XVIII.- Híbridos.
Felix observo aquella niña, la cual era tan perfecta a la vista, tan blanca, parecía una hermosa muñeca, no tenía algo que la hiciera parecer una licántropo.
—¿Quieres saber por qué le tienen miedo a esa mezcla? —pregunto liberando por completo a Felix, el cual caminó con ella por un pasillo llegando fuera de las celdas, hacia un gran castillo con hermosos cuadros y detalles dorados, no había recuerdo de que existiera un lugar así, en su memoria, a los alrededores se encontraban vampiros resguardando el perímetro, no había rastros de humanos o lobos, así que sabía que esa era un área de vampiros.
La niña que no pronunció palabra alguna solo se limitó a acompañarlos en silencio. Los tres llegaron a una gran biblioteca. Se le ofreció a Felix tomar asiento. Este lo hizo sin dejar la desconfianza. Después unos minutos llegó una jovencita con dos copas con algo parecido vino, pero era claro que era sangre. Felix tomó la copa observando el líquido espeso en esta.
—Te prometo que no contiene nada malo —interrumpió sus pensamientos la hermosa mujer.
Sin mucha opción lo tomó, el sabor es dulce pero no tanto como la sangre de su amado. Pensó.
—Bien, Anne es la media hermana de Hyunjin, como tú bien sabes, nosotros los vampiros nos unimos entre puros para hacer crecer nuestra raza, la cual en el paso del tiempo se ha vuelto débil y estúpida —se levantó para revisar algunos libros. —El poder de la inmortalidad, como el hecho de ser seres superiores, nos sirvió por mucho tiempo, para aprender y ser mucho mejor que cualquier raza en muchas áreas, muchos de los descubrimientos en el paso del tiempo fueron hechos por vampiros, pero, sin embargo, el poder nos embriago y nos hizo tontos y soberbios. —tomó un libro, abriéndolo para encontrar una página específica, después la colocó en las manos de Felix, —mira, siempre fuimos una unión, entre vampiros, licántropos y humanos, pero eso fue eliminado de la historia, porque nuestra razas comenzaron a crear nuevas vidas, una de las más fuertes fueron: "Los híbridos", una mezcla de un vampiro puro y un licántropo alfa, ese ser superaba a todos, en fuerza, en inteligencia, pero sobre todo había algo que lo hacía superior, no necesitaba sangre ni le afectaba el sol, haciéndolo una mezcla perfecta, con el poder de un licántropo y un vampiro, pero con aquella inmortalidad, sobre todo con el poder de curación más alta que cualquiera. —se sentó frente a él. —Pero fueron eliminados y borrados de la historia, por aquellos que tuvieron miedo, ¿te preguntaras porque te digo esto?
La vampiresa observó a su hija que estaba sentada en silencio alado de ella.
—El padre de Hyunjin, nunca me amó, jamás tuvo aquel sentimiento, estuve a su lado y con ello, conocí a los Han y los Lee, vampiros inteligentes y con grandes ideas, una noche hui de ese palacio cuando supe que iba haber una revolución, una nueva guerra, en mi huida tropecé para caer en un hermoso y gran bosque que era protegido por un antiguo licántropo, el cuido de mí, por 10 años y con quien tuve un romance donde nació Anne, pero la guerra comenzó y Hyunjin nos encontró, al igual que tú, ella y yo estamos encerrados, por el miedo de los vampiros —se levantó para tomar la mano de Felix —Es tiempo... para demostrar la fuerza de la verdadera raza superior.
Minho parecía un lobo enjaulado, caminaba de un lado a otro, respiraba con fuerza, sus fosas nasales se dilataban, su cuerpo se tensaba.
—¡No tengo tiempo para que ustedes 3 decidan por la vida de mi familia! —les gritó a los dos licántropos ancianos y al líder de los humanos.
—No podemos perder más de nosotros al buscar una guerra —respondió uno.
—¡Ellos ya la empezaron!, ¡cruzaron nuestras líneas!, no solo eso, ¡secuestraron a mi esposo e hijo! —gruño Minho sin miedo alguno a sus lideres.
—Pero ellos no pertenecen a nuestras razas —respondió el líder de los humanos
—¡Claro!, no pertenece a ningún de su raza, no pertenecen a ningún de su manada, porque ellos me pertenecen a mí, porque ellos son mi familia, si ustedes no me apoyarán, buscaré quien lo haga. —amenazó con furia.
—Te irás a una guerra por una criatura que no ha nacido y por un ser que no es de tu raza. —protesto uno de los ancianos
—Me iré a la guerra no solo por ellos, si no por cada uno de los nuestros quienes fueron asesinados por ellos, por cada una de las gotas de sangre derramadas. —Minho se giró con enojo, muchos licántropos lo siguieron, al igual que humanos.
Los ancianos no pudieron hacer nada por detenerlo.
Minho se preparaba para ir hacia la guerra, los hombres afilaban sus armas y los lobos se preparaban con vestimentas, con sus enormes capas de piel de oso. Chan se acercó a su hermano.
—Sabes que esto es una locura —pronunció, era como la voz de la razón, razón que le importaba una mierda en ese momento a Minho.
—Siempre me inculcaste el odio por ellos, ahora no quieres luchar, no estabas diciendo que eras un cobarde, pues levántate y demuestra tu fuerza —pronunció colocando algunas cosas en un bolso de piel.
—Sabes que quizá muchos mueran en esta batalla —indicó el mayor de los hermanos.
—Cada uno de ellos lo saben, cada uno tiene un motivo para pelear, mi motivo no es solo salvar a quien amo, si no tener la libertad de amarlo, sin miedo, dime ¿no deseas algo tú también? —golpeó el pecho de su hermano y sonrió. —si hemos de morir, que sea luchando y no como cobardes.
Palmeo la espalda de su hermano y avanzó entre los licántropos y humanos.
—¡Escuchen!, esto no será fácil, quizá moriremos, quizá no volvamos, pero que nuestro sacrificio sirva para que el futuro avance. —gritó y los soldados que lo acompañaban gritaron al mismo tiempo. Avanzó entre ellos. —Los primeros seremos los lobos quienes cubriremos a los humanos, los cuales usarán sus armas bañadas en plata para pelear, ¿entendido?
—¡Si señor! —gritaron y la guerra comenzaría.
Jisung ha recibido una carta de su hermano quien, con un grupo de vampiros, llagarían a la sede principal para enfrentar a los vampiros los cuales habían comenzado la guerra. Antes que aquella carta llegara, el rumor de que "Los híbridos" habían vuelto, se esparció por todos los oídos de los ancianos y vampiros jóvenes lo cual provocó una gran conmoción en la sede.
- "Pues la mejor arma contra ti es no saber quién es tu verdadero enemigo."
La labor de Jisung era mal informal, aunque eso lo ponía en constante peligro Changbin siempre estaba a su lado protegiéndolo. A la vez que informaba a los vampiros que no estaban de acuerdo con la guerra que si no se levantarían en la lucha que se resguardaran.
Ya que la noche más oscura y larga comenzaría.
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