◇Capítulo 13◇
Maratón 2/4
Narrador omnisciente.
—¡No miren atrás,solo corran!—ordenó la azabache,impidiendo que sus hermanos miraran aquel monstruo.
—¡¿Qué es esto?!—exclamó Gilda—.¡¿Estaba en el libro también?!
—¡No,esto no...! ¡Esta cosa...Esto es...!
—¡Es un demonio!—completó la azabache,corriendo detrás de sus hermanos,vigilando que nadie pierda el ritmo o caiga.
—Pero...—Emma habló—.¡Los demonios que Norman y yo vimos caminaban como humanos! ¡Hasta hablaban!
—Sí,los de nuestros primeros recuerdos también eran así...
—No tenían cola...—dijo la azabache,luego de que su hermano hablara—.Y siempre llevan esas horribles máscaras con cuernos...—Recordaba las veces que vio a esas cosas en su estadía con Ratri—.¡Y también tenían ropa! ¡Este es un demonio salvaje!
—Entonces...—habló Mark asustado—.¿El demonio no vino de la granja para atraparnos?
—¡No,este...!
—¡No!—exclamó Nat,interrumpiendo a su amiga—.¡Este quiere comernos aquí y ahora!
—¡Nat!—regañó la azabache.
—¡Aún no son ellos!—exclamó Emma—.Si fuera así,nos trataría como mercancía;jamás nos atacarían así.
La azabache giró su cabeza para mirar aquella bestia;por esto,casi termina tropezando.Ray la sostuvo del brazo a tiempo y la tomó con fuerza de la mano.
—¡Ten cuidado,tonta!—regañó.
—¡S-sí!
Continuaron corriendo,hasta que vieron a Don hacer una seña;a partir de ello,los niños se separaron en dos grupos,algunos con el moreno y otros con Gilda.
"¡Asombroso! Don dirige a los que tienen mejores habilidades físicas,mientras Gilda se encarga de los que son menos rápidos...¡Increíble!"—La azabache sonrió.
—¡Hay que encargarnos del demonio!—exclamó Emma hacia los mellizos.
—¿Cómo exactamente?—preguntó Ray.
—Podemos verlo en el camino...
—¿Corriendo sin un plan otra vez?—Luego de correr un rato más,el azabache se detuvo—.Aquí puede haber oportunidad.
—¿Eh?—Su melliza analizó el lugar—.¡Oh,hablas de...!
—Sí.Hacer que caiga en las trampas de los árboles—afirmó el chico.
—¡Bien,nos separaremos y...!
—No,lo haré yo solo—dijo inmediatamente el azabache.
—Ray...No será que sigues pensando en...¡No te dejaré!—exclamó Emma preocupada.
La azabache rió.
—No es eso.No haré un sacrificio heróico o algo así.Solo lo hago porque siento que puedo hacerlo.—Sonrió divertido—.¿Quién de nosotros ganaría un juego de las traes?
—...Tú—respondió la antena.
—Bien,entonces confía en mí—dijo apoyando una mano en el hombro de la pelinaranja—.Espera diez segundos después de que vaya,luego busca al grupo de Gilda y llévalos en la dirección del viento...Tan rápido como puedas.¿Entendido?
—Tranquila,Emma—habló la azabache sonriendo y avanzando hasta estar junto a los otros dos—.No dejaré que este idiota se sacrifique;yo iré con él.
—¡¿EH?!—La miraron sorprendidos.
—Ni pienses que te dejaré solo en esto,hermano—dijo borrando su sonrisa—.Si tú vas,yo voy.
—¡Estás...!
—¿Loca? Puede que sí—dijo encogiéndose de hombros;sonrió y puso sus manos detrás de su espalda—.Pero creo que viene de familia,¿no?
Ray solo sonrió.
—Hagámoslo—aceptó el azabache.
—¡Sí!—Emma se fue por otro camino,mientras los mellizos se iban hacia las trampas de las raíces.
Una vez en posición,se tomaron de las manos.
Ray miró a su hermana y asintió con la cabeza.
—Hazlo.
La azabache asintió y llamó la atención de aquel monstruo.
Ante esto,el demonio comenzó a perseguirlos.
—¡Vamos!—gritó la azabache empezando a correr.
Corrieron un tiempo,hasta que estuvieron ya cerca de las raíces.
—¿Lista?—Miró a su hermana,quien sonrió.
—Siempre.
Ante la respuesta,Ray sonrió.
Justo cuando el demonio iba a caer,algo más le cortó la cabeza.
La azabache abrió los ojos como platos al ver la escena.
Su hermano la jaló de la mano y se escondieron detrás de un árbol.
Sus respiraciones eran irregulares,sin embargo,intentaban mantenerse en silencio.
—Justo a tiempo,como anticipamos—habló una voz gruesa y aterradora;a la niña se le hizo conocida—.Los encontramos.—La chica tragó saliva con dificultad—.Los llevaremos de vuelta de una vez.—Miró el cuerpo del demonio y lo pisó—.Qué asqueroso.Imaginar que una raza inferior siquiera toque nuestra mercancía.
—Mierda...—susurró la azabache entre los brazos de su hermano.Lentamente,se asomó y divisó a aquel demonio apuñalar el ojo central del que los estaba persiguiendo.
"Ojo central...Siempre me pregunté por qué esas estúpidas máscaras...Ellos se regeneran,¿no? Pero todo ser vivo tiene un núcleo.Entonces,eso significa...¡Ah! ¡El núcleo de estas cosas es el ojo central!"—pensó la azabache uniendo cabos.
—Hay que irnos—susurró el chico.
—Ray...—Lo miró—.¿Crees que hayan atrapado a los demás?
El azabache estuvo a punto de contestar en susurros,sin embargo,ellos hablaron antes.
—¿Has encontrado algo?
—Esta cosa no ha comido nada.Su boca no tiene olor a humano,así que no creo que haya comido alguno aún.
Y ahí estaba su respuesta.Ellos estaban vivos.
Ray soltó a su hermana y se puso a buscar algo en su mochila.
—¿Qué haces?—susurró la azabache.
—¿Están ahí? Se están ocultando,ya pueden salir.
La chica sintió un escalofrío recorrerla de pies a cabeza,así como sus sentía sus pelos ponerse de punta.
Ya reconocía esa voz.
Ese demonio era quien siempre la acompañaba a ella y a Ratri entre granja y granja;también la había informado y educado respecto al sistema de granjas.
Eso no era bueno.La reconocería.
Oh,lo que le recordaba...Aún no les dijo a su hermano y los demás...¿Debería hacerlo?
Sacudió su cabeza.No era momento de pensar en eso;no ahora.
Vio a Ray sacar unas tijeras de su mochila.
—¡Ray,¿qué haces?!—exclamó en un susurro.
—Eso estuvo cerca,¿no?—habló el demonio.La chica no podía recordar su nombre—.Gracias a Dios estás bien.Está bien,me encargué del gran monstruo malo.
"Ni que fuéramos unos bebés"—pensó disgustada la chica.
—Idiota...—murmuró.
—Así que...¿Por qué no sales?
"Habló en singular...Tal vez podría..."—pensó la azabache,asomándose apenas.
—¿Debería ir por él y sacarlo de ahí?—habló otro demonio.
—No,así está bien.Quédate donde estás.—Dio unos pasos.La azabache miró a su hermano empezar a escribir algo en el tronco del árbol—.¿Estás solo? ¿Dónde están los demás? Ahora lo entiendes,¿no? Vivir aquí afuera es imposible.Déjanos llevarte a casa.
La azabache miró a su hermano ponerse de pie;observó lo que escribió.
"Ve 06-32
Perseguidor"
Frunció el ceño y regresó su mirada al azabache.
—Tendremos que correr.
"No..."
—No—dijo firmemente la chica,sorprendiendo y confundiendo a su mellizo.
—¿Eh?
"Lo siento,Ray,pero entre tú y yo,yo soy la prioridad de esos monstruos...Si puedo salvarte a costo de mi vida,lo haré sin dudar un segundo;no permitiré que algo te pase...Siempre estás cuidándome;pero ahora,me toca...Así que..."
—Déjamelo a mí—dijo mirándolo con firmeza y seguridad.
—¿De qué hablas,qué estás diciendo?—La miró alterado.
Ella sonrió.
—Tengo un plan.Tú vete,yo los distraigo.—Se asomó a verlos.
—¿Y dejarte sola?—La tomó del brazo y la hizo mirarlo—.¡Jamás!
—"No me iré justo aquí estaré.Y del mal yo te protejeré,siempre"—citó con dulzura,cosa que sorprendió al azabache,pues era la canción de ambos y de su madre—."Lo que más quiero es poderte cuidar.Sé que el mundo es injusto y no puedo enfrentar aquel mal que de mí te quiere apartar.Tan solo puedo desear que te logres salvar,de este destino puedas escapar".
—Basta,cállate—pidió negando con la cabeza,apretando sus ojos llenos de lágrimas—.Ya entendí.
—Siempre me estás cuidando...—Apoyó una mano en el hombro de su hermano—.Déjame devolverte el favor...
—Idiota...—Se limpió el rostro—.No es un favor...Lo hago porque eres mi hermanita y te amo...Tonta.
Ella sonrió.
No estaba segura de si volvería...No le importaba realmente;al menos ellos estarían bien,tendrían tiempo para huir.Ellos estarían...Oh.
Abrió sus ojos como platos al divisar a unos metros más allá a cierto albino.
La veía seriamente,como diciéndole que no se le ocurra morir o dejarse llevar de regreso a la granja.
Ella entendió.Sonrió levemente y miró a su mellizo.
—Estará bien,tranquilo.—Él la miró—.Volveré.Te lo prometo.
Él la miró mal un rato;suspiró y se resignó.
—De acuerdo;pero vuelve,¿entendido?—La tomó con firmeza del hombro y la señaló acusatoriamente—.O no te lo perdonaré.
Ella sonrió.
—Entendido,fuerte y claro,hermano.—Rió y lo abrazó fuertemente;él correspondió—.Te amo.
—Yo a ti,hermanita.
Se separaron.
—Corre.
Él solo pudo acatar la orden y huir,mientras ella se dejaba ver ante los demonios.
—Vaya,miren a quién tenemos aquí—habló el líder—._____________________.El número ochenta y un mil ciento noventa y cinco.Ha pasado un tiempo.
—Fueron solo dos meses,tarado.
El demonio sonrió.
—¿Dónde están los otros?
—Están muertos—dijo duramente.
—¿Segura? Me pareció haber visto a tu mellizo correr.—La chica abrió sus ojos como platos y apretó sus puños,gruñendo.El demonio rió—.Así que estoy en lo correcto,lo estás cubriendo.No creas que por ser la sucesora de Ratri te trataremos mejor de lo que podríamos tratar a la mercancía común.
—Kgh.—Se dio la vuelta y comenzó a correr,al menos le dio algo de tiempo a su hermano—.Hijos de perra.—Luego de correr un rato,uno de esos demonios la empujó y elevó,provocando que saliera volando unos metros—.¡WAAAAH!—Al caer,soltó un fuerte quejido y trató de levantarse lo más rápido posible.
—¡¿___________________?!—Ray,quien estaba cerca,corrió a ayudarla rápidamente.
—¡Hay que irnos,ya!—Con un poco de dificultad,se puso de pie y,luego de tomarle de la mano a su hermano,continuaron corriendo.
—Idiota,ten cuidado con ella—regañó el líder hacia aquel que la hizo volar.
Continuaron corriendo un rato,esquivando y evitando aquellas cosas que los querían de cena.
Armaban estrategias improvisadas en sus cabezas y las ponían en práctica rápidamente.
Ray se quitó su bufanda y se la lanzó a uno de los demonios,despistándolo y permitiéndoles tener unos segundos de ventaja.
Sin embargo,se dieron cuenta rápidamente,por lo que ambos mellizos maldicieron.
Siguieron con su carrera un buen rato.Comenzaban a sentir sus piernas flaquear,sus brazos dolían,el sudor los recorría de pies a cabeza y el aire fresco los hacía temblar.
La azabache temía que ese fuera su final;nadie llegaría a ayudarlos y hacía tiempo había perdido gran parte de su fe y su duda por la existencia de un Dios se había hecho mayor a medida que pasaban los años.
Su respiración se dificultaba,le dolían los pulmones.No sabía cuánto resistiría.
Ray estaba en la misma situación que su hermana.Quería salvarla a como dé lugar pero estando así de cansado no podría hacer mucho,por no decir que no podía hacer nada.
Sujetó con fuerza la mano de su melliza,negándose a cualquier destino que implicara perderla.
Se detuvieron bruscamente al verse rodeados.Por el movimiento repentino,la azabache terminó tropezando y cayendo de rodillas;su mellizo,sujetándola con fuerza y firmeza,la levantó apenas sus rodillas tocaron el piso.Se pegaron uno al otro,mirando a quienes eran sus perseguidores.
Sus respiraciones no podían estar más agitadas.
—Maldición...—murmuró la azabache.
—Se acabó—dijo el demonio.
Ray se negaba a ese destino;se maldecía a sí mismo,debería haber obligado a su hermana a ir con los demás.
Sujetando con fuerza la mano de su melliza,quiso escapar de vuelta,sin embargo,terminó cayendo al suelo.La azabache,por estar sujetada a él,también cayó.
—¡Ray!—Se arrodilló rápidamente (no tenía ni idea de cómo hizo,pues no sentía ninguna parte de su cuerpo),acercándose a él preocupada.
—U-ugh...—Intentó levantarse,sin éxito alguno—.Lo...Lo siento,hermana...—La miró con tristeza y culpa,ella apretó la mandíbula,con lágrimas en sus ojos—.Deberías haberte ido con los demás...
—No...Ray...¡No te rindas!—suplicó apoyando sus manos en su espalda,sacudiéndolo levemente.
Ray la miró de reojo,con tristeza y arrepentimiento.
"Perdóname...Perdón,Norman...No quiero morir aquí,no así;no con ella...Prometí que volvería...Creo que no lo cumpliré..."—pensó con remordimiento.
—Perdón...
—¡Ray!—exclamó con las lágrimas en sus mejillas.Al ver que los demonios se acercaban,cubrió a su mellizo con su cuerpo—.¡No se acerquen!—Lo tomó y lo acurrucó en su pecho,él apenas podía mover sus brazos para acariciar los de ella,intentando calmarla—.¡No lo lastimen,no le hagan daño! ¡Por favor,no lo toquen!—Miró suplicante al líder,quien ni se inmutaba—.¡No permitiré que los lastimen,antes mátenme a mí!
—___________________...No...—susurró mirándola;ella no le prestaba atención,solo miraba con firmeza a los demonios,con el ceño fruncido y su rostro lleno de lágrimas de desespero.
—¡No pueden lastimarme,¿verdad?! ¡Él no les perdonaría eso!—retaba firmemente—.¡No le toquen un solo pelo a mi hermano,demonios!
—Suficiente,niña—habló el demonio.
—Kgh.—Se aferró a su hermano.
Apretó los ojos.
Se estaba resignando y aceptando su destino,sin embargo,algo más los tomó a ambos.
—¡Suban,ahora!—Aquel desconocido los subió a su caballo.
—¡Vayan!—ordenó el perseguidor de los menores.
El sujeto lanzó lo que parecían ser bombas de humo caseras y,prácticamente,desapareció de la vista de aquellas cosas.
La chica se apoyó en el pecho de quien se convirtió en su salvador;su respiración era agitada y sentía el agarre de aquel extraño en ella,sujetándola como si fuera una niña pequeña.Miró a Ray,quien estaba prácticamente acostado en el lomo del animal.
—R-Ray...—Estiró su mano y,con debilidad,la sujetó.
—Mgh...
Él la miró de reojo y suspiró,dejando salir una lágrima de alivio.
Sí,pensaba en quién era ese tipo,adónde los llevaba y demás;sin embargo,estaba agradecido de que los haya salvado,de que haya salvado a su melliza.
Alzó su mano como pudo y sujetó la de su hermana.
Al sentir la calidez conocida de su mellizo,entreabrió los labios y derramó lágrimas de alivio.
A diferencia de su hermano,ella solo podía estar agradecida de estar viva y que su hermano siguiera con ella.Solo pensaba en la enorme gratitud que ahora sentía hacia aquel desconocido.
Cerró los ojos y se dejó apoyar y abrazar por el extraño,descansando contra su pecho.
Y todo se convirtió en oscuridad.
(...)
Lentamente,sus párpados se abrieron con pesadez y dificultad;aún estaba cansada.
Se sentó como pudo y miró a su alrededor;parecía una habitación o cueva de...¿raíces? Oh,son las del Alvar Pinera...Pero muertas.
A su costado,divisó a su hermano descansando.
—¡Ray!—Se acercó a él y lo tomó en brazos,abrazándolo y apretujándolo contra sí misma.Lo revisó y suspiró con alivio—.Menos mal...—Lo volvió a dejar en el suelo,dejándolo descansar.Se puso de pie algo tambaleante y se asomó al pasadizo que conectaba con esa "habitación"—.¿Dónde...?—Miró a ambos lados y avanzó un poco,hasta que escuchó pasos;se detuvo y abrió sus ojos a tope,empezando a temblar.¿Adónde correría? Además,su hermano estaba descansando aún;no iba a abandonarlo así como así.
"Más les vale que esas clases de defensa personal y pelea cuerpo a cuerpo me sirvan,maldito Ratri..."—pensó en alerta.
—¿Eh?—Escuchó una voz femenina,suave y dulce—.¡Oh,despertaste!—Se acercó y la revisó,a lo que la azabache no pudo reaccionar—.Menos mal.Es un alivio,no tenías heridas graves,solo uno que otro moretón o rasguño.
—¿Qué...?
—¿Cómo te sientes? ¿Estás bien?
—Yo...E-estoy bien...Gracias...—Se relajó levemente y suspiró—.Disculpa,pero...
—¿Huh? ¿Te duele algo?
—No,para nada,es solo que...Umh...—Se detuvo al bostezar;aún estaba agotada—.Oh,lo siento.
—Tranquila.—Rió levemente—.Tal vez debas seguir descansando.
—Huh,yo...
—Descuida,aquí están a salvo.
—Oh...Está bien.—Sonrió—.Entonces,creo que hasta luego.
—Hmp.Descansa.—Se despidió y se alejó.
La azabache regresó a donde estaba al despertar y se acomodó,pensando en aquel raro encuentro.
"No parecía ser alguien con malas intenciones...Llevaba una especia de túnica y su capucha,no pude verle el rostro...Su voz es muy dulce...No era quien nos salvó,pero se ve que está con él y nos ha cuidado y revisado..."—pensó mirando a su hermano.
Bostezó.
Se cubrió bien con las sábanas y frazadas y cerró sus ojos;suspiró y se dedicó a descansar un rato más.
(...)
Ray despertó bruscamente,a diferencia de su melliza.Miró alrededor algo alterado y,al divisar a su hermana,se acercó a ella rápidamente.
—Oh,Dios,¡___________________!—La tomó en brazos y la acurrucó en su pecho,a lo que ella se removió—.¡Menos mal!—La abrazó aliviado.
—Hum...—Abrió levemente sus ojos y lo miró adormilada—.¿Ray...?
—Estás bien...Qué alivio.—Ella bostezó y trató de despertarse;sin embargo,quería dormir un rato más—.Ven,vamos.Hay que buscar a los demás.—La tomó de la mano y la ayudó a ponerse de pie;ella solo se dedicó a seguirlo aún adormilada.A Ray le parecía raro,pues ella siempre estaba alerta en un lugar desconocido;claro,como la chica ya estaba casi segura de que aquellos desconocidos no eran peligrosos,no se preocupaba en despertarse o no.Caminaron un poco,hasta que Ray se topó con la pelinaranja descansando—.¡Emma!—Ambos mellizos corrieron a ella.
—¡¿Emma?!—La sacudieron para que despertara.
Al ver que abría sus ojos,suspiraron aliviados.
—¿Son ustedes...? ¿Ray,__________________?—Ambos sonrieron,a lo que Emma los abrazó—.Sí son ustedes,están aquí...¡Aún están vivos,estoy tan feliz de que estén con vida!
La azabache rió levemente.
—También estoy feliz de verte—comentó el azabache,acariciando la cabeza de su amiga.
—Ray,___________________,¿qué es este lugar? ¿Dónde están los demás?
El azabache se cruzó de brazos.
—¿Así que tampoco lo sabes?—Miró a su melliza bostezar;lo estaba fastidiando el hecho de ver que esté tan tranquila—.¿Y a ti qué te ocurre?
—Tengo sueño,estoy cansada.—Se talló los ojos.
—¿Eres idiota?—La miró mal,sonriendo forzosamente,incrédulo.Suspiró—.Ya veo.Fuimos salvados al mismo tiempo pero en diferentes lugares.El hombre encapuchado y la chica encapuchada...¿Estarán juntos? ¿Quiénes son? Y...¿Realmente están de nuestro lado?
—Creo que no son peligrosos—dijo Emma pensativa,ignorando cómo Ray sujetaba a su melliza del brazo y evitaba que se acostara a dormir allí mismo—.Solo tengo un vago recuerdo de ella,pero su voz se quedó conmigo.Ella era tan amable y gentil...Siento como si ella nos ha estado cuidando.—Miró a los hermanos,una intentando dormir tranquila y el otro evitando eso—.Sí,su voz era hermosa y amable.
—Ese no es el punto aquí.—Obligó a su hermana a quedarse arrodillada a su lado—.Si ellos son enemigos,no entiendo por qué estarían haciendo esto.—Miró a su hermana apoyarse en su hombro—.¡Oye,no te duermas,esto es serio,¿qué pasa contigo?!
—No son enemigos y ya,Ray—dijo mirándolo mal.
—Podría ser...—habló Emma—.¿No podría ser esto acción de Minerva?—Ambos mellizos la miraron sorprendidos—.Tiene sentido,¿verdad? Un humano que lucha contra la granja de niños...
—Es posible,sí—afirmó el azabache,con una mano sobre la cabeza de su hermana y sacudiéndola levemente,intentando mantenerla despierta—.Incluso si el mismo Minerva no está aquí,podría ser obra de sus camaradas.
Escucharon unos pasos más adelante,por lo que se pusieron de pie rápidamente.
El azabache se resignó al cansancio de su hermana y la refugió en sus brazos.La conocía y sabía que,a menos que ella esté segura con alguien o en algún lugar,no tendría la guardia baja sin razón alguna;aún así,él sí se mantendría en alerta.
—Disculpa...—habló Emma.
—¡Estás mejor!—exclamó aquella chica—.Estoy tan feliz de que te hayas recuperado,¿cómo te sientes?
—Em,sí,bien,gracias...—balbuceó la pelinaranja.La chica desconocida sonrió.
—El sangrado se ha detenido y parece que la fiebre ha bajado también.¡Las hiervas medicinales funcionaron a la perfección! No obstante,ustedes tres quedan prohibidos de realizar trabajo duro.¡Si se enferman de nuevo,será peligroso!—Miró a los mellizos;Ray tenía una cara de perro mojado e incrédulo,una desconocida prohibiéndole trabajar—.Todos hicieron un gran trabajo escapando de esa granja.Todo está bien ahora,están a salvo con nosotros.Por favor relájense y descansen durante la noche,¿okey?—La azabache miró a la chica,descubriendo su rostro del hombro de su hermano;sonrió levemente.
—Muchas gracias—murmuró,a lo que recibió una sonrisa de respuesta.
—Perdón,pero...—habló Emma—.¿Dónde están nuestros amigos? Los que estaban conmigo.
—Justo aquí—dijo la chica—.Acabamos de preparar la cena.¡Vengan,vamos!
Ray sujetó la mano de su hermana y comenzaron a caminar,siguiendo a aquella desconocida.
—Disculpa,pero...—dijo Ray—.¿Qué hay de aquel hombre encapuchado que nos salvó a mí y a mi hermana? ¿Él es tu compañero?
La azabache,despertando poco a poco,guardando su sueño para luego de comer,los miró curiosa.
—¿Te refieres a Sung-joo?
—¿Sung-joo?—repitió en un susurro la azabache.
—Sí,él también está por aquí—respondió la chica.
—Entonces no es Minerva—dijo Emma.
—¿Minerva?—preguntó la desconocida.
—William Minerva—explicó la antena—.¿Quizás hayas escuchado de él?
Ray suspiró y habló.
—Oye,escucha...—Se detuvo bruscamente,tanto al hablar como al caminar,al darse cuenta de un pequeño detalle;la azabache lo miró confundida,así como las otras dos femeninas—.Gracias.En serio,gracias por ayudarnos;salvaron a mi hermana y estaré agradecido por eso lo que me resta de vida.Me sacaron de un verdadero problema.Debo decir que estoy verdaderamente agradecido.
—¿Ray...?—murmuró su hermana confundida por su actitud.
—Solo me gustaría preguntarte una sola cosa.—Tiró de la mano de su hermana y la refugió en sus brazos,haciendo que su rostro se gire hacia el lado contrario de donde estaba la chica y sus manos queden inmovilizadas en su pecho,así como colocó a Emma detrás de él;la melliza menor estaba confundida y sorprendida,¿qué ocurría?—.¿Por qué nos rescataron? Dime...¿Por qué ustedes los demonios protegen su ganado?—La azabache escuchó pasos,por lo que levantó la mirada y miró a alguien más acercarse...A algo más acercarse;abrió su boca y apretó entre sus manos el saco de su hermano,frunció su ceño y abrió sus ojos como platos al distinguir la forma de quien era su salvador—.Ustedes dos son demonios,¿verdad? Tú y ese sujeto.
—¿Qué quieres decir?—preguntó Emma.
—¿Podrías seguir adelante y explicárnoslo entonces...estimado demonio?—Apretó a su hermana contra sí mismo,con la intención de protegerla.
Ella se aferró a su hermano al ver el arma en el hombro del demonio que resultó ser su salvador.
"Salimos de un problema y ya tenemos otro...Mierda..."
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Una aclaración antes de que sigan.
Si bien dice que la rayis perdió su fe o creencia en Dios,no pretendo ofender a nadie ni nada por el estilo.No me gustaría tener algún malentendido así que quería aclarar eso.
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