Dignidad podemos definirla como la cualidad del que se hace valer como persona, se comporta con responsabilidad, seriedad y con respeto hacia sí mismo y hacia los demás y no deja que lo humillen ni degraden.

Después de salir del hotel me dirigí a casa de Tae, el sentimiento de estar perdida me estaba ahogando, necesitaba ayuda, esa persona no era yo, como permití que me lastimara de esta manera, en esta ocasión no solo fue rudo, me había golpeado, no podía volver a pasar.

Tae solo me miró segundo- no te queda bien ese tono morado en tu hojo- intentaba reír pero podía notar la tristeza en sus ojos.

Con un cafe en mano y un HoSeok dormido en su habitación, comencé a contarle todo a Tae, desde el inicio hasta ese momento.

No se porque sentía vergüenza de mi, de permitir que dos hombres terminaran con mi tranquilidad, Tae me abrazo- que quieres hacer- beso mi frente- sabes que te ayudaremos en todo- me sentía tan segura.

Tae no me permitió ir a casa, decidió que me quedara con ellos el tiempo necesario para salir de ese agujero en el cual me había metido.

Los dias transcurrían bien, no voy a negar que en mas de una ocasión quería correr a los brazos de Jimin o llamar a Nam, pero por suerte tenia al VHope que me detenían.

Al llegar a casa, vi una figura muy bien conocida para mi, sentada en el sillón de frente a HoSeok y dando la espalda a la entrada.

Cuando HoSeok me vio, como era de esperar se mantenía neutral, dirigi mi mirada a esa figura y fue cuando regreso a verme.

La mirada de Nam tenia una combinación de odio con preocupacion, al notar que se dirigía a mi no puede evitar ponerme nerviosa, al tenerlo frente a mi, levanto mi rostro tomando con sus dedos mi menton, sabia que estaba viendo, ese golpe que ya se estaba tornando verde, lo intentaba tapar con maquillaje pero si mirabas detenida mente se notaba, con su mano libre sus dedos tocaron donde estaba la coloración, note como su mandíbula se tenso, con cuidado, como si tuviera miedo de lastimarme, irónico pues no me podía lastimar mas de lo que había hecho, me rodeo con sus brazos, para poner su rostro en mi cuello, podía sentir su aliento tibio- lo siento- fue mas un susurro- todo es mi culpa- decía mientras se enterraba mas en mi cuello y me presionaba mas contra el.

No tardo mucho para que su móvil sonara, sabia quien era, se disculpo para retirarse inmediatamente, no puede evitar mirar con odio a HoSeok, el cual mientras esperábamos la llegada de Tae, me comento que el fue quien invito a Nam para contarle lo que había pasado, entendí que el miedo de HoSeok era que yo volviera a caer con Jimin, pero me aseguro que el y Nam se encargarían de que no se volviera a acercar a mi.

Un mes viviendo con los chicos me parecía mas que suficiente, pero ellos insistían en que me quedara mas tiempo, la verdad era incomodo, ya que algunas noches los chillidos y quejidos de Tae no me dejaban dormir, pero me hacia feliz que ellos lo fueran.

Tres dias de descanso coincidimos los tres, decidimos ir al centro comercial, necesitava comprar ropa y cosas de aseo personal.

En el centro comercial Tae parecía un niño pequeño emocionado con todo, y mas cuando vio la pista de hielo, corrió hacia nosotros pidiendo que entraramos a patinar, intentamos negarnos pero fue imposible.

Justo cuando íbamos a entrar a la pista lo vi nuevamente, el chico que en mis vacaciones se encargo de alegrarme cada momento, cuando nuestras miradas se cruzaron y el se dirigió hacia mi, pude sentir como mis mejillas se sonrojaban, era perfecto verlo ahi, igual de alegre, me alegraba volver a verlo, Yesung.