Capitulo 2: Comida, ducha y ropa.

Cómo hablan los personajes.
TN: cuando hablas.
Nombré de otro personaje: Hola
Grito: ¡!
Pensamiento: **
Alguna emoción o accion: //

Mientras la Princesa sigue hablando y compartiendo historias, cuando escucha un gruñido, ella te ve agarrando tu estómago y entiende al instante que tienes hambre. Con cuidado, te lleva a la mesa y te presenta un plato lleno de comida deliciosa.

P. Celestia: Esto es lo que llamamos "almuerzo". Tiene diferentes alimentos que nos proporcionan los nutrientes necesarios para crecer y mantenernos sanos.

Celestia te muestra cómo usar los cubiertos, tomándolos con suavidad y precisión, y te enseña a llevar la comida a la boca. Tú observas atentamente cada acción suya, tratando de imitar sus movimientos con los cubiertos.

Siguiendo las indicaciones de la Princesa Celestia, te esfuerzas por manejar correctamente los cubiertos para tomar los alimentos dispuestos en el plato frente a ti. A medida que intentas llevar la comida a tu boca, los cubiertos a veces se deslizan entre tus dedos o la comida se cae del tenedor antes de llegar a tu boca. Estos pequeños contratiempos te generan frustración y enojo.

P. Celestia: /Con una sonrisa tranquilizadora/ No te angusties si al principio te parece complicado. Todos aprendemos gradualmente. Lo aprenderás poco a poco.

Te tranquilizas con su voz serena. Entiendes que aprender estas habilidades requiere paciencia y, después de algunos intentos y correcciones, finalmente logras llevar un bocado de comida a tu boca con éxito. Una expresión de satisfacción y alegría ilumina tu rostro mientras saboreas el primer bocado.

Mientras disfrutas de la comida, Celestia te explica sobre los diferentes tipos de alimentos. Te describe sus sabores, consistencias y los beneficios que aportan al cuerpo. Habla sobre frutas, verduras y granos, ampliando así tu conocimiento sobre la variedad de alimentos existentes.

Celestia te mira y percibe tu confusión. Tus ojos giran como un torbellino mientras intentas procesar toda la información que te ha dado.

(Ejemplo gráfico)
(Pinche Wattpad no me dejó poner gif)

P. Celestia: /Ríe con delicadeza/ Perdón querido, me dejé llevar y solo te confundí más.

Timeskipe (Luego del almuerzo)

En la privacidad del cuarto, donde una luz suave se cuela por las cortinas, La Princesa, con voz dulce, describe meticulosamente cada objeto que trae a tu lado, compartiendo sabiduría y esperanza.

P. Celestia: Querido ser, hoy he traído libros, joyas de autoridad y aventura /Mientras dispone los volúmenes con delicadeza a tu alcance/ Dentro de estas páginas yacen relatos y saberes que te guiarán en el descubrimiento de este mundo.

Ves todos los libros que trajo Celestia, uno de ellos te llamo demasiado la atención.

Solamente te pones a ver las ilustraciones del libro, Celestia los cuenta.

Cuando Celestia estaba leyéndote el libro que te llamó la atención, se dio cuenta de que llegó a la página del relato de Nightmare Moon, y rápidamente hojeó las páginas de la historia y pasó a la siguiente.

Miraste esto confundido, aunque querías escuchar esa historia, te limitaste a seguir escuchando el otro relato mientras pensabas en el de Nightmare Moon.

Te muestra una de las páginas que muestra Equestria

P. Celestia: Lo que ves en este dibujo es el reino de Equestria, es un reino mágico donde viven principalmente ponis terrestres, pegasos y unicornios, junto con otras criaturas como grifos y dragones, además de diferentes tipos de animales.

???(Tu): /Escuchas atentamente/

P. Celestia: /Continúa explicando/ Equestria contiene muchos lugares dentro de sí, un ejemplo que te puedo dar es el Imperio de Cristal, Ciudades como Canterlot, qué es donde estás ahora, Ponyhattan, Cloudsdale, también como pueblos como Ponyville, Equestria tiene una gran diversidad de paisajes y culturas.

Después de un momento de silencio

P. Celestia: /Notando tu expresión de asombro/ Parece que te has quedado impresionado con todo lo que te he contado.

Te sientes emocionado por la magia y la belleza del reino que se extiende ante ti. Observas detenidamente las imágenes que la Princesa Celestia proyecta y tratas de absorber cada detalle, deseando poder expresar tu asombro.

Ella te sonríe con amabilidad y luego señala hacia una mesa cercana donde hay una caja llena de cubos de colores brillantes.

P. Celestia: /Con voz suave/ ¿Te gustaría jugar con estos cubos, querido? Puedo enseñarte cómo usarlos.

Te quedas un momento contemplando los cubos, y luego asientes con entusiasmo.

P. Celestia: Ahora, querido, observa cómo se hacen los movimientos precisos /Con voz serena mientras apilaba cuidadosamente los cubos uno sobre otro/

Observas con atención sus gestos y tratas de imitarla, intentando colocar un bloque encima de otro con manos temblorosas. Al principio te resulta complicado y torpe, pero con la guía paciente de la Princesa Celestia, poco a poco empiezas a comprender cómo funciona.

Luego de algunos intentos logras hacer una torre de 4 cubos, Celestia sonríe al ver tu progreso.

P. Celestia: Muy bien, aprendes rápido, pero asegúrate de alinearlos perfectamente para que la torre sea estable. /Corrigiendo ligeramente la posición de un cubo/

Con cada nuevo objeto que Celestia te presenta, te esfuerzas al máximo por entenderlo y usarlo correctamente. Aunque a veces cometes errores y tropiezos, Celestia te anima y guía con paciencia, recordándote que aprender lleva tiempo y cada error es una oportunidad para mejorar.

El sol comienza a descender en el horizonte, tiñendo el cielo con tonalidades doradas y naranjas. A medida que la tarde avanza. Celestia te lleva hacia el 'baño real', allí, te muestra objetos de aseo personal.

P. Celestia: Esto es un cepillo dental /Mientras sostenía el cepillo/ Lo utilizamos para nuestros dientes y para mantener una buena salud bucal. ¿Comprendes?.

???(Tu): /Asientes con la cabeza/

Después de las explicaciones de la Princesa Celestia, intentas sostener el cepillo como te había mostrado, pero tus manos temblaban. Deslizas el cepillo por tus dientes de manera descoordinada, tratando de imitar los movimientos que Celestia había demostrado. Observando sus intentos, Celestia corrigió con ternura los errores

P. Celestia: Así es, trata de realizar movimientos delicados y circulares. Entre más practiques, mejorarás.

P. Celestia: /Muestra una barra de jabón/ Este es un jabón suave y perfumado, lo usamos para lavar nuestro cuerpo y mantenerlo limpio y fresco.

???(Tu): /Agarras el jabón, lo pasas sobre tu cuerpo/

P. Celestia: /Te ve confundida y se le escapa una risa/ Parece que necesitas ayuda para bañarte. No temas, porque estaré aquí para atender tus necesidades. En primer lugar, debemos quitarte la ropa. En segundo lugar, tenemos que asegurarnos de que tu cuerpo esté completamente empapado para que el jabón se deslice por tu piel con facilidad. ¿Estás preparado para recibir tan tiernos cuidados?.

???(Tu): /Asientes/

P. Celestia: /Frotando el jabón entre sus pezuñas/ Muy bien, observa cómo aplico el jabón entre mis cascos para generar una espuma abundante. Es fundamental frotar bien en todas las partes del cuerpo para lograr una limpieza completa. Observa con atención mientras te demuestro cómo se hace.

P. Celestia: Ahora, toca deslizar lentamente el jabón sobre tu cuerpo. Asegúrate de utilizar movimientos circulares suaves para asegurarte de que cada zona quede bien limpia. /Pasando el jabón por todo tu cuerpo/

Después de unos minutos.

P. Celestia: Muy bien, hemos hecho un trabajo minucioso. Ahora, vamos a enjuagar el jabón con agua tibia. Procura mantener los ojos bien cerrados para evitar que entre jabón en tus ojos.

Con los ojos bien cerrados, la Princesa Celestia lava cuidadosamente tu cuerpo con agua tibia para quitarte la espuma; la suave cascada te proporciona una sensación relajante y reconfortante que te envuelve por completo. Confías en los hábiles cascos de Celestia y sabes que estás bajo su cuidado amoroso.

P. Celestia: ¡Muy bien!, Ahora es el momento de secarte bien el cuerpo. Te envolveré con cuidado en una toalla secarte suavemente cada centímetro de piel para evitar un resfriado.

La Princesa Celestia coloca tiernamente una toalla suave sobre tu cuerpo, teniendo el máximo cuidado en secar meticulosamente cada parte de tu cuerpo con la mayor delicadeza y atención.

P. Celestia: Listo, ya terminamos, ahora solo falta la ropa.

La princesa Celestia te envuelve cuidadosamente una vez más en la toalla caliente antes de utilizar sus habilidades mágicas para transportarlos a ambos de regreso a la comodidad de su dormitorio. Te ayuda a vestirte con prendas de su propia creación, confeccionando meticulosamente un atuendo que refleja la misma ropa que traías al llegar a su mundo.

Princesa Celestia: Hoy vamos a vestirte con esta ropa que he hecho para ti. Recuerdo que tenías algo similar en ti, así que he tratado de recrear algo que se asemeje. ¿Qué te parece si empezamos con este kimono?

Te muestra un kimono que se asemeja a una de tus antiguas prendas.

Princesa Celestia: /Mostrando un kimono/ Este kimono tiene un diseño similar a uno que traías contigo. He utilizado colores que recuerdan tu estilo. ¿Qué te parece?

Mientras observas el kimono, tratas de recordar si alguna vez lo has visto antes. Aunque no logras recordar, decides confiar en Celestia y asientes con la cabeza.

Princesa Celestia: Perfecto. Ahora, pasemos al obi. /Mostrando el obi/ Este cinturón se usa para asegurar el kimono y darle forma. Y finalmente, esta haori, que es una especie de chaqueta ligera que se usa sobre el kimono.

Celestia observa cómo sonríes por lo que ha hecho por ti. Ella se siente aliviada, ya que sus esfuerzos no han sido en vano.

Flashback (Cuando todavía estabas en coma)

Vemos a la Princesa Celestia observando tu ropa con curiosidad.

P. Celestia: ¿Qué tenemos aquí? Son una especie de prendas que cubren casi todo su cuerpo. /Usa su magia para quitarte la ropa con suma delicadeza. Al terminar, examina cada prenda y deduce que las usas para el frío, ya que aunque tienes algo de pelaje en las colas, la mayoría de tu cuerpo no lo tenía, solo las colas y el cabello/ Hmm, esto es un  kimono, si no me equivoco, aunque con algunos detalles distintos /Con una sonrisa/ No será tan difícil de recrear.

Comienza a cortar y coser un trozo de tela intentando imitar la forma original de tu kimono.

P. Celestia: Bien, tengo ya el... /Se detiene y frunce el ceño, confundiéndose y cosiendo las mangas de manera incorrecta, haciendo el kimono más adecuado para un poni que para ti. /¡Oh, no! /Rápidamente descose las mangas y las cose nuevamente, ajustándolas al estilo de tu kimono pero nota algo más en tuyo/ ¿Un orificio para las colas?, De acuerdo /Hace un orificio en el kimono/

Ahora le toca el obi.

P. Celestia: Ah, un obi, creo lo usan para asegurar el kimono. Hmm.. /Toma trozos de tela, los corta y los cose/ Este es el más fácil, muy bien es hora del siguiente.

P. Celestia: ¡Oh, qué maravilla! Esta haori parece tan suave y abrigado. /Comienza el mismo procedimiento que con el kimono/ Bueno, supongo que lo primero que debo hacer es... coser las telas juntas.

Con una habilidad mágica increíble, Celestia empieza a unir las telas de manera entusiasta, sin prestar atención a ningún patrón. El resultado es una mezcla caótica de colores y formas. Una vez terminada, Celestia se pone su propia versión del haori y rápidamente se da cuenta de que algo no anda bien.

P. Celestia: "¡Oh! Esto se siente un poco extraño. ¿Por qué hay un agujero aquí? Y, ¿por qué mis alas no encajan?"

Mientras intenta ajustar la haori, la Princesa Celestia comienza a dar vueltas y aletear sus alas torpemente. Pronto, la tela se enreda en sus patas y en sus alas.

P. Celestia: ¡Ay, ay, ay! Esto no está saliendo como lo esperaba. Creo que he inventado una nueva forma de atrapar a los pegasos.

Celestia se libera del haori enredado y lo deja de lado. Luego de varios intentos, logra hacer una haori perfectamente ajustada a tu tamaño y movilidad.

Por último, le toca la ropa interior (boxer).

P. Celestia: Esto parece un... ¿pañal?
/Te vuelve a mirar y piensa/ No sabía que eras un bebé. /Agarra una tela, la junta, la corta y la cose/ Este pañal no fue tan difícil de hacer. Listo, ya está todo.
/Cansada por todo el esfuerzo que hizo para recrear tus prendas, se acerca a ti para darte un beso en la mejilla y se va a dormir/

FIN DEL FLASHBACK

En el dormitorio de la Princesa Celestia, con el sol comenzando a ocultarse en el horizonte, la atmósfera es tranquila y reconfortante. Celestia, con una expresión de satisfacción en el rostro, se acerca a ti con la ropa que ha confeccionado.

P. Celestia: /Sonriendo con orgullo/ Bueno, querido, es el momento de probarte la ropa que he preparado. Espero que te guste.

Celestia extiende el kimono frente a ti, mostrando el detalle y el esfuerzo que ha puesto en él. Luego te ayuda a ponértelo, ajustando con cuidado cada parte.

??? (Tú): /Sonríes y asientes mientras te pones el kimono, sintiendo la suavidad de la tela en tu piel./

P. Celestia: /Mientras ajusta el obi alrededor de tu cintura/ Este cinturón mantiene el kimono en su lugar. Debes ajustarlo bien para que no se deslice.

Una vez que el kimono y el obi están en su lugar, Celestia coloca suavemente la haori sobre tus hombros.

P. Celestia: /Revisando el ajuste de la haori/ Y aquí tienes la haori. Esta debería mantenerte abrigado y cómodo.

Te miras en un espejo cercano, admirando el esfuerzo y la dedicación de Celestia en recrear algo similar a lo que solías usar. La Princesa Celestia observa tu reacción con una sonrisa satisfecha.

P. Celestia: /Con un tono alegre/ ¡Te ves maravilloso! Me alegra mucho que te guste.

??? (Tú): /Mirando a Celestia con agradecimiento./

P. Celestia: /Se acerca y te da un suave abrazo/ No olvides que cada prenda lleva consigo el esfuerzo y el cariño que puse en ellas. Siéntete libre de pedir ayuda en cualquier momento.

Después de asegurarse de que te sientes cómodo y que la ropa está bien ajustada, Celestia se prepara para despedirse.

P. Celestia: /Con una sonrisa cálida/ Bueno, querido, es hora de descansar. Te dejo para que disfrutes de la noche. Mañana, exploraremos más y aprenderemos juntos.

Celestia se dirige hacia la puerta, dejándote solo para disfrutar de tu nueva ropa y reflexionar sobre el día. La habitación se llena de una suave luz dorada del atardecer, creando un ambiente sereno y acogedor.

Después de que la Princesa Celestia te deja solo, decides que es el momento perfecto para explorar y apreciar el entorno en el que te encuentras. La habitación está iluminada por la luz suave del atardecer, que crea una atmósfera tranquila y relajante.

Al acercarte a la ventana, ves que el cielo se tiñe de tonos púrpuras y naranjas a medida que el sol se pone en el horizonte. La brisa fresca de la noche entra suavemente por la ventana abierta, trayendo consigo el dulce aroma del jardín exterior.

P. Celestia: /Desde la puerta, con una sonrisa cálida/ Si decides explorar un poco, te sugiero que salgas al balcón. La vista es aún más impresionante desde allí.

Siguiendo el consejo de Celestia, te diriges al balcón. Al salir, quedas deslumbrado por la belleza del cielo nocturno. La Luna llena brilla con una luz plateada y majestuosa, iluminando el paisaje con un resplandor mágico. Las estrellas parecen danzar alrededor de ella, creando una constelación deslumbrante.

??? (Tú): /Contemplas la Luna con asombro pero algo te inquieta al verla/

El paisaje nocturno de Equestria se extiende ante ti, con montañas distantes y bosques cubiertos por una ligera neblina. El silencio de la noche, interrumpido solo por el suave susurro del viento, te envuelve en una sensación de paz y tranquilidad. Ves como Celestia se pone a tu lado.

P. Celestia: Es bueno ver qué veas las maravillas de la noche, casi ningun pony lo hace. /Con su tono sereno/

Mientras ambos contemplan la Luna llena desde el balcón, la atmósfera tranquila parece contrastar con una sutil melancolía en el rostro de Celestia. A pesar de su esfuerzo por mantener una sonrisa serena, hay una sombra de tristeza en sus ojos.

P. Celestia: /Con un tono que intenta ser alegre pero su voz tiembla ligeramente/ La Luna tiene una forma especial de iluminar la noche, ¿no crees? Es un recordatorio constante de que, incluso en la oscuridad, siempre hay luz.

Celestia observa la Luna con una mirada pensativa. La expresión en su rostro cambia brevemente, revelando una tristeza que intenta ocultar.

P. Celestia: /Con un suspiro suave/ La Luna ha sido testigo de muchas historias... Algunas más difíciles de recordar que otras.

Notas que Celestia parece distraída, como si estuviera atrapada en sus pensamientos. Sus palabras tienen un matiz de nostalgia y pesar.

P. Celestia: /Con voz más baja/ Hubo un tiempo en que la Luna no siempre traía calma. Algunos eventos pasados... dejaron su huella. Pero hemos aprendido mucho y hemos crecido a través de esos momentos.

Celestia intenta cambiar el tema rápidamente, pero su mirada sigue siendo un tanto distante. Su sonrisa parece un poco forzada, y hay un leve temblor en su voz que no pasas desapercibido.

P. Celestia: /Recuperando parcialmente su compostura/ Pero eso es parte del pasado. Lo importante es que ahora la Luna brilla de nuevo, y con ella, la esperanza y la paz han regresado a nuestro reino.

Tu percepción de su tristeza se acentúa al notar que evita hacer contacto visual directo y sus palabras parecen tener un tono de añoranza. Sin embargo, también sientes que intenta transmitir una sensación de optimismo y fortaleza.

P. Celestia: /Sonriendo con un toque de calidez/ A veces, las noches más oscuras pueden ofrecer las vistas más hermosas. Espero que encuentres consuelo y paz en la belleza de la Luna.

Celestia se acerca para ofrecerte un reconfortante abrazo, una muestra de apoyo sincero a pesar de la tristeza que aún lleva consigo.

P. Celestia: /Con una sonrisa amable/ Si necesitas hablar o simplemente deseas compañía, siempre estaré aquí para ti. La noche es un buen momento para reflexionar y encontrar calma.

Con un gesto cálido y una última mirada a la Luna, Celestia te guía de regreso al interior del castillo. La noche te envuelve en su quietud, y te sientes reconfortado por la autenticidad y el apoyo de la Princesa Celestia.

La tranquilidad de la noche y la belleza del cielo estrellado te brindan paz mientras te acomodas para descansar, llevándote el eco de la reflexión silenciosa de Celestia sobre el pasado.

Fin del segundo Capítulo.

(Idea original de la historia: Originalmente trataría que serías una especie de híbrido humano dragon, tendrías rasgos de dragón, también la capacidad de transformarte en uno, solo que no tendrías control al estar en ésa forma y perdías el control, destruyendo todo a tu alcance)

Ahora sí...

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