Capítulo Uno

*Audrey Webber en multimedia*

Audrey: 

Había imaginado miles de escenarios si mis sospechas eran correctas, había pensado en tantas posibilidades juntas , pero aun con los más grandes escenario en mi mente.

Jamás hubiera imaginado ver lo que mis ojos presenciaron esa tarde.

Jefferson Crafft

 El que era mi novio hace cinco minutos.

En la cama.

Con otra.

No, error.. con otro.

—Audrey...

Mis ojos se encuentran demasiado abiertos y los pies no me responden, pero en el momento en que Jeff se levanta desnudo e intenta acercarse a  mi  con su pene colgando en mi dirección, mi mente le grita un "Corre" a mis piernas, los  pies me funcionan enseguida y salgo de la habitación con el corazón acelerado.

Bajo las escaleras  y el no tarda en detenerme, sigue desnudo, aunque no tengo la mirada precisamente abajo.

La mano de Jeff hace presión en mi antebrazo.—Audrey, déjame explicártelo.

Vaya frase recontra cliché.

Aparto su  agarre de un tirón y lo miro a los ojos.

—¿Eres Gay?

El aprieta la mandíbula.

—Bisexual.

—Bisexual.—Repito con una sonrisa, decepcionada.—¿Y se supone que debo sentirme mejor?

—Audrey..

—Me engañaste.

Eso es lo único que me importa.

Sin importar con quien, hombre o mujer.

Aquí la realidad es que el me ha visto la cara todo este tiempo.

Jefferson cierra la boca de golpe mientras todo el peso de la traición me hunde, se me aprieta la garganta, pero ni eso va a lograr desmoronarme.

Y tal vez mi gran ayuda sea la sorpresa que me lleve porque si la situación fuera diferente, probablemente estaría viéndome como una pobre infeliz frente a sus ojos.

Jefferson Crafft ya se ha llevado mi humillación, no voy a permitir que se lleve algo más de mi.

Sin creérmelo, veo como una sonrisa se instala en su rostro.—¿Y esperas que crea que tu nunca lo hiciste?

Abro la boca con indignación.—Pues no, no lo hice.

Jeff vuelve a apretar la mandíbula.

—Eres un hijo de puta.

—Cariño..

—Se acabo.—Finalizo y sus ojos se abren.—¡Hemos terminado, Jeff! 

—¿No crees que estas exagerando, Amor?

"Amor", esa palabra me enfada más.

Lo apunto con el dedo y para que se le quede gravado.—Y para siempre.







(*)









—Lo odio.

Steisy me ofrece un pañuelo, lo cojo solo para limpiar mis mocos.

—¿Quién iba a decirlo?.—Pronuncia Nicole.—Se veía tan masculino.. No creí que Jeff.—Se detiene al notar la mirada furiosa que le estoy lanzando.

—Que fuera Gay.—Termina Steisy por ella, ella misma se retracta..—Oh no, Bisexual.

—Ni siquiera eso me importa, lo único que me importa aquí es que el me engaño.—Respondo decepcionada.—Creí que el.. ¡Dios! ¡No puedo creer que se lo presente a mis padres!¡A mi hermana! 

Vuelvo a limpiar mi nariz con el pañuelo.

Nicole suspira.—¿Sabes que necesitas para olvidar  esta fallida relación?

—Yo se.—Agrega Steisy.

Niego con la cabeza.

—No lo digan.

Ambas se dan una mirada.

—Una fiesta.

Y lo dijeron.











(*)











Esto es lo que no me gusta de mis salidas con mis dos grandes amigas, para empezar dejarme sola en la primera oportunidad, ya sea tragos o hombres.

Esta vez es lo segundo.

Lo menos que necesito es un pene en este momento, apenas me estoy despidiendo de uno.

Así que tomo la opción de unas cuantas cervezas.

—¡Dame otro, por favor!.—Pido desde mi asiento en la barra.

El barman me responde con una sonrisa y enseguida veo como me sirve otra cerveza, mi atención se desvía cuando suena la alarma de  un mensaje en mi teléfono, meto la mano al bolsillo y lo abro.

"Tengo un nuevo caso para ti, ve a mi oficina temprano"

Guardo el teléfono cuando veo que mi siguiente vaso de cerveza se acerca.

—Gracias.

—De nada, linda.

Cojo el enorme vaso con ambas manos y comienzo a beberlo, hasta que un comentario interrumpe mi concentración.

—Más despacio..

Bajo el vaso de mis labios.

—¿Disculpa?

El desconocido sonríe y cuando me acerco a verlo con más precisión, quedo maravillada, por la luz de colores me es difícil diferenciar con exactitud, pero lo que si veo es su perfecto perfil,  su cabello marrón, inclinándose al rubio tal vez, ojos color verde pasto suave y tatuajes que se escapan gracias al cuello de la camisa y no me sorprendería que habría más detrás de ella y en los brazos.

Es más, lo noto al poner los ojos en las mangas dobladas de sus muñecas, los tatuajes se escapan en la piel expuesta.

Vaya, el es todo lo que trato de evitar cada vez que me encuentro en lugares como estos o me encontraba en mi época de soltería.

Sin embargo esta vez decido quedarme.

—¿Te invito algo diferente?

Observo mi vaso.

—No, gracias y no estoy para coquetear.—Solo a beber.—Prácticamente he venido obligada.

—¿Quién estaba coqueteando?

Jaque Mate.

Me lleno de vergüenza y el sonríe.

Ayy dios mío.

"Tienes una linda sonrisa"

—Gracias..

¿Lo he dicho en voz alta?

—¿Qué te trae por aquí?

Engaños..

—Tranquila.—Intenta calmarme.—No estoy coqueteando, sexy.

—Eso ha sonado contradictorio.

El vuelve a sonreír.—¿Por qué te llame sexy?

Sonrio.

—Vaya..

—¿Qué?

—¿Te han dicho que tienes una hermosa sonrisa?

No me intimido, pero me quedo viéndolo, entonces decido desahogarme con este desconocido porque por más que todo en el me grite que debo alejarme.

Además..

Una conversación no hace daño a nadie.

Separo mis labios.—Encontré a mi novio con otra persona.

—¿Qué?

—Preguntaste que hago aquí.—Estiro los brazos y los bajo enseguida.—Esa es mi razón de estar aquí y fue idea de mis amigas.

Muevo el mentón en dirección a la pista, donde Nicole y Steisy encontraron nuevas victimas, el sigue mi mirada y la regresa a la mía con una sonrisa.

—Pues la mía me dejo hace un par de meses y antes de empezar con una vida que había preparado a ambos.

—No creí que tuvieras..—Me detengo al ver su expresión.—Lo siento, es solo que te ves..

—¿Cómo todo un mujeriego, sexy?.—Me pregunta y prefiero no responder.—¿Es por los tatuajes?

Mantengo mi silencio. 

—Que no te engañen, sexy , los tatuajes solo sirven para ocultar mis demonios.

—Esa es una increíble frase que colocar en una galleta de la fortuna.

Debe ser lo más estúpido que he dicho esta noche.

Al notar mi estado pregunta.—¿Cuánto has bebido ya?

—Lo suficiente.—Suspiro.—Si no eres un mujeriego como yo creo.

—Me alegra que lo admitieras.

Aprieto los labios.

—¿Por qué estas tú aquí?

El duda, pero finalmente me lo dice.

—Es más bien una despedida.

—¿Una despedida?

—Mi vida dará un giro si lo que espero se hace realidad.

—¿Y qué esperas?

Sin dudarlo, dice.—Una familia.

Mis ojos se abren.—¿Qué?

—Yo me entiendo, Sexy.

Quiero preguntar, pero el me interrumpe.

¿Y ese gran hombre ha sido tan especial como para que te lleve a un bar a beber?

Hago una mueca.—Ahora que lo pienso..

El baja la mirada sonriente.

—No creo que ese hombre valga tanto como para que sufras por el, sexy.

Mis ojos se abren.

El desconocido guarda silencio y mientras veo cada una de sus facciones, el bebe de su copa y pide otro, me da una sonrisa amable y decido atreverme sin miedo de ser rechazada.

—Quieres..

Soy la atención de sus ojos.

—¿Si, sexy?

—¿Quieres ir a algún otro lado?

Su sonrisa se ensancha.

—¿Tienes planeado algo?

Me basta con sonreír.






Hola...

Primer capitulo calientito y salido de mi horno de ideas.

Déjenme sus  comentarios que recién iniciamos.

Gracias por estar aquí.

Probablemente esta historia tenga también 30 capítulos igual que las dos anteriores, igual, cualquier cosa avisare.

Nos leemos prontito.

>> Yiemir.


Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top