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05 de Agosto, 2022.
Isla Jeju, Corea del Sur.

Ingresamos al departamento alquilado. Estiré mi mano y prendí las luces, inmediatamente Jimin se cubrió la boca con delicadeza.

Nini estaba en mis brazos, emocionado por sus primeras vacaciones.

—¡Quiero ver! ¡Quiero ver! —Los saltitos que daba me indicaban que ya era hora de bajarlo.

Sus piecitos tocaron el piso del departamento y, en cuestión de segundos, empezó a correr como loco por todo el lugar.

—Wow, es hermoso —dijo Jimin con un hilo de voz.

Lo miré y no pude evitar sonreír.

Era algo pequeño. Investigué mucho las opciones que teníamos y el departamento que estaba cerca de la playa era la mejor opción.

—Tiene todo lo que necesitamos —expliqué con una sonrisa—. Además, estamos a menos de cinco minutos de la playa.

Jimin cerró sus ojos con fuerza y sonrió encantado. Vi como llevaba de manera inconsciente una mano a su vientre. Sonreí ante tal gesto.

—Es perfecto. Me encanta.—Se acercó a mí y me dió un sonoro beso en la mejilla—. Bueno, nos encanta —corrigió.

Me acerqué a él y le di un beso en los labios. No sabía si se refería a Nini o a...

Bueno, a él o ella.

Era una corazonada. No sé cómo explicarlo. No era algo confirmado por algún test de embarazo o un estudio médico.

Era algo que sentíamos. Algo que nos gritaba que estaba ahí, pero que aún no nos tomábamos el atrevimiento de confirmar. Quizás era el miedo de que no fuera así. Ambos teníamos el mismo anhelo y descubrir que no seríamos papá pudo haber sido destructivo para ambos.

Me pare detrás suyo y lo abracé por la cintura. Apoyé mi barbilla en su hombro y acaricié suavemente su vientre. Él suspiró y colocó sus manos sobre las mías.

—Primeras vacaciones en familia —dije, sonriente y emocionado al mismo tiempo.

Jimin soltó una risa adorable, era una mezcla de alegría y tranquilidad. Estaba claro que él necesitaba estar lejos de casa y me alegraba que las cosas empezarán a salir bien para nosotros.

—¿Tienes algún plan? —preguntó, mientras se alejaba un poco de mí para comenzar a recorrer el lugar.

Miré a mi alrededor y mi lobo tomó las riendas de la situación. Ese lugar no tenía aroma a nada y eso nos molestaba bastante.

Mi omega y mis hijos estaban ahí presentes, ellos tenían que sentir el aroma de su alfa. Así que, por cada paso que daba, iba dejando marcas de aroma.

—Mi único plan es pasarla bien —contesté y observé el lugar.

Era mucho más lindo que en las fotos. Tenía una amplia sala de estar con un desayunador que separaba la cocina de la sala. Los colores eran blancos y grises, lo cual le daba una gran iluminación al lugar, además de ser agradable a la vista.

Las habitaciones estaban separadas por un baño, lo cual me encantó en el momento que lo noté. Nos daba la privacidad necesaria como pareja, además de tener a nuestro cachorrito a unos cuantos pasos.

El baño era pequeño, pero era ideal para nosotros tres. Después de todo, mi objetivo era salir y disfrutar de Jeju junto a mis amores. No quería estar encerrado los diez días.

—He buscado lugares que podemos visitar —dijo el omega, mientras estaba a la habitación principal—, pero primero me gustaría visitar la playa.

Miré la hora. Eran las cinco de la tarde, di un aplauso y lo señalé.

—Tenemos que comprar la comida, de regreso podemos parar y caminar un poco por la playa. ¿Qué te parece?

Ni siquiera había terminado de preguntar que Jimin comenzó a asentir con emoción.

—¡Sí! Me encanta. Nini, ponte los zapatos que vamos a ir a comprar.

El pequeño soltó un grito de emoción y preguntó a gritos si podíamos comprar helado. Me reí y recordé como Jimin me había exigido comprar cosas dulces debido a sus recientes y extraños antojos.

No estaba seguro de lo iba a pasar en ese viaje, solo esperaba que fuera lo suficiente para aclarar la mente de mi pareja. Además, mi objetivo principal era que se alejara de todo aquello que lo abrumaba. Jaebeom no estaba haciendo las cosas fáciles para ninguno y necesitábamos tomarnos un descanso de Busan y su gente.

Aún no solucionaba las cosas con Taehyung y eso también me tenía tenso. Sabía que Jimin se había reunido con él y eso me generaba más ansiedad. Una parte de mí estaba un tanto ofendido con el omega, principalmente porque nunca me comentó la relación amorosa que había entre nuestros mejores amigos.

¿Por qué me lo ocultó?

Agité mi cabeza y decidí no seguir pensando en aquello que tanto me atormetaba. No podía engañar a nadie, aún seguía ansioso por la charla que tuve con Jaebeom. Sus intenciones habían sido claras, él quería meterse con mi familia.

No podía permitir eso de ninguna manera, pero no era momento para estar pensando en ello. Tenía que disfrutar las vacaciones con mis amores y eso nadie me lo impediría.

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07 de Agosto, 2022.
Isla Jeju, Corea del Sur.

Estábamos los tres en la cama. Jimin dormía profundamente a mi lado, su rostro estaba casi pegado al mío y sentía su respiración sobre mi mejilla.

Por otro lado, estaba Nini. Su cabecita estaba sobre mi abdomen y su atención estaba puesta en la televisión. Veía una película de dibujos animados, mientras que yo le hacía caricias en el cabello.

—Papá —llamó en voz bajita.

—¿Qué pasa, bebé?

Él se levantó y miró con atención a Jimin. Vi como una pequeña sonrisa se le dibujaba en la carita al observar dónde tenía la mano su padre.

En su pancita. Nini ya era consciente de lo que estaba pasando, pero aún así decidía guardar silencio.

—¿Podemos quedarnos a vivir aquí para siempre? —preguntó—. Vi una escuela cerca, yo puedo ir. No me importa cambiarme.

Oh.

—¿Quieres vivir aquí? ¿Por qué?

—Es que aquí somos felices —respondió.

No supe que contestar, solo suspiré y con una pequeña sonrisa lo atraje a mí.

—Mientras estemos juntos, siempre vamos a ser felices.

—¿Y siempre vamos a estar juntos? Yo no quiero que papi vuelva a sentirse triste y tú tampoco. —Hizo puchero—. Me gusta como estamos ahora. Extrañaría a mis tíos, pero sé que pueden venir a visitarnos. ¿Puedes pensarlo?

¿Qué tenía que responder? ¿Había alguna respuesta correcta?

—Siempre vamos a estar juntos. Lo prometo.

Lo abracé y di un beso en su frente.

Vivir lejos de todo lo que nos causaba problemas era un sueño, pero tampoco podía pedirle a Jimin algo así.

Yo también quería lo mismo que Seongjin, pero ¿cómo se lo explicaba al omega?

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