Capítulo XL
El clima estaba muy agradable desde la mañana, los pájaros cantaban fuera de la ventana y el viento acariciaba suavemente sus mejillas.
Ese día, dejó a los niños con la niñera, puso a su bebé en la carriola y dejó la casa de la mano de Yitian. También había dos guardias militares con ellos, pero afortunadamente, estaban cuidándolos a una distancia "considerable" ya que había tenido que decirle sus planes a su esposo, Taehyung pudo ser lo suficientemente empático y razonable, en respetar su deseo de "vivir lo más normal posible."
—Mami, mami, rápido.
Yitian parecía estar ansioso por ir a la escuela por primera vez así que gritaba y halaba la mano de Jungkook para que corriera junto con él todo el tiempo.
—La escuela no se va a ir de allí, tranquilo.
En el colegio, recorrió el lugar con algunos otros visitantes, Yitian inmediatamente se hizo amigo de los hijos de otros padres, cómo un buen ejemplar de futuro Alfa, demostró el liderazgo innato de los de su casta. Estaba jugando con todos, con sus ojos brillando ante los toboganes y columpios coloridos que no podía encontrar en su hogar.
El bebé empezó a llorar en el camino, pero solo cambió su pañal una vez y le dio de comer muy poquito, el recorrido terminó en aproximadamente una hora y con ningún contratiempo que lamentar, aunque por supuesto que Yitian quería quedarse un poco más que eso, se despidió de los niños de los que se había hecho amigo y dijo que esperaba verlos otra vez.
—¿Te la pasaste bien?
—¡Sí! ¿Me voy a quedar aquí?
—No he decidido todavía, pero si te gusta podemos decirle a papá.
Yitian, pareció completamente enloquecido debido a la gran cantidad de personas en la escuela, nunca había visto más niños que a sus pequeños hermanos, así que decidió que estaba bien si ambos se tomaban un respiro.
—¿No quieres algo dulce, bebé?
—¿Está bien?
—Claro ¿Qué se te antoja?
En ese momento, escucharon un fuerte tronido. Era un accidente de tráfico en una intersección cercana, un coche le había pegado a otro a mitad de la acera, parecía que varias personas estaban involucradas y la escena era terriblemente escandalosa.
—¡Mamá...!
Al parecer, una madre y su hijo estaban involucrados, el conductor, que salió del auto, era un hombre de mediana edad que se había quedado completamente atónito ante la escena, escuchó una voz que gritaba: "¡Échenme una mano!" Y luego vio a uno de los guardias de Taehyung darle un masaje cardíaco al pequeñito junto al auto accidentado. Había tantos mirones que no pudo ver bien de que iba toda la situación.
—Mamá, ¿Está herido?
—Está bien, amor. Enseguida viene una ambulancia así que no te preocupes.
No supo lo que pasó después, pero su ritmo cardíaco aumentó gradualmente.
—¿Qué es esto?
Tenía dificultad para respirar y estaba empezando a sentir que tenía muchísima fiebre de nuevo. Era su celo, pero incluso cuando miró a su alrededor, descubrió que la multitud no estaba reaccionando a su aroma en lo más mínimo, se sintió un poco aliviado, aunque igual no podía saber cuánto tiempo duraría la buena suerte.
—Ya...
Estaba tratando de correr a algún lugar junto con Yitian, pero su manita, la que intentaba tomar, se escapó antes de tocarlo.
—Mamá ¿Ella está bien? ¿Está lastimada? —Señaló a una mujer, sentada al costado del camino y justo al lado de un hidrante. Quizá se había sentido mal cuando vio la escena del accidente porque ciertamente estaba pálida como un muerto, trató de decir algo, pero no pudo modular ni una palabra y antes de darse cuenta, Yitian corrió de nuevo para ayudar a la mujer y desapareció entre la multitud.
—... Yitian.
—"..."
—¡Yitian! No me hagas esto. Regresa. ¡Yitian!
Una señal de peligro parpadeaba en su cabeza y entonces escuchó algo parecido a un latido...
—Yitian. ¡¡Yitian!!
Cuando logró alzar la voz por segunda vez, finalmente lo vio correr de nuevo hacia él.
—Mamá, ¿Qué pasa?
Se sintió aliviado de tener de nuevo a su niño, pero su condición estaba empeorando considerablemente, su fiebre estaba tan fuerte y sus piernas tan cansadas que contactó con urgencia a Taehyung antes de que ya no pudiera ni hacer eso. Fue él quien guardo su número en marcación rápida en su celular para recibir un llamado con solo tocar un botón, Jungkook le mandó su ubicación por mensaje.
—Ven aquí, bebé. Vamos.
Finalmente, pudo agarrar la mano de Yitian para entrar en un callejón mientras empujaba la carriola de su otro niño, era peligroso tener el celo en pleno parque así que inmediatamente sacó la jeringa y la colocó en su brazo.
—Mami, ¿Estás enfermo? —Yitian frunció el ceño con ansiedad.
—Estoy bien. Estoy bien ¿De acuerdo? Ya llamé a papá para que venga.
El repelente que le dio Taehyung también fue rociado por la zona para que no se acercara nadie, hasta se había ido a ese lugar porque lógicamente el spray funcionaba mejor en un área pequeña. En ese momento, Taehyung le llamó.
—Ya voy para allá. ¿Qué sucedió? ¿Estás herido?
—No lo sé. Me siento mal, ven pronto...
—Ya voy. Estoy cerca. Terminé mi trabajo rápido porque Mina dijo que estaba nerviosa por ti.
—Ah... Es una Alfa muy buena.
De verdad estaba orgulloso de ella, y no solo de Mina, sino también de Yitian, Min, Yuna, Hwan y TaeJoon. Por supuesto que igual de su pequeño bebé Taemin. Aunque no tuvieran su sangre, las sonrisas de los niños y la manera en la que lo abrazaban y lo buscaban, lo hacían amarlos y querer protegerlos con su vida si fuera posible.
—¿Qué pasó con los guardias? Esos idiotas...
—Hubo un accidente de tráfico... Y... Hay heridos...
—No pasa nada, tranquilo. Iré pronto, llegaré pronto ¿Si mi amor? Así que espera.
La tranquila voz de Taehyung lo calmó un poco. Habían prometido proteger sus vidas diarias y las de sus pequeños hijos así que era más que evidente que iban a salir de esta situación de la manera que fuera, se sentó al lado del carro del bebé, Yitian lo abrazo de forma protectora, el pequeño Alfa estaba alerta y preocupado por su madre, juntos esperaron en silencio a que llegara Taehyung, intentando mantener su conciencia despierta mientras escuchaba la voz del niño diciéndole que todo estaría bien.
Pero su corazón rebotó de nuevo.
Estaba... Esa persona... Ese era un Alfa Gamma...
Estaba convencido de que lo era a pesar de que su conciencia estaba alterada debido a la fiebre. Podía sentirlo, esto no era solo el celo, estaba siendo incitado intencionalmente por él. Sin embargo, fue diferente a cuando reaccionó ante la presencia de Taehyung, está vez sentía algo maligno en el aire, tenía la horrorosa certidumbre de que ese Alfa Gamma quería hacerle daño.
—Mami ¿Qué te pasa?
Entonces notó que estaba teniendo una hemorragia nasal. Yitian estaba muy asustado, trató de calmarlo —Está bien, bebé —se limpió rápidamente la nariz con el dorso de su mano.
Pensando en cómo iba a salir de esto, recordó cuando Taehyung tomó un supresor para no atacarlo, fue antes de que estuvieran enlazados, aun así, la influencia de la feromona no pudo ser suprimida y tuvo que ponerse más inyecciones hasta que finalmente le hicieron efecto.
Fueron un total de cinco. Taehyung lo amaba tanto que no le importaba hacer cualquier cosa para protegerlo a él y a sus hijos, incluso él lo amaba de tal manera que podía sacrificarse por conservar a su familia unida y sana, tanto Taehyung como los niños lo necesitaban así que pensó que buscaría la manera de salir de esta situación antes de que ese Alfa Gamma lo encontrara.
En ese momento, sintió un aire fuerte y malvado que le hizo levantar la cara, la presencia era tan fuerte que incluso el bebé comenzó a llorar.
Deseaba que fuera su esposo, pero no era posible, comenzó a llorar sintiéndose derrotado, ya no podía pensar de forma optimista cuando se sentía tan mal. La sombra, que se veía en la entrada del callejón, era alta y ancha, no tenía un uniforme militar y estaba haciendo algo para suprimir el lobo del pequeño Yitian, quien tenía las mejillas enrojecidas y parecía sufrir de un dolor tremendo mientras mantenía una lucha interna con su lobo para no sucumbir y abandonar a su madre.
—Yitian, ¿Qué pasa, Yitian?
—Mami...
Cuando tocó su frente, descubrió que tenía mucha fiebre y síntomas como de un resfriado. — ¡Detente! Mi hijo tiene solo 6 años. ¡Detente! ¿¡¡No ves que lo estás haciendo sufrir!!? —Le gritó al hombre que se acercaba y parecía estar disfrutando de esta situación. Incluso escuchó una voz rugiente salir de su garganta así que se preguntó cómo podría detenerlo, si salía del callejón iba a estar en peligro, pero iba a ser mucho peor si se quedaba allí.
Pensó.
Pensó de nuevo.
El llanto del bebé continuó con fuerza, era como el sonido de una sirena de policía que señalaba el peligro y además de todo eso, el dolor de Yitian pareció ir en aumento. Rara vez lloraba, pero ahora sus mejillas estaban empapadas de lágrimas, Era horrible verlo en ese estado de sufrimiento.
—¿Cómo estás? ¿Es doloroso? Respira.
La sangre continuó brotando de su nariz y tiñó el suelo de rojo. ¿Era solo anemia o se debía a que había utilizado una gran dosis de supresores? No lo sabía, sin embargo, todavía podía seguir. Todavía estaba lo suficientemente bien como para seguir consciente.
—Hah, ah... —Exhaló todo su calor y tocó el suelo para no perder la cabeza, aunque el bebé seguía llorando y Yitian se estaba aferrando a su cadera, podía ver que el hombre se acercaba cada vez más...
—Hmm, eres terco.
Los pies del Alfa aparecieron cerca de su vista, trató de mirarlo a la cara, pero sus ojos estaban nublados y no podía verlo bien. Fue en ese momento que, desde el otro lado del callejón, escuchó una voz que gritaba.
—¡Jungkookie!
Taehyung borró la presencia desagradable del ambiente.
—Ah ¡Aquí! —Gritó. Estaba aliviado de volver a sentirse a salvo, pero antes de que pudiera decir algo más, el hombre le hablo con total desdén.
—Te mataré después.
—"..."
Taehyung se acercó y al mismo tiempo el hombre desapareció.
—¡Jungkookie!
—Se... Se escapó por allí, es un Alfa Gamma.
El sonido de los zapatos se podía escuchar justo a su lado, pero, al mismo tiempo en que experimentó alivio, también perdió el completo control de todo su cuerpo. La hemorragia nasal paró, pero siguió siendo doloroso.
—Dios...
Taehyung no pudo ocultar su sorpresa al ver a Jungkook tan mal, tampoco pudo disimular su ira. Detrás de sus ojos, que siempre tenían el color de una noche en calma, había una llama roja de completa ira. Taehyung revisó el interior de la carriola después de confirmar que Yitian estaba más tranquilo y también había dejado de sentir dolor, entonces... Los abrazó.
—¿Los tres están a salvo...? ¿Les hizo algo?
—Todo está bien, no te preocupes.
—¿Te golpeó?
—Esto es... Fue diferente.
—Te inyectaste...
Mirando al suelo por encima del hombro de Taehyung le respondió, —Algo así. —No estaba completamente seguro pues se le habían caído varias ampolletas al suelo.
Lo abrazó más fuerte, pero se sintió triste. El lobo en el interior de Taehyung, estaba gritando y aullando de rabia e impotencia.
—No tengas miedo, ya estoy aquí. —Las palabras de Taehyung llenaron el hueco de ansiedad que tenía en su corazón. No lo culpó, conocía a su Alfa y sabía que el mismo se estaba reprochando el no haber llegado a su lado antes.
Taehyung lo besó, cargó a Yitian entre sus brazos y ayudó a su esposo a hacer lo mismo con el bebé.
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