Jungkook estaba a punto de perderse en un deseo que nunca antes había sentido.

Taehyung tenía habilidades que un Alfa ordinario no poseía, como hacer que el celo de un Omega viniera de manera inesperada y a su vez de un modo terriblemente intenso, pensaba que tal vez provocando su celo una vez más su lobo iba a colaborar y así iba a poder borrar la marca de enlace entre Namjoon y Jungkook, dejando una nueva. Sin embargo, el deseo que brotaba de los dos era tan poderoso que tuvo miedo de herirlo.

—Espera...

El fluido corporal que rebosaba en sus nalgas había mojado su ropa interior de tal manera, que ya hasta estaban manchadas también las sábanas...

—¿Es doloroso, mi amor? —Jungkook negó con la cabeza en un segundo. El sexo con otro que no fuera su Alfa debía ser doloroso, pero, ahora no se estaba produciendo náuseas, ni dolores de cabeza, ni mucho menos sentía ganas de irse de allí. Por el contrario, era como si un profundo placer sin precedentes estuviera envolviendo a Jungkook desde la cabeza a los pies, incluso aunque a Taehyung aún no le llegaba el celo.

—Borra su marca... Por favor. Quítala de mí...

Había estado esperando por esto durante mucho tiempo, porque quería, anhelaba y deseaba que solamente él fuera su Alfa. Estaba encantado de que lo abrazara, pero también se estaba preocupando de lo que podía pasar estando aun enlazado con Namjoon.

—¿Qué tal se siente?

—Bien, está bien...

Su pulso tembló, deseaba que se apurara porque de verdad quería tomar el nudo de Taehyung dentro de él y sentir su semen inundando la parte posterior de su estómago, en su vientre. Era un requerimiento silencioso que le hacía a Taehyung, aunque él ya lo sabía tan perfectamente bien como si lo hubiese susurrado a su oído, incluso comenzó a desnudarlo sin pedir permiso.

—... Espera, espera por favor.

El cuerpo de Jungkook parecía seguir siendo sexualmente inmaduro, se podía decir que hasta era como el de un adolescente, comparado con eso, el de Taehyung era complejo.

Jungkook lo miro desde abajo, deleitándose con la manera en la que montaba sobre él, y recorriendo mientras tanto sus músculos abdominales con los dedos. Su torso tenía el encanto de una persona madura y las líneas de sus músculos empezaban a hacerle sentir envidia de lo artísticas que eran, definitivamente había un encanto viviente que estimulaba la parte animal que tenía dentro.

—Jungkookie

"..."

Por primera vez, fue llamado con un diminutivo, se llevó la mano a la boca.

—¿Cómo...? —No sabía que podía ponerse tan débil solo con escucharlo decirle así.

El área alrededor de sus pezones fue estimulada con las yemas de sus dedos hasta un punto en que se erizaron, llegó un momento en el que sintió que su cuerpo ya no parecía hacerle caso. Taehyung tenía el control y él reaccionaba según su voluntad.

"Hmm... Ah..."

Sus dientes estaban clavados en su cuello y después, besó tras beso, descubrió que sus labios ahora se estaban moviendo hasta detenerse en su clavícula. Sin embargo, en todo este tiempo, las protuberancias irritadas de sus pezones estaban todavía bien sujetas por sus dedos.

"Hmm..."

Cuando lo succionó, su espalda entonces dibujó un arco perfecto.

Ya le había dado lo que quería, pero su cuerpo estaba tan codicioso en ese momento que simplemente deseaba más.

"Quiero que toques, que me aprietes, que me penetres, que me marques" Lo pensó, pero no lo dijo, Taehyung acarició sus costillas como si hubiera adivinado lo que quería, aunque no lo transformara en una voz.

"¡Ah!"

Cuando lo mordió, entonces gritó con una voz que todavía no conocía que tenía porque no era suya, era de su lobo que también se hizo presente, de verdad no podía creer que tuviera un tono tan desesperado cuando le hacían el amor, pero era evidente que lo que escuchó era una realidad. Trató de apretar su mano contra sus labios para no volver a hacerlo.

—Espera... Estoy avergonzado.

Taehyung lo acostó y comenzó a acariciar su pecho con toda la palma de su mano, mientras se acomodaba entre sus piernas, transmitía un aura de majestuosidad que Jungkook ni siquiera se sintió capaz de poder ver sin sonrojarse, ciertamente era bochornoso que cada reacción que mostraba su cuerpo pareciera expresar sus sentimientos más honestamente de lo que lo haría al hablar.

"Ah..."

Al voltearlo, la lluvia de besos que cayó sobre su espalda hizo que su cuerpo se sacudiera otra vez, era muy probable que se estuviera perdiendo desde que comenzó y, aun así, si además lo acariciaba y le besaba el cuello, comenzaba a sentir una fiebre que le nublaba la visión.

Concentró su conciencia en él...

—Muerde mi cuello... Muérdeme. —Su voz se oía suplicante y entonces la marca de la mordida comenzó a ser recorrida con la punta de los labios de Taehyung.

"¡Ah! Ah, ah..."

—¿Quieres que lo haga, mi amor?

"Hmmm..."

—¿Quieres que sea tu compañero?

—¡Sí!

Y entonces, sus dientes se hundieron el cuello del Omega con fuerza, el dolor fue tan intenso que sintió que le había perforado más que la piel con sus colmillos que eran tan afilados como los de un animal. Taehyung estaba gruñendo como una bestia.

"¡Ah, ah, ah, ah!"

Cuanto más se iba estimulando, más podía ver el cambio que ocasionaba en el Alfa.

—Tu olor es... Intenso. Es tan delicioso...

Mirando hacia atrás, incluso notó que sus ojos se estaban pintando de dorado y que la saliva no dejaba de gotearle por la cara. ¿Pudo borrar la marca de enlace? No podía creerlo, pero, solo podía pensar que sí, porque la presencia de su lobo indicaba que aceptaba a Taehyung como su compañero. Lo estaba haciendo atacar como un animal feroz, igual que cuando se abrazaron por primera vez en plena calle.

"Ah..." —Un dulce suspiro salió de sus labios.

Ojalá fuera verdad y el enlace que tenía con Namjoon ya estuviera anulado, sonaba como algo imposible, pero lo deseaba con cada una de las células de su cuerpo. En realidad, los dos estaban, desesperados por pertenecerse el uno al otro y tal vez, un Gamma realmente era alguien especial.

Taehyung tomó su pene y lo frotó contra su muslo, era más grande que cuando lo vio por primera vez, estaba duro como una roca y goteaba de su punta como la saliva de un tigre frente a su presa, por supuesto que tanto la longitud como el grosor estaban más allá de la imaginación de Jungkook.

—Voy a entrar....

Fue aterrador pensar que lo rompería, sin embargo, deseaba que lo hiciera de una vez.

—Lo quiero, lo quiero, lo quiero.

Sus manos le tocaron la espalda, de su boca salió un sonido húmedo y profundo, Taehyung introdujo uno de sus dedos en el ano de Jungkook.

—Respira, solo respira mi amor..."

—Más...

Era aterrador. Pero incluso si su cuerpo se rompía con su pene, definitivamente deseaba que lo penetrara con fuerza, deseaba que lo empujara y balanceara en su interior una vez y otra vez y, cuando se dio cuenta de esto, pensó que también se había convertido en un animal.

—Rápido... —Jungkook levantó su trasero y lo movió frente a él, su pene entró y definitivamente no podía creer que estuviera sosteniendo algo tan grande con los músculos del ano.

"¡Aaaaaah! ¡Ah, por...!"

Taehyung era suyo, su compañero, su Alfa y su amante también, suyo para siempre, suyo incluso a pesar del maldito de su hermano, fue abrazado y penetrado dentro de su nido, hasta pareció no importarle que lo estuviera destruyendo todo.

Era tan bueno, que incluso pensó que Dios les arrojaría un rayo por disfrutar tan placenteramente de un tipo de dicha que solo se volvía más intenso cada vez, todo lo que podía escuchar era la respiración áspera de Taehyung y su voz pronunciando su nombre.

—Aquí estoy... Ah, aquí estoy mi amor. —Sintió una oleada terrible de calor en la espalda. No desapareció de inmediato, sino que mojó su interior hasta desparramarse entre sus piernas.

"Ah, ah, ah, ah, ah..."

Taehyung siguió vertiendo su semen en el interior de Jungkook y al momento final, antes de desmayarse lo escucho gemir su nombre una última vez. Quería también decirle algo, pero las palabras desaparecieron bajo los labios de Taehyung antes de poder convertirse en una oración.