Nunca quiso sobre pensar los recuerdos e imágenes de su madre. Pero en este instante sabía que tenía que recordar lo poco que hablaron sobre ese tema.

Todoroki de diez años estaba manteniendo un pequeño conejo color verde, obviamente inusual que dejaría en claro que es una persona con quirk si no fuera porque apareció en su cumpleaños número diez y que no se separara de su lado en vez de volver a su forma humana e ir a su casa o quién sabe qué, pero no mantenerse a su lado mientras se acurrucaba entre sus piernas.

Rebuscando en su memoria encontró el significado detrás de este pequeño animalito que parecía admirarlo con estrellitas en sus ojos del mismo color que su pelaje, pero más brillante.

Era casi hipnotizantes debe de admitir, como su significado para la sociedad.

Cuando aparecieron las peculiaridades no pasó mucho para que una persona declarara al mundo que veía algo parecido a los hilos rojo del destino que según generaciones atrás era la representación de las parejas románticas destinadas. Era parecido, no igual ya que esa persona decía que nos rodeaba un ser borroso que representaban a las mitades amorosas por colores y actitudes. Un día cuando el corazón de dicha persona dejó de latir, antes que se detuviera intentar expresar su quirk de una forma que muchos héroes consider agotadora, una forma de evolucionar un quirk de una manera muy drástica para la salud de una persona.

No pasó mucho que las personas se dieran cuenta que animales se sentían atraídos a ellos, además de las características peculiares de esos seres vivos que parecían entender más que un animal promedio. Al poco tiempo se confirmó que vino del quirk de esa persona que murió y dio su último aliento para seguir uniendo parejas.

Era muy raro que llegaran muy joven, es como si supieran que no deben llegar a una edad temprana porque ellos no iban a entender su significado místico, tampoco muy tarde porque dejarían de creer en ellos, así que se decidió una edad aproximada para que llegaran al parecer.

- Cuando cumplas tu décimo año verás un pequeño animal, insecto, anfibio, animalito Aéreo, acuático o terrestre, hay tantas posibilidades para ese pequeño ser para representar a tu persona amada ¿No crees que es genial saber quién te amará de forma condicional? Pero esa persona siempre aparece ante ti en el momento perfecto, no antes ni después - Susurró lo último mientras el veía como una mariposa con tonalidades naranjas y rosadas se acercaba a su madre para caer en su cabello blanco.

En esos momentos no sumo el dos más dos para darse cuenta que ese insecto volador era la representación de la pareja de su madre ¿Aún estará acompañando a su madre en el hospital?

El pequeño conejito al parecer noto su melancolía así que se acercó a él para acurrucarse en él como muestra de apoyo, pero no saltaba muy alto para llegar al regazo de Shouto, así que parecía que abrazaba sus piernas.

- Shouto ¿Dónde estás cumpleañero? - Llamó su hermana, al parecer ya estaba tardando para la pequeña celebración que planeo con Natsuo para él que estaban haciendo en secreto por su padre.

- ¡Aquí estás pequeño! - Escuchó el grito de su hermano justo a unos metros, pero sus pasos se detuvieron- ¡Ya llegó! - Él gritó al ver al acompañante peludo, junto a su grito de felicidad un gato de color morado estaba maullando que se encontró en sus hombros, parecía también muy feliz por el menor.

- Gracias, Nekoshi - Le dijo a la gatita.

- Deja de decirle así, se llama Sadashi * - La gata parecía que se reía mientras movía su cola de forma animada.

- ¿Y cómo llamarás al animalito? ¿Qué tal Rini * o Ruri *? ¿O si los combinamos? - Su hermano siempre pensando en ponerle a los animales nombres muy humanos, aunque relativamente son algo humanos estos seres.

- Midori * - Dijo sin pensar mucho, es un nombre comprensible de animal si le pides nombrarlo a un niño.

- Se nota que, aunque parezcas tan serio eres tan poco imaginativo, puedes tomar tu tiempo, yo demore una semana decidir el nombre de esta dominante - Acarició a la representación de su pareja que comenzó a ronronear feliz de que le tomara atención.

- Dije que se llamara Midori - Su hermano solo rodó sus ojos.

- ¿Al menos viste si le gusta al pequeñin, que tal si lo odia? - .

Miro al conejito que parecía aún admirarlo.

- Te llamarás Midori - Y sin esperar el conejito respondió con un salto que sorprendió a los dos hermanos Todoroki, logrando caer en el pecho del menor y Shouto reaccionó a atraparlo para que no cayera- Parece que le gusta -.

El pequeño animalito parecía intentar llamar su atención cada rato, cuando su hermana lo vio chillo de alegría alagando lo tierno que era, cuando confirmaron que era macho su hermana lo abrazo informándole sobre algo que no sabía.

Al parecer aún es mal visto que dos personas del mismo género estar enamorados entre sí, pero al ser hasta respaldado con la conexión de parejas para muchas personas ya no tenían excusa para odiarlo, pero los ideales a veces contradicen muchas cosas correctas.

Qué mezcla más rara tiene esta sociedad al unir tantas personas con pensamientos tan opuestos obligándolos a interactuar entre sí, es como si quisiera que se pelearan de una forma u otra.

Así es la vida en la que también están los ideales heroicos y donde la villanía es lo que debemos exterminar, según su padre.

Aunque este conejito cada vez que veía a su progenitor, aunque temblara intentaba ponerse delante de él de forma protectora y defensiva, Endeavor cuando veía eso en sus entrenamientos siempre estaba cerca de exterminarlo en cenizas, cuando tenía fuerza para pelear ocupaba su hielo para alejarlo de Midori.

A veces cuando no podía la pareja animal de su hermana venía a toda velocidad a salvarle el pellejo al de él, una pantera que en la cadena alimenticia podía ganarle a una persona en ciertas circunstancias, no es la pelea ganada para Enji, menos cuando al ver las acciones tan heroicas que tenía el animal amenazante dejando en claro que debía tener un trabajo relacionado al mismo de su padre.

Por lo que un tipo raro de respeto se formó entre esos dos, aunque Midori siempre intentaba protegerlo. Aunque cuando escuchaba los gritos de su padre siempre se quedaba quieto por un segundo y sus orejas cayeron en picada demostrando lo mal que le sentaban los gritos.

Su pareja destinada debe odiar los gritos, pero esa idea se esfumó cuando su hermano gritaba de felicidad por entrar a la universidad que quería, que estaba a kilómetros de distancia en otro continente, eso fue cuando Shouto estaba a punto de cumplir quince años. Parecía tan animado el conejito ante la felicidad de su hermano, Midori pronto entraría a la etapa adulta según los cálculos de su hermana.

Aunque estaban con esa idea hace ya dos años, los animales representan la edad de su pareja, así que calcular deben tener una misma edad aproximada. Ya que él tampoco era un adulto todavía.

Cuando fue a hacer la prueba de recomendación para Yuei dejó a Midori a cargo de su hermana, el pequeño animalito se comenzó a quejar haciendo un chillido que le rompió el corazón a los únicos dos Todoroki presentes. Provocando que casi Shouto aceptara llevarlo consigo, pero no quería que durante los ejercicios alguien quisiera lastimar a su pareja.

Aunque parecía que el pequeño no entendía y respondía con un salto, como si le quisiera decir que podía superar todo lo que se le viniera encima.

Su pareja debe ser tan animada como nerviosa, ya que a veces el pequeño ser temblaba en su regazo en ciertos momentos, en otros quería mimos, aunque últimamente parecía agotado un punto de colapsar como él cuando comenzó a entrenar a su joven edad. Esperaba que nadie estaba sobreexplotando a su pareja.

Ver a la representación de dicha persona y como es tan cálido hacia su persona sin ninguna necesidad a cambio, aun cuando Shouto intentaba alejarlo cuando su humor estaba negativo, Midori intentaba animarlo y si solo provocaba más enojo en Todoroki el conejo no escapaba como haría un animal normal al recibir tal actitud de su dueño, el pequeño se acurrucaba a su lado mientras movía sus orejas para que quedaran sobre el cuerpo de Shouto.

Tierno, su pareja debe ser tierna.

Cuando llegó la aceptación para entrar a la academia de héroes su padre estaba orgulloso, pero comenzó su discurso de que debe tomarse en serio todo eso, que ya soportó mucho tener a su pareja animal distrayéndolo de sus obligaciones como hijo de él.

No pasó mucho tiempo antes que Midori saltara de quien sabe a dónde para darle un buen mordisco a la mano de su padre, era la manera que utilizaba para hacer callar a su padre cuando Shouto ya no tenía espacio en la cabeza para soportarlo. Después de esos fuertes mordiscos el vejestorio de su padre entendió que no debía meterse con Midori.

Cuando se lo contó a su hermano por videollamada se enteró que era algo graciosa toda esa escena.

- ¿Como no te reíste de eso Shouto? Literalmente ese idiota se doblegó por una cosita que solo quiere dormir en tu lado izquierdo - Eso dolió, aun se sintió incómodo ocupando su lado izquierdo y sabía que las vacaciones acabarían pronto para darle paso a su primer día siendo un estudiante para ser un héroe.

- A él también le gusta mi lado derecho - Intentó contradecir lo que decía su hermano.

- Solo en verano en sus días más insoportables, hasta en primavera prefiere el otro lado, tres estaciones contra una. Perdona, pero creo que esta pelea la gané yo con el apoyo de Midori - Soltó burlesco.

Él solo rodo los ojos, mientras acariciaba detrás de las orejas de Midori que estaba caídas por lo relajado que se sintió.

- ¿Y cómo será ir al fin a clases con Midori? - Pregunto Natsuo, él no entendía.

- No entiendo - Al decir eso Midori miro hacia él con un movimiento de cabeza como de negación, sintió que estaba decepcionando de él, así que decidió enfriar un poco su mano para seguir dándole cariñitos.

Dejó de hacer esa cara para comenzar a quedarse dormido al encontrar una temperatura perfecta, además de saber algo que seguramente su padre estaba escondiendo.

Las academias de héroes al tener mejor seguridad que una escuela promedio se aceptaban que las mascotas de parejas fueron durante las clases para acompañar a su dueño, logrando una mejor búsqueda entre las parejas heroicas. Siendo lo mejor ya que los héroes no tienen tiempo que perder después de sus estudios, tenían un trabajo dedicado a proteger a la sociedad, su vida privada dejaba de existir rápidamente y el disfrute de esta si eres uno popular ya que te persiguen los paparazzis.

Cuando le contó a su hermana sobre llevar a Midori a la academia solo a una semana de que empezara las clases se exalto, según ella deben dejar a Midori impecable para el primer día. Él no entendió completamente esto, pero dejo ser a Fuyumi ya que terminó con una ropita de temática de All Might.

- Lindo - Susurro mientras lo tomaba para dejarlo en su pecho, el pequeño animalito comenzó a mover su nariz contra él.

- Parece que le encanta All Might, teníamos otros estilos - Apuntó a su pantera.

Él depredador tenía otras cinco prendas de conejos más sencillas y extrañas -¿Una frutilla? Enserio- que estaba seguro de que le quedarían igual de bien, pero el que tenía puesto le recordó a su madre y no podía negar que Midori tuvo la mejor elección en todo el asunto.

El día llegó y su padre al ver a Midori con su disfraz se le desfiguro la cara, pero aun con toda la repugnación que tenía hablo de la forma más normal que pudo.

- No me caes bien, sé que no te caigo bien y ese traje me lo demuestra - Midori soltó un chillido al ver que Endeavor se acercaba a su cuello, Shouto estaba preparado para darle un golpe con hielo a su viejo si intentaba hacer algo- Pero no dejaré que andes por ahí sin identificación de la familia Todoroki - Y sacó un lazo rojo algo anaranjado, como las llamas y con una medallita más pequeña que una huella digital donde estaba escrito el nombre, Midori y el apellido Todoroki.

Fue raro y Shouto decidió dejar toda esa escena de mierda tomando de forma rápida a Midori para ir al tren que lo llevaría a su dirección.

- Cuando se acabe la clase de hoy te compare un nuevo lazo, pero de otro color - Midori asintió - ¿Qué te parece Blanco? - El conejito negó- ¿Celeste? - Otra vez lo mismo- No diré verde, ya tienes mucho de ese color pequeño - De nuevo negó el color y comenzó a morder el listón - ¿Rosado? - Negación- ¿Rojo pastel? - Y al fin consiguió la aprobación de Midori- Eres todo un caso Midori - Susurro para sí mismo, aunque por la cercanía el pequeño igual escucho y chillo enojado.

Cuando llegó a la academia vio una variedad de animales que hacían parecer todo un zoológico, lo que más le saco un susto fue ver un león rojo siguiendo de forma juguetona a un rubio que tenía una cara de pocos amigos, en el momento que chocaron sus miradas sintieron como Midori se removía en sus brazos con miedo.

- Entendido, no nos acercaremos a él - Le acercó a su cara para que Midori supiera que es sincero y este decidió saltar a su hombro y quedar ahí, en su cuello mientras movía su nariz con cariño, como si fueran besitos.

Al ver que su caminata y la del rubio seguía por el mismo lado supuso rápidamente que era un compañero suyo y estaba seguro de que eso a Midori no le iba a gustar y mucho menos a sus nervios, solo debía esperar que el chico no se sentara al medio del salón para alejarse lo mejor posible de él y así fue. Se sentó en los de atrás donde vio una chica de cabello negro que le sonaba de algún lado.

Hasta que un murciélago fue volando a su cara de forma muy exagerada, logrando que se exaltara y que Midori se cayera de su hombro, aunque logró caer de pie en la mesa al lado de la chica pelinegra que miraba todo con los ojos abiertos.

- O por dios, perdona Todoroki-san, Kōmōru a veces le gusta gastarle bromas a los demás, aunque después se avergüenza como ahora - El Murciélago con tintes morados oscuros y claros se escondió en el peinado de la chica.

- Tranquila - No pregunto como ella sabía su nombre, para ver a Midori que miraba fascinado al otro animal- Midori - El conejito lo miró y asintió para tranquilizar a Shouto de que estaba bien.

Paso el rato viendo como la pareja animal de su compañera de al lado volaba alrededor de Midori jugando a un tipo de pillada, provocando una risa delicada de Yaoyorozu que se presentó como la otra chica que entró por recomendación. Así que de ahí le sonaba.

Aunque el chico rubio se puso a pelear con un chico que tenía un tipo de etiqueta de la responsabilidad muy marcada. No se dio cuenta en qué momento el lugar se llenó de animales, pero no parecía mal la variedad, hasta era divertido de ver un perro al lado de un león jugando entre ellos mientras sus dueños discutían.

Midori miraba con persistencia a la cachorrita café del chico llamado Iida - Lo sabía porque lo grito a todo pulmón-. Aunque el rubio dejó de gritarle al de lentes para pasar a un chico de cabellos verdes que acaba de entrar.

El aire se fue de sus pulmones por un segundo al ver lo nervioso que se puso al tener la atención del rubio, un chillido que logró reconocer como el de Midori.

Miró a su animalito que miraba la escena temblando, paso su mano para calmarlo poco a poco.

- ¡¿Que hace un ciervo en la entrada del salón?! - De ese grito pasó a saltar sobre el peliverde con una gran amistad, al parecer se conocían, mientras le seguía otro perro pero de una raza mucho más alta que el cachorro que tenía el otro chico.

- Perdona, el ciervo es mío - Se escondió en sus brazos con vergüenza- Samitsui entra, no pasa nada con Kacchan - Lo escucho hablar o mejor dicho chillar.

Y así fue como vio por primera vez a un ciervo, con una cicatriz en el mismo lado que él cuernos con decoraciones blancas que seguramente el chico puso. Su pelaje era blanco con toques rojos en sus pezuñas algo peludas.

Todos los alumnos soltaron una exclamación de fascinación ante el extraño animal.

- ¡DEKU DE MIERDA! ¡NO LLAMES LA ATENCIÓN CON TU CIERVO DE MIERDA! - El rubio gritó, pero parecía que esta vez Midori no le temía.

Vio como Midori hizo su carrera más rápida en todos estos años para llegar a los demás animales y chillar de emoción para ser recibido por la mirada sorprendida de los otros adolescentes.

- ¡Tiene ropa de All Might! - Dijo el peliverde con un sonrojo junto a una sonrisa de oreja a oreja.

- Es tan tierno, hola pequeñín - Saludo la castaña.

- ¿Dónde está su dueño? No debería dejar a su pareja por ahí - Y tenía el chico que movía sus brazos de forma robótica.

Se paró de su asiento para acercarse lo suficiente para quedar a dos metros del cúmulo pequeño que se formó en la entrada.

- Midori, ven aquí - El grupo de tres dirigió su mirada hacia él, no pasó mucho tiempo para que los tres pares de ojos se dirigieran al ciervo y nuevamente a él. Sus bocas estaban demasiado abiertas, lo suficiente para que una, no, demasiadas moscas entraran y dejaran sus huevos dentro de ellas.

Pero lo que le importaba era que Midori no le hacía caso por mirar al ciervo de gran porte que miraba a su dueño solamente.

- Midori, te estoy hablando - Ordenó nuevamente, pero no esperaba lo siguiente.

- ¡SI! - Chillo con nervios el peliverde que tiritaba, pero actuaba muy atento a él.

- No te llame a ti, dije Midori - Suspiro acercarse más y tomar a su animal hacia su pecho para regañarlo un poco, pero nuevamente el chico hablo.

- Lo siento, es como dijiste Midori reaccione sin darme cuenta por mi apellido, por el parecido - Su apellido, así que por eso a Midori le gustaba tanto su nombre cuando se lo puso- Soy Midoriya Izuku - Hizo una reverencia demasiado exagerada.

- Eres tan nervioso como Midori representaba - Eso exaltó a Midoriya- Soy Todoroki Shouto, un gusto en conocerte a ti y a mi representación animal - Miró al ciervo que cuando conectaron miradas ambos hicieron un movimiento de cabeza como reconocimiento.

Fue raro, si podía ser sincero. Era como mirar un espejo de forma algo distorsionada.

- Ya alumnos, dejen de hacer tanto ruido y vayan a sus asientos y los que sospechen que son parejas pueden hablar después de clases entre ustedes, la escuela no obliga nada, solo apoya - Habló un señor que parecía ser su maestro.

Todos asintieron y fueron a sus puestos.

Cuando llegó al suyo miró a Midori que se la pasaba mirando al ciervo que tenía su cabeza en el cuello de Midoriya.

- Creo que ese lazo rojo pastel no se comprara hoy y todo es por tu culpa por saltar de la nada, en vez de lazo te comprare una correa para que dejes de meterte en problemas y como veo deberé comprarle a ese chico también - Sentía que su vida estaba llena de problemas ahora que encontró a su pareja.

Y lo confirmo al ver cómo se quebraba un hueso mientras lanzaba una pelota, miró al ciervo y sin dudarlo formuló su duda.

- ¿Suele pasar eso muy seguido Samitsui? - El ciervo solo asintió mientras miraba la escena con aburrimiento, como si solo hubiera sido un moretón.

No solo tiene un pequeño animalito, si no que un pequeño problema que no cree que su altura se compare con los problemas que vendrán.

Midori: Significa «verde».

Rini: Significa «conejita».

Ruri: Significa «esmeralda».

Sadashi: Chica ambiciosa, con ganas de comerse el mundo.