🥀25🥃
Eran las 1:18 AM y el ancora del reloj no dejaba de hacer eco en la pesada oscuridad de aquella sala. Las velas se encontraban a unos minutos de consumirse y que la tenue llama se apagara completamente y la leve iluminación se apaciguara hasta la oscuridad completa.
Los platillos de comida que con tanto labor y paciencia se habían preparado ahora se encontraban completamente fríos y insípidos.
La chimenea que había estado conservando el calor del ambiente comenzaba a apagarse, al igual que el brillo y la ilusión del joven peligris que aun tenia un pequeño atisbo de esperanza de que el chico de blondo cabello tocara la puerta y le explicara el porque no había llegado a su cita...
Con cada hora que pasaba su frágil voz interior excusaba la ausencia del mayor.
"Seguro se le presento un problema en la oficina"
"No pudo haberme dejado plantado sin razón ¿verdad?"
"Yo se que vendrás, estoy seguro que en cuanto menos lo piense ya estarás aquí conmigo"
Soltó un gran suspiro, sintiendo como la angustia y el disgusto calaban por su garganta y se alojaba como pequeñas lagrimas llenas de impotencias en sus vidriosos ojos.
Agarro su teléfono y lo reviso por octava vez luego de haber intentado comunicarse de todos los métodos posibles.
Había mandado mensaje tras mensaje y lo único que tenia de respuesta por parte del mayor era dejar en visto todo aquellos mensajes.
—Yoongi ¿donde estas?
Dijo con la voz tan apagada como las expectativa que tenia de esta "cita perfecta". Se recostó en la silla con un puchero pronunciado y miro el reloj mientras sorbía su nariz y limpiaba un poco sus llorosos ojos.
De pronto la sala se alumbro tenuemente y el sonido del teléfono con una nueva notificación de mensaje había hecho eco en toda la sala.
El peligris salto en su asiento y una sonrisa ocupo todo el espacio en sus labios, de repente todas las ilusiones que se encontraban casi muertas ahora saltaban de la alegría y emoción.
Agarro su teléfono sin borrar su sonrisa en ningún momento. pero gran fue su sorpresa cuando vio que el mensaje no era de yoongi, sino de Taehyung...
Frunció el ceño en confusión ¿porque le hablaría a estas horas? ¿No se supone que estaba enojado?
Sin mas abrió el chat de Taehyung y comenzó a leer los múltiples mensajes que le había mandado el menor.
Abrió los ojos, sintiéndose completamente perplejo y confundido.
¿Porque yoongi estaría con taehyung?
Nuevos mensajes llegaron y no pudo creer lo que sus ojos leía.
¿Que lo hacia por su bien? ¿Que lo conocía muy bien?
¿De qué reglas y de qué juego hablaba taehyung?
Un último mensaje llegó y este no era nada mas y nada menos que un video...
Se debatió internamente de si debía de hacerle caso a los mensaje de taehyung o solo pensar que es una broma del menor para disgustarle la vida. Pero su curiosidad fue mas grande, asi que abrió el video.
Todo se veía oscuro en el video y lo único que se escuchaba eran respiraciones erráticas y el sonido de un pequeño chirrido.
De pronto un claro gemido se reproducio en el video y no necesito mas para entender lo que estaba sucediendo...
Su corazón apretó con fuerza y su respiración le fallo por unos largos segundos. Los sonidos lascivos seguían sonando, llenado la sala y haciendo eco en los oídos del peligris.
Su garganta se cerro con fuerza y las lagrimas no tardaron en salir con agresividad de sus ojos. Se sintió desvanecer cuando del video sonó la voz de su mejor amigo pronunciando en ahogados gemidos el nombre del rubio.
No aguantando mas agarro su teléfono y lo estrello contra el suelo, con el único deseo de que dejara de sonar aquellos asquerosos sonidos que no dejaban de hacer eco en su cabeza.
Soltó un sollozo grande al darse cuenta lo estupido que había sido el haberlo esperado, el haberle preparado un velada para ambos y el haberse permitido enamorar...
Agarro una de las puntas del blanco mantel y jalo con fuerza, tirando todo al suelo y haciendo que las copas y platos de cristal se rompieran en múltiples pedazos.
—¿¡Porque!? —gritó con fuerza mientras se tiraba al suelo al sentir sus piernas fallar y su ojos arder con demasía—.
Soltó un jadeo cuando sintió como uno de los cristales atravesó la piel de su mano, contándolo profundamente.
Sollozo mas alto. Ahora no solo tenia el dolor de su corazón roto, sino también el de la cortadura en toda la extensión de su palma.
Nunca le había gustado celebrar su cumpleaños...pero este era definitivamente el peor de todos.
Se levanto como pudo y corrió lo mas que sus débiles piernas le permitieron, saltando de una a la extensa cama y agazapándose debajo de las grandes sabanas. Importándole poco marchar todo de sangre.
—¿Porque yoongi? ¿Porque? —pregunto al aire mientras hundía su rostro en la almohada y se desvanecía en lágrimas y alaridos completamente dolorosos—.
¿Era posible que alguien rompiera tu corazon, y sin embargo seguir amandolo con cada uno de los pedacitos rotos que aún quedaban?
Los tenue rayos de luz que se filtraba por la persiana de la ventana se colaron dentro de la habitación, golpeando directamente a los párpados del adormilado rubio, quien parpadeo confundido y aturdido por no poder inferir lo sucedido en la noche anterior.
Intento reincorporarse apoyándose en su hombro. Pero callo nuevamente al colchón al sentir un gran dolor en toda la extensión de su torso.
Soltó un alarido ahogado y parpadeo varias veces para acostumbrar su visión a los rayos de luz.
De repente una pulsada en su cabeza se produjo, trayendo vagos recuerdos de la noche anterior.
Levanto la mirada y percibió con sobresalto que se encontraba en su cama, en su habitación, en el intranquilo sentimiento de desasosiego de su hogar.
Sujeto su cabeza, los recuerdos comenzaban a golpearlo como Valdés de agua helada...
Soltó un gruñido sintiéndose completamente aireado al recordar el rostro del peligro, de sus palabras y aquella habitación de hotel.
Se paró de la cama y como pudo corrió al baño, tropesandose con todo, pero importandole poco cuando lo único que quería es comprobar que todo había sido un mal sueño, una jugada de su subconsciente para hacerlo sufrir.
Subio el interruptor de la luz y en la claridad de la luz artificial pudo ver su Blanca piel invadida de marcas moradas y rasguños.
En el costado de su cuello se encontraba una gran marca morada, se podía apreciar con facilidad unas pequeñas marcas rojizas de dientes en todo alrededor.
No era un sueño...
Era la realidad, la cruel y verdadera realidad que lo estaba golpeando con rudeza y sin compasión alguna.
Sintió su garganta cerrarse y como sus ojos se empeñaron en amargas lágrimas. Su respiración se convirtió rápidamente en una errática y las piernas que lo sostenían de toda esta basura comenzaron a fallarle.
Retrocedió torpemente hasta chocar con los azulejos, soltando el primer fragoso sollozo, deslizándose lentamente hasta tocar el suelo y hundir su rostro contra su rodillas, sintiéndose completamente destruido.
El no quería que las cosas terminaran así...
No quería que jimin lo odiara, no quería que lo rechazara.
Pero...¿como jimin iba a quererlo ahora que el había sido marcado y manchado por el que se supone que es su mejor amigo?
¿Como iba a acercarse al menor sin sentir asco de si mismo?
...
Si esto era un cruel sueño, solo quería despertar y estar a un lado de la persona que amaba.
Pero lo único que lograba pensar era que efectivamente todo era un sueño.
Uno en el que soñaba que me querías y que teníamos un futuro juntos...
Pero desperté y me di cuenta que todo es una farsa.
◇°•○♡○•°◇
E
spero que les haya gustado :')
Perdón por la tardanzay los problemas que presente por mi inseguridad:(
Prometo no tardar tanto en publicar el siguiente capítulo ☆
(Pronto se viene algo que muchas esperaban☆) >:)
En fin...
Las amo mucho y mucho gracias por leer y estar aquí 💜
Este cap va dedicado a tatis_Rubiano 💜💜💜🍷
Nos leemos pronto~
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