meg/Octavia: No....

Vinyl/Iris/Helvetica: ¡Hora de ir de compras! -anunciaron al unísono- 

Fue así que cuatro de los 5 miembros del grupo salieron del cuarto en dirección al centro comercial, dejando a Meg sola, la cual se resignó a seguir a sus amigas con la siguiente frase:

Meg: Esta será una tarde muy larga.

Con Mineta

Mineta: ¡TENGO UNA CITA! ¡TENGO UNA CITA! -gritaba victorioso mientras tocaba la bocina a modo de celebración-

El joven demonio se detuvo frente a un semáforo en rojo, cuando la luz se tornara verde giraría hacia la derecha para llegar al edificio en el que vivía con Moxxie y Millie. En ese momento un pensamiento llegó a su cabeza, recordando lo que dijo hace unos segundos:

Mineta: ¡TENGO UNA CITA! -exclamó alarmado- Carajo! No tengo idea de cómo comportarme en un lugar elegante, voy a hacer el ridículo con Via! -pensó antes de soltar un suspiro para calmarse- Debería pedir ayuda pero... Moxxie y Millie salieron a cenar. Y Blitz... bueno, es él.

Fue entonces que a Mineta se le ocurrió una idea.

Mineta: Puedo pedirle ayuda a Loona! Ella no es especialmente refinada pero seguro me puede ayudar en algo! -dijo un poco más alegre-

En ese momento Mineta sacó su teléfono, pero al preciso instante de hacerlo una notificación de Impstagram le llegó.

Por simple curiosidad el chico abrió la notificación, era Loona. La loba subió una foto suya junto a Nova y Gwen en lo que parecía ser una tarde/noche de películas. Al parecer su amiga tampoco estaría disponible.

Mineta: No pasaron ni dos horas desde que la dejé en su depa... -murmuró sacado de onda- Bueno, sólo queda una opción. 

La luz del semáforo cambió a verde, pero Mineta, en lugar de girar a la derecha para dirigirse a su hogar, giró hacia la izquierda... rumbo a una autopista que lleva a Ciudad Pentagrama.

Como el ciudadano respetable que era Mineta, este había llamado a Charlie antes de retomar la autopista, una de las ventajas de haber comprado su fabuloso Mitsubishi era la característica de poder hacer llamadas con manos libres. Así que no dudó en hacer la llamada manteniendo su atención en la autopista, la cual no tardó en ser atendida por la dueña del Hotel Hazbin

Charlie: Hola Mineta

Mineta: Hola Charlie! Estoy yendo al hotel, necesito ayuda con algo importante.

Charlie: Seguro logramos ayudarte Mineta. A propósito ¿Dónde has estado? Ninguno de nosotros supo de ti desde que te fuiste.

Mineta: Pues... pasaron cosas. Te las contaré cuando llegue ¿Te parece? No me tomará mucho tiempo llegar.

Charlie: Está bien! Te estaré esperando.

Cuando la llamada terminó, el demonio aceleró un poco más, quería llegar lo antes posible para tener la solución a sus problemas cuanto antes.

Tenía sentimientos encontrados, estaba nervioso por la nueva situación que se le había presentado, estaba preparado para ser rechazado por la princesa, pero no había sido así. La chica había aceptado amablemente la invitación, lo cual lo emocionó de sobremanera, pero sus nervios nacieron cuando se dio cuenta que estaba en terreno desconocido. 

Charlie podía ser su única solución y si ella no lograba ayudarlo pues agradecería el intento y encomendaría su ser a Satán para que todo fuera bien. Depositó toda su confianza en la hija de Lucifer, era la primera amiga que conoció en el Infierno y quien no lo juzgó por sus pecados. Es más, había sido la primera que lo consideraba una persona capaz de redimirse. No por nada estaba dispuesto a ayudarla en lo que pudiera con respecto al hotel si ella se lo pedía.

El viaje por la autopista había sido bastante tranquilo, lo suficiente como para que Mineta tuviera aquella reflexión. Y en unos pocos minutos había llegado al Hotel Hazbin, estacionando su auto afuera y evitando que éste estorbara en el camino de alguien más.

Dentro del Hotel:

Niffty: ¡OIGAN, ALGUIEN LLEGÓ! -comentó enérgicamente la pequeña demonio viendo por la ventana del hotel-

Charlie: ¿Es Mineta? Me llamó diciendo que vendría dentro de poco. 

Niffty: No estoy segura ¿Te dijo si tiene auto? 

Charlie: ¿Por qué lo preguntas? 

Niffty: Porque hay uno estacionado afuera.

Con esa frase más de uno se arrimó a ver el automóvil, viendo como el chico salía del auto.

Vaggie: ¿Es un Mitsubishi? ¿Cómo es que se consiguió uno? -preguntó evidentemente sorprendida-

Husk: Seguro fue con el dinero que se ganó en la carrera. -comentó ebrio como siempre y restándole importancia al asunto-

Charlie: ¿De qué carrera hablas Husk? -preguntó confundida-

Husk: Me faltaba un corredor y el chico se ofreció, tendrían que haberlo visto correr, pero dudo que estén de acuerdo con las carreras callejeras. -finalizó dándole un sorbo a su bebida-

Vaggie: ¡¿Lo hiciste correr una carrera clandestina?! -cuestionó enojada- 

Husk: Qué parte de "Él se ofreció" no entendiste chamaca? -respondió agriamente-

Con aquella última frase las puertas del hotel fueron abiertas tímidamente por Mineta que evidentemente se puso nervioso al ver que todos sus amigos del hotel fueron a saludarlo y felicitarlo por su adquisición.

Angel: ¡Mineta felicidades por tu auto! Tienes buenos gustos. -comentó el arácnido homosexual-

Mineta: ¡Gracias Angel! Siempre quise un modelo así y ahora lo tengo en mis manos. 

Charlie: ¡Bienvenido de vuelta Mineta! Pasa y ponte cómodo. –dijo mientras le señalaba un asiento- ¿Te apetece algo? ¿Galletas? ¿Té? ¿O prefieres café? 

Mineta: No te molestes, no quiero quitarte mucho tiempo así que quiero ir directo al grano. -contestó amablemente-

Charlie: Está bien, ahora cuéntame ¿Cuál es el problema? -preguntó esperando aplacar los problemas de su amigo- 

Mineta: Pues verás, mañana... tendré una cita. -dijo algo nervioso pero soltando el notición-

Las reacciones mixtas no se hicieron esperar. Charlie, Alastor y Angel mostraban una sonrisa al ver lo apenado que se mostraba el chico. En cambio Vaggie y Niffty mostraban algo de asombro debido a la reputación del chico y Husk... bueno, a él no le importaba mucho.

Alastor: Vaya! Muchas felicidades por ese logro Mineta! -dijo tan sonriente como siempre-

Mineta: Gracias Al! -respondió igual de alegre-

Angel: Es chica?? -preguntó ganándose un codazo por parte de Vaggie-

Mineta: -suspira fastidiado- Sí Angel, es una chica.

Niffty: A dónde la llevarás?? -preguntó con notable curiosidad-

Mineta: A un restaurante no muy lejos de donde vive ella.

Angel: A dónde la llevará es lo de menos. Cuéntanos... quién es la desafortunada?? -preguntó con tono bromista, ganándose un codazo el doble de fuerte de la chica de piel gris- OW!! -chilló quejándose del dolor-

Mineta tragó saliva antes de responder.

Mineta: Ese es el problema, no es cualquier chica, es Octavia Goetia. Invité a Octavia Goetia a salir. -respondió nerviosamente-

Y las reacciones nuevamente salieron a flote, pero con aun más fuerza, aunque claro, las únicas emociones que se presentaron fueron la alegría y la confusión.

Alastor/Angel/Niffty/Vaggie: ¿¡QUÉ!? -gritaron al unísono demostrando su impresión- 

Charlie: ¡NO PUEDO CREER QUE VAYAS A SALIR CON VIA! -comentó abrazando al chico fuertemente mientras gritaba de la emoción-

Mineta: Yo... tampoco. -mencionó el demonio con dificultad-

Vaggie: ¡¿Cómo alguien como ella decidió salir contigo?! -preguntó confundida por el suceso. No es considerara que Mineta fuera mala persona, pero su antigua fama de pervertido que todos los del hotel sabían que tenía hacía bastante difícil de creer que Mineta consiguiera una cita con una chica, sobretodo una de la nobleza- 

Mineta: Es lo mismo que me pregunté... cuando te conocí Vaggs. -comentó aun siendo apretujado por Charlie- Podrías dejar de abrazarme... ¿Por favor? -preguntó con su cara, usualmente roja, de un color azul-

Angel: Pues... eso cambia mucho las cosas. 

Niffty: Y que lo digas, estamos hablando de una princesa auténtica.

Charlie: No tienes nada de qué preocuparte, solo tienes que actuar como lo harías en cualquier otra cita. 

Mineta: ... Charlie. 

Charlie: ¿Sí Mineta? 

Mineta: Nunca he tenido una cita antes. 

Charlie: ¿Ninguna?

Vaggie: Olvidaste que es un pervertido, cariño. -comentó la chica a su novia-

Charlie: Cierto...

Vaggie: No te ofendas Mineta. -le dijo ahora a nuestro protagonista-

Mineta: Nah no te preocupes.

Alastor: Pervertido o no, la señorita ha aceptado su invitación. -dijo acercándose a Mineta- No te preocupes muchacho, con todos los aquí presentes te convertirás en un caballero de pies a cabeza. -afirmó rodeándolo con su brazo-

Mineta: ¿En serio lo crees? -preguntó el chico ilusionado-

Alastor: Mmm... no, la verdad no. 

Todos: ¡AL! 

Alastor: No cuesta nada intentarlo. 

Todos: Aaaah....

Angel: Ya escucharon al venado ¡Que comience el entrenamiento! Música que inspire!

https://youtu.be/dN6TARt-28Y

Fue con esa frase que empezó un clásico montaje de entrenamiento de los 70s donde se podía observar a nuestro protagonista en varias situaciones. 

La primera lección consistió en el reconocimiento de los 32 cubiertos para una cena elegante, lo cual no tomó mucho tiempo gracias a la buena memoria de Mineta y a los golpes en las manos que Niffty le daba con una regla si se equivocaba.

La siguiente lección consistió en una clase de modales bastante resumida por Alastor, donde Mineta tomaba nota de lo que escribía su amigo en el pizarrón. Y repasaban cada tanto las acciones que debía hacer.

La tercera lección era aprender a bailar. Mineta ya tenía un buen par de pasos prohibidos que podría sacar a relucir cuando fuera adecuado, pero el tipo de baile al que se preparaba era algo más calmado y formal: Un vals. No era nada del otro mundo aprender a bailarlo, más si quien se lo enseñaba era la misma Charlie.

La cuarta y última lección del día, una práctica de combate, siendo sus maestros nadie más ni nadie menos que Angel y Vaggie, siendo esta última la que más quería golpear al chico por bailar con su novia. 

Dicha práctica era para ver las capacidades físicas de Mineta para proteger a Octavia si la situación lo ameritaba. El chico estaba más que capacitado para ello, su tiempo trabajando con Blitzo y M&M junto a su antiguo entrenamiento en UA le daban los reflejos y agilidad para enfrentar a Angel y Vaggie. Si hubiera tenido su quirk hubiera sido aún más fácil, pero había aprendido a adaptarse a las capacidades de su nuevo cuerpo, logrando superar a ambos fácilmente. Angel era muy bueno disparando por lo que el grupo se sorprendió cuando Mineta logró ganarle en una competencia de disparos. En cuanto a Vaggie, ella era buena en el combate cuerpo a cuerpo, algo que a Mineta le tomó tiempo sobreponer debido a la intensidad con la que atacaba la chica, aun así esta había sido una buena excusa para probar sus movimientos de cola, la cual podía ser usada como una quinta extremidad. Fue así que, con un movimiento rápido, Mineta logró desarmar a la chica y tumbarla con su cola para que cayera.

Ese había sido un día ajetreado que aun así había logrado abarcar una gran cantidad de temas para la futura cita del chico. Ya con la noche haciéndose presente, era hora de que Mineta volviera a su apartamento y descansara para otro día de trabajo para luego prepararse para su cita. 

Mientras todo esto ocurría:

Octavia y sus amigas caminaron hacia el centro comercial decididas a encontrar un buen conjunto para su cita. Por lo que fueron directamente al local de ropa más cercano a probarse algo, aunque claro, muchas de las prendas no tenían aquel impacto que las amigas de Via buscaban que ella reflejara.

Fue así que era momento de que aumentaran el nivel, Octavia era una princesa por lo que podría costearse algo más caro, por lo que decidieron ir a un local llamado "Tentación", una marca de moda dirigida por la mismísima Lilith. La administradora no dudó en ayudar a las chicas, después de todo sería muy malo que alguien de la nobleza hablara mal de ella. Por lo que facilitó a Via y sus amigas una buena cantidad de conjuntos.

https://youtu.be/T9Dl0hWGunw

Otro montaje se hacía presente mostrando cómo Via iba de vestido en vestido, viendo si a sus amigas les gustaba cómo quedaba. 

Muchas veces se daba la situación en la que una gran mayoría decía que sí o no, Octavia no quería arriesgarse, solo compraría el conjunto que todas sus amigas estén de acuerdo. La única que no parecía prestarle atención al asunto era Meg, la cual miraba su celular y levantaba su pulgar de vez en cuando para decir que le gustaba el vestido. Claramente al resto de sus amigas no les gustaba dicha actitud ahora mismo, habían venido para apoyar a Via y Meg ignoraba completamente el asunto.

Meg era la chica menos femenina del grupo, pero al menos esperaban que dieran una opinión sobre el tema, por lo que se paró firme y fue sincera con sus palabras:

Meg: El tipo la invitó, es obvio que le gusta, no necesita algo extravagante. A veces algo sencillo es mejor que algo excesivamente adornado. -respondió con simpleza-

Via se sorprendió por la respuesta de su amiga, pero no tenía nada que perder, así que encontró el atuendo más "sencillo" y fue a probárselo. La intriga era grande hasta que Octavia decidió salió del vestidor, ESE era el conjunto indicado.

Iris/Vinyl/Helvetica: ¡TE VES INCREÍBLE!

Meg: Se los dije.

El vestido fue elegido y comprado por las chicas, las cuales debido a la hora que era tuvieron que irse cada una a sus casas. Pero eso no impediría que se reunieran nuevamente mañana para preparar e instruir a su amiga para su primera cita. Esa tenía que ser la experiencia de su vida, así que harían lo imposible para que esta primera cita fuera inolvidable.

Al mismo tiempo, a las afueras de la ciudad...

https://youtu.be/P_tEbxd1ng8

Una casa maltratada se alzaba en las planicies del lugar, alejada de la carretera, y debido a su estado no muy confiable para habitar. Aún así, si en ese momento se vigilara la propiedad, podría verse movimiento en ella. El interior no era muy distinto del exterior, polvo, suciedad, paredes y muebles desgastados por el tiempo mismo. Aun así, ese era el lugar donde una reunión se llevaba a cabo, más en específico, en la sala principal de la casa. Donde siete demonios tenían una conversación en la oscuridad, ninguno de ellos podía verse el rostro, pero no era necesario. Lo importante era la charla que estaban teniendo y esta... era más que interesante.

???: Entonces... ¿Estás seguro de lo que viste? -comentó un demonio de voz gruesa y autoritaria, posiblemente el líder del grupo- 

???: Sé lo que vi, ese chico... es amigo de Angel Dust. -respondió otro demonio recostado en la pared de manera relajada-

???: POR QUÉ LES IMPORTA TANTO ESE MOCOSO!?? VAYAMOS POR ESE BASTARDO DE ANGEL!! -dijo de manera molesta uno de los integrantes que se encontraba sentado en un asiento- 

???: Deja de gritar! -dijo uno de sus compañeros callándolo- Ir directamente por Angel sería estúpido, está muy cerca de la princesa Charlotte y de ESE tipo.

???: Por eso sugerí vigilarlo y buscar un punto débil. -mencionó otro miembro sentado en una silla de madera- Y ese punto débil... es ese chico, creo recordar que su nombre era Mineta.

???: Ahora entiendo porque me mandaste a vigilarlo ¿Ahora qué? -preguntó otro demonio sentado en una mesa usando una laptop siendo acompañado por otro-

???: Tienes información de dónde podemos atacarlo? Quiero que este asunto se acabe lo antes posible. -mencionó el líder-

???: Mmm... Hizo una reservación en un restaurante, parece que será mañana. 

???: ¡CARAJO! ¡ES MUY POCO TIEMPO! -comentó colérico el demonio del asiento-

???: Para nada. -habló el demonio que estaba al otro lado de la mesa, captando la atención de sus compañeros- Mañana mismo, antes de que lleguen, podemos infiltrarnos en la cocina como meseros. Sería arriesgado, pero no veo otra forma de hacer esto rápido. -finalizó dejando impactados a los presentes-

???: Realmente has cambiado mucho desde la última vez que te vi, amigo mío. -contestó el que estaba sentado en la silla de madera.- 

???: Lo sé, tu muerte fue la que me incentivó a madurar. -respondió- Volviendo al tema, es la única manera que veo de hacerlo desde que nos desvinculamos de ANO.

???: Sí... -dijo el líder haciendo una pausa- Lo que le hizo Angel a nuestros amigos... no tiene perdón. Pediré un par de refuerzos, pero tengan por seguro... ¡Que mañana por la noche, asesinaremos a Minoru Mineta y obligaremos a Angel Dust a pagar por lo que hizo!

Todos: ¡SÍ! 

???: La sesión se cierra, descansen. Mañana será una gran noche. -ordenó el líder- 

Con esas últimas palabras, las siete sombras salieron de aquel edificio resguardados por la oscuridad de la noche, esto se pondría complicado...

Sábado -6:00 PM-

Otro largo día en las oficinas de I.M.P, masacrando a los vivos por encargo, esa era la rutina, pero no por ello menos emocionante. La jornada laboral había terminado y todos los miembros del equipo se estaban preparando para irse a sus casas a su manera. Moxxie y Millie guardaban sus armas, Mineta y Loona preparaban sus mochilas, mientras que Blitzo cerraba su oficina.

Blitzo: ¡Qué día! -dijo feliz por el trabajo realizado en el día- Pero ya es hora de irse, muy bien todos, vámonos de una vez! -anunció el jefe siendo seguido por sus empleados- 

Moxxie: Ya era hora, estoy agotado. 

Millie: Igual yo ¿Noche de películas? -preguntó la demonio viendo a su esposo- 

Moxxie: Noche de películas. -afirmó el demonio abrazando a su pareja- 

Mineta: ¿Qué hay de ti Loona? ¿Planeas hacer algo? 

Loona: La verdad no tengo ni idea de lo que haré, pero si quieres podemos ir por unos tragos. -ofreció la loba a su compañero- 

Mineta: Agradezco la oferta, pero ya tengo planes para esta noche, será para la próxima. -respondió el chico.- Bueno, todo listo Loona ¿Quieres que te dé un aventón? 

Loona: No es necesario, además, esta vez quiero caminar. 

Mineta: Está bien, como gustes. Moxx, Mills, qué hay de ustedes? 

Moxxie: Me vendría bien, la verdad. 

Millie: Acelérele chofer. -comentó ya metida en el auto- 

Todos en I.M.P (con la excepción de Loona) se habían enterado de la nueva adquisición de Mineta, sus "padres" estaban más que orgullosos mientras que Blitz se sintió ofendido e indignado porque su empleado cambiara su regalo por algo más moderno. Claro que Mineta aclaró que el regalo de su jefe había sido guardado en un lugar seguro para ponerlo en condiciones. 

Así fue que cada uno se fue por su lado, siendo que Mineta y sus papis se dirigieron al edificio donde vivían. Al llegar se separaron nuevamente para ir a su respectivo departamento, apenas Mineta entró, empezó a hacerse un listado mental de todo lo que debía hacer, pero había algo en especial que se le había olvidado... algo que fue opacado por la sensación de ser vigilado.

En un rápido movimiento, Mineta desenfundó su arma apuntando a quien hubiera decidido meterse a su departamento, solo para encontrarse con una cara familiar. 

Alastor: Sabes que es de mala educación apuntarles a las visitas ¿Verdad? -comentó apartando el cañón de la pistola con uno de sus dedos-

Mineta: Al igual que estas lleguen sin avisar ¿Qué haces aquí Al? Mejor aún ¿Cómo sabías que vivo aquí? -cuestionó el demonio guardando su arma- 

Alastor: El cómo lo sé no es importante, lo importante aquí es ir al Hotel para una última lección. -mencionó lanzando levemente su bastón en el aire y atrapándolo-

Mineta: No puedo Al, la cita es a las 7. 

Alastor: Ya veo... bueno, te deseo suerte entonces! -dijo con su emblemática sonrisa de loco desquiciado-

Mineta: Oh mierda... olvidé la ropa!! ¿¡Qué me voy a poner!? -dijo alterado- 

Alastor: Por favor, seguro tienes algo que ponerte.

1 minuto después...

Alastor: ¿Cómo es que tienes una cita sin tener un traje adecuado? 

Mineta: Me olvidé por completo de ello ¿Ahora que haré? -se cuestionó al borde de las lágrimas-

Alastor: Espera aquí, tengo algo que podría salvarte. -comentó el Overlord entrando a un portal que había creado con sus manos-

Otro minuto más tarde...

Alastor había vuelto con una caja debajo del brazo, esa era la salvación de Mineta. El chico abrió la caja y observó su contenido. Realmente no se esperaba algo así, el Overlord simplemente lo frenó y le dijo que se apurara, luego vería la forma en la que se lo compensaría.

Fue así que Mineta fue nuevamente a su auto, pero en lugar de dirigirse a la residencia de los Goetia para buscar a Octavia (como sería lo normal) fue rumbo al salón de belleza en el que Nova trabajaba, en busca de la "opinión de un experto" antes de su cita. Para fortuna del chico, el establecimiento quedaba relativamente cerca de la casa de la chica búho.

Luego de unos 5 minutos de recorrido, Mineta llegó al salón de belleza. 

Mineta: Buenas tardes NovAAAH!!! -chilló después de abrir la puerta del salón-

La reacción de Mineta era comprensible, al abrir la puerta lo primero que vio fue a Nova agachada en el piso en una posición algo... sugerente, sacándole un pequeño sobresalto a nuestro protagonista y haciendo que soltara la caja que le había dado Alastor, atrapándola encima de su cabeza.

Nova: Oh, buenas tardes Mineta! -saludó con voz alegre y despreocupada-

Mineta: Q-Qué rayos haces Nova?? -preguntó mientras se recuperaba del susto-

Nova: Estaba buscando un cepillo que se me cayó ¿Te asusté? -preguntó conservando su posición-

Mineta: Emm, sí. Quiero decir, no es muy normal recibir visitas estando en cuatro. -dijo soltando una risilla-

Nova: En fin... -dijo a la par que se levantaba y se sacudía un poco de polvo de sus vestimentas- En qué puedo ayudarte?? -preguntó amablemente-

Mineta: Verás, tengo una cita en... -revisa su reloj- Más o menos media hora. Ya estoy prácticamente listo, pero quisiera que me ayudaras un poco con mi cabello y de paso para que me digas qué opinas de la ropa que voy a llevar.

Nova: Vas a ir así??

Mineta: Nop, todo está en esta caja. -dijo abriendo la misma y enseñándosela a Nova-

Nova: Oh... wow!! -expresó maravillada viendo el contenido de la caja- Realmente te la rifaste consiguiendo ese atuendo Mineta. -dijo la loba tatuada- Loona se va a volver lo-qui-ta cuando te vea!! -dijo para sus adentros-

Mineta: Pues tengo que lucir bien para mi primera cita. -comentó dándole unas palmaditas en la cabeza a la loba. Los dos tenían más o menos la misma estatura y eso le facilitaba enormemente las cosas a Mineta para esta clase de gestos-

Nova: Oh! Es por eso. Pero... qué pasa con tu pelo? Se ve bien para mí.

Mineta: Sí, la cita es en un lugar elegante y bueno, no quisiera andar por ahí con mi pelo de Bob Ross.

Nova: .... Bob quién?? -preguntó extrañada-

Mineta: Bob Ross, ese señor de afro y barba que tenía un programa de televisión entre los 80s y 90s en el que daba clases de pintura. MissaSinfonia y hasta el puto Deadpool le han hecho parodias.

Nova: Ah ya! Bueno okey, siéntate ahí y veré qué puedo hacer. -dijo señalando a una silla que tenía a su izquierda-

Mineta: Perfecto.

Acatando la orden de la loba de brazos tatuados, Mineta se sentó en la silla. Nova sacó un peine lo pasó por el pelo del demonio. Sin embargo la cabellera de Mineta no cedía y la chica tuvo que batallar bastante para poder alisarlo, sacándole uno que otro quejido a nuestro protagonista. Luego de 1 minuto en este conflicto, Nova logró su cometido.

Nova: Sí! -exclamó triunfante-

Apenas la loba empezó a celebrar, el cabello de nuestro diablillo protagonista volvió a su alborotada forma original.

Nova: No! -dijo ahora completamente derrotada- Bueno, esto va a ser difícil. Voy a tener que sacar la artillería pesada. -dijo mientras hurgaba en uno de los estantes que tenía el mueble en frente de Mineta-

Mineta: Eso es gel para el cabello?? -preguntó al ver a la loba sacar un pequeño frasco-

Nova: Sip, creo que con eso debería bastar.

La loba de cabello negro volvió a pasar repetidamente el cepillo por el pelo de Mineta, pero esta vez por cada pasada le aplicaba un poquito del gelatinoso contenido del frasco.

Nova: Yyy listo! Ahora sí que...

La chica no pudo seguir ya que, al igual que la vez anterior, el pelo de su amigo volvió a su frondosa forma afro... y de paso terminando la pobre Nova con su cara salpicada de gel.

Mineta/Nova: -suspiro de decepción.mp3-

Nova: Creo que mejor te lo corto un poco no? -preguntó intentando conservar su actitud alegre mientras se limpiaba el gel de su carita, pero el cabello de Mineta realmente la estaba frustrando-

Mineta: Me parece bien.

Con la aprobación de su amigo, Nova sacó unas tijeras dispuesta a rebajar considerablemente la cabellera de Mineta. El plan hubiera funcionado... si no fuera porque las tijeras se rompieron al primer intento de corte. Aparentemente, el destino (es decir, Tocachi y yo) quería que Mineta conserve su cabello intacto y despeinado.

Nova: Sabes qué? Creo que mejor te lo dejo así, te da personalidad.

Mineta: Lo dices en serio??

Nova: Sip.

Mineta: Vaya. Pues gracias por intentar ayudarme Nova, cuánto te debo?? -cuestionó sacando su billetera-

Nova: Ay por eso no te preocupes Mineta! Considera esto como un favor mío. -comentó apoyando su cabeza sobre la de Mineta-

Mineta: Mierda, no sé qué decir.

Nova: Oye... no deberías irte poniendo tu traje??

Mineta: Es verdad!

Nova: Sígueme, te llevo a los vestidores, ahí podrás cambiarte tranquilo. -dijo la loba siendo seguido por el chico-

Mineta entró por una puerta blanca que le indicó Nova. Al entrar había un par de casilleros y unas bancas. Eso era básicamente el vestidor, así que Mineta empezó a quitarse la ropa para colocarse el regalo de Alastor. Aunque, por alguna razón, sentía una sensación extraña en su ser, la cual decidió ignorar por el momento. 

Mientras tanto, afuera de la habitación, Nova fisgoneaba por el agujero de la cerradura el cómo lucía Mineta sin camisa. Y para suerte de ella, podía apreciar muy bien el trabajado cuerpo del demonio. Pectorales, abdominales, bíceps y algunas cicatrices que le quedaron después del incidente de Ojiro, todo estaba enfrente de Nova para devorarlo con la mirada.

Nova: ¡Qué envidia te tengo Loona! ¡Mira nomás lo que te vas a comer! -dijo para sus adentros mientras su cara se ponía bastante roja y movía emocionada su cola- 

Para cuando Mineta empezó a sacar su ropa formal dejó de espiar, quería llevarse la sorpresa de como luciría el chico con aquella vestimenta. No tomó mucho tiempo hasta que Mineta finalmente salió.

Mineta: Bueno... ¿Cómo me veo? -preguntó el demonio- 

Nova: Si no tuvieras dueña ya te pediría que me dieras como cajón que no cierra. -expresó la chica sorprendida de lo apuesto que se veía su amigo con ropa elegante- 

Mineta: ¿Cómo dices que dijiste? -cuestionó el chico pensando que había escuchado mal-

Nova: Que te ves bien hombre!

Mineta: Jeje, gracias. -respondió viendo su celular- 

Nova: Estuvo cerca. -pensó-

Mineta: Bueno, ya es momento de ir a buscarla.

Nova: Te acompaño a la salida. 

Mineta: En serio Nova, realmente te agradezco la ayuda.

Nova: No agradezcas, si puedo ayudar a un amigo lo haré.

Al llegar a la salida la vista de la loba se centró en el increíble vehículo estacionado enfrente del local.

Nova: ¡¿Ese es tu auto!? -preguntó asombrada-

Mineta: Sí que sí. -aclaró orgulloso el demonio- 

Nova: No escatimaste en gastos para impresionarla por lo que veo. 

Mineta: Pues tienes razón en eso, además, siempre quise uno. Luego te cuento como lo conseguí. 

Nova: Vale, pero apresúrate. No querrás llegar tarde. 

Mineta: Tú lo has dicho. 

El chico encendió motores y se dispuso a partir directo a la residencia de los Goetia... hasta que una idea pasó por su cabeza después de mirar su reloj.

Mineta: Oye, Nova... -dijo llamando la atención de la chica tatuada-

Nova: Sí Mineta?? -cuestionó mientras terminaba de cerrar su local-

Mineta: Todavía me queda algo de tiempo antes de mi cita ¿Quieres que te acompañe a tu casa?

Nova: Mineta, vivo literalmente doblando la esquina, no hace falta tranquilo. -dijo amablemente-

Mineta: Mamadas mija, creo que es lo menos que puedo hacer después de que me ayudaras.

La loba se lo pensó unos segundos. Finalmente decidió aceptar, de todos modos el estar junto a ese papucho por unos minutos más (aunque solo fueran amigos) era un buen incentivo.

Nova: Bueno, ya que insistes... -dijo sonriendo mientras se subía al vehículo-

Mineta: Okey pues, abróchate el cinturón.

Nova hizo lo que Mineta le dijo, y con esto el chico se dirigió rápidamente a la casa de su amiga. Efectivamente y tal como había dicho Nova, su vivienda quedaba doblando la esquina del salón de belleza en el que trabajaba. No era una casa tan grande si se le comparaba a la de Vortex, pero esos son detalles que ni para Mineta ni para cualquiera de nosotros vienen al caso.

Mineta: Esta es tu casa?

Nova: Sip, gracias Mineta.

Mineta: Jeje, ni lo menciones.

Nova: Bueno, suerte en tu cita tigre! -dijo animosamente mientras salía del auto-

Mineta: Gracias Nova, que tengas buena noche! -respondió igual de alegre-

Una vez que nuestro protagonista se despidió de la loba tatuada, ahora sí se dirigió raudo como el viento a la residencia de los Goetia. Al cabo de una media hora de recorrido llegó al enorme palacio, y todavía le quedaba un minuto de sobra.

Mineta: Okey, máximo esfuerzo Minoru. -se dijo a sí mismo para darse ánimos-

El joven salió de su auto y se encaminó con paso lento pero seguro hacia la puerta principal de la mansión. Una vez frente a la misma, tocó el timbre y esperó unos segundos a que lo atendieran.

Poco a poco empezaba a oscurecer en el Infierno, el ambiente ya se estaba haciendo presente para una noche especial. Fue en ese momento, en que el joven demonio observaba sus alrededores, que la puerta se abrió dando paso a la noble y esbelta figura del patriarca de la familia, el príncipe Stolas.

Stolas: Sí? En qué... Oh! Mineta ¿Eres tú? -preguntó el búho de la realeza-

Mineta: Emm... sí, soy yo señor Stolas... ¿S-Se encuentra Octavia? -contestó y cuestionó nerviosamente el diablillo-

El demonio Goetia lo observó más detenidamente, el joven estaba muy bien vestido y arreglado para aparecer enfrente de su casa. Se lo veía notablemente nervioso y la mezcla de desodorante y colonia eran fácilmente captada por el pico del príncipe. Este mismo lo miró extrañado alzando una ceja por la actitud del chico analizando la situación hasta que sus pensamientos fueron interrumpidos por el mismo Mineta.

Mineta: ¿P-Puedo pasar? 

Stolas: Puedes. Sígueme por favor, esperaremos a mi hija en el comedor. -dijo el príncipe dirigiéndose a la habitación mencionada- 

Mineta: Con su permiso.

La residencia Goetia se encontraba un poco oscura, por lo que el joven demonio no podía ver muy bien los detalles de la misma, esperaba que en algún momento pudiera visitarla nuevamente estando más iluminada. Como pudo, el diablillo siguió a la alta figura de Stolas hasta llegar al comedor, el cual consistía en una cocina con estanterías, nevera y horno mientras que al otro lado había una mesa redonda.

Stolas: Por favor, toma asiento. -indicó el búho con su mano-

El asiento al que se refería era a un sillón cercano a una gran ventana cercana a la mesa redonda, y así como se lo pidió Mineta obedeció. La luz blanca del único foco en la habitación junto a la presencia de Stolas incomodaban al diablillo.

Stolas: No esperaba una visita de tu parte, menos a esta hora. -mencionó con sinceridad- 

Mineta: Bueno, es que... es una ocasión especial. -respondió intentando ocultar su incomodidad- 

Stolas: ¿Quieres algo de té, café o...? 

Mineta: Le agradezco que pregunte, pero... estoy bien. 

Stolas simplemente agarró su plato y taza de porcelana para colocarlo en mesa para sentarse en el extremo opuesto de la mesa. El silencio entre ambos era más que insoportable para el chico, el cual, prefería mil veces mantener una charla con el príncipe antes que ser juzgado en silencio, hasta que... eso ocurrió.

Stolas: Sé lo que ocurre, Mineta. -declaró su majestad- 

Mineta: Ah... sí?

Stolas: Sí... dime Mineta... ¿Cuáles son tus intenciones con mi hija? 

Mineta se había quedado mudo ¿Acaso había sido demasiado evidente frente a Stolas? Podía confesar sus sentimientos ahora mismo, pero... ¿Qué pasaría si la respuesta que daba no era del agrado de su majestad? Podría prohibirle volver a ver a Octavia, a hablar con ella o siquiera a saber de ella, es más, incluso podría ordenar que lo asesinaran con tal de que su hija no interactuara con él. Mineta también había escuchado de boca de Blitzo algunas anécdotas... un poco turbias relacionadas al príncipe búho, eso le hizo pensar que en el peor de los casos podría incluso condenarlo a ser su esclavo sexual.

Pero aún así... con aquel nudo en su garganta y con la posibilidad de ser separado de Via o de ser sodomizado por el resto de sus días de "juventud y galanura" a manos del príncipe... jamás se atrevería a negar lo que sentía por ella. Tragó saliva, tomó un poco de aire y se dispuso a hablar con sinceridad... 

Octavia: Papá, Mineta vendrá en un par de... minutos. -dijo haciendo acto de presencia la joven princesa-

Ambos jóvenes se habían quedado paralizados por la presencia del otro ¿Y cómo no estarlo? Los dos se habían puesto sus mejores vestimentas y perfumes para la ocasión. 

Mineta se quedó embobado por el aspecto de Octavia, quien vestía un hermoso vestido violeta sin tirantes que hacía lucir su esbelta figura junto a un cinturón de estrellas y unas bellísimas pantimedias moradas. Su usualmente despeinado plumaje se encontraba cuidado y estilizado mientras una serie de anillos plateados adornaban su cuello y brazo izquierdo. Y su cara, oh su cara, Mineta jamás se cansaría de ver esos ojos rosados en su pálido rostro que ahora era resaltado por el maquillaje y su rubor natural, luciendo además un par de aretes plateados con forma de estrellas.

https://www.instagram.com/p/CJg0mjbAih_/

Por el lado de Octavia, ella estaba disfrutando de la vista panorámica que le daba Mineta en ese momento. Como era de costumbre, siempre cargando con una sonrisa alegre y sincera, su pelo afro se encontraba un poco más brillante debido al gel que intentó echarle Nova momentos atrás. Pero la vestimenta del chico era la que había dejado sin palabras a la chica, un conjunto completamente blanco de pies a cabeza, interrumpido solamente por las mangas recogidas y el saco abierto, que revelaban una camisa de vestir violeta debajo junto a una hebilla dorada en el cinturón.  

https://www.deviantart.com/tocachi-green-pencil/art/Mineta-Great-Night-883466102

Pero aquel placer visual, como todo lo bueno de la vida, tuvo que acabar increíblemente rápido debido a la intervención del padre.

Stolas: ¿Cómo es eso de que tendrás una cita y yo no estoy enterado? 

Octavia: Si te decía dirías que no, Mineta me acompañará para protegerme. 

Stolas: Oh, pensaba que... él te había invitado. -comentó confundido el príncipe- 

Octavia: Para nada, fue un chico de la escuela, solo le dije que sí para que dejara de molestar. -aclaró pretendiendo molestia- Por eso le pedí a Mineta que viniera, por si hace algo raro. 

Stolas: Ya veo. -respondió su majestad más tranquilo- Entonces los acompaño a la salida.

Y dicho y hecho el padre siguió a ambos chicos a la salida, donde se despidió de su hija procurando que ella supiera que esperaba que se divirtiera. Pero cuando Mineta se dispuso a ir al auto fue cuando Stolas lo retuvo sosteniendo su hombro.

Stolas: Antes de que se vayan ¿Puedo preguntarte algo, Mineta? -cuestionó el príncipe, mientras ambos le daban la espalda a la chica que entraba al auto-

Mineta: Por supuesto señor Stolas. 

Stolas: ¿Conoces al muchacho que invitó a Via? 

Mineta: Para nada, ahora mismo está sentado en el asiento de atrás. -respondió siguiendo el juego de Via-

Stolas: Ni siquiera se dignó a conducir él mismo... no me agrada. -expresó molesto- 

Mineta: No se preocupe señor, mantendré mis ojos toda la velada en ese tipo. 

Stolas: Que así sea Mineta. -dijo un poco más alegre por la disposición del chico- Dile a ese mequetrefe que quiero a mi hija antes de la medianoche en mi casa ¿Está claro?

Mineta: Como el agua, señor. 

Stolas: Una sola cosa más. -mencionó antes de acercar su pico a los oídos del diablillo- Si ese idiota intenta sobrepasarse con mi hija... Tienes permiso de dispararle. Que sea de advertencia, no algo mortal ¿Entendido?

Mineta: Me gusta cómo piensa. -comentó el chico antes de ver su celular- Bueno, hora de irse, la reservación de los tortolitos será dentro de poco- 

Stolas: Te encargo la seguridad de mi hija muchacho, no lo olvides. 

Mineta: Sí señor. 

Y con esa última respuesta, el joven demonio tomó el volante y partió rumbo al restaurante mientras se despedía del príncipe. 

Al alejarse un poco más de la casa y fuera de la vista del príncipe, Octavia le pidió a Mineta que parara el auto, así podía acompañarlo en el asiento del copiloto. El chico se tomó el tiempo de estacionarse debidamente para no causar ningún accidente, y así ahora tenía a su cita al lado suyo para tener una conversación antes de llegar.

Octavia: Realmente lo lamento Mineta, por lo de mentirle a mi padre sobre ti. -comentó avergonzada- 

Mineta: No hay problema Via, no hay nada que disculpar. 

Octavia: Es que... con toda esta situación familiar... no confío mucho en mis padres.

Mineta: Te entiendo perfectamente, más de una vez me planteé en ser sincero con mis padres biológicos con respecto a lo que hacía.

Octavia: Espero que todo se solucione en algún momento. -dijo observando el paisaje con cierta melancolía-

Mineta: Verás que sí, pero tomará tiempo. -comentó con honestidad- Hablando de tiempo, aún tenemos un poco de tiempo antes de la cena ¿Quieres caminar mientras hablamos? 

Octavia: Me gustaría.

Fue así que Mineta se acercó a un parque local, donde estacionó su auto y ayudó a Octavia a salir. Como buen caballero que es extendió su mano, que la princesa aceptó con una hermosa sonrisa en su rostro. Ambos caminaron juntos por un sendero del parque el cual era iluminado por los faroles a los lados del mismo. Aunque la cita de por sí ya había comenzado, los dos no querían escalar tan rápido, por lo que de manera inconsciente el tema de conversación al que decidieron tocar era sus vivencias actuales, para no agotar lo más interesante para la cena.

Mineta/Octavia: Entonces ¿Cómo va...? -preguntaron al mismo tiempo, interrumpiéndose y avergonzándose mutuamente- 

Octavia: Tú primero. 

Mineta: No, no, damas primero ¿Cómo ha sido tu día? 

Octavia: Pues... qué te cuento? Nada fuera de lo común, no hay nada interesante, clases insufribles junto a maestros aburridos y mantenerse al margen de los grupos sociales de la escuela. 

Mineta: ¿Grupos sociales? ¿Como lo que ocurre en las películas escolares americanas? 

Octavia: Sí... y justamente mis amigas y yo no somos de las más populares.

Mineta: ¿En serio? Pero eres una princesa ¿Eso no debería hacerte popular?

Octavia: Al parecer no, no tengo nada que impresione a la gente.

Mineta: Pues... tal vez estás equivocada. -declaró el chico.- Una princesa que le gusta la taxidermia, los chistes inteligentes y posiblemente de humor negro, que le gusta salir con su más que excéntrico, en el buen sentido, grupo de amigas me parece más que interesante. -comentó haciendo que la cara de la chica se sonrojara- También se me olvidó mencionar el buen sentido de la moda.

Octavia: Mineta por favor, detente, me sonrojas. -respondió alegre mientras intentaba ocultar el rubor de su cara con sus manos- 

Mineta: Pues esa es la intención. -mencionó acompañado de una risita- Te ves hermosa Via, realmente lograste impactarme cuando te vi.

Octavia: Hey! ¡Te dije que pararas! -respondió dándole un golpe amistoso al hombro del chico-

Mineta: No lo haré, me gusta verte contenta.

Octavia: Está bien, está bien, pero dos pueden jugar ese juego. -dijo mientras se acercaba al chico y rodeaba con uno de sus brazos el brazo izquierdo de Mineta- Esa es una reacción que me gusta ver, te queda muy bien el rojo brillante. -comentó riendo suavemente por la reacción de Mineta- Ahora es tu turno ¿Cómo fue tu día?

Mineta: Pues... en lo que respecta a trabajo no mucho, el asesinato de gente viva no es muy complicado, aunque claro, siempre hay algún que otro objetivo complicado. Pero lo mejor de todo es que me divierto y paso tiempo con mis amigos. -mencionó bastante alegre- Jamás pensé que mi vida cambiaría tanto de un momento a otro, he aprendido a hacer cosas que nunca pensé que lograría hacer.

Octavia: Por como suenas, realmente se nota que lo disfrutas ¿Qué tanto ha cambiado desde que... bueno, ya sabes?

Mineta: Pues... -el diablillo estaba a punto de responder cuando se percató de algo, su reservación para cenar.- ¿Qué te parece si te cuento más en el restaurante? Falta poco para nuestra reservación.

Octavia: Wow, estuvimos hablando un largo tiempo. -comentó sorprendida de que el tiempo se les hubiera ido volando- 

Es así que ambos jóvenes se dirigieron al auto, sin saber que alguien los estaba vigilando. 

???: Jefe, el mocoso se dirige al restaurante. Repito, el mocoso va al restaurante. -informó un sujeto en las sombras- 

???: Entendido, seguiremos con el plan, ven aquí y prepárate para todo.

Solo le tomó unos minutos a la parejita llegar al restaurante que Mineta había elegido, un nuevo local de comida italiana nombrado como "Il Calderone Infernale". Aunque hubiera abierto relativamente poco, se había ganado una reputación lo suficientemente rápido como para que se formara una fila de demonios bien vestidos esperando a tener la oportunidad de tener una velada en aquel lugar. Poco a poco la fila fue disminuyendo en cantidad hasta llegado el turno de la pareja. Mineta había hecho una reservación antes de salir a trabajar por lo que no hubo problema en dejarlo entrar, más aún cuando iba acompañado de la hija de un príncipe. El personal dirigió a los jóvenes a su respectiva mesa, una la cual se encontraba cercana a una ventana y con buena accesibilidad para que ambos no tuvieran la necesidad de caminar mucho. 

Dicha mesa había sido otorgada por los mismos empleados al percatarse de la pareja del chico, evitarían a cualquier costo quedar mal frente a la nobleza, por lo que proporcionarían todo lo que se les solicitara para quedar bien. 

Lamentablemente... alguien tenía planeado otra cosa. 

En la parte trasera del local, un empleado algo delgado y con acné estaba sacando la basura y preparándose para seguir con su trabajo pésimamente remunerado cuando fue arrastrado a las oscuridades del callejón donde había depositado los desperdicios del local. De la negrura del lugar apareció nuevamente el empleado, pero su apariencia parecía distinta, aquel chico flacucho y con granos ahora tenía más musculatura y parecía más atractivo (#NoHomo).

???: Atraeré al resto del personal, estén listos para el cambio, que sea rápido. -comentó mirando hacia atrás mientras acomodaba sus prendas- 

Ambos jóvenes tomaron asiento y se les otorgo un menú para que pudieran elegir su comida mientras los empleados continuaban con su trabajo. Los dos miraron desconcertados el papel plastificado, eran muchas opciones y muy deliciosas para tomar una decisión apresurada. Aun así, conversaron sobre cuál sería la mejor opción, llegando a estar de acuerdo en probar "Polpi in purgatorio", un platillo de pulpo preparado con cebolla, vino blanco y un toque de pimienta roja. Via lo sugirió debido a la nacionalidad de Mineta, quien aceptó gustoso. Él estaba acostumbrado a comer comidas preparadas con ingredientes marinos, al fin y al cabo nació en Kanagawa, una zona costera de Japón, pero nunca antes se pudo dar el lujo de probar una preparación extranjera. Una vez elegida la comida, el mesero se retiró y volvió a la mesa con una cesta llena de panes.

Mesero: ¿Les apetece una bebida en especial? ¿Champagne, vino? Tenemos un buen catálogo de bebidas. -preguntó cortésmente- 

Mineta: Pues... ¿Tu qué quieres Via? 

Octavia: Con agua estoy bien. 

Mesero: Entonces agua será. 

Unos minutos más tarde, el mesero había vuelto con una jarra de agua con cubos de hielo para mantenerla fría. Este se despidió para seguir con su trabajo dejando a la pareja sola y lista para continuar con su diálogo.

Octavia: Mientras esperamos... ¿Te gustaría contarme más de ti, Mineta? -preguntó emocionada-

Mineta: ¿Que te gustaría saber, querida? -cuestionó con una sonrisa en su rostro- 

Octavia: ¿Te parece continuar por donde lo dejamos? 

Mineta: Me parece bien. La verdad es que... mi vida ha cambiado radicalmente y para bien, honestamente hablando. Incluso me atrevería a decir... que me va mucho mejor que estando vivo.

Octavia: ¿Y qué cosas han cambiado? -preguntó interesada-

Mineta: Pues... ahora tengo buenos padres, un gran grupo de amigos, un trabajo bien pagado y la oportunidad de tener una cita con una chica linda. -comentó ruborizando a la chica- Mis padres biológicos no eran muy buenos, prácticamente me obligaron a seguir un camino que no quería, lo único que saqué de esa vida fue un par de amigos y... ¿Un espíritu de lucha? Creo que es la mejor forma de describirlo.

Octavia: ¿Y qué vocación querías ejercer? -cuestionó colocando los codos sobre la mesa y su cabeza encima del dorso de sus manos-

Mineta: Me hubiera gustado ser médico, no estoy muy seguro de la especialización, pero realmente me gustaba la medicina. 

Octavia: ¿Cómo reaccionaron ellos cuando les dijiste? 

Mineta: Bueno... mi mamá se rió en mi cara y mi papá me dio un zape por decir algo así.

Con aquella respuesta, el ambiente se había vuelta bastante incómodo y silencioso.

Octavia: Lamento... haber preguntado. Realmente la pasaste muy mal. 

Mineta: No te preocupes, como dije, ahora me encuentro mejor. Moxxie y Millie me tratan como si fuera su hijo, he conocido a un montón de demonios buena onda y estoy viviendo mi vida como quiero y siendo feliz que es lo más importante. 

Octavia: ¿Los empleados del idiota rojo? ¿En serio te tratan así? 

Mineta: Fueron ellos los que me enseñaron a disparar, y sí, Millie me trata como si me hubiera dado a luz.

Octavia: Sabes? Es lindo que te traten de esa forma. No es muy usual ver a un demonio comportarse así.

Mineta: Sí, realmente me impresionó su actitud. De cierta forma... me hicieron ver que incluso los demonios pueden ser buenos. -comentó viendo ilusionado por la ventana del local-

Octavia: Ese es un bonito pensamiento. -respondió simplemente observándolo con una sonrisa-

Mineta: Por cierto, Via. -dijo llamando su atención- Me estaba preguntando... ¿De qué te gustaría trabajar cuando salgas de la escuela?

Octavia: Esa es una buena pregunta. -mencionó tomando un poco de agua- Supongo que tendré que seguir el legado familiar... aunque me gustaría estudiar astronomía. 

Mineta: ¿Astronomía? 

Octavia: Sí, nosotros los demonios Goetia, o al menos mi familia, somos capaces de predecir ciertos eventos con solo ver la posición de los astros.

Mineta: Wow! Eso es increíble Via. -dijo agarrando un poco de pan para comer-

Octavia: Gracias. -respondió con una risilla- Por cierto, me quedé con la duda... ¿Qué oficio decidieron tus padres por ti? 

Mineta: Ellos eligieron que fuera héroe profesional. -comentó tomando algo de agua- 

Octavia: ¿Héroe profesional? -preguntó confundida- 

Mineta: Sí, hace un par de generaciones atrás, los humanos empezaron a "evolucionar" y obtuvieron poderes. Desde entonces la sociedad se adaptó mucho debido a eso y ahora existe el trabajo de héroe profesional.

Octavia: Vaya, no me esperaba eso. 

Mineta: Realmente logré sorprenderte ¿Verdad? -mencionó haciendo una pequeña pausa- No es un mal trabajo, te pagan bastante bien e incluso puede que te vuelvas famoso. 

Octavia: Wow! Y... ¿Cuál era tu poder? 

Mineta: Pues... podía sacar pelotas pegajosas de mi cabeza. 

Octavia: Conociéndote seguro le diste un gran uso a tu poder. 

Mineta: La verdad es que me perfeccioné, entrené duro para aprender de mi quirk y sacarle el mayor provecho.

Octavia: ¿Quirk? 

Mineta: C-Cierto, no te lo dije, así es como llamamos a los poderes. Significa "Peculiaridad" en inglés. 

Octavia: Ya veo.

Mineta: Pero no todos tienen suerte, el 80% de la población humana tiene una peculiaridad, y mis padres entraron en el 20% que no la tenían. Al darse cuenta que había manifestado un quirk, decidieron seguir su sueño de ser héroes en mí. Es muy frustrante intentar impresionar a tus padres... la única vez que se sintieron orgullosos de mí fue cuando entré a UA. 

Octavia: Supongo que esa "UA" de la que hablas debe ser una escuela de héroes.

Mineta: Así es. -afirmó el demonio- Hablando de escuela, aún te debo una clase de japonés. -comentó con una sonrisa encantadora en su rostro- 

Octavia: Después de esta cita tenemos que programarla, estaré esperándola. -mencionó coquetamente-

Fue en ese instante en que los dos jóvenes estaban platicando cuando el mesero volvió con sus platillos, tan apetecibles que con suerte podían contener su baba en sus bocas. El mesero se regresó a la cocina listo para seguir con su trabajo, cuando notó cómo ninguno de los cocineros le decían qué llevar o siquiera se dignaban a dejar un plato. 

Fue ahí cuando sintió un buen golpe en la parte posterior de la cabeza cayendo al suelo. Al intentar levantarse fue retenido por un extraño quien le tapó la boca con una servilleta para luego amenazarlo con un arma. Este le pidió que se quitara la ropa, cumpliendo con lo ordenado, el demonio armado le lanzó las prendas a otro. Eran un grupo numeroso, todos ellos con ropas de mesero, no sabía que ocurría, pero se mantendría a raya si quería seguir vivo.

El líder del grupo envió a uno de sus secuaces a la mesa del chico y la princesa con una botella de vino, vio perfectamente como éste guardaba un arma en sus ropas para ocultarlas ¿Acaso era un rehén en un asesinato de la realeza infernal? Eso parecía. Aun así, fijó su mirada en el líder, un demonio delgado, pero de buena contextura física portando unos pantalones negros y un abrigo con capucha largo con un estampado de rayas blancas y negras el cual, al estar abierto, dejaba ver su pecho. De pelo gris y una mirada intimidante dado a sus escleróticas oscuras e iris rojos, era con esos ojos con los que observaba lo que ocurría. Solo el líder sabía lo que pasaba por su cabeza en aquella secuencia. 

Mente del líder...

Falta muy poco, unos minutos más y nuestra misión tendrá éxito, pronto haremos pagar a Angel Dust por lo que le hizo a Sorbet y Gelato. 

Después de haberlos perdido trabajando para el jefe, el destino nos dio la oportunidad de reunirnos todos juntos aquí en el Infierno.

Solo unos meses más tarde volvimos a perderlos debido a esa araña chupa-vergas, fueron masacrados, balaceados durante un trabajo de intimidación. Ya había sido suficiente el ver sus cadáveres, Gelato había muerto asfixiado y por su mirada había presenciado algo horrible. 

Luego descubrimos cual había sido aquella visión, un día se nos entregó un treinta y seis paquetes, al juntarlos descubrimos el cadáver de Sorbet, el cual acabo diseccionado en paneles de formalina.

Aquello no quedaría impune, todos nosotros nos desvinculamos de la mafia en la que trabajábamos y decidimos vengarnos de nuestro antiguo jefe. Una venganza... que nunca llegó. Todos nosotros, nos habíamos reunido de nuevo en el Infierno. Pero prontamente nos volvieron a separar. Ahora solo falta vengarnos de Angel Dust... y empezaremos por ese mocoso.

Volviendo a la realidad... 

Los recuerdos del líder se vieron interrumpidos al ver la interacción del miembro de su grupo con el demonio del pelo afro. Parecía que el chico le estaba pidiendo que se llevara el vino mientras que su aliado insistía profusamente en dejar la bebida. Fue ahí que ocurrió... la mirada entre el líder y Mineta se cruzaron solo por unos segundos, segundos los cuales fueron claves para que el muchacho entendiera qué estaba pasando.

Conmoción y escándalo eran las palabras que describían la situación actual, un "mesero" molesto intentando persuadir a la joven pareja resultó ser un asesino encargado de matar a Mineta. La patada propinada al asesino lo mandó a volar lejos, lo suficiente como para que Mineta tirara su mesa para usarla de barricada y proteger a Via junto a su propio ser. 

El movimiento de demonios en el local no tardó en ocurrir, desde que se escuchó el primer disparo, el resto de la clientela salió corriendo. Pero mientras unos salían otros entraban en acción, los miembros de aquel grupo criminal se adentraron en el local y tumbaron las mesas para protegerse. La tensión se podía sentir en el aire, la cual fue cortada rápidamente por la voz del líder.

Líder: No queremos a la chica, solo a ti, si te entregas la dejaremos libre. 

Mineta: Hasta crees que nací ayer. 

Líder: Muy bien, te lo advertí. -finalizó haciendo un movimiento de manos para que dos aliados se acercaran- 

Mineta: Ni una cita tranquila puedo tener. -comentó por lo bajo mientras cargaba su pistola-

Via: ¿Tienes una pistola? -preguntó casi en un susurro- 

Mineta: Si algo aprendí de mi "mamá" es que siempre hay que ir con un arma. -dijo mientras observaba cuántos enemigos habían, siendo dos los que se aproximaban- Muy bien... hora de contar.

https://youtu.be/kFrMOAf-H6s

Via: ¿De contar? 

Mineta: Sí, de contar. Pase lo que pase no te muevas de este lugar. -dijo antes de tomar una buena bocanada de aire- Okay... máximo esfuerzo. -mencionó lanzándose al aire en un salto-

Con un movimiento acrobático el joven demonio se elevó rotando sobre su propio eje, disparando dos veces y con ello matando a dos enemigos, y sonrojando en el proceso a la princesa por sus habilidades.

Mineta: Dos menos, faltan 10. -dijo mientras le regalaba una sonrisa a Octavia-

El demonio salió corriendo mientras era balaceado gastando 3 balas de su cargador y provocando que sus atacantes se movilizaran a buscar mejor terreno, es decir, adentrándose en el restaurante para que los buscara.

Mineta: Mineta malo! -mencionó por lo bajo viendo como uno de los asesinos se acercaba al lugar de Via- 

???: ¡Di Molto! -comentó para sí mismo un demonio de pelo lacio y antifaz mientras apuntaba su arma con una sonrisa a Octavia- 

*PUM* 

El atacante de la princesa cayó al piso con un agujero de bala en el lado izquierdo de la cabeza.

Mineta: Mineta bueno. -dijo encogiéndose de hombros-

Octavia estaba impresionada, su pareja realmente se las estaba arreglando con todo este asunto.

El joven demonio se dirigió a la cocina, pero fue interceptado por otro miembro del grupo que portaba un rifle automático, el cual disparaba y destruía todo a su paso dejando las balas atascadas en las estructuras, obligando a Mineta a buscar refugio. 

El tirador no dejaría pasar esa gran oportunidad de matar al muchacho de una vez por todas. Saltó directo a la acción con una expresión de soberbia mientras veía al patético chico posando despreocupado, su último acto de "valentía": Aceptar su muerte. Apretó el gatillo esperando deleitarse con el baño de sangre, pero nada pasó, el por qué era simple: Había gastado su munición.

Mineta: Alguien no está contando sus balas. -comentó disparando a la cabeza al enemigo, matándolo en segundos- Quedan 8.

El joven demonio continuó su camino entrando a la cocina, la cual, entre los muebles y utensilios para la preparación de platillos, daban un entorno en el cual sería difícil de combatir. Un disparo dio a dar cerca de su cara, atravesando la ventana que daba hacia las mesas de los comensales y al mismo tiempo alertando al chico para que tomara cobertura.

???: ¡JODER! -gritó un demonio blanco con pelo celeste, intentando divisar a Mineta-

Mineta: Muy bien, supongo que es el momento. -comentó para sí mismo-

Mineta observó el reflejo que producía el metal de los estantes, su enemigo se acercaba con cuidado por su lado izquierdo. Tenía la ventaja, su contrincante le había perdido el rastro y podía atacarlo de sorpresa. Si intentaba un ataque directo, la reacción de su contrincante podría ser más rápida y por lo tanto fatal. 

Observó nuevamente el reflejo, había sartenes colgando a la distancia. Una idea había surgido, inhaló hondo y se preparó. Un disparo, un solo disparo que rebotó perfectamente en 3 sartenes y tomando el ángulo perfecto para atravesar a aquel asesino desde la nuca.

Mineta: Ese fue un tiro increíble!! ¡Y Moxxie se lo perdió! -dijo emocionado, listo para continuar con su carnicería-

El sonido de pisadas cercanas se hizo evidente para el chico. Salió en dirección a ellas, encontrando una escalera ascendente hacia la azotea. En su camino en ascenso, fue interrumpido por otros dos miembros más del grupo, siendo uno de ellos quien le sacaba la argolla a una granada. Mineta simplemente sonrió y disparó a Rossie, haciendo que la bala colisionara con el explosivo e hiciera su trabajo. Afortunadamente para Mineta, sus enemigos se encontraban lejos y la explosión no le había afectado.

Mineta: Okay, quedan 6. 

Cuando se disponía a bajar las escaleras, sintió un tirón, el cual se convirtió en un jalón que lo hizo atravesar la puerta hacia la azotea. Un lugar más amplio para pelear, pero... ¿Cómo había sido llevado hasta allí? 

???: Mataste a muchos de los nuestros, no puedo permitir que continúes. -mencionó un demonio haciendo acto de presencia-

Aquel demonio era de contextura atlética y esbelta, vistiendo un polo amarillo junto a calentadores de mano y zapatos haciendo juego. Encima del polo, portaba un abrigo largo de color negro, pero todo ello quedaba atrás debido a su cara. Tenía el cabello afeitado a excepción de unos cuantos mechones de cabello de color verde chillón y carecía de una barbilla. Si no fuera por su cara seria, Mineta se estaría riendo por comparar el rostro de aquel demonio con una piña.

Mineta tenía muy pocas balas y quería hacerlas valer. Estaba esperando observar qué arma usaría su contrincante. Su sorpresa fue grande cuando su oponente sacó de su manga una vara corta de color negro y detalles ornamentales blancos adornado con el cráneo de un reptil. Dicha varilla parecía tener unos anillos de metal en su estructura, los cuales sostenían un hilo rosa conectado al cráneo del animal de donde se desprendía. Al parecer tenía un mecanismo para retraer el cordel mediante una pequeña manivela, pero lo más importante de todo era lo que estaba atado al final del hilo... un anzuelo.

Mineta: ¿Eso es...?

???: Sí, es una caña de pescar. Lo llamo "Beach Boy". 

Mineta: ¿Tú también le pones nombres a tus armas? La mía se llama Rossie!

???: ¡Suficiente! Terminemos con esto de una vez!

Mineta: Siendo honesto, no te veo dañándome con... -comentó el joven demonio hasta que sintió un corte en su pierna izquierda, más exactamente en su pantorrilla-

Ahí estaba su pantalón blanco, rasgado y dejando a la vista una pequeña herida de la cual brotaba lentamente su negruzca sangre. 

???: No me subestimes niño. -respondió balanceando el anzuelo- 

Ambos se lanzaron al combate, Mineta tenía que asegurarse que todos los disparos que usara acertaran. No podía permitirse a que impactaran por suerte, tomó la decisión de combatir cuerpo a cuerpo y solo disparar cuando no hubiera margen de error. Durante su embestida le colocó el seguro a Rossie y se lanzó con una patada dirigida a la rodilla.

Grande fue su sorpresa al ver como el sedal de la caña se había enroscado a su pierna, la cual fue alzada más de la cuenta para que este cayera al suelo. Ya en el suelo, Mineta fue atacado por su enemigo mediante patadas en la cara las cuales bloqueaba con sus brazos. Aun así, eso no impidió que su contrincante intentara emplear una táctica sucia, aplicó un poco de fuerza para separar las piernas del chico y lanzar una patada directo a la entrepierna. Esta fue una oportunidad que no fue desperdiciada por Mineta, quien atrapó la pierna de su rival para tumbarlo de cara al suelo. Una vez conmocionado, el chico no perdió más tiempo y ejecutó una llave de sumisión para cortarle el suministro de aire a su atacante.

Mineta: ¡Se acabó, date por muerto! -afirmó el joven asesino- 

???: Sigue soñando. -respondió dando un potente cabezazo que aturdió a Mineta-

Con el demonio de traje blanco atontado, el asesino no tardó en poner la situación a su favor, lanzando hábilmente la cuerda de su caña constriñendo con ella los brazos y pecho del chico. Y para agregarle más dolor a la situación, logró que el anzuelo se aferrara a su piel en un sector descubierto de su pecho. La situación se había complicado mucho y se puso aún peor cuando el hilo restante se enroscó sobre su cuello, quitándole el aire poco a poco.

https://youtu.be/zlQfH4FNDiI

Loona se encontraba aburrida, después del cansado día que tuvo, lo primero que hizo al llegar a casa fue darse una ducha caliente para quitarse el sudor y las contracturas del cuerpo. Ya refrescada, se colocó su pijama para estar más cómoda. Un conjunto similar al que usualmente usaba solo que adornado con un estampado de lunas crecientes y menguantes.

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Después de una cena algo simplona, consistente en una sopa de fideos instantánea, la joven sabueso se tiró al acolchonado sofá para relajarse. Alguna serie de TV ayudaría con aquel cometido, pero para desgracia de la loba, todas ellas estaban dando capítulos repetidos o siendo interrumpidos cada cinco segundos por un comercial. Esto la sacó de quicio y decidió hacer otra cosa, una mucho más interesante... llamar a Nova y Gwen.

Desde que intercambiaron números de celular, más de una vez se habían contactado para charlar sobre su vida diaria o algo interesante que les pasó en el día. Justamente esperaba que dicha charla la entretuviera un poco antes de decidirse ir a dormir.Así que ni corta ni perezosa comenzó una llamada con ambas.

Loona: ¡Hola chicas! 

Gwen: ¡Hola Loony! 

Nova: ¡Hola a las dos! 

Loona: ¿Cómo estuvo su día? -preguntó recostándose para estar más cómoda-

Gwen: Ni te lo creerías, hoy tuve que atender a un tipo que se clavó una flecha en la pierna. Y mintió diciendo que lo atacó un indio. -expresó frustrada- 

Loona: Wow, qué idiota. 

Gwen: La mayoría de pacientes que entran al hospital por un accidente, ten por seguro que son unos idiotas. 

Loona: Yyy tienes algún plan para mañana?

Gwen: Pues Tex tiene planeado invitarme a un restaurante que abrió hace poco, "Il Calderone Infernale" creo que se llamaba.

Nova: Aww, suena romántico! -dijo emocionada por su amiga-

Loona: Mmm, ya veo ¿Y... qué hay de ti Nova? ¿Qué tal tu día hoy?

Nova: Pues... bastante interesante la verdad. –comentó risueña- Mineta vino a verme para un corte de pelo.

Loona: ¿Mineta? -preguntó confundida- 

Nova: Ajá... ¿Y? 

Loona: ¿"Y" qué? 

Nova: Vamos Loona, no te hagas. -dijo picaronamente- 

Loona: ¿Hacerme qué?

Nova: Vamos Loona, dilo de una vez ¿Cómo te fue en tu cita con Mineta? -mencionó empezando su interrogatorio-

Gwen: Uhhhhh! -expresó emocionada- 

Loona: ¡¿De qué me estás hablando Nova?! 

Nova: Pues Mineta se puso todo guapo para su cita de hoy chiquita ¿Cómo estuvo? -volvió a preguntar picaronamente-

Loona: Nova... ¡Mineta y yo no tuvimos una cita! -respondió enojada-

La expresión pícara y juguetona de la loba tatuada cambió inmediatamente a una de puro nerviosismo e incomodidad.

Nova: ... *interferencia* Chic... *interferencia* la seña... *interferencia* se cor... *interferencia*

Loona: ¡Nova estamos en una videollamada! ¡Puedo ver perfectamente cómo lo finges! -contestó colérica viendo como su amiga intentaba engañarla-

Con esa declaración, Nova simplemente se desconectó de aquella llamada dejando a sus dos amigas a solas. 

Gwen: ¿Por qué te pones así? Ni siquiera es tu novio. 

Loona: No, pero es mi amigo, él me habría dicho si iba a tener una cita.

Gwen: Ya... eso o estás molesta de que esa cita no sea contigo. 

Loona: Tch, para nada! Mineta puede hacer lo que quiera. 

Gwen: Ajá... -pronunció no muy convencida- Bueno Loona, tengo que dejarte, tengo que trabajar y estar linda para mi cita con Tex. Descansa. 

Loona: Okey, descansa tú también Gwen, hablamos mañana.

Con la llamada finalizada, Loona se levantó del sofá y simplemente se acostó en su cama mientras abrazaba una almohada para poder dormir. Pero varias preguntas se mantuvieron rondando y azotando su cabeza ¿Por qué Mineta no le había contado que tendría una cita? ¿Con quién sería la cita? Y ¿Por qué no la consideró para invitarla a una?

De regreso con Mineta...

El chico forcejeaba como podía, pero parecía imposible zafarse del agarre de aquel hilo y de la fuerza de su enemigo. Fue así que aplicó más fuerza para poder liberarse, Octavia estaba sola y no sabía cuántos enemigos más seguían vivos, tenía que apresurarse.

El joven demonio simplemente forzó sus músculos... podía sentirlo. Podía sentir como crecían y debido a ello el hilo de la caña lo apretaba aún más. Pero todo tiene su límite y aquel sedal lo había alcanzado. Con un fino y rápido sonido se rompió liberando a Mineta al mismo tiempo que dejaba impactado de la impresión a su oponente.

???: ¡Imposible! -comentó sorprendido- 

Mineta: ¡Nada es imposible! -respondió tomando un extremo de aquel cordel, para atrapar con él a su antiguo captor y colocarlo en la misma posición en la que él estaba antes-

Cuatro disparos se escucharon en la azotea, Mineta no se iba a permitir que su atacante escapara o intentara volver a tomar ventaja, por lo que disparó dos balas en cada una de sus rodillas y otras dos en cada mano. Ahora su enemigo se encontraba atado de brazos mientras su pecho y cuello eran comprimidos por el cordel de su propia "arma". Estaba completamente inmovilizado y podía sentir como el aire ya no podía alcanzar sus pulmones.

Mineta: ¡Dime tu nombre! -exigió el joven demonio mientras ajustaba aún más la cuerda en el cuello de su enemigo- 

???: Pes...ci -respondió entrecortado- 

Mineta: Bien Pesci, me diste una buena pelea. Por eso no olvidaré tu nombre. -finalizó dando un fuerte tirón-

Con aquel tirón, Mineta había acabado con la vida de su enemigo. Tenía que admitirlo, jamás se sintió tan agitado y nunca pensó tener que inmovilizar a un enemigo para luego poder dejarlo inmovilizado completamente. Si Ojiro lo había entretenido durante un buen tiempo, este chico Pesci lo superaba con creces, prácticamente había salido de aquella situación con suerte.

Antes de irse observó la caña de pescar de su contrincante, era bizarra en el buen sentido. Contrajo el artefacto y lo guardó dentro de sus prendas, un souvenir de una pelea que recordaría el resto de su vida... o por lo menos durante unas semanas. Era momento de bajar y reencontrarse con Octavia, sentía su cuerpo entumecido, como si aquella corta pelea lo hubiera desgastado más de la cuenta.

Aun así, descendió por las escaleras, lentamente y manteniéndose en silencio para mantenerse en sigilo. En unos minutos llegó y se acomodó junto a Via. Estaba agradecido que no la hubieran encontrado pero aquella tranquilidad no duraría mucho cuando una bala atravesó la mesa que servía de protección. Reaccionando rápidamente, tomó a la princesa en sus brazos y corrió en busca de una nueva cobertura más resistente, la cual fue detrás de una pequeña pared.

Tres eran los enemigos que lo atacaban, el primero era un demonio de altura media de pelo corto, prácticamente rapado, vistiendo una camisa de malla roja junto a calentadores en sus brazos y una chaqueta de cuero verde adornada con clavos y unos jeans haciendo juego. El segundo parecía levemente más alto que el primero, llevaba un cabello atado en seis coletas y vestía un chaleco blanco de mangas largas con pantalón a juego, zapatos oscuros y puños de metal en las mangas. Junto a un conjunto de rodilleras y coderas sumado a un cinturón de hebilla cuadrada. El tercero y último de todos era el más formal y alto del trio. De pelo corto y rubio atado en tres esteras en la parte posterior, vestía un traje amarillo con un diseño similar a una telaraña y debajo de este una camisa de colores oscuros y alrededor de su cuello un colgante estilizado de color blanco.

Sus apariencias se quedarían grabadas en la mente de Mineta una vez terminado su trabajo, lo principal ahora era terminar con la amenaza. Cuando el trio se estaba acercando, saltó acrobáticamente sobre aquella pared disparando su arma, una bala y tres muertos, en resumen, un disparo perfecto. 

Todo había terminado, el chico se acercó a su cita y le extendió la mano tranquilizándola con una sonrisa. El lugar estaba hecho un desastre: Escombros, casquillos de balas y madera destruida por todas partes. Ya era hora que ambos salieran de aquel lugar, si no fuera porque un estruendo se escuchó detrás de la pareja... un disparo. Uno que le había dado a Mineta en la parte baja del abdomen haciéndolo caer del dolor.

Mineta: ¡HIJO DE PERRA! -dijo con furia y dolor mezclado- 

Via solo intentaba parar el sangrado, se sentía impotente mientras el perpetrador del disparo se acercaba lentamente a ellos. 

???: Eres un hijo de puta muy duro de matar. -comentó acercándose- 

Era él, el líder del grupo, haciendo acto de presencia a último momento. Él conocía a Angel Dust y de lo que era capaz, pero no se esperaba lo mismo de aquel chico, quien le había dado pelea a todo su grupo con relativa facilidad.

???: Buenas noches. -mencionó sin expresión alguna apuntándole con su revólver-

Un disparo, otro de los tantos de aquella noche, el cual había cobrado otra víctima... al líder de la banda. Mineta estaba muy adolorido en aquel momento, por lo que no pudo jalar el gatillo, ni siquiera apuntar. Había sido la misma princesa, la cual queriendo proteger a su acompañante le quitó el arma, apuntó y disparó directo al corazón del atacante. Su cuerpo cayó pesadamente en el suelo, muerto al instante.

Ahora sí, todo había acabado. Octavia se alejó por un momento de Mineta, tomó dos servilletas de tela del suelo y uso una para parar el sangrado de la herida de su cita. Como pudo lo ayudó a levantarse y salir del lugar de manera lenta para no empeorar la herida del chico. 

Mineta: ¿Alguna vez te han dicho que eres increíble? -preguntó a la princesa-

Su cita simplemente dejó escapar una risita junto a un sonrojo, eso era lo único que Mineta necesitaba para estar más calmado y alegre. Los dos habían llegado al auto del chico, después de todo lo ocurrido esa noche era momento de llevar a Octavia a su casa y dejarla descansar al igual que él. 

Aquel momento de tranquilidad se vio interrumpido por la presencia de un tercero que llamó la atención mediando un chiflido dedicado a la princesa. 

Mineta: Via, me... 

Octavia: No tienes que decírmelo. -comentó metiéndose en el auto, en el asiento del copiloto-

Mineta: Escúchame bien, esta noche ha sido muy complicada y lo último que me falta es que un idiota venga a arruinarlo aún más. 

???: ¿Qué ocurre? ¿No te sientes capaz de proteger a alguien como ella? 

Mineta: Soy completamente capaz. 

???: Oh vamos! Sabes bien que debería estar con alguien mejor... como yo por ejemplo. 

Mineta: ¿Puedes predecir el futuro? 

???: Ehh? -expresó confundido-

Mineta: Porque yo sí, y pude verte a ti tumbado en el suelo. -mencionó lanzando un derechazo que dejó tieso al demonio- 

Con esta acción, Mineta se subió algo adolorido a su auto.

El muchacho manejó como pudo hasta el palacio Goetia, con sumo dolor, pero aguantándolo con toda la voluntad que tenía en su ser. Finalmente habían llegado, como pudo salió del auto e intentó abrir la puerta del lado de Octavia quien se había adelantado a dicha acción. 

Mineta: Hey! Yo debería abrirte la puerta. -comentó en tono sarcástico pero sin intención de insultarla- 

Octavia: Acabas de salvarme la vida, además estás herido, es lo menos que puedo hacer. -dijo bajándose del auto-

Mineta: Bueno aquí estamos. Te acompaño hasta la puerta. -mencionó empezando a caminar junto a la princesa- Lamento que... tu primera cita haya sido un asco. -expresó algo decepcionado de como se había desarrollado la cena- 

Octavia: ¿Estás bromeando? ¡Fue la mejor primera cita de mi vida! -respondió aferrándose al brazo izquierdo del demonio- 

Mineta: ¿Lo dices en serio? -preguntó confundido, realmente no se esperaba una respuesta así-

Octavia: Lo digo totalmente en serio. -respondió apegándose un poco más al chico- Viniste a buscarme en auto, tuvimos una caminata por el parque, una cena romántica y para terminar te luciste matando a esos tipos.

Mineta: No fui el único. 

Octavia: Cierto, cierto. -dijo con una risilla debido al comentario- Realmente sabes cómo sorprenderme, superaste todas mis expectativas.

Mineta: Wow! No me esperaba eso. Me gusta escuchar eso de ti Via. -comentó sonrojándose- Bueno aquí termina la cita. -dijo viendo la puerta del palacio frente a él- 

Octavia: Gracias por todo Mineta, en serio me divertí esta noche. -contestó abrazándolo- 

Mineta: Lo mismo digo Via, lo mismo digo. -dijo correspondiendo el abrazo-

Aquel abrazo fue interrumpido por la repentina apertura de la entrada, dejando a la vista la figura de Stolas

Stolas: ¿Interrumpo algo? -preguntó alzando una ceja ante la escena-

Mineta: Eee... ¡Para nada... señor! -respondió nerviosamente, esperando que su majestad no descubriera lo que estaba pasando-

Stola: Okay... -dijo observando su entorno- Y... ¿Dónde está tu cita, Via? Me gustaría tener una pequeña plática con él. -comentó esta vez con un tono de voz más molesto- 

Octavia: Se fue... cuando todo se complicó. -comentó con una expresión cansada-

Stolas: ¿A qué te refieres con "se complicó"? -preguntó nuevamente, esta vez dándole importancia a lo dicho por su hija- 

Octavia: Papá... ya es algo tarde, te lo contaré mañana. -respondió cansada de la situación-

Stolas: Está bien, me prepararé para dormir. Te agradezco que hayas cuidado de mi hija, Mineta. -agradeció el príncipe-

Mineta: Ni lo mencione señor. 

Con aquellas palabras el príncipe se retiró dejando a los dos jóvenes solos nuevamente. 

Mineta: Pues... yo ya me... -mencionó a punto de partir, siendo interrumpido en su accionar-

La princesa lo agarró del brazo evitando que escapara, no podía dejarlo ir después de todo lo que había pasado. Lo acercó rápidamente y le dio un beso en la mejilla, Mineta simplemente la vio fijamente con su boca ligeramente abierta demostrando su asombro por el gesto. 

Octavia: Un regalito de mi parte, espero la segunda cita pronto. 

Mineta: Entonces... la estaré planeando desde ya. -dijo sonrojándose y mostrando una gran sonrisa en su rostro-

Octavia: Y yo estaré esperando la invitación. -respondió con picardía- Que duermas bien Mineta, espero sueñes conmigo. -comentó dándole una mirada seductora- 

Mineta: No tengas dudas de que lo haré. Y espero que tú hagas lo mismo. -mencionó con una actitud picaresca- 

Octavia: Dalo por hecho, buenas noches. -dijo lanzándole un beso que Mineta atrapó en el aire-

Con esta última acción por parte de la chica, la joven pareja tomó rumbos separados.

Con Octavia: 

La joven búho entró a su hogar, se dio un baño rápido, se puso su pijama consistente en una blusa negra de mangas cortas con una estrella rosa estampada y se acostó en su cama dispuesta a dormir... sin embargo, en su cabeza apareció inmediatamente la imagen de Mineta sonriente y elegantemente vestido. Recordó también que después del tiroteo en el restaurante, tuvo que levantar un poco el saco y la camisa de Mineta para atender su herida, dejando a la vista sus bien trabajados (aunque con margen de mejora) abdominales, y esa maravillosa vista le impedía conciliar el sueño.

La unigénita de los Goetia se levantó rápidamente de la cama y buscó un libro en un mueble de su habitación, tal vez leer un poco la ayudaría a dormir. Sin embargo, al abrir la primera página obtuvo el mismo resultado, lo único que sus ojos veían era el alegre rostro de Mineta en compañía de su zona abdominal.

Octavia: Maldita sea, a donde sea que mire veo su cara... -murmuró abrazando el libro- Ya lo extraño. -finalizó cerrando sus ojos firmemente decidida a dormir-

Con Mineta:

Eran alrededor de las 11:30 PM cuando nuestro pervertido protagonista pudo llegar a su hogar, estacionó su auto en frente del edificio en el que vivía con Moxxie y Millie y entro al ascensor del mismo.

Cuando Mineta se encontraba frente a la puerta de su departamento decidió abrirla con sumo cuidado, si bien sus "padres" vivían en el piso superior, no quería molestarlos abriendo y cerrando la puerta estrepitosamente.

Con lo que Mineta no contaba, era con encontrarse a Millie sentada en el sofá apenas encendió la luz de su departamento. La mirada usualmente alegre de la demonio era reemplazada por una mirada un poco más seria. No habían dudas: Mineta estaba en problemas.

Mineta: Ah! Oh, ho-hola Millie, q-qué haces en mi departamento? -preguntó algo nervioso por la mirada de su "mami"-

Millie: Por qué llegaste tan tarde? -preguntó manteniendo su expresión-

Mineta: Estoooo, me quedé entrenado con Moxxie, tú sabes, para afinar un poco la puntería. -dijo intentando mantener la calma, fracasando miserablemente-

En ese momento, una silla giratoria sacada de Dios sabrá dónde dio media vuelta, revelando al diablillo pecoso.

Moxxie: Quieres intentarlo otra vez? -preguntó con obvio sarcasmo mientras apoyaba su mentón sobre sus manos entrelazadas-

https://youtu.be/3a-aV5mMqX8

Mineta: .... Chale ya la cagué verdad? Okey, les diré... -dijo haciendo una pequeña pausa- Tuve una cita con Octavia.

Moxxie: QUÉ!? -exclamó sorprendido y orgulloso por su "engendro"-

Millie: YIJAAA!!! ASÍ SE HACE MINETA!!! -exclamó eufórica abrazando a su "pequeño"-

Mineta: Agh! -chilló quejándose del dolor, el cariñoso abrazo de la fémina abarcó la zona afectada por el disparo que recibió en su cita-

Millie: Per... dón. -dijo mientras notaba la herida en el abdomen de Mineta- OH POR SATÁN QUÉ TE PASÓ MINETA!!? -gritó ahora completamente preocupada-

Mineta: Unos tipos que querían matarme aparecieron en el restaurante al que fuimos, así que los maté a ellos, pero el que creo que era su jefe me agarró con la guardia baja y pues... me disparó. -respondió mientras se quitaba el saco y levantaba un poco su camisa, dejando a la vista la herida- Via intentó frenar el sangrado con unas servilletas pero creo que sería bueno darle un tratamiento apropiado a esta herida. -finalizó señalando el disparo en cuestión-

Moxxie: Iré por el botiquín. -dijo retirándose temporalmente de la escena-

Millie: Quién va a querer ver muerto a mi bebé?? -preguntó mientras abrazaba la cabeza de Mineta sobre su pecho y acariciaba su cabello-

Mineta: Eso es justamente lo que pienso averiguar mami. -dijo con determinación- Mañana es nuestro día libre así que tendré tiempo de hacer unas cuantas llamadas e investigarlo, por lo menos para quitarme esa duda.

Moxxie: Me gusta tu determinación para buscar información de los responsables de estropear tu cita. Pero por ahora, atendamos esa herida. -dijo depositando el botiquín de primeros auxilios sobre la mesa-

Mineta: Tienes razón. -dijo abriendo su camisa morada para quitársela y darle más espacio para trabajar a su "papá"-

Moxxie: Bien, el tiro fue en tu costado, así que no debió tocar ninguna zona vital... creo que con unas gasas, cinta adhesiva y vendas para rematar estarás bien. -dijo mientras revisaba la herida-Es un lindo traje. -dijo examinando la indumentaria de Mineta, la cual por se encontraba un poco agujereada y manchada de sangre debido al tiroteo- Sería un crimen dejarlo así como está.

Mineta: La verdad es que sí ¿Conoces a un buen sastre que pueda arreglAAAHAAAHAAAAYY!!!!

La interrupción en la interrogante tenía una simple y más que entendible explicación: Millie había extraído la bala del abdomen de Mineta con unas pinzas, provocándole gran dolor al chico.

Moxxie: Bien, ahora vamos a desinfectar el área de la herida. -dijo hurgando en el botiquín hasta encontrar un poco de algodón, otro par de pinzas y una pequeña botella plástica llena de un líquido transparente-

Mineta: Agh... -expresó manifestando fastidio, como sabiendo lo que vendría a continuación-

Moxxie: Sí, te aviso que puede arder un poco.

Mineta: Y que lo digas, tampoco es la primera vez que me desinfectan una herida con alcohol, pero no por eso deja de ser fastidioso.

Mllie: Te entiendo Mineta, pero toma esto! -dijo pasándole una almohada- Si te molesta, trata de rasguñar a la almohada y no mi brazo! -finalizó con tono juguetón-

Mineta: Okey!

Con esta interacción, Moxxie empezó a frotar el algodón empapado de alcohol antiséptico alrededor de la zona del balazo de su "criatura", y tal y como previó, Mineta sufrió de un leve ardor en toda la zona circundante a su herida, arañando suavemente la almohada para liberar su desesperación por el escozor. Luego de eso, esperaron unos cuantos segundos esperando a que el alcohol se secara e hiciera efecto.

Después de la desinfección, Moxxie colocó un parche de gasa sobre la herida y lo aseguró con un poco de cinta adhesiva gruesa y varias vendas. Eso debería bastar para atender más "profesionalmente" la herida.

Moxxie: Bueno, ya quedó. Trata de no hacer cosas que requieran demasiado esfuerzo, ok?

Mineta: Haré lo que pueda. -dijo mientras soltaba un bostezo- Bueno, es algo tarde así que mejor nos vamos a dormir, tienen planes mañana?

Millie: Pues la verdad es que no, pero seguro se nos ocurre algo, verdad amor?

Moxxie: Tú sabes que sí. -respondió regalándole una sonrisa a su esposa-

Mineta: Bueno, buenas noches chicos, que duerman bien.

Moxxie: Buenas noches Mineta. -dijo mientras se dirigía a la puerta del departamento-

Millie: Descansa mijito. -respondió acompañando a su esposo a la salida-

Cuando sus "padres" abandonaron el departamento, Mineta se quitó los pantalones y se puso unos shorts morados. Luego de eso y para no empeorar más su herida, se acostó cuidadosamente en su cama dispuesto a gozar de una relajante noche de sueño después de un día tan agitado... o al menos esa era la idea, ya que apenas cerró sus ojos recordó algo que sucedió en su cita con Via:
Cuando corrió con la chica en sus brazos para buscar una nueva cobertura y protegerse del ataque de los tres miembros restantes del grupo (excluyendo al líder) que eventualmente serían liquidados acrobática y espectacularmente por Mineta, no sé fijó bien debido a la adrenalina del momento y una de sus manos... estaba tocándole un pecho a Octavia.

Si bien Mineta no lo hizo con malas intenciones (a diferencia de cómo posiblemente lo hubiera hecho estando vivo), tampoco puede decir que no le gustó, pero igual no fue impedimento para que la piel de Mineta, ya de por sí roja, se tornara de un tono casi fosforescente debido a la pena que sintió al recordar eso ¿Octavia se habría dado cuenta? ¿Le contará a su padre sobre eso?

Mineta sólo se limitó a colocar la almohada sobre su cabeza y dejar salir su vergüenza con un grito ahogado.

Mineta (amortiguado por la almohada):

https://youtu.be/hK20d1hWnqE

Unas horas más tarde...

La claridad de la mañana se colaba por la ventana de nuestro protagonista, el cual cerraba fuertemente sus ojos para evitar ser molestado, pero aquella acción no pude ser tan efectiva como quería.

Se resignó a levantarse, se dio una ducha junto a un cambio de vendaje y luego fue directo a desayunar. Decidió hacerse algo sencillo, unas tostadas con mantequilla junto a un vaso de jugo de naranja. Aquel desayuno era de lo más silencioso, lo suficiente como para que el muchacho pudiera mantenerse tranquilo y poder pensar tranquilamente... hasta que sus vecinos de arriba (o sea sus "padres") comenzaran a hacer el amor.

Con una cara de desagrado, limpio rápidamente el plato y vaso que utilizó para luego partir con su auto al Hazbin Hotel en busca de algo de información sobre lo sucedido ayer. No tenía apuro, era domingo por la mañana y su herida reciente tampoco le iba a permitir que se moviera de manera brusca. Durante su trayecto había recibido una llamada de su amigo Vortex, con el cual conversó hasta que tocó cierto tema:

Mineta: Yyyy entonces, tienes algún plan para hoy bro?

Vortex: Bueno, los tenía. -respondió algo frustrado-

Mineta: Por qué? Qué pasó? 

Vortex: Había hecho una reservación en un restaurante que abrió hace poco llamado "Il Calderone Infernale", parecía un sitio elegante y romántico y había invitado a Gwen a cenar ahí... pero aparentemente anoche hubo un tiroteo ahí y todavía están arreglando el desastre. -explicó el sabueso-

Mineta: .... Oh. -respondió algo apenado-

Vortex: Pasa algo Mineta?

Mineta: Sí, digamos que... tuve que ver en ese tiroteo. Estaba en una cita con Octavia hasta que unos hijos de puta que querían matarme aparecieron, así que yo los maté a ellos pero recibí un disparo en el abdomen.

Vortex: Mierda, ta fuerte el asunto, lamento que tu cita se arruinara viejo.

Mineta: Nah tranquilo, dentro de todo la cosa salió bien, Via se divirtió y la verdad, yo también. Más bien debería ser yo el que te debería pedir disculpas por arruinar tus planes con Gwen, si encuentro la forma de compersártelo, ten por seguro que lo haré.

Vortex: No te preocupes por eso Mineta, al menos los hijos de la chingada de "Il Calderone" tuvieron las bolas de hacerme un reembolso, ya pensaré cómo puedo usar el dinero.

Mineta: Ya, menos mal... oye, no sé si ayude pero mientras buscaba restaurantes a los que ir en mi cita me pareció ver uno de comida china llamado "Los Cuatro Dragones", estaba a punto de escoger ese pero en el momento pensé que un restaurante italiano sería más especial para una primera cita.

Vortex: Sí, "Los Cuatro Dragones" me suena, creo que fue ese el mismo restaurante al que fui con Gwen antes de que las cosas se pusieran... picantes entre nosotros.

Mineta: Y por qué no repetir eso? Tal vez romper un poco con esa rutina romántica ayude a... avivar un poco el fuego.

Vortex: Oye, buena idea! Gracias Mineta, eres un pinche genio! Seguro que nunca has tenido novia antes?

Mineta: .... Absolutamente seguro. -respondió mientras en su cabeza sonaba "Boulevard of Broken Dreams"- Bueno, tengo que colgar bro, hablamos en otro momento.

Vortex: Vale, nos vemos Mineta, recupérate pronto.

Con ello la conversación terminó con el tiempo justo, debido a que Mineta estaba llegando al hotel. Estacionó su auto y entró al edificio, no parecía haber nadie en el vestíbulo, cosa rara teniendo en cuenta el lugar. Mineta simplemente entró teniendo cuidado, esto estaba muy raro, demasiado

De un momento a otro, fue tacleado por algo pequeño: Era Niffty, quien había saltado para recibirlo y felicitarlo por su logro de anoche. Mineta la miró confundido por el comentario cuando algo más grande lo tacleó nuevamente, esta vez era Angel Dust que había llegado con las mismas intenciones que la pequeña demonio.

Angel: ¡Finalmente llegas animal! ¡Felicidades por tu estreno de anoche! -comentó abrazándolo y alzándolo en el aire- 

Mineta: ¿A qué te refieres? -preguntó confundido- 

Angel: No te hagas. Realmente no me esperaba que te lanzaras tan rápido a eso en la primera cita pero supongo que no hay problema si ella también se prestó a eso.

Mineta: En serio Angel, no te entiendo nada ¿De qué hablas?

Fue en ese momento en que aparecieron Alastor, Charlie y Vaggie. El primero portando esa sonrisa socarrona propia de él, Charlie con un rubor en su cara y tratando de no ver directamente a los ojos al chico mientras que Vaggie tenía una cara amargada y de desagrado, aunque fácilmente podría confundirla con su típica expresión amargada de siempre.

Mineta: Hola chicos. -dijo siendo dejado en el piso por el prostituto arácnido- ¿Cómo los trata la vida? 

Alastor: ¿Mejor que tú? Lo dudo muchacho. -expresó el demonio radio- Vaggie ya nos contó todo.

Vaggie: No puedo creer que ambos hayan hecho una cosa así, y en un restaurante. -comentó disgustada-

Mineta: Lo preguntaré de nuevo... ¡¿A QUÉ SE REFIEREN?! -cuestionó con notable enojo-

Vaggie: ¡Vi lo que ella te estaba haciendo! ¡Fue asqueroso! -replicó la chica, con furia y asco-

Mineta: ¡Ella solo me estaba curando del disparo que me dieron! -dijo mostrando su vendaje el cual empezaba a mancharse un poco con su sangre- ¡¿Qué tiene eso de malo!?

Vaggie: ... ¿Ella qué? -preguntó desorientada por la respuesta dada-

Mineta: Ella me estaba curando una herida, unos malnacidos aparecieron y empezaron a dispararnos ¿Qué creías que me estaba haciendo? -preguntó el chico-

Vaggie: Eeeeh pues, yo pensaba que... bueno, esa posición en la que estaban y tus gritos de niña no ayudaron en nada...

Mineta: ¿Posición? ¿Gritos de niña?... Laputamadre Vaggie, pensabas que me lo estaba chupando!? Y dicen que el mente sucia soy yo!

Angel: Entonces... ¿Todo fue una mentira? 

Alastor: Así es mi afeminado amigo. 

Angel: Me emocioné para nada. -comentó decepcionado-

Mineta: Okay, basta de todo esto. -declaró el chico, dándole un paro a todo lo que pasaba- Vine aquí en busca de información sobre los bastardos que me atacaron a mí y a Octavia. 

Alastor: ¿Alguna pista con la que podamos empezar?

Mineta: Mmm... pues había un tipo llamado Pesci, fue el único que me dio problemas. -contestó mostrando respeto por el mencionado-

Angel: ¿Pesci? Ese nombre me suena. -dijo empezando a pensar- 

Vaggie: ¿Por qué no me sorprende a estas alturas? -dijo con sarcasmo-

Angel: Ya recuerdo! -respondió exhaltado- Ese tipo y su grupo pertenecían a ANO. Seguro quisieron vengarse porque mate a esos jotos de Sorbet y Gelato.

Mineta simplemente lo miró extrañado por unos instantes.

Angel: ¿Qué? -preguntó viendo a Mineta-

Mineta: ¿En serio tienes derecho a llamarlos así? 

Angel: Sí, yo también soy joto después de todo. Además, esos dos siempre estaban juntos, eran como uña y mugre.

Niffty: Pero no entiendo ¿Qué tiene que ver Mineta en todo esto? 

Alastor: Simple, Niffty querida. -dijo acariciándole la cabeza- Es obvio que esos tipos querían muerto a Mineta para obligar a Angel a salir.

Angel: ¡Ah, conque esas tenemos! Ya fue! ¿Cuántos quedan Mineta? Dime y acabaré con ellos!

Mineta: Ninguno, los maté a todos. 

Angel: ¿Lo dices en serio?

Mineta: Después de casi cagarme mi primera cita ¿Tú crees que los dejaría vivos?

Angel: Eh, buen punto.

Mineta: ¿Eran extranjeros? Lo pregunto por su acento. 

Angel: Creo que eran italianos, de Venezia.

Mineta: Querrás decir Venecia.

Angel: Eso dije, Venezia. 

Mineta: Se dice Venecia. 

Angel: Venezia. 

Mineta: Venecia! -respondió empezando a desesperarse-

Charlie: ¿Por qué mejor no continuamos con esta conversación con una taza de té y galletas? -preguntó algo cansada por la ridícula discusión, aunque conservando una sonrisa de oreja a oreja en su rostro- 

Mineta/Angel: ¡Estoy de acuerdo! -contestaron al unísono- 

Fue así que el resto del día Mineta se tomó el tiempo para convivir con sus amigos del hotel, ya que debido a su trabajo no tenía mucho tiempo para visitarlos.

En cierto punto del día, el grupo de amigos decidió ver una película, una la cual Alastor estaba disfrutando de sobremanera, ya que no paraba de reírse como pinche loco desquiciado.

Alastor: Oh vaya, esta película es de lo más entretenida! -comentó secándose una pequeña lágrima por tanto reír- ¿Cómo decían que se llamaba?

Mineta: Bambi... -comentó hecho un mar de lágrimas, al igual que el resto de la pandilla-

Y así como comenzó, el día domingo había terminado, Mineta se la había pasado conversando con los chicos del hotel sobre la cita que había tenido, tomando té y galletas, mientras preguntaba sobre las actividades que tuvieron durante la semana. Por parte del joven demonio, este disfrutó amenamente la conversación, era agradable tomarse un tiempo libre en un lugar que le daba una gran sensación de paz y deshacerse del estrés semanal de hacer su trabajo. Trabajo el cual decidió no compartir con sus amigos, al menos para no decepcionar a Charlie.

Lunes -8:00 AM-

Mineta se despertaba con la alarma de su celular, como pudo logró conciliar el sueño la noche anterior. Fue prácticamente un milagro que pudiera dormir debido a la extensa actividad de sus padres en el piso de arriba. Se dio una ducha rápida, desayunó una magdalena junto a una taza de café y partió directo a las oficinas de IMP acompañado por Moxxie y Millie.

Todo parecía normal en la oficina hasta que Blitz hizo acto de presencia, acomodando su traje y viendo a sus empleados. 

Blitzo: ¡Muy bien muchachos! Hoy tenemos un día muy largo por delante, así que demos todo lo que tenemos. 

Mineta: Ya rugió jefe. -dijo listo para partir junto a ellos, siendo frenado en el acto- 

Blitzo: Excepto tú Mineta, Millie ya me comentó lo que sucedió. Así que te quedarás acá y ayudarás a Loona con el papeleo. 

Mineta: ¡Pero jefe! -expresó decepcionado- 

Blitzo: Nada de peros, te quiero al 100% la próxima vez que te mande a una misión. Te quedas aquí haciendo el papeleo.

Mineta: Bien. -comentó resignado- 

Blitz: M&M, vayan preparándose, nos vamos en unos minutos. 

La pareja de demonios asintió ante lo indicado y empezaron a preparar sus cosas para la misión. Mientras tanto nuestro demonio protagonista se recostaba en el sofá reclinando la cabeza hacia atrás, su "padre" se acercó a él con intenciones de hablar. Éste cargaba en sus manos un paquete blanco, rectangular y achatado con el cual tocó el pecho de su hijo para llamar su atención.

Moxxie: ¡Aquí tienes! Sería muy malo que perdieras un conjunto como ese. 

Mineta simplemente abrió la caja para ver su traje blanco limpio y sin ningún rasguño, parecía haber sido reparado por arte de magia. 

Mineta: ¡Wow! ¡Quedó como nuevo! No sabía que Millie sabia coser! -comentó asombrado por descubrir otra habilidad de su "madre"-

Moxxie: No lo hace, yo lo reparé. -respondió simplemente apartando la mirada avergonzado-

Mineta simplemente alzo una ceja viendo fijamente a su padre. No se esperaba una respuesta así, pero... ¿Quién era él para juzgar al tipo que lo trataba como si fuera de su propia sangre?

Moxxie: Aquí entre nos. -dijo acercándose al chico para poder hablarle al oído- Millie pues... no es muy buena en lo que se refiere a costura.

Los dos simplemente vieron a la demonio pasar en frente de ellos cargando con armas de fuego y armas blancas. En ese momento la fémina paró para tomarse una lata de refresco, la cual le provocó un sonoro eructo que no trató en disimular u ocultar. Para cualquiera que viera esa escena llegaría a la misma conclusión: Aquella diablilla no era para nada femenina. Pero, aun así, tanto para Moxxie como para Mineta, ese era el encanto de Millie, uno el cual lograba sacarles una sonrisa a ambos. Ninguno de ellos la cambiaría por nada en el mundo, ella era perfecta a su manera.

Con aquella pequeña plática, Moxxie se despidió y se fue junto a su esposa a hacer el primer encargo del día. Así había iniciado la primera hora de aburrimiento para Mineta, quien ayudó como pudo a su peluda compañera, la cual parecía no tener la intención de querer hablar con él en lo más mínimo. 

Lo primero que pensó Mineta fue que era algo normal debido a su actitud desinteresada, pero pronto descartó aquel pensamiento debido a que ella misma se esforzaba en hablarle lo menos posible.

Mineta: *sigh* Muy bien ¿Qué ocurre? -preguntó cansado del silencio incómodo entre ambos- 

Loona: ¿De qué hablas? -respondió de manera monótona-

Mineta: Sé que no quieres hablarme Loona ¿Quieres decirme por qué? 

Loona: Tú ya sabes por qué. -respondió alzando un poco su tono de voz-

Mineta: Vamos Loona, mírame a la cara y dime lo que te molesta. -dijo de manera calmada pero mostrando su descontento por la respuesta de su compañera- 

Loona: ¿Quieres saber por qué estoy molesta? Porque al parecer soy la única que no sabía que TENDRÍAS UNA CITA! -finalizó gritando lo último-

Mineta: Se suponía que nadie debía saber, era una sorpresa. -comentó frotándose la nuca con uno de sus brazos- 

Loona: Pues el "nadie" no debería incluirme a mí ¡Somos amigos Mineta! ¿¡Por qué no me lo contaste!? -preguntó prácticamente exigiendo una respuesta-

Mineta: Como dije, se suponía que debía ser una sorpresa, además... iba a pedirte ayuda, créeme que sí. Pero vi por Impstagram que estabas con Nova y Gwen viendo unas pelis, no quería interrumpirte. 

Esta era una nueva visión para Mineta, al parecer su amiga Loona confiaba más en él de lo que pensaba. Con solo ver su reacción exagerada por una simple cita, no quería saber que podría ocurrir en alguna otra situación.

Loona: Aun así, me debes las molestias. -comentó ofendida y de brazos cruzados- 

Mineta: Vale, vete al sofá te lo compensare ahí. 

Loona: ¡¿QUÉ?! 

Mineta: ¿Qué de qué? Ve al sofá de una vez, quieres?

Loona estaba nerviosa ¿En serio Mineta planeaba hacer algo con ella en plena oficina? Ella simplemente se sentó, viendo como el demonio se colocaba detrás de ella. El simple hecho de saber que Mineta se encontraba detrás y tan cerca, hacía que su rostro se enrojeciera, algo que para fortuna suya, Mineta no notó. 

Para sorpresa de la loba, Mineta la agarró suavemente de una de sus orejas y empezó a acariciarla, estaba decidida a rechistar, pero no podía moverse, sus músculos no respondían por la gran relajación y satisfacción que le provocaba ser acariciada en esa zona.

Cuando las caricias disminuyeron, Mineta simplemente abrazó a Loona por la espalda. 

Mineta: La próxima vez serás la primera en enterarte. -dijo manteniendo el abrazo-

Loona: Que así sea... lo siento por... gritarte. -respondió disculpándose-

Mineta: Acepto tus disculpas. -comentó manteniendo el abrazo entre ambos- Oye, Loona...

Loona: Sí, Mine... -contestó la loba la cual fue callada cuando recibió un beso en la frente por parte del demonio- ¿Acabas de...? 

Mineta: No te confundas. -respondió dando una risilla mientras se levantaba del sofá- Ahora bien ¿Quieres que te ayude con el papeleo? 

Loona: No es como si tuvieras muchas opciones. 

Mineta: Pues empecemos de una vez, cuanto más rápido terminemos mejor.

Loona: Tú lo has dicho. -finalizó la chica soltando una risilla mientras lo acompañaba a buscar los papeles-

Continuará... 

Bueno, más de 17000 palabras, sin duda este es el capítulo más largo de "Un Pervertido en el Infierno" hasta la fecha, y posiblemente el más largo en todas mis historias en general, agradecimientos como siempre a Tocachi-Greenpencil por ayudarme a escribir este monstruo de capítulo en el que nos estuvimos casi dos meses, espero que la espera (bruh xd) haya valido la pena.

En caso de que haya algún desubicado/ignorante, los csm que atacaron a Mineta son versiones demoníacas de los miembros de la Squadra de Jojos: Golden Wind

Seguramente se estarán preguntando qué son los links que puse después de la descripción de los outfits de Mineta, Octavia y Loona. De una les aviso que no, no son códigos para lanzar misiles nucleares en Kazajistán, son links para ver fanarts en los cuales Tocachi y yo nos basamos para escoger la facha para Mineta (dibujo hecho por el pana Tocachi dicho sea de paso) y Octavia para su cita, así como para la "pijama" que usó Loona en su videollamada con Nova y Gwen.

Ahora ¿Por qué decidí optar por esta medida en vez de poner la imagen directamente? La explicación es relativamente simple: 

Cuando estaba escribiendo la segunda parte de "El Réquiem del Traidor" Tocachi decidió hacer un dibujo de Mineta después de matar a Ojiro (como habrán visto en ese capítulo Mineta también resultó bastante herido, siendo esa la "gracia" del dibujo), y yo como buena persona que aprecia el trabajo artístico de los demás decidí adjuntar ese dibujo en el capítulo, al fin y al cabo podía ayudar a que se metan más de lleno en el fic. 

Lo que pasó al día siguiente es que Wattpad me mandó un mensaje diciendo que bloquearon esa imagen (la del dibujo de Tocachi) para que sólo yo pudiera verla, ya que supuestamente ese dibujo "incentiva el daño personal y el suicidio" y que si seguía en esas pues podrían borrar la historia o de plano tirarme la cuenta. Y yo como "Wey, no hay nada de sangre o nada explícitamente violento, es solo Mineta (o bueno, su versión demoníaca) vendado y con cara de cansado, no mames". Obviamente borré el fanart del capítulo porque me parece un poco fastidioso que sólo yo pueda verlo, si quieren verlo pídanme un link o vayan a la cuenta de DeviantArt de Tocachi.

El caso, para no correr más riesgos decidí que a partir de ahora pondré los links de las imágenes que vaya a adjuntar, sean del tipo que sean. Lo único negativo es que parece que Wattpad, para más colmo, no puede copiar y pegar links directamente, por lo que si quieren ver las imágenes, tendrán que escribir los links LETRA POR LETRA ¿Es estúpido? Sí, bastante, pero como dije, no quiero correr riesgos de ahora en adelante.

Bueno, creo que eso sería todo, les ha hablado Diego y les deseo buenas noches.... aunque esté publicando esto a las 7:30 AM xd

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