La llevó a una habitación en el sótano donde se encontraba una gran cantidad de armas (aunque en realidad solo había un diseño para cada arma, por ejemplo, veinte espadas iguales, veinte arcos iguales, etc.), muy bien ordenadas. Todas con cierto estilo blancuzco.

Había espadas ligeras, claymores, arcos, lanzas y lo que parecían ser libros bien adornados.

—Woahhh increíble. —decía la joven con brillitos en los ojos, se sentía como en un cuento.

—Elije una, la que quieras. —dijo Lisa sonriendo. 

—¡Sii! Pero, tengo una duda...¿Porqué hay libros aquí también? Entre tantas armas. —ladeó la cabeza confundida. 

—Oh, son catalizadores. —sacó el suyo— Es muy útil, aunque te limita solo al daño elemental. —lanzó un pequeño rayo al suelo como demostración.

—¡Oh entiendo! ¡Es como ser hechicera! Yo también quie- —Lisa la interrumpió.

—Te advierto que necesitarás entrenar mucho si quieres usar catalizador, necesitas tener un buen control de tu elemento. —advirtió a la chica quien enseguida de oir lo dicho por la rubia comenzó a dudar de lo que quería— piénsalo mejor querida.

—Bueno...a ver, catalizador no, por lo que ya dijiste...espada normal no, porque es atacar a corta distancia y me matarán en un instante seguro...arco tampoco, se necesita puntería, cosa que yo no tengo...claymore menos, demasiado pesado, me caeré con todo y arma...lanza...ataque a larga distancia, ligera... —pensó un poco en su veredicto final y asintió para si misma luego de unos segundos— ¡Quiero la lanza!

—¡Buena decisión! —dijo Lisa mientras se acercaba a tomar una, la cuál después le entregó a ____ con una dulce sonrisa— Ahora esta Lanza de Favonius es tuya y de nadie más.

—¡Woahh esto se siente genial! —exclamó tomando en sus manos dicha lanza y mirándola por todos lados— todas las veces que jugué con la escoba de pequeña no fueron en vano. —dijo recordando como jugaba con sus primos a las luchas con las escobas de su abuela; a la vez que simulaba ataques.

—Ya que tienes tu arma deberías ir con los caballeros que están entrenando allá afuera, aprende lo que puedas.

—¡Entendido! —hizo un saludo militar fingiendo seriedad extrema, después sonrió y corrió con su lanza hacia donde de dijo Lisa; por suerte ya sabía exactamente a dónde ir, pues intuyó que el lugar donde vio a Kaeya en la mañana era en el que se reunían para entrenar los caballeros.

Al llegar, como era de esperarse había varias personas divididas en grupos distintos según su arma (lanza, arco, catalizador, claymore o espada ligera), aunque ninguno de ellos a excepción de cierto chico peliazul tenía visión.

—Vaya pero si eres tú, ¿Ya elegiste tu arma? —llamó su atención Kaeya— Genial, únete a los lanceros —señaló a dos chicos y una chica que entrenaban con maniquíes.

—¡E-entendido! —exclamó un poco nerviosa y fue a dónde le dijo.

La siguente media hora la pasó entrenando arduamente; después tuvo que irse para prepararse. Se dió un baño y como no tenía más ropa se vistió con la misma con la que había llegado a Teyvat, aunque no fuera apta para explorar (agradecía en su mente a la linda chica albina que había lavado su ropa la noche anterior, a quien por desgracia no pudo ni hablarle pues cuando notó que habían lavado su ropa, ella ya iba apresurada a otro lado)

Según el reloj de bolsillo (que le regaló Lisa) aún quedaban veinte minutos para reunirse con Bennett, así que decidió ir a la taberna de Diluc un rato antes de irse a su aventura.

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La mayoría eligió lanza <3

Corto capitulo para haberme tardado tanto, lo sé, lo siento, pero de hecho lo tenía escrito hace ya tiempo, solo que quería hacerlo más largo, aunque al final no lo hice y tarde más en actualizar...xd