POV Sonic.

Creo que solo me queda una opción, algo a lo que creí jamás acudir, pero no hay otra alternativa. Aunque antes de hacer eso quisiera ver por última vez a Amy, quiero saber cómo está, pero... ¿acaso será lo correcto?, ¿y si termino haciéndole daño de nuevo?. Todo esto es tan confuso, pero lo único que ahora pienso es en ella. ¿Debería ir a verla o irme antes de que algo peor suceda?... Sé que esto es una verdadera locura pero... iré al hospital, no podré irme tranquilo sin saber nada de mi querida Ames, solo espero que no suceda nada malo y ella este bien.

Desafortunadamente cuando Sonic se disponía a salir de la cueva se dio cuenta de que ya era demasiado tarde, el día estaba terminando y el sol estaba a punto de ocultarse. Otra noche de tormento había llegado y con ella quizá una nueva víctima.

Sonic: ¿Tanto tiempo estuve en este lugar? – Se preguntaba confundido pues parecía que el tiempo nunca avanzaba dentro de aquella oscura cueva, aunque claro, con tantas cosas en que pensar uno no se da cuenta de lo que ocurre a su alrededor y para Sonic ese era un lujo que no se podía dar. Sin previo aviso los últimos rayos de sol desaparecieron y con ellos también aquel erizo que todos conocían, ahora solo quedaba una bestia sedienta de sangre cuyo único objetivo es buscar una nueva presa.

Hospital 12:00 a.m

Un erizo azabache y una murciélago blanca se encontraban en el pasillo sentados en una banca; a pesar del carácter provocativo que siempre solía tener Rouge la situación en la que estaban la mantenía seria y pensativa, consideraba a Amy como una gran amiga, una de las pocas que realmente era honesta con ella y temía que algo malo le pasara.

Shadow: ¿Qué te pasa Rouge? – su rostro reflejaba algo de duda y preocupación.

Rouge: ¿Qué? – Se sorprendió por las palabras de Shadow, nunca antes le había preguntado cómo se sentía - ¿Y a ti desde cuando te importa lo que me pasa? – preguntó a la defensiva, pues en cierto modo le molestaba que hubiera tardado tanto en hacerle caso, siempre parecía que la ignoraba.

Shadow: Solo pregunto porque te he visto tan callada y ambos sabemos que tú no eres así – mencionó serio mientras se cruzaba de brazos – Pero ya en serio Rouge... ¿estás bien?

Rouge: Bueno... - dijo sorprendida, la preocupación de Shadow era algo nuevo en él – Solo pienso en Amy, no hay noticias de que esté mejorando, y ni siquiera ha despertado desde que llegó aquí – su mirada se tornó triste y para disimularlo bajó la vista, ella no quería parecer débil enfrente de Shadow, ¿Cómo lo tomaría él?

Shadow: Amy es fuerte, seguro que se pondrá bien... - mencionó con su actitud seria que siempre solía tener, sin embargo había algo de suavidad en su tono de voz, haciendo que se viera más amable que de costumbre.

Rouge: Si, eso espero...

Shadow: Yo... ahora vuelvo, no tardo. – y sin decir otra palabra más se levantó de su asiento y caminó por el largo pasillo hasta desaparecer dejando a Rouge un poco confundida por su actitud. Sin embargo después de unos minutos lo vio regresar con dos grandes vasos térmicos en las manos y al acercarse a Rouge le ofreció uno – Toma, creo que esto te hará bien, nos ayudará a pasar la noche – una vez que Rouge aceptó el vaso Shadow se sentó junto a ella.

Rouge: Gracias, el café siempre me relaja – comentó mientras le daba un sorbo a u vaso.

Shadow: No lo sabía... la mayoría de las personas consideran que el café altera los nervios – dijo como comentario para sacar algo de qué hablar y así distraer a Rouge de su preocupación.

Rouge: ¿Porque estas siendo tan amable conmigo Shadow? – Soltó finalmente - ¿acaso sientes lástima por mí? – a pesar de parecer algo exagerado, era demasiado extraño que Shadow la estuviera tratando así, en todo el tiempo que había convivido juntos el mantenía una actitud indiferente pero justo ahora estaba actuando más amable, ¿acaso solo era eso lo que el sentía?

Shadow: Claro que no Rouge, ¿cómo puedes pensar eso?, es solo que... me preocupas si, llevamos mucho tiempo de conocernos y eres mi mejor amiga, nunca antes te vi así, y aunque no lo creas me importas... y mucho. Solo trataba de ayudarte.

Rouge: Yo... -dijo sorprendida por las palabras de Shadow, nunca antes lo escuchó hablar así, después de todo este tiempo, realmente ella le importaba - no sé qué decir... gracias Shadow, por todo. – fue lo único que logro mencionar antes de ser interrumpidos por el sonido de su comunicador.

*Llamada por el comunicador*

Tails: Hey ¿cómo va todo por allá?, ¿Alguna noticia de Amy?

Shadow: Me temo que no Tails, todo sigue igual. – respondió por el comunicador.

Tails: Espero que pronto haya noticias, nosotros tampoco tenemos resultados de la búsqueda.

Shadow: Esa criatura es más lista de lo que parece.

Tails: Si, eso es lo que me temo... bueno me tengo que ir Shadow, avisen si tienen noticias.

Shadow: Lo haremos, hasta pronto.

*Fin de la llamada*

Rouge: ¿Alguna novedad?

Shadow: Me temo que no... solo nos queda esperar.

Casa de Tails 3:00 a.m

Un pequeño zorro estaba sentado frente a la pantalla de un ordenador vigilando a través de las cámaras cualquier actividad sospechosa. Sus amigos habían tomado la decisión de turnarse para vigilar y de esa forma hacer el trabajo más sencillo.

Tails: (¿Dóndes estas?... nos has causado muchos problemas a todos y ni siquiera sabemos qué es lo que eres) – se repetía en su mente mientras observaba detenidamente las cámaras, imaginando que en cualquier momento aparecería ante él un gran monstruo. Sin embargo todo el bosque parecía tan tranquilo que la simple idea de una bestia rondando el lugar parecía absurda.

Las horas pasaron, ahora eran las 4:30 a.m, y la criatura seguía sin aparecer.

Knuckles: Tails, creo que deberíamos abandonar la búsqueda por hoy... mira la hora, pronto amanecerá. No creo que aparezca ahora, debe saber que lo estamos buscando. – menciono adormitado mientras se tallaba los ojos, después de todo él tenía razón, a esa hora era prácticamente imposible que un monstruo así apareciera.

Tails convencido por las palabras de Knuckles y el cansancio que sentía desistió de su búsqueda y todos se fueron a descansar.

8:00 a.m Bosque de Grind Hill Zone

Un erizo azul inconsciente yacía en el suelo junto a un árbol. Poco a poco comenzó a despertar, su vista se veía borrosa pero conforme comenzó a parpadear se fue aclarando.

Sonic: Otra noche ha terminado... - mencionó para sí mismo mientras se daba una vista rápida y al no notar ningún rastro de sangre en él por un momento sintió algo de alivio. – Bueno, será mejor que me prepare para ir al hospital.

Casa de Tails 10:00 a.m

Tails: Parece que nadie se ha levantado todavía – mencionó al ver su sala vacía, había sido una noche en vela muy pesada y sin éxito. – Será mejor que prepare algo de comer para cuando los demás despierten. – y así el pequeño zorro se dispuso a hacer sus actividades diarias limpiando la sala y preparando el almuerzo para sus amigos, al ver que había terminado temprano decidió comenzar con la investigación de nuevo y al encender su ordenador se llevó una sorpresa que no esperaba. - ¡¿Qué?!, ¡¿pero cómo paso esto?! – Las cámaras de vigilancia de los robots estaban apagadas y mostraban un mensaje de error en la pantalla. Rápidamente Tails subió a despertar a sus compañeros - ¡Chicos despierten!, ¡algo ocurrió mientras dormíamos!

Knuckles: ¡¿Qué?!

Tails: Alguien destruyó los robots que enviamos al bosque. Según mis registros ocurrió a las 4:50 a.m.

Chip: Pero eso fue 20 minutos después de que nosotros nos fuéramos a dormir.

Knuckles: Esa cosa es muy lista, sabía que lo estábamos vigilando... Tails, ¿puedes recuperar el video de las cámaras?

Tails: Si, toda la información que los robots recopilen es enviada a una base de datos por si ocurría algo como esto pero... me tomará unas horas recuperarlo.

Knuckles: Bien, por lo menos creo que al fin podremos tener una imagen de la criatura.

Hospital 1:00 p.m.

Vainilla y Cream se encontraban haciendo guardia en el hospital, esperando con suerte tener alguna noticia de Amy. La preocupación las comía vivas, pues el estado en el que se encontraba su amiga era grave, la herida que sufrió fue profunda y había perdido mucha sangre, difícilmente se recuperaría de algo así.

Ambas conejitas se encontraban en las bancas del pasillo pues hasta que Amy no despertara nadie podía entrar a su habitación. Sin embargo eso no significaba que el lugar estuviera completamente asegurado, pues cierto erizo azul había logrado colarse hasta la habitación por la ventana para evitar ser visto.

Lo que Sonic vio al entrar a la habitación terminó por llenarlo de culpa y arrepentimiento. Amy estaba inconsciente, conectada a muchos aparatos que emitían cientos de pitidos agudos y cuya función era mantenerla con vida, realmente había sido una pelea fuerte en la que se había enfrentado y aun no terminaba, pues ahora se encontraba luchando por vivir. Y para los ojos de Sonic esa escena le trajo un repentino recuerdo que surgió como una imagen, aquel momento justo cuando salto sobre Amy, la cara de terror que aquella eriza sentía al ser atacada por la persona que más amaba. Todos los sentimientos que Sonic sentía se descargaron sobre él de un solo golpe, haciendo que se sintiera aturdido y por un momento perdiera el equilibrio, sin embargo él sabía que no podía dejarse vencer, tenía que ser fuerte, era la última vez que vería a su amada antes de partir lejos. Así que una vez recupero su compostura se acercó a la cama de Amy y dejó junto a ella un ramo de rosas rojas, aquellas flores que siempre fueron las favoritas de Amy. Luego se sentó en una silla que estaba al lado de su cama y por unos minutos se quedó en silencio observando el cuerpo inmóvil de la rosada, pero escuchando atentamente el latido de su corazón. Los minutos parecían eternos y llenos de agonía, realmente le pesaba mucho ver a su amada en ese estado. Después de estarlo meditando un rato decidió hablar.

Sonic: Amy... Lamento haberte causado todo este daño, por mi culpa estas así ahora... si tan solo te hubiera hecho caso... si tan solo te hubiera dicho la verdad... pero ya es tarde, ya no pueden ayudarme, ya no hay salvación para mí. Pero tú Amy, tienes que ser fuerte, lucha por vivir y no te rindas yo sé que tú puedes. Siempre has sido fuerte y valiente, has sido tan linda y amable con todos, no mereces lo que te está pasando y por eso tengo que desaparecer... es la única manera en que puedo dar fin a todo esto. Voy a extrañarte mucho, siempre fuiste y siempre serás mi gran amor Ames – Al decir eso se levantó de su silla y le dio un tierno beso de despedida a Amy – Te amo Amy... nunca lo olvides – En eso detectó el sonido de los doctores acercándose por el pasillo a punto de entrar a la habitación de su amada, sin embargo para cuando ellos abrieron la puerta aquel erizo ya se había marchado, dejando como único rastro de su presencia aquel ramo de rosas rojas.

Casa de Tails 4:00 p.m

Knuckles: Tails, ¿aún falta mucho? – preguntó aquel equidna impaciente, aunque claro, ¿quién no estaría desesperado por encontrar aquello que habían buscado por tanto tiempo?, las horas se habían hecho infinitas y sentían que aquel misterio terminaría esfumándose, aquella sensación no dejaba de molestarlo.

Tails: No te preocupes ya casi acabo – mencionó mientras tecleaba algo en su ordenador, había estado trabajando muy dura durante varias horas y no descansaría hasta terminar. De pronto en la pantalla apareció el mensaje "cargando" y después de 5 minutos apareció el video que tanto habían estado esperando. – Muy bien, es hora de ver que captó la cámara.

CONTINUARÁ...