Sin importar las consecuencias

Después de decir aquello noté la sorpresa de N, una reacción que incluso me hizo repasar una y otra vez las líneas que acababa de decir. A veces podía ser un poco "acelerada", pero nunca pensé que, sólo con palabras, dijera el sentimiento que me consumía en ese momento... mis deseos de salvarlo.

-Vaya...- Negó con la cabeza por unos segundos, como si estuviera tratando de convencerse de algo -En algún momento mi corazón no podrá más...- Con una sorpresa en mi rostro que no me logré quitar durante el combate, creo que vi como N parecía... ruborizarse y un brillo distinto se asomaba por sus ojos.

Como si compartieramos pensamientos, mis mejillas también adoptaron ese color carmesí y la gran sala del trono se quedó en un silencio incomodo, que necesito la interrupción de los grandes legendarios para poder continuar.

"Alteza, lamento arruinar su silencio, pero esto sólo se decidirá con el final de este combate" El dragón blanco pareció dudoso en toda la frase, como si no hubiera querido interrumpir.

"Digo lo mismo que algodón, sino continuamos esta batalla nunca llegará mi turno" En cambio nuestro querido Zekrom seguía siendo el típico aguafiestas de siempre.

-P-perdón- me disculpé casi instintivamente, sabía que no era mi culpa; el silencio sólo se formó por una vergüenza algo sospechosa, sin embargo, luchar con el dragón negro era muchísimo peor que aceptar la culpa.

-Annie...- Alcé la mirada para encontrarme con unos ojos grises, acompañados de una amplia sonrisa. Lo mire expectante, pues parecía no haber acabado de hablar, pero, N tampoco parecía poseer palabras.

-En fin- se encogió de hombros rindiéndose de lo que fuera que iba a decir, y finalmente miró a Carracosta. -Sé que apenas saliste pero, ¿Estás preparado amigo?- Su Pokémon asintió sin musitar palabra.

Tal vez no era del tipo "hablador", como cierto Pokémon que siempre está a mi lado...

"Excadrill también tiene algo de desventajas" Ah, hablando del rey de Roma "Pero, también ventaja" Afortunadamente Raichu no había comentado nada al inicio, porque se hubiera convertido más vergonzoso de lo que fue.

-Digamos que ambos Pokémon están nivelados- intervine después de un rato, musitando mi pequeño análisis -Asi que, aprovechemos lo que tenemos en este momento.

-Decidida por el combate...- por su tono, podía saber que N iba a por el primer turno. –Bueno, entonces podemos continuar, Carracosta, ¡Hidrobomba!- su Pokémon no espero ninguna señal, sólo con escuchar la voz de su entrenador tomó la delantera y atacó a Excadrill.

-¡Intenta escapar con excavar!- Tenía que hacerlo, la única debilidad de su Pokémon era el tipo roca, y la de Excadrill su tipo tierra, tenía que aprovechar las oportunidades, por pocas que fueran.

Excadrill superó la velocidad del Pokémon tortuga y escapó, apareciendo detrás de su contrincante.

-¡Onda certera!- Por muy pocas que fueran...

-¡Protección!- Un acto inexplicable y al tiempo sorprendente, sin ni siquiera voltearse, Carracosta se defendió del movimiento.

-Los Pokémon de tipo roca, considerados los más resistentes, no sólo por su físico sino por sus capacidad para usar movimientos de protección, de la manera más eficaz- Apenas estábamos en la segunda ronda y a cierta personita se le da la idea de instruirme sobre tipos.

-Resistentes ante ataques, pero, débiles ante la madre tierra- Chasqueé los dedos y Excadrill tocó la tierra provocando un terremoto, un movimiento, que afortunadamente un Pokémon como él no podía esquivar -¿O me equivoco?-

N sólo soltó una sonrisa obligándome a poner más atención, eso sólo me daba mala espina.

-No eres la única que posee aquel "don" de la naturaleza- Esta vez, con un golpe en el suelo, N mandó la orden a su Pokémon. Otro ataque tipo agua.

-¡Excadrill esquívalo y usa Taladradora!- Si él quería un combate entre Super-efectivos, se lo iba a dar.

Mi compañera volvió a salvarse, afortunadamente, y con una rapidez que sólo se le puede conferir a un Pokémon, alcanzó a darle un ataque directo a Carracosta, o eso creí yo.

-Doble equipo- Susurró N, no sabía como pero, sus Pokémon podían actuar de la forma que él deseara. En mi caso el "libre" fue lo único cercano a ello, sin embargo en este caso...

Pareciera como si N y su Pokémon fueran uno sólo.

"Esto se está complicando más de lo normal" La voz de Raichu en momentos de tensión podía ser algo molesta, pero a veces ayudaba "¿Qué hacemos?" continuó, a veces.

-No estoy muy segura- Un golpe directo era todo lo que pedía, la defensa de ese Pokémon podía ser grande pero, confiaba en que un crítico de Excadrill lo acabaría de una sola.

Supongo que tendré que confiar.

Llamé la atención de Excadrill con un silbido y con la mirada, le compartí mis deseos de ganar.

-Excadrill, por favor, usa toda tu fuerza y sigue mis órdenes- Aquello, en pocas palabras, se podía traducir a un "En el próximo ataque da todo lo que tienes".

Mi compañera asintió impidiendo que ningún sonido saliera de su boca. Sin más se dio la vuelta y esquivó otro movimiento, aquel Carracosta no permitía ni un segundo de descanso.

-¡Avanza con garra de metal!- tomando impulso saltó y dando volteretas en el aire cayó en picada con su garra apuntando a su oponente.

-¡Protección de nuevo!- Afortunadamente ese era parte de mi plan, Carracosta era un Pokémon que sabía reponder con velocidad pero, aquel ataque no podía usarse por mucho tiempo.

-¡Ahora lanza un onda certera!- Al protegerse había dos opciones bloquear o esquivar, sin embargo cuando ya se bloquea una vez, hay que alistarse para una segunda, en cambio esquivar era sólo de reacción.

¿Por qué cuento todo esto? Carracosta ya había gastado su intento de protegerse y ahora la única salida que le quedaba era... moverse de su posición original.

-¡Excadrill!- Esperé el momento oportuno y paso exactamente como había previsto, el Pokémon contrincante se movió hacía la derecha dejándome la oportunidad perfecta -¡Libre!- Grite con una emoción que trate de ocultar y Excadrill alcanzó a saber que era exactamente lo que quería.

Fue misterioso, que justamente en ese momento, no me di cuenta del dolor de mi muñeca, ni de mi cuerpo, pues simultáneamente un aura me empezó a rodear.

Mi compañera tomó a Carracosta con la guardia baja y a sólo milímetros de distancia se cubrió de la misma energía que me recorría, aunque sólo fue por un segundo, y allí sin pensarlo se convirtio en su característico taladro, dando un golpe directo que mandó a volar al Pokémon.

Había sido un crítico.

"¡Excelente!" Exclamó Raichu moviendo su cola con felicidad y yo estuve a punto de celebrar victoria, pero sólo de reojo alcancé a ver la verdad.

-Me sorprendes Annie- Carracosta había recibido el movimiento, aun así no lo había debilitado, y a pesar de su notable cansancio, había agarrado a Excadrill en su forma taladro mostrando que... Ella no podía escapar –Cometiste dos errores en esta batalla-

"Unos algo críticos" fue la primera vez que escuche a esa tortuga.

-El primero, fue olvidar a tu contrincante- Realmente no había dejado en el olvido el hecho de que su habilidad fue robustez, pero nunca pensé que... Era verdad, en todo este combate Carracosta no fue tocado ni una sola vez por Excadrill.

-Y la segunda- Ahora N parecía tener una expresión de pena, al parecer comprendía mis supuestos "fallos" pero ¿Por qué note decepción? –Es olvidar tus propias "cartas sorpresa"- Allí fue donde capturó toda mi atención.

Su Pokémon pareció sonreír y lanzó a Excadrill contra uno de los muros de la sala.

-¿De qué hablas?- Miré con preocupación a mi compañera mientras hablaba, ella sólo se levantó con dificultad.

-Annie- Su sonrisa volvió a aparecer -¿Conoces los movimientos tutor?- Abrí mis ojos como platos para notar como el suelo alrededor de Excadrill cambiaba para, de improviso, ser apresada por unas rocas.

Eso había sido tierra viva.

-Te lo repito- Volvió a levantar su mano y su Pokémon hizo lo mismo, acercándose a Excadrill con Aqua-Jet y luego mandándola al aire.

Grite con impaciencia, esperando que hiciera algo, confiando que se salvara, pero simplemente no paso.

-Yo soy el campeón y eso significa- Ahora fue otro Hidrobomba, uno de los que no se pueden esquivar y el mismo que me llevó a perder –Que no soy del mismo nivel que aquel alto mando.

Excadrill quedó debilitada con sólo dos movimientos.

"..."

-...- Raichu y yo estábamos igual; Con las miradas perdidas, la sorpresa en nuestra expresión y tan atónitas que era dificil reaccionar ¿Qué fue todo eso? ¿Cómo N había podido...?

"No sólo te gano" Mencionó mi compañera con amargura mientras miraba a N "Sino que usó el mismo truco con el que lo superaste en la primera ronda" después de ello rió con nerviosismo tratando de ocultar su inseguridad.

"N es un mundo aparte" Por muy impresionante que fuera, era verdad. Ya me estaba dando cuenta de ello.

-Sigamos- N empezó a sacudirse la ropa por unos segundos antes de sacar una Pokeball –Amigo regresa.

Todavía en mi desconcierto no dude en verlo con cierto temor ¿Qué Pokémon iría a sacar ahora?

-Esta bien, es ahora o nunca- Lancé mi pokeball de primero y Unfezant salió al campo de batalla.

-Bienvenida al combate- Mencionó N mientras lanzaba la pokeball de su compañero al aire una y otra vez. Al frente de él yacía otro Pokémon que no estaba registrado en mi Pokedéx. Un Klinklang, un Pokémon hecho de tuercas y de un color gris que representaba su tipo acero.

De alguna manera el movimiento tutor de Unfezant podría ayudarme en esto, pero...

-Klinklang, ¡Espacio raro!- Su Pokémon se quedó estático con los ojos cerrados, esto ¿Era bueno, verdad?

-Unfezant- Un riesgo, al menos antes de ese ataque -¡Onda ígnea!- Envolviéndose en fuego como la primera vez, mi compañera se acercó con disimulo a su contrincante, quien seguía con los ojos cerrados y N no había musitado palabra, esto me dió un mal presentimiento.

Sin embargo, el ataque se ejecutó con satisfacción, con la única falla de que no había tocado a Klinklang.

Espacio raro se había completado y sabía exactamente que hacía.

"Permitir a los más lentos que ataquen primero" Y por primera vez, amigos les presento a mi Guía de Pokémones parlante, ¡Raichu! "¿Cómo lo ejecutó antes de que Unfezant lo alcanzara?" No fui yo la que respondió esa pregunta.

-Sinceramente ni yo lo sé- Ambas volteamos a ver al de cabellos verdes, mientras volvía a meter las manos en sus bolsillos –Digamos que... ¿Confianza?- Por un motivo que sigue siendo misterio N sabía usar todas mis técnicas a la perfección.

Unfezant ahora estaba en el aire confundida, tratando de localizar a un Pokémon, que parecía desvanecerse de su radio de visión a los 2 segundos de haberlo encontrado.

-Esto no terminará asi- Chasqué los dedos y Unfezant volvió a cargar el movimiento.

-¡No lo permitas! ¡Foco resplandor!- Seguía siendo curioso como N no usaba movimientos que hicieran mucho daño, a menos de que fueran necesarios, por el hecho de no querer ver sufrir a los Pokémon.

Sabía que con esta batalla había dudado, pero, al ver como sus amigos reaccionaban empezó a emocionarse más de lo normal. Sonreí casi inconscientemente.

-Unfezant ¡Aguanta!- El impacto fue directo pero, no desvaneció, siguió en su misma posición e incluso desvió el movimiento con un ala de acero improvisado. Al darme cuenta de su mirada, el valor llenó mi cuerpo.

A pesar de que aquella mirada fue la última que vi de ella en todo este combate, pues, Unfezant desprendió el calor de su cuerpo rodenado la sala con un fuego bastante potente que su contrincante no pudo esquivar.

Sin embargo, no habíamos ganado y a pesar de que no fue nuestra culpa, fue el error que me obligó a no poder intervenir.

-Klinklang, bloqueo- Así N impidió mis intentos de escape –Ahora ¡Electro cañón!-

-¡Esquívalo!- Debido al cansancio no logró esquivarlo por completo y por fin recupero la compostura su rival ya estaba al frente de ella.

-Y asi...- empezó N.

-¡Unfezant!- Un hiperrayo salió de Klinklang a una distancia que fue inevitable.

-Es que se derrotan a dos Pokémon- Unfezant cayó al suelo debilitada –De una sola vez- Sin notarlo N miró el campo de batalla y a una Unfezant que se había recuperado de su desmayo y ahora tenía dificultados para levantarse.

-¡Amiga!- Corrí hacía ella buscando en mi bolsa algo para curarla, mientras trataba de encontrar algo, no fui la primera en llegar.

-¿Estas bien?- deteniéndome en el acto, noté al "Lord" que se arrodillaba enfrente de Unfezant ofreciéndole una baya y revisando sus alas.

"Muchas gracias" Susurró mi compañera al tiempo que llegaba a su lado y le volvía a sobar su plumaje.

-Lo siento- Escuché al lado mío y lo más curioso por dos voces, N y el mismísimo Klinklang ahora me observaban expectantes de que les perdonara.

-No te preocupes- Alcancé a asomar una pequeña sonrisa -fue una técnica justa y además... lo que hiciste, gracias- Le dediqué mi sonrisa mientras devolvía mi compañera a la pokeball.

Después, sólo me mantuve un rato en el suelo antes de volverme a parar, y vaya sorpresa terminé enfrente de un querido chico-edificio.

-¿Por qué eres tan alto?- Ups... el típico caso de "No sabía que pensaba en voz alta". Me tapé la boca con ambas manos y luego retrocedí hasta que escuche la voz de N.

-No lo sé- Sonrió colocando una mano en mi cabello y sobándolo –Tal vez sea de familia- agregó –Y eso que no soy tan mayor que tu- Lo último lo dijo con un aire de duda mientras seguía con su acto, hasta que se dio cuenta y apartó la mano.

-Supongo que tendré que comer más- Susurré soltando una risita y ambos regresamos a nuestras posiciones originales.

-Muy bien N, hemos llegado a la parte crítica del combate- El poder de Espacio raro todavía no había desaparecido, asi que tenía que vencer a Klinklang de una manera u otra.

-Eso veo Annie- Otra vez su sarcasmo, dio una suave palmada y las tuercas de Klinklang empezaron a soltar un sonido metálico mientras giraban, su Pokémon estaba bastante motivado.

-Bueno... es tu turno amigo- Solté la pokeball dejando que esta rodara por el suelo por unos segundos antes de que apareciera en el campo... Mi querido rodillo –Scolipede ¿Estás listo chico?-

"Claro entrenadora" sus cuernos parecieron vibrar e intentó erguirse de tal manera que se viera más alto de lo que ya era.

-Me pido el primer turno, ¡Disparo espejo!-

-¡Esquívalo con rodillo púas!- A pesar de sus esfuerzos por querer "crecer",  a mi pequeño amigo le tocó adoptar la misma posición que solía tener en su forma de Whirlipede.

-Como el viento fluye, la tormenta se acerca- Pareció una frase de las típicas improvisaciones de N, pero esta fue como una "orden" para su Pokémon. El cuerpo de Klinklang empezó a soltar chispas y de improviso un trueno alcanzó a mi compañero.

-¡Scolipede!- Mi Pokémon resistió el movimiento, sin proponérselo se acercó hacia su oponente –Perfecto...- Si Espacio raro dificultaba las cosas sin embargo, tenía la leve sospecha de que se terminaría en cualquier momento -¡Mega-cuerno!-

-¡Esquívalo!- Su compañero acató la orden con rapidez y de la nada volvió a colocarse detrás de Scolipede, el viejo truco del ataque por la espalda...

-¡Detrás de ti!- y el grito que ya se volvió cliché...

-Lo siento Annie- N regresó a su tono burlesco, Klinklang estaba cargando un hiperrayo –Al parecer ganaré otra ronda a menos que...- Justamente allí me miro de reojo, logrando que sonriera.

Lo que me encantaba de su personalidad, era el hecho de que siempre buscaba que yo diera lo mejor, en situaciones como esta. Además tenía justo lo que quería, en el mismo momento donde Klinklang apareció detrás de Scolipede escuché una grieta.

-A menos de que... ¿Suceda esto?- El ataque todavía no se había terminado de cargar, pero allí Espacio raro se rompió y sin importar la distancia que los Pokémon poseían entre ellos.

Klinklang no iba a tocar a Scolipede.

-N- le dedique una sonrisa siniestra mientras chasqueaba los dedos –Te devuelvo el favor, Scolipede ¡Hiperrayo!- Con su velocidad finalmente recuperada mi amigo Pokémon no permitió que su contrincante terminara el ataque, un gran rayo de luz salió de su boca golpeando a su rival y mandándolo al otro lado del campo.

Era un ataque poco eficaz, pero era un comienzo, los ataque tipo veneno no le afectarían a Klinklang pero, eso no era lo único que mi Scolipede sabía hacer.

-¡Aprovecha la distancia y utiliza excavar!- Me tocó esperar unos segundos hasta que la estática causada por el ataque se desvaneciera. Para mi fortuna el Pokémon de N también había sufrido aquella "penalización" a pesar de no haber completado el movimiento.

Finalmente y después del silencio que provocó esa espera, ambos Pokémon se lanzaron al combate. Scolipede optó por desaparecer, quien iba a pensar que Excadrill no era la única con movimientos tipo tierra. Klinklang en cambio se quedó quieto, sin embargo (a diferencia de la última vez) noté preocupación, aquel Pokémon no sabía cómo actuar frente a su debilidad.

-¡Ahora!- desde el suelo e incluso a pesar de su "habilidad de reacción" el Pokémon de N no pudo esquivarlo –finalmente ¡Acábalo con golpe roca!- Incluso después de ambos ataques Klinklang seguía de pie.

-Poniendo seriedad en las últimas fases del combate ¿Es que nunca cambias Annie?- Ahora N estaba de brazos cruzados, y era curioso, pues aquel peli verde era el primer entrenador que cambiaba su forma de dar órdenes cada par de rondas.

-¿Es que acaso no existe la originalidad?- le replique con el mismo tono burlón –Una persona siempre posee algo que lo hace destacar- chasqueé los dedos y Scolipede saltó (Sí, si Zekrom puede entonces Scolipede también) cayendo hacia su oponente con un rodillo púas.

-La luz en medio del camino, y las sorpresas nunca terminan- Klinklang terminó a merced de Scolipede siendo aplastado por él y... estando estampado en el suelo.

Justo lo que quería.

-Nuevas ideas y estrategias- susurré siguiéndole el juego a N –Es justo lo que me describen- volví a alzar mi pie, dándole otra patada al suelo al tiempo que gritaba mi orden -¡Scolipede, terremoto!-

Después de un pequeño temblor, escuché como mi contrincante soltaba un resoplido.

-Bien hecho amigo- musitó mientras devolvía a Klinklang a su Pokeball, finalmente había roto la racha de N y la había vuelto mía. Aunque, fue en ese momento cuando pareció que él leyó mis pensamientos porque soltó una sonrisa, una que no me daba mucha confianza.

-No lo será por mucho- Susurró a un tono casi inaudible, antes de fijar su mirada en mi –Annie, no disfrutes la victoria...- Lanzó la pokeball de improviso y otro Pokémon prehistórico se hizo presente –Cuando no la tienes- Dio otra suave palmada y su Pokémon se abalanzó contra mi rodillo -¡Archeops, acróbata!-

-¡Sco...!- No pude terminar. Aquel suceso fue similar al que sucedió en mi combate contra Cheren, sin embargo, la fuerza de este ataque estaba fuera de todo lo que había visto.

"Hemos perdido de nuevo" Soltando un gruñido y con chispas en sus mofletes, Raichu se agarraba con fuerza de mi hombro "Nos da la seguridad por unos segundos y luego..." Le interrumpí.

-Nos derrota en un tiempo record- Ahora, como si fuera la primera vez en todo mi viaje, me encontraba en términos desventajosos contra mi oponente, a mí sólo me quedaban dos y a N tres.

"Pido este combate" En todo el combate mi compañero había estado descansando, pero al parecer hasta Samurott había reconocido lo peligrosa que era esta situación.

Asentí sin más y mi amigo dio un paso hacía el campo de batalla.

-Archeops- llamó N sorprendiéndonos a Raichu y a mí, había extendido su brazo, gesto que sólo significaba el descanso de aquel tipo volador.

El Pokémon prehistórico se alejó del combate y se colocó en el hombro de N, justo como Raichu suele hacer.

-¿Sabes algo Annie?- musitó después de unos segundos.

-¿Qué sucede ahora?- Intente parecer molesta, sin embargo con él me era imposible -¿Vas a empezar con otro de tus...?- No me dejó continuar, las palabras que salieron de su boca, interrumpiéndome, me dejaron en un completo shock.

-Estoy empezando a apreciar los combates- Eso simplemente no me lo espere.

-¿E-en serio?- Tartamudeé intentando recuperarme. N pareció ignorar mi estado porque simplemente lo empeoró.

-Sí, aunque las batallas del alto mando jamás me pusieron de esta manera...- Se quedó pensándolo -¿Qué fue lo que cambió?-

"Allí viene la frase" A pesar de su comportamiento hace unos segundos, Raichu se encontraba riendo como idiota "Prepara tu corazón Annie"

-¿Por?- Mirar confundida a mi compañera ya era habitual, no sabía a qué se refería en la mayoría de ocasiones. Aunque esta vez recibí una sonrisa algo burlona.

"No sé, tal vez habrá un "Badump" en camino?" ¿Un qué?

-Raichu haces unos análisis tan curiosos- Al parecer, la forma de hablar de mi compañera alegraba a cierto Lord –Aunque... Me siento algo tonto después de decir aquello- Se disculpó con un gesto hasta que fijó su mirada en mí.

-La única diferencia de todos aquellos combates, fue con quién me enfrentaba- Sonrió –Tú, eres la razón de que esto sea tan emocionante- Mi pecho pareció explotar por medio segundo.

-¿Qué quieres decir?- De milagro no tartamudeé en toda esa frase.

-No es nada importante- susurró mientras sacaba a Carracosta de nuevo –Pero, te doy las gracias por aparecer en mi vida- Agache la cabeza de golpe, no quería mostrar lo sonrojada que estaba en ese momento.

-En fin...- Susurré después de tomar aire por unos segundos –Samurott, terminemos con esto-

-Perfecto- Al parecer la única afectada por aquellas palabras fui yo, N seguía con su comportamiento sereno, aunque, eso si debo de resaltarlo, su postura ya no mostraba tanta tensión.

N parecía querer disfrutar estas últimas rondas.

"Muy bien, ahora es todo o nada" asentí a las palabras de mi compañera "Si ganamos estas tres rondas tendremos la ventaja si no, Zekrom tendrá que lidiar con más Pokémon aparte de Reshiram"

"Lo cual no sería de mi agrado" Disparó el dragón oscuro.

"Exacto, asi que déjenmelo a mí" Samurott completó la frase permitiendo que los tres Pokémon soltarán una sonrisa.

-Carracosta ¡Poder pasado!-

-Samurott ¡Esquívalo con Aqua-Jet!- Con una fortuna que sigo sin saber cómo tengo, Samurott acató mi orden con prontitud y aquel Carracosta no fue rival para su velocidad.

-¡Acua-cola!- Aprovechando que estaba de espaldas, Carracosta empezó a cargar el ataque.

-¡Utiliza el mismo movimiento!- Ambos ataques chocaron y un torbellino de agua los alejo un poco.

-Carracosta, es hora de mostrar tu doble tipo- Exclamó N logrando que su Pokémon asintiera y lanzara otro "Poder pasado" a Samurott.

-¡Rómpelas con Concha filo!- Estaba segura, esto lo iba a acabar con un solo combo. –Ahora ¡levántalo con Mega cuerno!

"¡Sí señora!" apoyándose en el suelo que la fuerza para ocasionar una grieta, Samurott lo elevó dejándolo a mi completa merced.

-¡Protégete con refugio!- Dando honor a su forma tortuga, Carracosta se metió en su caparazón.

-Eso no será suficiente- Chasqueé los dedos y Samurott lo obligó a dar vueltas en el aire – ¡Atácalo con concha filo arte de la espada!- Si estaba escondido en ese caparazón sólo tenía que obligarlo a salir.

¿Adivinen qué? Lo hizo justo a tiempo y en el mismo momento que Samurott lo levantó de nuevo.

-Ahora...- Una perfecta puerta de victoria -¡Termina con desquite!- Un ataque súper-efectivo que lo envió directo al suelo... Esto es malo.

-¡Raichu!- Exclamé y al terminar mi frase, Raichu ya había atrapado a Carracosta antes de que tocara el suelo.

Ya había sido derrotado en pleno aire, y aunque sabía que esta técnica la había usado múltiples veces, los Pokémon de N no merecen tanta maldad... Son su familia después de todo.

N se acercó hacía su Pokémon y lo regresó a descansar, no sin antes dedicarme un gesto de agradecimiento, al cual sólo pude replicar con el mismo. Finalmente, la última ronda.

-Annie, sé que es algo común para ti pero... ¿Puedo hacer una solicitud?- Su Archeops se sacudió un poco, estaba arreglando sus alas para luego volver su mirada hacía el campo. En cambio N seguía estando tranquilo, sin importarle el peso de aquel Pokémon.

-¿El príncipe quiere pedir algo?- Solté una risita y él me la respondió.

-Exacto, una orden algo egoísta- señaló el campo de batalla –Finalmente estamos en igual de condiciones, ambos con dos Pokémon, dos luces que quieren brillar- De alguna manera lo entendí.

-Quieres una batalla doble- musité, a lo cual él asintió.

-¿Puedo?- con disimuló había sacado la pokeball de su otro compañero, enfrente de mí había un entrenador que se mostraba firme como la naturaleza, solté una sonrisa.

-Es curioso...- lo señale –Tu cabello es precisamente como tu forma de ser, tranquilo pero peligroso, como la gran madre tierra- Él pareció satisfecho con aquella descripción.

-Al igual que tú, tu pasión arde como la llama, por el rojo de tu cabello y aparte, tu rareza y amabilidad, capaz de cautivar a cualquiera, se representa en aquel amarillo.- y finalmente agregó.

-Annie, no eres la única que pone atención a su oponente- se palmeó el hombro y Archeops retomó su vuelo.

-Lo sé, al parecer somos más parecidos de lo que pensé- Mi Pokémon más fuerte junto a mi mayor resistencia, esto será interesante.

-¡Adelante!- gritamos al unísono, para lanzar a nuestro único amigo que no había tocado el campo.

Desafortunadamente, Zoroark perdería su habilidad, al ser el último Pokémon no podría copiar la apariencia de otro...

Sin embargo, nunca pensé que a N le sucediera lo mismo.

Ambos Pokémon tocaron el suelo y miraron a sus compañeros antes de verse entre ellos.

"No puede ser" Susurró Raichu, y esa era justamente la expresión que podía describir lo que presenciamos en ese momento.

Mi Zoroark estaba en frente de otro de su misma especie, sin embargo eso no era lo peor. Aquel acto que torno todo en una completa sorpresa, fue la visión del rostro de mi amigo mezclada de miedo y desconcierto.

Un temor que se trasladó a mi cuerpo, cuando él musitó...

"M... ¿Mamá?"

-(OuO)9

Buenas tardes queridos lectores!!!

Como verán estoy algo decepcionada conmigo misma pero, era inevitable ¿De qué hablo? Pues, hoy es el aniversario de "Un linaje Pokémon" pues lo empecé hace 2 años en esta misma fecha.

Como era una fecha especial quería terminar la obra pero, bueno, por razones que no explicaré (porque son muy comunes) no pude publicar tan seguido.

Este capítulo es como mi regalo de aniversario para ustedes y agradecerles que siguen leyendo esta obra.

Realmente culpo a mi imaginación por hacer el combate tan largo (el sólo 5 vs 5 se está demorando 3 capítulo O-O) pero, alguien me dijo...

-Pues Qué? Es la batalla final, no te preocupes (De paso te lo agradezco con toda mi alma)

Asi que aquí estoy, intentando ser cada vez más original en cada capítulo que pasa...

Gracias por leer y me voy despidiendo!

Bye Bye!!

-Niko

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