La puerta principal se cerro atrás de ambos y el se volvió a mirarla con su cuerpo hecho para el pecado y su cara absolutamente angelical. Ella le sonrió con ternura y paso un mechón de cabello negro detrás de su oreja.

--Gracias por.....

Jos corto sus palabras pegandola contra la pared y atrayendo su cuerpo. Inclinó su cabeza y enterró su nariz en el cabello color noche de ella. El olor a flores y melocotón le impregnó las fosas nasales queriendo emborracharse de su aroma para siempre.

--Me encanta tu aroma.--murmuro aún con su cabeza enterrada en su cabello.

La beso lentamente desde su oreja, pasando por su mejilla, luego dejando un beso por su nariz y terminando finalmente en su boca. Su beso fue suave, lento y dulce. Sus lenguas comenzaron con una danza entre ambas mezclándose entre sí. Madison gimió contra sus labios al sentir el sabor de vino aún en su boca y se acercó más a él.

--Me encanta tu sabor.--mordio con suavidad su labio.

Una mano de el acarició desde su muslo hasta su cintura, la otra se posó detrás de su espalda. La atrajo aún más logrando que sus rodillas separaran los muslos de ella y sonrió con picardía mientras sus dedos le acariciaban en un movimiento lento y sensual la cintura.

--Me encanta todo de tí.--mordio el lóbulo de su oreja y la levantó haciendo que envolviera sus piernas alrededor de su esbelta cintura.

La condujo hasta la habitación de Jos y puso a Madison en la cama mientras él se quitaba la camisa de botones. La pelinegra miró con fascinación aquella habitación que contenía un aire poderoso y masculino al igual que Jos con todos aquellos adornos con la combinación de lo antiguo con lo moderno, posó luego su mirada en el y suspiro al ver la primera porción de piel desnuda. La mirada oscura de el se tornó aún más oscura y Madison sintió como se derretía.

--Como te odio.--el enarco una ceja interrogante.--Como desearía que dejarás de hacerme sentir así.

--¿En qué sentido?

--Con tan solo mirarme haces que me quemé. Odio como logras hacer eso con tanta facilidad, no es justo.

El sonrió sexymente.

--Y aún no te he acariciado como se debe.
--la levantó y acarició su mejilla.--Montre-moi ton jolie corps.

*Muéstrame tu hermoso cuerpo*.