Narrador:

-¡UNO! -grito Hoseok con una sonrisa victoriosa en el rostro, soltando una risa burlona, al igual que su ultima carta en el centro de la mesa-.

-¿¡Que!?-vocifero Jin con un puchero en sus labios y poniendo exageradas expresiones de sufrimiento-¿¡otra vez!?-reclamo Jin mientras tomaba un poco de tequila puro y hacia una expresión de asco y dolor-estoy seguro qué haces trampa...

El rubio mas bajo soltó una pequeña sonrisa al ver la discusión de ambos, viendo su baraja de carta y planeando cual seria su siguiente movimiento para poder ganarle de una vez por todas al mayor de anchos hombros.

-Ni pienses que me vas a ganar, rubio enano-advirtió con aura de competencia y una burlona sonrisa en sus gruesos labios-.

El mayor sonrió jocosamente antes de tirar una de sus cartas y reírse por lo gracioso de la situación o por la cantidad de alcohol que ya había en su sangre, quedándose únicamente con una carta.

-¡UNO! -grito con alegría el mayor, a punto de pararse del suelo y comenzar a bailar-.

Yoongi sonrió, esperando pacientemente a que el mayor cometiera el error de no lanzar ninguna carta especial. Afilo sus gatunos ojos y soltó una carcajada que pinto una sonrisa en el pelirrojo y una mueca de confusión en el mayor.

-Te salto, agarras dos, reversa, agarras cuatro y ¡UNO! -grito yoongi con una sonrisa victoriosa y lanzado su ultima y única carta a la mesa, ganándole de manera arrasadora al mayor-.

Se escucho la particular risa del pelirrojo, acercándose a yoongi y simulando con sus manos tirar billetes y colocando una "corona" en la cabeza del mayor.

Jin tiro su carta con una cara llena de fastidio, sintiéndose muy humillado por un enano como yoongi. Aparto el vaso con la mezcla fuerte de alcohol, agarrando la gran botella de whisky y haciendo fondo blanco directamente del pico de la botella, vaciándola de una.

-Oficialmente cortó nuestra amistad-expreso con un poco de dificultad el mayor, provocado una estruendosa risa por partes del pelirrojo y una bonita sonrisa de encías rosadas en el mayor-f-fuera de mi empresa...

Hoseok abrazo al mayor, llevándolo abrazado hasta el sofá y acostándolo mientras restregaba su nariz en el cuello del mayor y le brindaba mimos amistosos al alcoholizado castaño.

-Quede a comer en casa con Nammie en quince minutos-hablo el castaño mientras cerraba sus ojos por unos segundos, disfrutando de las inocente caricias del menor y hacia un pronunciado puchero-¿ahora como le explico que me emborrache jugando UNO?

Nuevamente las risas se hicieron presente en la oficina del mayor, quien había recibido horas antes a ambos menores, enganchándose en su tonto juego alcohólico antes de trabajar.

-Será mejor que llame a un taxi-rio de manera ahogada, parándose del sofá y agarrando su teléfono-¿ustedes harán algo?-pregunto mirando a ambos menores, bajando y subiendo sus cejas de manera sugerente, provocando un leve sonrojo en el pelirrojo y una extraña mueca en el rubio-.

-No, no tengo nada que...-fue interrumpido el rubio por el enérgico menor, quien lo abrazo por el hombro y lo atrajo a el en un abrazo-.

-Yoongi y yo iremos al centro comercial del centro a visitar algunas tiendas de ropa-explicó con una sonrisa, contagiando al castaño mayor y confundiendo al rubio-.

-P-Pero yo...-fue interrumpido nuevamente por Hoseok, quien jalo de la manga de su camisa, guiaba afuera de la oficina del mayor-.

-¡Suerte!-grito el mayor antes de ver como ambos menores abandonaban la gran oficina-.

Narra Yoongi:

Fui literalmente arrastrado por Hobi hasta un centro comercial muy grande, uno del cual estaba seguro que jamás había pisado en mi vida.

Entramos y lo primero que note era la gente que entraba y salía...

Ahora sabía porque que nunca lo había conocido o siguiera había pisado el lugar. Aquellas personas que entraban y miraban por las vidrieras cargaban entre manos 5 a 6 bolsas de todas marcas que no conocía, pero que se veía a leguas que eran de alta costura y muy caras.

-Hobi...-lo llame delicadamente. No quería arruinar la "salida" y mucho menos borrar su bonita sonrisa blanca-entiendo que te encante cualquier tema que tenga que ver con la ropa y la moda en si-agregue cautelosamente, avergonzándome al ver que volteaba a verme fijamente a los ojos-pero...¿que hacemos aquí?

-¿No es obvio? -pregunto con una sonrisa burlona-¡vamos a cómprate ropa!

¿Que? ¿Ropa? ¿En este lugar de ricos?

-Hobi, no se si lo olvidas, pero te recuerdo que yo vivo de mi escaso sueldo-hable con una expresión de incredulidad en mi rostro-cualquiera prenda de cualquier de estas tiendas sale mas caro que mi sueldo de tres meses...-un puchero involuntario se pinto en mis labios, provocando una pequeña risa en el menor-.

-Sigo pensado que te sobre explotan...-dijo con el ceño confundido mientras miraba al suelo y algunas vidrieras de las tiendas cercanas-de todas maneras planeaba comprártela con mi dinero-sonrió plenamente, como si la repuesta que había dado fuera muy casual-.

-¿Que? ¡No!...¿como crees que voy a permitir que pagues por algo que yo usare-me negué, parando en seco la tranquila caminata-suficiente fue con la ropa que Jin me dio para que ahora tu tengas que gastar el dinero de tu esfuerzo.

Reclame, tratando de convencer al pelirrojo sobre que todo esto era una locura de su parte. Baje mi mirada al sentir como hobi me miraba atentamente, soltando luego un pequeño suspiro y pintando una comprensible sonrisa de corazón en sus rojizos labios.

-Si te hace sentir mejor, dejare que me pagues toda ropa en cuotas...-ofreció agarrandome de mis hombros-pero hoy si o si tienes que estar muy bien presentado-sonrió con entusiasmo y con una clara sonrisa de complicidad-Jin te tiene muy buenas noticias.

Abrí los ojos sintiéndome cohibido por las palabras del menor, pero contagiado por la energía y felicidad que su sonrisa detonaba.

Sonreí quedándome callado, dandole entender a Hoseok que ya no iba a rechistar mas con la idea de entrar a todas aquellas tiendas.

Hobi sonrió en grande, formando un corazón en sus labios y agarrando mi mano para jalarme apresuradamente dentro de una tienda con el nombre de "Calvin Klein"

Esto seria una tarde interesante...

Narrador:

-¡Jimin, por favor!-suplico mientras ejercía fuerza, tratando de empujar el menudo cuerpo del menor-¡un día de shopping no te hará daño! -empujo nuevamente el castaño con fuerza, lo cual no era tarea fácil por la resistencia que estaba poniendo él pelirosa-.

-Te dije que no quería venir...-hablo sin gana alguna, con el cabello algo desaliñado y la ropa extrañamente sin combinar- llévame a mi casa Yugyeom.

-¡No puede ser! Ni siquiera te pareces un poco al Park Jimin que vino del aeropuerto, al Jimin que me contó muchos planes y pinto en los medios muchas expectativas de triunfo! -vocifero con un tono de reclamo en su voz-desde que llagaste del aeropuerto lo único que haz hecho es encerrarte en tu casa, encerrarte en tu habitación y encerrarte en tu mundo...-hablo con sinceridad, preocupado por el estado de su amigo-¿quien eres...?

El pelirosa suspiro, sabiendo que el castaño tenia razón en todo loq je que decía...

¿Quien era? ¿Porque ni siquiera sentía sus pensamientos como propios?

-No lo sé-hablo agachando la mirada, sintiéndose avergonzado y muy confundido, en un conflicto interno de emociones-no sé quien soy...

En ese momento el teléfono de Yugyeom sonó, haciendo eco en los oídos del mayor y sacándolo de los pensamientos en los que se había hundido por unos segundos.

-Espera un segundo...-hablo suavemente mirando directamente a los ojos de jimin, para luego voltearse y alejarse unos metros para atender la llamada-.

El mayor se quedo callado, viendo como el castaño se alejaba para atender una de esas llamadas que solo significaban entrevistas, reuniones, desfiles y mas cosas que solo lograban cansarlo y sofocarlo hasta el punto de querer llorar toda la noche.

¿Que le ocurría? ¿Porque todo se sentía tan impropio y tan alejado a lo alguna vez soñó?

¿Porque cumplir sus sueños ya no se sentían tan correctos? ¿Que era esa sensación de vacío absoluto?

De pronto su corazón comenzó a acelerarse y su respiración comenzaba a ser pesada, su garganta se cerro y sus párpados pesaban como si de ellos colgaran dos piedras pesadas y gigantes.

Comenzaba a atraer las miradas de todas aquellas personas que pasaban cerca de el, murmurando cosas y riendo ocasionalmente del raro ritmo de respiración que llevaba el pelirosa.

Miró para todos lados, sintiendo como las miradas de los demás atravesaban sus pensamientos, su cuerpo y como todos sus secretos parecían ser regalados y estaba siendo juzgado por ello.

Retrocedió varios pasos, comenzado a sentir como sus piernas comenzaba a perder fuerza y como sus ojos comenzaba a picar en angustiosas lagrimas.

De repente sintió chocar con alguien que venia en la dirección contraria, haciendo exaltar y sentir mas desorientado que nunca...

Volteo rápidamente, viendo enfrente de sus vidriosos ojos a un chico rubio y ojos rasgados como los de un felino.

-¿J-Jimin?-pronunció con confusión y absoluta sorpresa en su voz, perplejo de tener al menor enfrente suyo en un estado tan deplorable.

Abrió sus ojos, no pudiendo creer que la persona que estaba enfrente no era ni mas ni menos que el mismísimos Min yoongi, aquel chico que desgraciadamente reinaba hasta en sus horas de insomnio y que llego a odiar tanto como llego a amar...

Su respiración fallo por unos segundos, sintiendo de un momento a otro una horrible punzada en su cabeza.

De pronto todo se volvió negro y lo ultimo que sintió fue el duro impacto contra el suelo...

¡EL YOONMIN OTRA VEZ JUNTOS, PERO NO COMO TODOS PENSARON!

¡GRITEN CONMIGO...AHHH!❤

Ya me calmo xd

Agregaré un capitulo mas para que la historia termine en el capitulo 35❤💛💙

Espero que les haya gustado por lo menos un poco 💙❤💛

Estaré leyendo y contestando todos los comentarios👀❤

Por cierto...

Hice por primera vez un edit de tipo "manipulación" y me hace mucha ilusión mostrárselo :,3

(Así se ve originalmente) ❤️

(Editada por mi ;-;)💚

Futuro: ahhh recuerdos D:

💛💛¡Las amo mucho! 💛💛

Adiós~🎀