Capítulo 20

***

— Samuel y Zoe son compatibles.

Oh Dios.

Ahogo un grito con las manos y empiezo a llorar. Siento como mi alma regresa a mi cuerpo. Después de tanto sufrimiento y ver como todas mis posibilidades se iban agotando apareció una pequeña luz de esperanza, una luz de esperanza que prolongará la vida de mi niña.

Me volteo y abrazo a Samuel, cómo si mi vida dependiera de ese abrazo.

— Gracias Samuel, me has hecho la mujer más feliz de éste mundo—estoy llorando de felicidad.

—Andrea—dice tenso y tratando de apartarme de él.

¿Por que no le gusta que lo abrace? No importa, lo que realmente me importa es que él salvará la vida de mi niña.

—Gracias Samuel—repito—no te imaginas lo que ésto significa para mí.

— Puedo hacerme una idea—murmura—¿Que hay que hacer ahora? pregunta Samuel al doctor mientras se separa un poco de mi.

— Hay dos opciones, la primera es que durante 5 dias antes de la donación, se le administrará cada día una inyección de 5 minutos de factor estimulante de colonias de granulocitos, ésto es una hormona de crecimiento de los glóbulos blancos. El día 5, un proveedor de atención médica entrenado, colocará una aguja en cada uno de sus brazos. Una aguja extraerá su sangre y una máquina circulará la sangre y obtendrá las células madre. Luego se retornará la sangre a su cuerpo a través de la segunda aguja. Este proceso dura unas 3 horas y puede repetirse en un segundo día de donación. Durante el proceso, los efectos secundarios incluyen dolores de cabeza, dolor óseo y malestar por las agujas.

— ¿Cuál es la segunda opción?—Samuel parece demasiado interesado.

Después pensaré en su comportamiento, ahora solo me preocupa el transplante de mi princesa.

— La segunda opción es que te sometas a una recolección de médula ósea durante la cual los médicos extraen médula ósea de la parte posterior del hueso de la cadera, esto se hará a través de una cirugía.

— ¿Debo hacer reposo?—Pregunta Samuel.

— Una vez que le extraigan la médula, usted regresara a su casa puedes retomar sus actividades normales en el término de 1 semana, aunque los efectos secundarios frecuentes incluyen náuseas, dolor de cabeza y fatiga, que a menudo se relacionan con la anestesia. También son frecuentes los hematomas o molestias en la región lumbar.

Samuel balbucea algo que no logro entender.

— Andrea—el doctor se dirige a mi—la niña debe continuar en quimioterapia para destruir las células dañada y todos los anticuerpos para que él transplante sea exitoso—nos dice el doctor — desde éste momento su hija estará incomunicada. Es peligroso debido a las infecciones que pueden contraer—continúa el doctor.

— ¡¿Qué?!—Decimos al unisono Samuel y yo asustados.

— Ustedes como sus padres, podrán verla pero con un traje especial, ella debe estar protegida.

—¿Pero podremos verla?—Pregunta Samuel y yo me sorprendo.

¿Está interesado en Zoe?.

—Si, pero con traje especial, la niña no puede tener ningún contacto—Nos dice

Siento que en cualquier momento me desmayo. Mi nena estará aislada no podré tocarla.

— Andrea, quiero que te pongas en todos los escenarios.

— ¿Que quiere decir?.

— Tu hija en ésta etapa puede morir—siento que estoy al borde de un abismo, mientras el miedo empieza invadirme.

—Por favor doctor se lo imploro; no me diga eso, prométame que hará todo lo posible para que ella se salve. —

— Haremos todo lo posible para salvar a Zoe, pero es una posibilidad que ella pierda la vida, como te lo he dicho, debes ponerse en todos los escenarios posibles—si no fuese por que Samuel tiene puestas sus manos en mis hombros en este instante me derrumbo.

—Debes ser fuerte Andrea—me pide Samuel.

— ¡¿Es que no entiendes?! Lo peor que le puede pasar una madre es que le digan que su hija se puede morirle digo llorando.

Estoy aterrada.

—Andrea, todo va estar bien—besa mi frente—estoy seguro que tú niña vivirá.

Ojalá, por qué si no... No habrá esperanzas para mí.

—¿Podemos verla antes que empiecen?—Pregunta Samuel sorprendiendome.

¿Que es esto?¿Por que la quiere ver?

— Por supuesto, pueden ir ahora sí lo desean, ya después será más difícil.

— Vamos Andrea, vamos ver a tu hija—me pide Samuel y hace que me quede en shock.

¿ Será que le importa? Imposible ¿O sí? ¿Por que actúa asi?

Trato de calmar ésta angustia que estoy sintiendo. —Vamos Andrea—Samuel, me tiende su mano.

Estoy muy sorprendida —¿Que le hizo cambiar de opinión?.

—Vamos—digo dudando.

Samuel y yo salimos de la consulta del doctor Guerra y nos dirigimos a la habitación de mi niña.

—¿Como te presentaré?—le pregunto nerviosa.

— Note preocupes Andrea, tu hija ya me conoce—responde Samuel con tranquilidad.

— ¿Cómo que ya te conoce?—No lo entiendo ¿En qué momento la conoció? Estoy realmente asombrada.

— Ayer la conoci.

—¿La viste?¿Cómo es posible que no me haya dado cuenta?.

— Si, ella pensaba que yo iba leerle un cuento cuando entré a la habitación.

— ¿Que le dijiste?.

— Nada, solo hablamos un poco—me contesta.

— ¿Por eso decidiste hacerte los ánalisis para ver si eras compatible?—¿Mi niña te conquistó?—Mi nena es capaz de derritir hasta el corazón más frío.

—Algo así — Se limita en decir.

— Ella tiene que estar bien—digo para mí misma.

— Lo estará Andrea—me doy cuenta que Samuel ha escuchado mi súplica.

—¿Que haré si mi niña se va de éste mundo?No podré seguir viviendo.

—Andrea, es una posibilidad. No es que vaya a pasar, no te mortifiques más por favor.

Limpio mis lágrimas ante de entrar a la habitación, no quiero que ella me vea así.

Samuel abre la puerta y entramos, a pesar del temor que siento, estoy con los nervios de punta, estaremos los tres por primera vez, no sé si es bueno o malo, pero estaremos como una familia en una habitación.

—¡Mami!—chilla niña al verme. —Hola, bebé hermosa—me acerco y beso su cabecita.

Ella está cada dia peor, la maldita enfermedad la está consumiendo día a día. Está cansada, ha perdido peso.

Respiro hondo, debo tener confianza y fé... Ya tengo al donador y me aferraré a eso.

—Hola—dice Samuel con timidez.

—¡Samuel, has regresado! —Ella se emociona al ver a su padre—¿será el llamado de la sangre?.

Samuel está nervioso e incómodo, aún así se acerca a Zoe.

—Hola princesa—Samuel se acerca y le besa su frente — ¿Cómo te sientes?.

— Cansada, ¿Tú sabes cuando yo podré irme a mi casa?—Pregunta con tono de voz debil y cansado—ya no quiero estar aquí... Me aburro.

— Te irás pronto, o al menos cuando estés bien—dice Samuel.

—Pero yo estoy bien—afirma mi niña.

— Si, pero estarás mucho mejor—añade Samuel incómodo.

— Por cierto ¿salvaste lo que tenias que salvar?—le pregunta con curiosidad a su padre.

—Creo que podré hacerlo—murmura Samuel mirándome.

Yo no entiendo su conversación pero no me incomoda su acercamiento.

Ahora que lo pienso, creo que he sido egoísta con mi hija al negarle a su padre. Nunca busqué a Samuel por temor a ser rechazada, siempre tendré la duda por saber ¿Que hubiera sucedido si hubiera buscado a Samuel cuando me enteré que estaba embarazada?—¿Cuál hubiese sido su reacción al enterarse que seria padre?.

—¿A qué te dedicas, Samuel?—El interrogatorio de Zoe hacia su padre me saca de mis Pensamientos.

—Tengo una empresa—dice Samuel y le sonrie.

— Como mí abuelito, el también tiene una empresa—dice Zoe.

— ¿Enserio?—¿Y como se llama la empresa de tu abuelito?

— Zoe, creo que deberías descansar —lo interrumpo para que no hable más de la cuenta.

Él ha pedido una cita con tu abuelo, hija, está muy interesado en hacer negocios con él... Todavía no debe ser revelado quienes somos... Hemos estado protegida durante años, solo mi padre es conocido en el mundo empresariado.

— Mami, estoy bien... Quiero hablar con Samuel, el es mi amigo ¿Verdad?—Responde con dulzura.

—Si, soy tu amigo — no sabía que podías ser tierno con una niña que evidentemente te hace sentir incómodo y no la sientes como tuya.

— ¡Que bien! — Exclama feliz — ¿Cuando salga del hospital me irás a visitar a mi casa?No cuentes con ello hija.

— Estaré encantado en visitarte — miente Samuel. Es obvio que no lo harás. Un golpe en la puerta nos distrae.

—Lo siento pero tendrán que salir, cambiaremos de habitación a la niña—una enfermera viene por mi hija para que la aislen.

—Mi amor te amo mucho... Eres mi vida y estés donde tus estés yo estaré contigo... Te amo—beso su frente mientras mis ojos se llenan de lágrimas.

— Yo tambien te amo mamita, Samuel cuida de mi mami ¿Si?—Dice y mi corazón se rompe en mil pedazos.

No te quiero soltar hija mía, pero sé que es por tu bien todo esto, aunque me duela hasta el alma acataré la orden de los doctores, todo sea por salvarte amor de mi vida.

— Pronto estaré contigo — le dice Samuel.

— Nos vemos pronto mi vida, portate bien—añado con voz ahogada.

— Lo haré mami, te veré más tarde.

Le doy un beso en la frente y ante que las lágrimas me invadan salgo de la habitación con el corazón oprimido. Mi hija puede morir en la quimioterapia, tal vez está sea la última vez que la vea con vida.

No. Me niego aceptarlo. Ella estará bien, tiene que estar bien.

Samuel sale detrás de mi.

— Es una niña fuerte, estará bien—me dice Samuel, pero su voz no suena segura Me desarmo y exploto en llanto.

—Andrea no te debilites ahora. Esa niña estará bien—Samuel trata de consolarme. — Ella te necesita fuerte.

— Lo sé, es sólo que me siento superada.

— Debes tener más confianza.

— Tengo confianza, ya te dije... Solo me siento superada por todas las emociones que he vivido hoy.

Necesito un abrazo pero sé que tú no me lo darás. Esperaré pacientemente todo el proceso. Mi hija estara bien.

Maratón (4/6)

ଓଓଓ

Ayer no puede actualizar espero poder terminar la maratón pronto


Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top