Uzui escuchó con incomodidad como Giyuu descaradamente llamaba al nombre de otro Alfa estando en celo. Le dolió un poco lo desvergonzado que estaba siendo Tomioka al acurrucarse en sus prendas mientras buscaba el afecto de otro individuo de forma necesitada. 

Las tres mujeres de Tengen miraron con confusión a Giyuu, mientras que este seguía maullando el nombre de un tal Sabito con un tono de desesperación y angustia. 

- Giyuu, quién es Sabito? 

Suma se acercó al otro Omega y le acarició la cabeza mientras intentaba entablar una conversación con él, pero Giyuu solo rechazó los toques y se ocultó entre las prendas de ropa de Uzui nuevamente. 

- Sabito~... Sabito~... 

Tomioka no se estaba sintiendo cómodo al pasar el celo fuera de su hogar. Estaba acostumbrado a encerrarse en su habitación con la camisa de secundaria de Sabito y las fotos que tenía de él, mientras se frotaba sus partes sensibles con el apoyo de una almohada para poder complacerse de forma poco invasiva cuando se sentía caliente por el celo. 

Por alguna extraña razón hacer eso le calmaba los dolores en su útero, a pesar de que nunca llegó a recibir una penetración que naturalmente apaciguara los síntomas del deseo de apareamiento. 

Ahora no tenía más opción que aguantar los calambres y el calor agobiante sobre su piel olfateando el olor de Tengen, ya que esa esencia era lo único que le brindaba tener una pizca de cordura. 

El aroma de Tengen le gustaba mucho. Era un olor fuerte y varonil, una fragancia que se hacía resaltar por su potencia y frescura, pero por más que le gustara no lo dejaba satisfecho. 

Necesitaba un aroma más cálido que le diera protección y confianza... Y todos sus pensamientos y lamentos siempre le llevaban a recordar a la misma persona. Giyuu mordisqueó una camiseta para calmar su ansiedad, y maulló entristecido recordando la sonrisa radiante de su Alfa cada vez que este le miraba a los ojos con un afecto que le aceleraba el corazón. 

Ya habían pasado 4 años desde que Sabito había fallecido en un lamentable accidente automovilístico, pero ese vacío en su vida todavía no era capaz de sanarse. Aún le generaba un dolor ardiente y profundo el trauma de haberse quedado solo de un día para otro, además de recordar el cadáver del hombre al cual amaba tanto estar con su cabeza desfigurada... 

Por qué tuvo que ver eso?... Qué les costaba corroborar su identidad a través de una muestra de ADN? El haber reconocido que su Alfa había muerto, y el haber tenido la capacidad de verlo en ese estado le atormentó en pesadillas todo un año... 

Hubiera deseado tanto haber sido marcado por Sabito antes de que el accidente ocurriera, porque así de seguro se habría muerto de pena y no habría que tenido que sufrir tanto su soledad... 

Lo extrañaba tanto... Todas las memorias felices junto a él surgieron de lo profundo de su memoria para empezar a torturarlo e incitarlo a llamarlo más, como si tuviera esperanzas de que Sabito acudiera a su llamado. 

Eso era algo inútil, porque el que sentía que estaba siendo llamado con los maullidos del Omega era Tengen. 

Uzui suspiró acomplejado y se tocó el pecho, sin saber si acudir a donde el Omega o no. No quería invadir su espacio personal ahora que estaba vulnerable, pero el llamado era demasiado fuerte... Él quería acudir aunque el llamado no fuera para él. 

Tengen se llenó de valor y entró a la habitación con un paso lento para no espantar al Omega, quien se refugiaba en su nido improvisado de prendas de vestir. 

- Giyuu? Pequeño Omega, estás ahí dentro? 

Uzui se sentó en el borde de la cama y sonrió de forma gentil, acariciando el bulto que formaba Tomioka al estar dentro del nido. 

Giyuu se asomó un poco con curiosidad, pero emitió un gruñido y se ocultó otra vez. 

- Quiero a Sabito~! Voy a esperar aquí a Sabito~! 

Sus maullidos estaban al borde del llanto por la desesperación a causa de la tristeza y su dolorosa excitación. Tengen sonrió sutilmente y siguió acariciando la cabeza de Giyuu. 

- Por supuesto, Giyuu. Puedes esperar aquí a tu... Sabito, okay? Él, bueno, no sé quién es, pero si lo llamas tanto de seguro vendrá. 

Le dolía incitar al Omega a estar con otro Alfa, pero en el tono de voz de Tomioka podía sentir su angustia por llamar a ese tal Sabito. No iba a negarle su derecho de estar enamorado e interesado en otro Alfa, porque eso básicamente no le correspondía. 

- Sabito~! 

La voz de Giyuu cada vez se iba llenando de más frustración al ver que sus súplicas no daban ningún resultado. Tengen le dio unas palmaditas en la cabeza y lo siguió acariciando. 

- Tranquilo, Giyuu! Ten un poquito más de paciencia. De seguro ya no tarda ese Sabito... Tus llamados son demasiado fuertes! 

Las palabras de Tengen no lo consolaron, a lo que Giyuu apretó las sábanas de la cama con todas sus fuerzas y cerró los ojos fuertemente. 

- AGHHH! 

Giyuu emitió un repentino grito de frustración, sobresaltando al Alfa a su lado. Tengen se quedó en blanco y miró con curiosidad a Giyuu, quien ahora empezaba a llorar de forma desconsolada mientras que su cuerpo se sacudía y lanzaba golpes en todas las direcciones para liberar su enojo. 

Estaba harto de sentirse solo. Estaba harto de llorar y rogar por tener a Sabito de vuelta... Era demasiado doloroso y frustrante! Por qué no podía parar de llamarlo cada vez que estaba en celo...?

- Hey, Giyuu! Tranquilo, shhhh, shhh! Todo va a estar bien, tranquilo~... No llores, porque te va a doler la cabecita y no te vas a sentir bien~

Tengen atrapó a Giyuu entre sus brazos e intentó calmarlo a base de caricias y susurros, ya que se encontraba en un estado demasiado inestable y de vulnerabilidad. 

Jamás había visto a un Omega tan alterado durante el celo... O por lo menos no de forma agresiva. 

- Sabito me dejó~! 

Giyuu gritó llorando, sintiendo un profundo dolor en la garganta a causa de la angustia. 

- Sabito me dejó solo~!! No quiero estar solo~! Me da miedo~! 

- Qué...? Tomioka, de qué hablas? 

Tengen lo agarró del mentón suavemente y le intentó secar las lágrimas de la cara, pero le resultó imposible porque el Omega no paraba de llorar. 

- POR QUÉ ME QUITARON TODO LO QUE AMABA!? POR QUÉ UN AUTO ME ARREBATÓ A MI SABITO!? NO! NO! 

Uzui emitió un jadeo de sorpresa y se quedó en shock. A qué se refería el Omega...? Un accidente? Oh no... 

De seguro ese Alfa que Giyuu llamaba con tanta desesperación estaba muerto, por algo reaccionó de una manera tan violenta y entristecida... Le dolió el corazón al ver sufriendo tanto a Tomioka... 

Además, le hacía sentir una carga emocional horrible, recordando un accidente automovilístico en el cual estuvo presente 4 años atrás. 

No había sido su culpa, pero... Aún así se cuestionaba el por qué había salido ese día a comprar cosas al supermercado... 

Recordaba haber frenado en un semáforo cuando aquel todavía estaba de color amarillo, pero el auto detrás de él iba tan acelerado que pasó de largo y lo chocó. Aquel empuje le hizo colisionar un vehículo pequeño contra un muro, causando la muerte de un joven de 17 años que se encontraba en el interior... 

Mierda... No le gustaba pensar en eso... 

Aún recordaba el aroma a caucho por las ruedas quemadas y el olor putrefacto a sangre al interior del vehículo al que chocó, y la imagen perturbadora del cuerpo con su cabeza aplastada a causa del parabrisas y el techo... 

Tengen suspiró y acurrucó a Giyuu entre sus brazos, llenando sus mejillas húmedas con besos delicados y unas cuantas caricias con sus dedos pulgares. 

- Hey, Omega, mírame... Sé que te duele y que quieres gritar, pero te prometo que vas a superarlo... Confío en tí, amor. Eres... Eres más fuerte de lo que crees. 

Giyuu sollozó y miró a los ojos a Tengen tratando de calmarse. Le era difícil porque todavía seguía mareado y caliente. La combinación de esas dos cosas junto a la impotencia eran una muy mala mezcla. 

- Tengen... Sniff... No sé que voy a hacer... No puedo olvidarlo... Sniff... Siento que mi corazón se rompe cada vez que yo... Sniff... Pienso en él... 

Uzui lo miró apenado y volvió a tocarle la cara para llamar su atención. 

- No pienses en el desenlace amargo que ha tenido todo, Tomioka... Piensa en los momentos felices que tuviste con ese Alfa. Te arrepientes de esos momentos? 

- H-hmm... Sniff... N-no... 

- Entonces por qué estás llorando? No sería mejor agradecer que tuviste la posibilidad de vivir tan buenos momentos? Como dice un dicho que leí por ahí, es mejor amar y perder que no haber amado nunca... Tomioka, por favor no te tortures con esto... Si de verdad lo amaste tanto, que ese amor perdure en tu corazón como un recuerdo bonito y sonríe cada vez que pienses en él... Estoy seguro de que Sabito prefiere que lo recuerdes de esa manera... 

- T-Tengen...

Tomioka le miró a los ojos y sus sollozos se calmaron un poco. El apoyo y comprensión de Uzui eran lo que él había estado deseando todos esos años de soledad... Alguien que le dijera lo positivo de su pérdida en vez de lamentarse junto a él... 

Repentinamente el aroma del Alfa se le hizo más exquisito. Giyuu ronroneó y se acercó un poco más a Tengen, olfateando su nuca. 

- Tomioka? Ahora qué haces? Ya no estás triste? 

Giyuu se acurrucó en el cuerpo de Tengen y se secó las últimas lágrimas de sus ojos, para después darle un beso en la mejilla al Alfa. 

Uzui se estremeció al sentir los delicados y húmedos labios de Giyuu contra la piel de su mejilla. 

- Tengen~! Yo... Yo te quiero mucho~

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Hola a todos!! Cómo están? Por fin estoy saliendo de mi bloqueo creativoooo!!! 😭😭

Me costó mucho escribir esto, así que espero que les haya gustado jsjs tengo unas cuantas ideas para los próximos capítulos, pero quería saber si ustedes querrían que las cosas entre Giyuu y Tengen avancen rápido o no 😳

Opiniones del capitulo e ideas las pueden dejar aquí como siempre! Todo es bien recibido y lo aprecio mucho ❤️❤️

Siguiendo la temática del capítulo pasado (poner una preguntita) qué les gusta hacer? Es decir, algún hobby o algo así? A mí aparte de escribir me gusta dibujar. Aquí les dejo unos dibujitos que hice la otra vez :D 

Sin nada más que decir, muchas gracias por leer este nuevo capítulo! Cuídense mucho! ❤️❤️