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Ya había salido de la ciudad, estaba en las afueras de Nueva York.

Leonardo miro hacia atrás, y su mente le trajo recuerdos de las misiones que tenía con sus amigos y sus hermanos.

- Hasta luego, Nueva York, jamás olvidaré de donde vengo - dijo y siguió su camino.

¿A donde exactamente?
No lo sabía, pero lo iba a descubrir.

Cada paso que daba se alejaba mas de la ciudad.

En las alcantarillas....

El primero en despertar fue Mikey, para hacer el desayuno.

Cuando llegó a la cocina vio la nota.

- ¿Y esto? - se acercó y la tomo.

Para mis hermanos y mi Sensei:

- Es la letra de Leo - dijo Mikey desdobló la hoja y empezó a leer.

Con cada palabra, cada letra, le daba ganas de llorar.

Pensaba que era una broma de Leo, pero Leo no hace esa clase de bromas.

Decidió ir a su habitación para ver que estaba dormido en su cama.

Al abrir la puerta y entrar en ella, estaba su cama acomodada como si nadie hubiera dormido ahí.

Las lágrimas salieron y fueron muchas.

- No es cierto... Leo... No - dijo Mikey, corrió a tocar la puerta de Donnie de Raph y le grito a Sensei.

- ¿Que sucede? - salió Donnie frotándose los ojos.

- ¿Porque tanto alboroto, Miguel Ángel?

- Mikey si esto es una broma... Te voy a -

- Leo se fue - dijo cortando a Raph.

- ¿¡Que!? - dijeron en unísono Raph, Donnie y Sensei.

- Leo dejo una nota, en ella dice que se iba de la alcantarilla - empezó a llorar.

- Tal vez esta en su habitación - empezó Donnie - debe de estar dormido...

- ¡No! - gritó Mikey. - ya fui esta vacía, su cama esta intacta

- Es posible que se haya ido a dormir con Casey o con April - dijo Raph para calmar a Mikey quien no dejaba de llorar.

- No - dijo Mikey - Velo por ti mismo..

Le dio la carta a Raph y la tomo, Donnie se junto para leerla.

Sensei consolaba a su hijo con un abrazo.

Donnie empezó a llorar y Raph no se lo creía.

- No puede ser... Leo.. Se fue - dijo en un susurro Donnie.

- Esto no esta pasando. - dijo Raph, pensaba en disculparse con el justamente hoy. - no debe de estar lejos iré a buscarlo.

- Espera - le dijo Donnie - llamalo - le dijo.

Raph tomo su T-phone y marco al número de Leo.

Se escucho el tono de un teléfono.

Donnie siguió la música y encontró el T-phone de Leo.

- Dejo su T-phone. - dijo Donnie.

- Iré a buscarlo si me doy prisa lo podre alcanzar.

- Te acompaño - dijo Donnie.

- Iré también - dijo.

Sensei leía la carta, y le salían lágrimas de sus ojos.

- Vayan por su hermano. - dijo Splinter.

Y corrieron a buscarlo.

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