25. Alfa Infiltrado


Un Alfa de presencia abrumante, impresionante estatura y un cabello largo de tonalidades rojizas entró a la Academia Kimetsu emitiendo un suspiro. 

Se acomodó la corbata y los lentes de sol oscuros, mirando a su alrededor en busca de dos personas específicas. 

Se sabía muy bien que el político Kibutsuji Muzan era corrupto y malévolo, pero lo problemático era que todos sus planes eran destruidos siempre a causa de las intervenciones de Ubuyashiki. Su maldito clan era demasiado entrometido! Cómo el señor Muzan podría tener toda Japón bajo su control si esos idiotas no paraban de arruinarle? 

La única manera de descifrar su manera de actuar era teniendo infiltrados en sus instalaciones más cercanas. Y ahí qué caía como anillo al dedo? La Academia Kimetsu. 

El plan de tener a dos infiltrados para obtener cualquier información y novedad era brillante! Pero solo si los dos malditos infiltrados daban señales de vida! 

El Alfa pisó con fuerza y emitió un suspiro de rabia, ahora teniendo que infiltrarse él para buscar a la vice-pirncipal de la Academia, Nakime, y a un simple estudiante llamado Inadama Kaigaku.

Por qué no le respondían las llamadas y mensajes al señor Muzan!? Kokushibo estaba molesto. Buscar inútiles no era su trabajo! Él solo estaba para servirle al señor Muzan como secretario! 

Caminó con un aura de enojo a través del pasillo de la Academia, mirando por las pequeñas ventanas de las puertas si es que lograba hayar a alguno de los dos sujetos que necesitaba localizar. 

Pero tras varios minutos, no encontró nada. Era como si se los hubiera tragado la tierra! 

Siguió caminando en línea recta con la mirada distraída, hasta que sintió a alguien chocar contra su pecho de forma bruzca. El impacto le hizo retroceder un par de pasos, y su molestia se elevó por los aires. 

- Pero qué mierda!? Ten más cuidado por donde caminas!

Kokushibo elevó la voz mirando al hombre de cabellos blancos un poco más bajito que él, quien también era un Alfa. Por su olor podía saber que él también estaba enojado. 

- Cállate, idiota! También debes mirar por donde caminas, bobo! Esperas que te dé el paso!? Yo también estoy ocupado! 

Sanemi gruñó irritado y elevó un poco la cabeza para poder mirar a la cara al imponente Alfa delante de él. Quién era ese? No era un profesor... 

- Y tú? Quién eres!? Qué haces caminando libremente por la Academia como si fuera tu casa!? 

Sanemi agarró con fuerzas la corbata de Kokushibo y lo obligó a inclinarse un poco hacia adelante, para que aquel no se viera más alto. Le irritaba que hubieran Alfas que lo superaran por altura. Bueno, odiaba a cualquiera que lo hiciera. 

Obviamente no le agradó para nada la actitud de Sanemi y lo alejó, volviendo a acomodar ahora su arrugada corbata. 

- Qué te pasa!? Estoy conociendo las instalaciones porque estoy postulando para ser profesor en la Academia! El señor Ubuyashiki ya tiene mi currículum! 

- Tengo entendido que no hay postulaciones en estas fechas! Me ves cara de estúpido!? Ahora dime qué estás haciendo aquí antes de que te vuele los dientes con mis puños-

Sanemi emitió un jadeo y se quedó quieto al sentir otro cuerpo chocar detrás de él. Al voltear un poco, vio al profesor de cívicas Himejima Gyomei detrás suyo. Su presencia sí que era... Enorme. 

Sintió el suspiro del enorme Alfa detrás de él chocar contra su nuca, lo cual le hizo estremecerse y mirar hacia otro lado con irritación. 

- Shinazugawa... El señor Ubuyashiki dijo que hoy era la excepción, porque están buscando profesores que hagan actividades recreativas para que los alumnos lidien con el estrés de los estudios. Por favor no eleves la voz en el pasillo... 

- Viste? Hasta tu compañero de trabajo sabe sobre esto! Por qué no me creías? 

Kokushibo se tocó la sien en un gesto de molestia y miró a Sanemi, quien se encontraba acorralado entre ambos Alfas más altos con una cara de vergüenza. 

- Y-yo... No estaba enterado. Lo siento... 

No entendía por qué se estaba sintiendo tan pequeño en comparación a los hombres a su alrededor. No era por el simple hecho de que ambos eran gigantes en altura, sino que... Era algo más de presencia. 

Qué patético se estaba volviendo a causa del estrés! 

Kokushibo sonrió un poco al notar que el plan de infiltración estaba funcionando perfectamente. Obviamente no iba a entrar a la escuela a buscar a Kaigaku y a Nakime simplemente metiéndose a la escuela sin un plan! 

- Y profesor de qué eres... Exactamente? 

Sanemi se dignó a hablar para tratar de ocultar su complejo de inferioridad, tapando su tono de voz irritado bajo un tono neutral. 

- Soy un maestro de Iaido, pero también pertenecí a las fuerzas especiales de la U.S. Mi plan-digo... Mi idea en esta escuela es motivar a los alumnos para volverse fuertes y aprender a usar katanas, así para poder defenderse y hacer muchas otras cosas que requieren de habilidad y buen estado físico. El concentrarse en este tipo de actividades ayuda a los alumnos a secretar la endorfina, serotonina y dopamina, además de que podrán sentirse más cómodos con ellos mismos y de sus habilidades. Le he presentado mi proyecto al señor Ubuyashiki y le ha parecido correcto...

-... Ah. 

Sanemi rodó los ojos y asintió en silencio, algo molesto por toda esa innecesaria explicación por parte del Alfa. Era muy estresante escuchar por tanto tiempo sobre un tema por el cual no tienes ni una sola pizca de interés. 

Gyomei puso sus manos sobre los hombros de Sanemi y lo acercó más a su cuerpo para susurrarle al oído. 

- Estás conforme con sus palabras? No deberías ser tan enojón, Shinazugawa. Si sigues siendo tan agresivo, ese comportamiento no va a gustarle al señor Ubuyashiki... 

- Sí, sí, como digas... Ya! No me toques, idiota! 

Sanemi apartó de un manotazo las grandes manos del Alfa contrario y se retiró molesto, caminando nuevamente en línea recta por el pasillo en busca de su hermano menor. 

Kokushibo lo siguió con la mirada y sonrió un poco, divertido por la agresiva actitud del Alfa más bajo. Le pareció encantador su comportamiento siempre a la defensiva, como un Chihuahua rabioso. 

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Genya estaba sentado en una de las mesas de la cafetería comiendo un yogurt que le había comprado Muichiro, ya que habían leído por Internet que era un alimento beneficioso para el embarazo. 

A Genya no le gustaba comer eso porque le parecía ácido, pero quería lo mejor para su bebé y su desarrollo. 

Cuando alzó la mirada después de tragar otra cucharada de Yogurt, vio a su hermano entrar a la cafetería y acercarse a él. Se puso tenso y por instinto se cubrió la pancita con la mano, como si creyera que Sanemi le pudiera hacer daño a su bebé. Al darse cuenta del gesto, de inmediato bajó la mano avergonzado. 

Por qué hacía eso? Su hermano mayor era duro, pero jamás le haría daño a su sobrino... No? 

Sus labios temblaron y él dejó el envase de yogurt en la superficie de la mesa, mirando la expresión enojada de Sanemi hacia él. Qué había hecho mal ahora? No era por el examen de matemáticas, cierto? Le había pedido que no lo regañara porque se sentía mal... 

Ya había adoptado la costumbre de acariciar su vientre todavía plano cuando estaba nervioso, así que lo hizo para calmarse un poco y acarició su piel por debajo de la ropa de forma delicada. 

- Por qué haces eso, idiota? No te das cuenta de que eso se hace cuando llevas meses de embarazo!? Te ves patético! 

Sanemi gruñó estando en frente de Genya, mirándolo de forma amenazante. El Omega bajó la cabeza y dejó de acariciar su panza por órdenes de su hermano mayor. 

- Lo siento... Pero es que yo... Uhm... Es que eso me gusta mucho... 

- Quién te preguntó si te gusta, uh!? 

Sanemi gruñó más fuerte y Genya emitió un chillido de miedo, mirando hacia abajo. Trató de buscar con la vista a Muichiro para sentirse seguro con su Alfa cerca, pero no lo vio alrededor. 

- Vas a explicarme la mierda que pusiste en tu último examen de matemáticas!? Me ves cara de imbécil o qué!? Crees que se justifica no responder tu evaluación solo por unos putos cólicos!? Eh!? Respóndeme! 

Genya se encogió de hombros y apretó los labios, bajando más la cabeza a causa de sentirse amenazado. 

- Y-yo... Hermano... Es que... 

La voz de Genya era tan bajita y suave que sonaba como un simple suspiro. Las venas de Sanemi se marcaron en su frente por el enojo, y de un tirón, agarró al Omega por el cuello de la camisa para que este dejara de ocultar la cabeza. 

- HABLA MÁS FUERTE SI ES QUE ERES UN HOMBRE! VAMOS! DEBES DEJAR DE SER TAN FRÁGIL! CÓMO CREES QUE VAS A SER BUENA MADRE SI ERES ASÍ DE COBARDE?? 

Genya chilló otra vez y sus labios temblaron de terror, sin ser capaz de responder algo coherente sin tartamudear. Sanemi al darse cuenta de esto lo soltó con brusquedad y sonrió de forma burlona. 

- Qué patético... Es gracioso, no crees? Siempre las personas más inútiles e incapaces de criar son quienes tienen hijos. Por eso la sociedad está valiendo mierda! Ahora deja de temblar y ponte a estudiar matemáticas! Llevas años reprobando el mismo curso! Cómo eres tan estúpido para hacer eso!? Aprende matemáticas de una vez!! Eres inútil en todo lo que haces! 

- N-no... Eso... Eso no es cierto... 

Genya elevó la cabeza con miedo y empezó a sollozar, protegiendo su pancita con ambas manos. Sanemi rió con una irritación extrema y agarró al Omega por el pelo. Le daba lo mismo que otras personas estuvieran mirando, ya que todos sabían que él era así de violento con quien se le diera la gana. 

- Uh!? Te atreves a responderme!? En serio crees que eres bueno en algo? Ha! Claro que sí! Eres bueno abriendo las piernas! Eso es lo único que sabes hacer! 

- N-no! 

Genya apretó los dientes y miró a Sanemi con una mezcla de terror y molestia, ya que se sentía muy ofendido y pisoteado. 

- Yo gané un premio por ser el mejor en tiro al arco en la escuela! Pero tú destruiste mi reconocimiento en frente de todos y dijiste que debía aprender matemáticas! Yo sí sé hacer cosas bien! 

Genya mantuvo su vista pegada a Sanemi, esperando que milagrosamente su hermano se disculpara por tratarlo tan mal. Deseaba poder tener el apoyo de Sanemi durante su embarazo... Deseaba tanto el cariño de su hermano mayor... 

Pero lo único que se ganó al elevar la voz fue una cachetada en la carita. Él maulló de dolor y empezó a llorar. 

- EL TIRO AL ARCO VA A SERVIRTE PARA DARLE EDUCACIÓN A TU HIJO!? ACASO CREES QUE PUEDES CONSEGUIR DINERO A BASE DE ESO!? DEJA DE SOÑAR PURA MIERDA! EL DINERO NO SALE DE LOS ÁRBOLES, CABEZA HUECA! NECESITAS UN TRABAJO DE VERDAD, Y PARA ESO DEBES ESTUDIAR! 

- Lo sé! Pero... Pero por qué no puedes alegrarte por mí por lo menos una vez!? Me esforcé mucho en el tiro al arco para que estuvieras orgulloso de mí! Por qué me odias tanto?... Yo no quería ser un mal hermano... Perdón por hacerte enojar todo el tiempo...

Lágrimas siguieron cayendo de los ojos del Omega cuando este no pudo seguir hablando a causa del nudo en su garganta generado por la angustia. Sanemi se sintió un poco culpable, pero no se atrevió a ser blando con Genya. No podía mostrar piedad si es que quería hacer fuerte al Omega... 

Él debía saber que las personas iban a ser crueles y que la vida no iba a ser fácil. Cómo sobreviviría en el futuro si no sabía sobre eso? Mostrarle afecto al Omega solo le haría volverse inútil y dependiente del apoyo emocional, y siendo sincero, eso era sumamente patético. 

- Sabes por qué no puedo alegrarme por tí? Porque eres un hermano incompetente e inútil! Solo sabes actuar como bebé y hacer todo mal! Cómo podría sentirme orgulloso como hermano mayor!? Dime cómo! Desearía que nadie supiera que existes!

La cara de shock y dolor del Omega le hizo quedarse callado, y también darse cuenta de las crueles palabras que le había dicho. Se había sobrepasado. 

- G-Genya... Yo... No quería decir eso... 

Sanemi intentó acercarse a su hermano en un gesto de preocupación, viendo que la cara de Genya estaba casi tan pálida como el papel. 

- Genya... Me estás escuchando? No quise decirte algo como eso... Solo... AH! GENYA! 

Sanemi gritó de horror cuando Genya perdió consciencia de su cuerpo y cayó desmayado, siendo atrapado por suerte entre los brazos de Sanemi antes de golpear su cabeza contra el suelo. 

- AH! GENYA! GENYA! DESPIERTA! 

Sanemi sacudió el cuerpo del Omega con extrema preocupación sujetandole por los hombros, pero este no reaccionó a ningún estímulo. 

- AHH! AYUDA! AYUDA POR FAVOR! MI HERMANITO! 

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Hola a todos! Cómo están? ❤️

Sé que dije que no iba a haber tanto drama ahora, pero... Bueno, se me ocurrieron cositas jajaja. 

Qué les ha parecido este capitulo, y la mención de dos nuevos Alfas? 😈

Espero que les haya gustado!! 

Opiniones e ideas para futuros capítulos como siempre super bien recibidas! Me encanta leer sus comentarios! ❤️❤️❤️

Para seguir con la tradición de agregar preguntitas para interactuar más, les gustan los videojuegos? Y si es así, cuales son sus juegos favoritos? 

Yo tengo demasiados favoritos, así que haré mención a los que más me han marcado y han formado parte de mi vida XD jsjs

- Outlast 2. 

- Resident evil: Biohazard. 

- The last of us I y II. 

Muchas gracias por haber leído este nuevo capítulo! Los amo muchísimo, cuídense mucho!!!! 

Bye byeeee 💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕💕

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