Capítulo 13: Recuerdos antiguos y un problema nacido de un arreglo.

Creer en su corazón... Esa es su magia.

[Punto de vista de Akko]

Akko: así que han pasado diez años desde que desapareció... Me pregunto dónde estará Chariot y qué estará haciendo ahora...

Todos nos fuimos a un lugar apartado de todas después de lo que sucedió momentos antes, lo de la estatua viviente y... lo de esa chica grosera.

¡¿Quién se creé para hablarle así a los demás?!

Hizo sentir mal a México y habló mal de Chariot!

Eso nunca se lo perdonaré!

Lotte: al parecer, nadie en ningún lado sabe nada.

Pero... Tiene razón en algo.

Chariot desapareció... Y nadie sabe qué fue de ella.

Eso me hizo sentir mal... Quisiera saber que fue de ella.

Y también... Quisiera conocerla en persona y decirle lo mucho que me ha inspirado para entrar en este maravilloso mundo de la magia.

Había sacado mis cartas Shiny Chariot que una vez le enseñé a México en el tren cuando veníamos hacia acá y las acomodé todas en el pasto.

Y solo me limité a mirarlas mientras me abrazaba de rodillas.

Lotte: Oye, debió haber sido muy difícil coleccionar todas estas tarjetas.

Dijo Lotte de manera interesada y para calmar el ambiente... Supongo que notó mi mal humor.

Akko: Sí. Todo el mundo estaba loco por coleccionar sus cartas en la época de Chariot cuando yo era niña.

En eso... Recordé mis momentos de la infancia cuando iba a los mini mercados a comprar los sobres de Shiny Chariot y el cómo iba consiguiendo las tarjetas.

Y también... Cuando miré en una estantería de una tienda la tarjeta premium de Shiny Chariot...

Akko: Nunca pude conseguir la mejor tarjeta. Apesar... De que lo deseaba mucho.

Dije mientras posicionaba mi mano en un espacio vacío entre las tarjetas.

Sucy se había unido a nosotras sentándose cercas de nosotras.

Sucy: "El hongo del recuerdo del amor perdido".

Dijo Sucy mientras leía una tarjeta de las que estaban ahí, luego Lotte tomó otra tarjeta.

Lotte: esto es un unicornio.

Akko: "La sagrada bestia inmortal que protege la felicidad de la dama".

Lotte: ¿Te lo sabes de memoria?

Exclamó, Lotte, sorprendida, eso me levantó un poco los ánimos.

Akko: por supuesto, recuerdo todas ellas. Aunque siempre tuve problemas con la pronunciación de los hechizos.

Lotte: oh, esta me la sé.

Dijo mientras tomaba otra tarjeta

Lotte: Es la mariposa mágica.

Akko: "Papiliodia, la mariposa que viaja por los cinco continentes. Eclosionan solo una vez cada 120 años y dice la leyenda que traen esperanza a los corazones de los que las admiran".

?: *Suspiro pesado*

Pero, de la nada, se oyó un suspiro que denotaba cansancio.

Todas volteamos a ver a quien había suspirado de esa manera.

Y nos dimos cuenta que era nada más y nada menos que México.

Él estaba sentado cerca de un río que estaba pasando debajo de un puente ahí cercas de nosotras.

Parecía estar muy sumergido en sus pensamientos... Me pregunto qué estará pensando.

Pero, en eso, vi a Sucy levantarse y se acercó a él estando a un lado.

Sucy: oye, te encuentras bien?

Preguntó con ese mismo tono aburrido y desinteresado de siempre...

Pero México no respondió.

[Punto de vista del mexicano]

*Suspiro pesado* ..... Qué quieren que les diga?

Ya ni tengo ganas de seguir en esta puta escuela.

Lo único bueno es... ¡Nada!

Conseguí nuevas amistades? Sí.

Conseguí algo de provecho o que me beneficie? ¡No!

Estoy considerando irme de aquí, no creo que la directora se oponga.

De todos modos me sentí obligado a quedarme en este PUTO LUGAR DE MIERDA!!...

.

...

......

.........

............

................

Áargh! qué me sucede?!

Debes de tranquilízate, T/N!

Tal vez solo fue un mal inicio de clases! Todos han tenido uno, no?

Algunos se han equivocado de salón o llegaron tarde, otros vomitaron o no alcanzaron ir al baño a tiempo, otros se desmayaron en la asamblea y algunos ni siquiera llegaron a casa... ay.

Pero... A mí? Solo me hirieron sentimentalmente.

No es la gran cosa, no?

Antes ya me lo habían hecho y de la peor manera, pero, por alguna extraña razón...

Esta fue la más dolorosa de todas.

De todos modos esa niña, de familia famosa, rica o noble que no recuerdo su nombre, tiene razón.

No debí de andarme con tontas bromas con la profesora Finnelan... Vaya, me aprendí su nombre!

Pero bueno, ella solo hacía su trabajo, y yo? Solo estaba estorbando...

Odio admitirlo, pero... esa niña tiene razón.

Tal vez... Debo cambiar mi forma de ser, mis padres siempre han querido eso.

Ellos también han querido que entre de nuevo a la escuela... Les dolió cuando les pedí que me sacaran de ahí para trabajar.

Ellos no querían, se rehusaban a toca costa... Pero no quedaba de otra. Nuestra situación económica dependía tal vez de eso.

*Suspiro* en fin... Todo eso me llevó a este lugar... De algún modo.

Solo... Quiero que las cosas sean como eran antes...

Antes de entrar a esta escuela.

Antes de conocer la magia.

Antes de tomar ese tren.

Antes de irme de mi país.

Antes de "ayudar" a esa tipa.

Antes de ir por las tortillas.

Antes de meterme a trabajar.

Antes de..... "eso".

Y antes de salirme de la escuela.

¡Ni siquiera tuve una digna infancia!

Pero eso es lo de menos.

Gracias a mi, mis hermanos si pudieron vivirla... Casi todos.

...

......

.........

.............

¿Y ahora cómo llegué a este tema?

Será mejor olvidarlo antes de hundirme en el pasado... Y mejor me pongo a ver el presente... Para esperar el futuro.

Ahora, en dónde me encuentro?

Pues... No sé con exactitud como decirles, pero estoy en un lugar de la academia, de eso estoy seguro.

Era un lugar muy solo y muy relajante, algo que deseaba con todo el alma.

Akko, Lotte, Sucy y yo estamos como que en una especie de parque... Pero era parte de la academia.

Ésta escuela está más grande que mi colonia!

Akko y Lotte estaban sentadas en el pasto mirando las tarjetas... Digimon? Pokemon? Yugi-oh?...

Sepa cuál sea. La cuestión es, que las estaban viendo y hablando de no se qué cosa, pues ni les ponía atención.

Sucy estaba leyendo un libro de... Sepajudas.

Estaba en otro idioma, así que no se cómo decirles de que se trataba.

Y yo... Pues estaba cercas de un río que está cercas ahí.

Tenía los pies descalzos metidos dentro del agua.

Se sentía bien, aparte que hacía olvidarme de lo que había pasado antes...

......

Es más, ya ni recuerdo porqué estaba triste!

Siento que puedo con cualquiera que se me cruce!!

Sucy: ¿Sigues triste porque te humillaron hace rato?

Lotte: Sucy!

... Cierto, era por eso.

No me había dado cuenta, pero Sucy estaba a un lado de mí.

México: ahora lo estoy, gracias.

Le dije sarcásticamente mientras la miraba, pues si me sentía un poco mal por lo de hace rato, pero al menos lo estoy superando... De a poquito.

Lotte: no te preocupes, México. Algún día podrás mostrar el resplandor de tu verdadera magia.

Dijo, Lotte, creo que para intentar consolarme.

Y de algún modo... funcionó.

Su voz, al oírla, me relajaba... Era muy tranquila y te acariciaba al oído con solo escucharla.

Eso me hizo sentir... bien.

Me volteé para mirarla y para agradecerle con una pequeña sonrisa dibujada en mis labios mientras permanecía en el mismo lugar.

México: hmf, gracias, Lotte. Pero no creo que mi magia sea tan "resplandeciente" como crees... Y no creo tener una.

Akko: no digas eso!

Todos volteamos a ver Akko quien parecía seguir molesta.

Akko: yo sé y creo con mi corazón que tienes una magia resplandeciente en tu interior! Yo creo en tu corazón, México!

... Eso fue lindo, pero no me convencía.

Solo hizo enfadarme un poco, pues fue gracias a ella que pasó esto.

Yo solo le cuestioné sonando cada vez más molesto.

México: yo también creí en el mío, pero... ¿De qué me sirvió? ¿A caso logré hacer algo? ¿Logré hacer magia con tan solo creer en mi estúpido e inútil corazón?...

Dije mirando al río que corría bajo el puente y mirando mi reflejo mientras fruncía un poco el ceño.

México: Es obvio que era una gran farsa las palabras de esa maldita bruja payaso de los putos shows! Y por eso...

Dije lo último girando un poco mi cabeza para mirar a Akko por el rabillo del ojo y decirle de una manera muy furiosa...

México: ¡¡Por eso ya nadie habla de ÉSA ESTÚPIDA BRUJA!!...

Sucy: •-\) ...

Lotte: •-• ...

Akko: ;~; ...

Yo... estaba un poco enfadado... Aunque "poco" sería decir muy poco.

Estaba jadeando del cansancio, del estrés, del enojo y coraje por todo lo que me sucedió últimamente!

Pero me fui tranquilizando cuando me di cuenta de algo...

Mi intención no era sentir mal a nadie, pero... aún así lo fue.

Akko parecía como si le hubieran dicho la peor cosa del mundo... Y tal vez así fue.

Yo insulté a su mayor ídolo... A su mayor inspiración! La que la hizo tener un sueño que cumplir y tener ganas de venir a estudiar a esta escuela!!

Y todo lo anterior...! Lo dije sin pensar.

Solo saqué un poco de lo que tenía guardado... Desde hace mucho.

Y será la primera y última vez que lo haré.

Pues eso... Hizo sacarle unas lágrimas a Akko...

Soy una mierda de persona.

Ella no tenía la culpa!... Bueno, un poco.

Pero no merecía estar triste por mí culpa!

Sucy no parecía importarle el asunto, pero se veía sorprendida por mi "pequeño" arrebato de ira.

Y Lotte... Se veía incómoda.

En realidad soy un idiota...

No cabe duda que soy un grandísimo estúpido.

Solté un suspiro pesado para luego sacar mis pies de ese río y ponerme de pie.

Me acerqué a Akko quien estaba abrazada de rodillas en el pasto mientras miraba al suelo y... logré divisar unas lágrimas rodar por sus mejillas.

Eso me hizo sentir más peor de lo que estaba. Solo falta que me hagan algo malo con magia y ahora sí me habrá tocado todo lo malo del mundo...

Aunque no se si contar lo de la estatua...

Y será mejor no recordarlo!

Me senté a su lado mirando también el suelo... Para ser exacto, sus tarjetas de... De la bruja esa.

Quería pedirle disculpas, pero, por una extraña razón... se me dificultaba hablar.

Las palabras no me salían de la boca. Era como si me hubiera quedado mudo o que no pudiera abrir la boca por más que trataba.

Tardé unos segundos para tomar valor.

Inhalé un poco para hablar y decirle...

México: oye, Akko...

Pero ella... No volteó.

Solamente se giró un poco al lado contrario de dónde estaba para evitarme. Supongo que si está enojada conmigo.

Fruncí los labios y bufé con pesadez.

México: yo... Lo siento. No debí decir eso sobre... "Ella".

Dije haciendo énfasis en lo último, pues aún no me aprendía el nombre de esa bruja de los shows. Pero Akko seguía sin querer prestarme atención.

México: Ni siquiera pensé en lo que decía, solo... salió. ¡No debí hablar así de la persona quien te inspiró y te hizo tener un sueño!

Dije emocionándome un poco, para luego hacer que esa emoción se fuera.

México: solo...

Bufé otra vez con pesadez mientras miraba seriamente al suelo.

México: Debí callar y fingir que me sentía bien... Cómo siempre lo he hecho... No decir lo que pienso y guardar mis pensamientos para mí.

Eso hizo que Akko me mirara un poco.

México: yo... De alguna forma, te admiro.

Dije sonriéndole al suelo, pero, lo que dije, hizo que Akko me mirara con sorpresa.

México: tal vez sea muy tonta o muy simple la razón... Pero tú tienes un sueño que cumplir!

[Punto de vista de nadie]

Akko miraba atentamente al mexicano con sorpresa, mientras, el ya mencionado, miraba al suelo todo el tiempo.

México: Tú quieres hacer feliz a la gente con tu magia, y eso está bien! La gente necesita sonreír o divertirse de ves en cuando!

El mexicano, quien tenía una sonrisa pegada al suelo todo el tiempo, fue desapareciendo para que una mirada triste la remplace.

México: En cambio, yo... qué quieres que te diga? Ni siquiera tengo un sueño o meta por alcanzar...

Eso hizo que Akko estuviera confundida.

México: tal vez yo parezca una persona despreocupada o muy vaga que no le interesa las cosas que pasan, pero por dentro siempre me estoy muriendo de miedo aunque nunca lo demuestre. También puede que esté sonriendo la mayoría de mi tiempo, o tal vez parezca que sea feliz, pero... Es una simple máscara. Una máscara de felicidad para-

Akko miraba atentamente al mexicano, pero Lotte y Sucy también estaban atentas, pues el mexicano estaba hablando de más.

Y cuando el mexicano se dio cuenta de eso abrió los ojos y rápidamente sacudió la cabeza en negación.

México: O-olvida eso!

Dijo nerviosamente.

México: Yo... Solo quería pedirte disculpas, eso es todo. No debí hablar así de tu ídolo de la infancia y... Solo eso. Quiero saber si me puedes perdonar por lo que dije.

Al terminar de hablar, el mexicano miró a Akko y le brindó una pequeña sonrisa dibujada en los labios y con ojos esperanzados.

Akko miraba al mexicano confundida, pues se preguntaba que qué era eso de lo que estaba hablando. Pero el mexicano pensó que era por otra cosa.

México: bueno, digo yo...

Dijo desviando la mirada y volver a mirar el suelo.

México: Si no me quieres perdonar, está bien, entiendo la razón. Yo tampoco me perdonaría. Yo solo-

Pero fue interrumpido por Akko quien alzó la voz.

Akko: yo te perdono, México!

Y, acto seguido, se lanzó hacia el mexicano para atraparlo en un abrazo.

El mexicano abrió los ojos impactado, pues no se esperaba eso, esperaba cualquier cosa mala; un grito, una cachetada u otro golpe, unas groserías dirigidas a su persona... menos eso.

Pero Akko siguió hablando.

Akko: fue mi culpa en primer lugar! Yo te obligue a hacer eso aunque tú no querías hacerlo y me lo decías!

Y sin darse cuenta, Sucy se había acercado a ellos y sentándose junto a ellos... Otra vez.

Sucy: sí, fue tu culpa.

Lotte: Sucy!

Sucy: ¿Qué? Es la verdad.

Akko miraba a Sucy mientras hacía un puchero, luego posicionó su cabeza en el pecho del mexicano para seguir hablando.

Akko: yo... También te quiero pedir perdón, México! No quiero que te tortures así!

El mexicano seguía un poco impacto, pero muy sorprendido mientras miraba a Akko.

Akko: yo sé que tienes un sueño que cumplir, todos tenemos uno! Y si no tienes uno...

Al decir eso, Akko levantó su cabeza del pecho del mexicano y lo miró con unas estrellas en los ojos.

El mexicano seguía impactado.

Akko: Yo te ayudaré a encontrar el tuyo!!

Dijo con una inquebrantable determinación en su voz y ojos.

Y esos ojos... esa sonrisa... Al mexicano le recordó a alguien...

A alguien quien ya no estaba con él hace mucho.

Un recuerdo... Casi olvidado.

{~flashback~}

Tú estabas tranquilo en tu casa mientras tocabas la guitarra en un sillón de la sala principal.

Pero dos niñas pequeñas, de vestimentas estereotípicas de una bruja, se acercaron a ti.

Y una de ellas te preguntó...

?: ¡Hermano! ¿Nos puedes tocar una canción?

Tú te detuviste y las miraste, luego soltaste una pequeña risa y, con una dulce y fraterna sonrisa, les dijistes...

T/N: claro, ¿de qué quieren que se trate la canción, pingüicas?

Dijiste lo último en forma de burla a sus estaturas.

Las niñas, quienes ya sabes que eran tus hermanas menores, no lo pensaron dos veces y dijeron al mismo tiempo con una sonrisa, mirada y voz inquebrantablemente determinada.

Hermana 1 y 2: ¡¡DE BRUJAS!!

Arqueaste una ceja y volviste a dirigir tu mirada a tu guitarra diciendo, con el ceño un poco fruncido, mientras la afinabas.

T/N: aún no entiendo su fanatismo con esas cosas si ni siquiera existen!... O al menos yo sé que no son reales.

Tus hermanitas hicieron un puchero de manera molesta haciendo que tú te rieras.

T/N: Pero bueno, la vecina del 71 es una bruja según ustedes y sus amigos, no?

Eso ocasionó una pequeña risa de las niñas.

T/N: Pero... No digan que le dije eso, por favor... Ya sabes cómo es ella cuando le dicen así.

Dijiste mientras dabas una pequeña risa nerviosa.

Tus hermanitas, simplemente, asintieron mientras tarareaban su respuesta.

T/N: bien.

Usted, una vez ya terminando de afinar su guitarra, te acomodaste en tu lugar y les dijistes...

T/N: prepárense, enanas, ésta canción se llama...

Las brujas.

{~fin del flashback~}

Akko, Lotte y Sucy miraban sorprendidas al mexicano quien abrazó a Akko de repente.

Estaban sorprendidas, sobre todo Akko, quien no esperaba algo así, pero no solo por eso, sino que lo escuchaba sollozar en silencio...

El abrazo que el mexicano le brindaba... Era uno lleno de amor... Uno lleno de nostalgia... Uno lleno de fraternidad..... Uno lleno de arrepentimiento.

Y con una voz quebrada, le dijo en voz baja entre llantos y lamentos.

México: 'perdóname... Te lo pido por favor, perdóname... Yo prometo que te cuidaré a toda costa, no haré que te sientas mal otra vez... No volveré a cometer ese error... Daré mi vida por ti si es necesario...'

Al terminar de decir eso, aumentó la fuerza de su abrazo.

México: 'Yo te protegeré..... Lo prometo.'

{~Mientras tanto en otro sitio de la academia~}

En un jardín botánico de Luna Nova, estaban tres brujas mayores observando un árbol muy viejo.

Esas brujas eran nada más y nada menos que la directora Miranda Holbrooke, la profesora Anne Finnelan y la maestra Úrsula Callistis.

Las tres miraban un árbol que parecería que estaba en sus últimos momentos, pues estaba de un color casi muerto.

Úrsula había sido la encargada de investigar la razón de eso, pero pidió más tiempo para seguir investigando la causa.

¿?: Directora.

Hasta que una voz llamó la atención de todas.

Al girarse, se dieron cuenta de quién se trataba.

Diana: El árbol Conmemorativo de Jennifer se ha reducido a este estado lamentable...

Era Diana, quien venía acompañada de sus dos amigas, Hannah y Barbara.

La directora, junto las otras dos maestras, se giró para mirarla y decirle...

Holbrooke: así es, Diana. Este árbol ya tiene sus años.

Luego se giró para ver el árbol, Diana también dirigió su mirada para verlo.

Holbrooke: Puede que en éste momento, esté cerca del final de su ciclo vital.

Diana miraba fijamente al árbol, hasta que se acordó de algo que quería saber desde que iniciaron las clases.

Aprovechó la oportunidad para preguntarle a la directora...

Diana: directora, puedo preguntarle algo?

Holbrooke: claro, Diana, sucede algo?

Diana: es sobre el chico que permitió dejarlo estudiar en esta institución. El tal "Tenochtitlan".

Holbrooke: oh, el joven Tenochtitlan! ya lo conoció?

Diana: sí, algo así.

Holbrooke: es alguien muy agradable, no cree?

Diana: ...

Diana no respondió, simplemente se quedó en silencio con su semblante serio.

Finnelan: ese chico le hizo algo a usted, Diana? Si es así, lo expulsaremos de inmediato!

Preguntó, Finnelan, con preocupación y un poco de enojo.

Holbrooke: tranquila, Anne. Ya le dije que él no es alguien malo!

Diana: Descuida, no es nada de eso, solo quiero saber la razón del porqué lo dejó quedarse a estudiar en Luna Nova. Es, acaso, alguien especial como para tener ese privilegio apesar de ser un chico?

Diana vio como la directora se quedó pensando para elegir sus palabras.

Después de unos segundos, la directora habló.

Holbrooke: no sé si a él le agrade que le diga a todas la razón, pero con usted no creo que haya problema. Al fin y al cabo, ustedes dos se llevan bien, no?

Diana solo mantuvo su semblante serio.

Holbrooke: el joven Tenochtitlan, el día que llegó aquí, me contó que una de las antiguas brujas se hizo presente ante él y lo trajo en contra de su voluntad a este país.

El semblante serio de Diana se esfumó al oír eso y abrió un poco los ojos por la impresión.

Estaba desconcertada.

Mente de Diana: (Una de las antiguas brujas lo trajo?)

Se preguntaba para sí misma incrédula por eso, pero recuperó la computadora al pensar en algo.

Diana: Directora, usted cree que ese chico dice la verdad?

Holbrooke: Por supuesto. Él no sabía nada sobre la magia y también me dijo que él no creía en eso. Y, aún así, me dijo el nombre de la antigua bruja sin saber quién era ella.

Diana se mantenía dudosa, pues no es algo para creer fácilmente.

Holbrooke: entonces pensé que sería bueno tenerlo aquí. Tiene la bendición de Woodward; una de las antiguas brujas, así que no creo que sea un problema.

Finnelan: yo aún sigo dudando sobre su decisión, directora.

La directora y la profesora Finnelan empezaron otra pequeña discusión.

Pero Diana estaría pensando en lo que le dijo la directora.

Mente de Diana: (una de las antiguas brujas?... No veo la razón por la que la directora debería de mentir. Pero tampoco veo la razón por la que debe quedarse ese muchacho. Pero ya es una desición tomada. Solo queda aguantar).

Pero no solo ella estaba en sus pensamientos, sino que la maestra Úrsula también estaba sumergida en ese mundo.

Mente de Úrsula: (Woodward lo trajo?)

Era lo único que sé preguntaba, pues no sabía sobre eso.

Mente de Úrsula: (acaso eso... Era lo que me trataba de decir?)

Y en eso, hubo un recuerdo de la maestra Úrsula.

{~Flashback~}

Se podía ver, desde el punto de vista de una joven bruja, cómo sostenía una foto donde se veían dos brujas, una de cabellera de color roja y la otra de color lila, junto a un joven muy similar al mexicano.

¿? 1: ¿Dónde estarás, T/N?...

Se preguntaba mientras miraba la foto con tristeza.

¿? 2: Es muy extraño que haya desaparecido así de la nada.

Dijo otra chica quien estaba a lado de ella, era la chica de cabello color lila de la foto.

La chica se giró a verla.

¿? 1: Crees que la haya pasado algo malo, Croix?

Le preguntó a la chica de cabello color lila, quien ahora sabemos que se llama Croix.

Croix: No lo sé, el lugar se veía muy destrozado como... Si un dragón u otro monstruo lo hubiese atacado.

Dijo con preocupación, pero eso hizo que la chica se sintiera peor.

‽: No se preocupen...

Hasta que, de la nada, se oyó una voz de una mujer.

Las chicas se giraron y vieron a una mujer muy alta que emanaba un brillo verde.

‽: Él está bien.

Pero, por alguna razón, Croix no parecía estar contenta de mirarla.

?: Sabes algo de él, maestra?

Preguntó la chica de cabellera roja con un poco de esperanza mientras juntaba sus manos.

‽: Sí, y solo les digo que no se preocupen.

Croix: ¡¿Que no nos preocupemos?!

Replicó, Croix, sonando muy molesta.

Croix: El lugar donde usualmente dormía está hecho una mierda! Muchos árboles están derrumbados, quemados y todo está totalmente destruido a su alrededor! y dice que no debemos de preocuparnos?!

‽: Todo tiene su motivo. Y eso incluye su desaparición.

?: Desaparición?... Entonces si desapareció?

‽: Así es. Y no lo volverán a ver hasta unos años.

Croix: ¡¿Y porqué no?! ¡¿Cuál fue la razón por la que desapareció?!

Pero, en eso, las dos jóvenes brujas observaban cómo unas hojas rodeaban a la gran mujer que tenían en frente.

‽: Ya lo sabrán, sean pacientes y esperen el momento de su encuentro en un futuro. Por mientras te pido, Chariot, que sigas buscando las palabras del Triskelion.

La bruja de cabellera roja, quien ahora sabemos que se trata de Chariot, sacó un objeto con siete orbes, ese objeto era la vara brillante.

Ella lo miró y vio como los orbes se iluminaron de un color verde.

Chariot: ser paciente y esperar el momento... De nuestro encuentro.

Y, en eso, le llegó una palabra en la mente...

Chariot: Mayenab Dysheebudo...

Al recitar esa palabra, algunos de los orbes se iluminó de color amarillo.

Y el brillo se fue intensificando más y más...

{~Fin del flashback~}

Finnelan: Maestra Úrsula!!

Regresando a la actualidad. Se podía ver a la Profesora Finnelan quien intentaba sacar a Úrsula de su trance.

La maestra Úrsula, ante el grito de Finnelan, se asustó casi tirando su portapapeles que tenía.

Úrsula: ¿S-sí? ¿Q-qué ocurre, Maestra?

Finnelan: llevo casi media hora hablándote! ¿Qué es lo que le sucede?

Úrsula: eh?

La maestra Úrsula se dio cuenta que todas la miraban extrañadas.

Úrsula: N-no es nada! S-solo estaba... pensando sobre... E-el problema del árbol de Jennifer!... Sí, eso.

Finnelan: ... Pues perdiéndose en sus pensamientos no logrará nada. Tenemos que seguir buscando entre los libros cuál es la razón de todo esto!

Y, al decir eso, las maestras se retiraron del lugar.

Pero Diana, junto a las dos chicas que la acompañaban, se quedó en el lugar.

Diana: El Arbol Conmemorativo Jennifer... El árbol de la vida de Luna Nova olvidado para heredar el legado de la gran bruja Jennifer.

Decía mientras miraba, con los brazos cruzados, al árbol que tanto preocupaba las maestras y a la directora.

Pero Diana tenía un plan en mente.

Diana: señoritas, necesito de su ayuda. Están dispuestas?

Dijo, refiriéndose a sus compañeras de equipo quiénes estaban ahí con ella.

A lo que ellas, sin pensarlo dos veces, respondieron....

Hannah/Barbara: Sí!

≈

Después de unos segundos, todas estaban acomodando unas piedras verdes alrededor del árbol.

Pero una estaba un poco angustiada.

Cosa que Diana notó al notar que solo estaba quieta mirando una de las piedras.

Diana: ¿Te sucede algo, Barbara?

Así es, Barbara era la que estaba un poco angustiada. Pues estaba pensando en algo que la preocupó un poco.

Barbara: n-no es nada, Diana. Solo estaba pensando un poco.

Hannah: y en qué pensabas?

Barbara: oh, bueno... No es nada importante... Solo era sobre aquél chico; México.

Hannah: ¿Estabas pensando en ese torpe?

Diana: ¿Porqué pierdes tu tiempo pensando en él?

Barbara miró al suelo estando nerviosa.

Barbara: B-bueno, y-yo solo-

Hannah: ¿acaso te gusta?

Barbara: ¡¿Q-qué?!

Esa pregunta hizo que Barbara se pusiera totalmente roja.

Barbara: C-claro que no! Solo sentía lástima por él!

Diana: ¿Lástima?

Hannah: ¿Y porqué sentías lástima por él?

Barbara: es que... Me dio tristeza verlo a lo lejos llorar. No crees que fuiste un poco dura, Diana?

Diana se acordó de lo sucedido y... Por alguna razón, se inundó de lástima.

Pues su verdadera intención no era esa.

Barbara: creo que merece una segunda oportunidad, tal y como nos dijo, Hannah.

Hannah: ¿P-pero que tal si nos hace algo malo?

Preguntó un poco asustada al igual que preocupada.

Pero ese temor desapareció con otra pregunta de parte de Barbara.

Barbara: él nos ha hecho algo malo? Solo trató de llevarse bien con todas, ser su amigo y nada más. Además, ya escuchaste a la directora, una de las antiguas brujas lo trajo, entonces supongo que no es alguien malo.

Ahora Hannah permaneció pensativa.

Pero Diana sacudió su cabeza en negación, pues una vez intentó ayudar al mexicano y él "rechazó" su ayuda.

Diana: no nos distraigamos con esas cosas. ¿Ya terminaron con su trabajo?

Preguntó refiriéndose a que si habían terminado de acomodar las piedras. A lo que ellas respondieron.

Barbara: Sí, ya terminé de este lado!

Hannah: yo igual!

Diana: muy bien, intentaré usar magia de rehabilitación en el árbol mágico. Con los nutrientes suficientes, se puede devolver a la vida grandes plantas. Este es un arte secreto transmitido por generaciones en la familia Cavendish.

Al decir eso, Diana se preparó para recitar el hechizo de rehabilitación.

Diana: Louperial Ral!

Y, gracias al hechizo, unos destellos se unieron a unas piedras e hizo que un brillo verde cubra todo el árbol.

En unos segundos, el árbol volvió a recuperar sus colores vivos y las hojas saldrían de las ramas.

Hannah y Barbara estarían asombradas por eso.

Diana: el flujo de nutrientes ahora debería estar restaurado.

Hannah: Es asombroso, Diana. Lo conseguiste!

Barbara: Vamos a decirle a las maestras!

Dijo Barbara emocionada. Y las dos se fueron excepto Diana, quien estaría observando su trabajo bien hecho al restaurar al árbol Conmemorativo de Jennifer...

Diana: huh?

Pero notó algo raro, algo que abrió un poco el suelo y de ahí... Salía una extraña luz.

Diana: pero qué...?

Fin del capítulo 13

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¿Quién era ese muchacho a quien Úrsula recuerda y porqué se parece y se llama igual que ustedes?...

Lo sabrán... Dentro de mucho xd

Bueno, eso sería todo xd

Y sí, sé que me tardé en subir un capítulo pero... Hay una explicación muy clara de eso!

..... En fin, espero que les haya gustado este capítulo.

Si es así, que bien.

Y si no, también xd

Y tal vez algunos recuerden que dije que subiría capítulos muy seguido... Pero no me hagan tanto caso xd

También les recuerdo que en la sección de "votaciones", las votaciones siguen en pie, así que voten cuál bruja quieren que gane o también si quieren que haya harem.
(Se los recuerdo por si no sabían que seguía en pie las votaciones xd)

Las votaciones acabarán cuando yo lo diga, aunque es obvio que será a dos capítulos de acabar la historia.

Y creo que eso sería todo, me despido.

Adiós y que Dios los cuide y proteja (sean creyentes o no)

TIMOITASE!!