No es broma, en un tiempo se me caía el pelo por el estrés que acumulaba.

Como ya solo quedan siete capítulos para terminar, decidí subirlos todos de una vez antes de que se estrené Kenobi.

Estaré escribiendo como loco jajaja.
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La fuerza de ataque Rebelde estaba a nada de llegar al sistema Mustafar.

Los cruceros pesados de los Mon Calamari formarán un bloqueo alrededor de la estrella de la muerte.

Las naves caza serán las encargadas de adentrarse en la superficie y avanzar hasta su objetivo.

Según el reporte, la estación de batalla cuenta con defensas a lo largo del camino, cañones pesados pero poco maniobrables.

Pasar será una tarea sencilla, solo tienen que cudiarse de las TIE que lleguen a ser desplegadas para frenar su avance.

Los Jedi por su parte, entrarán a la estación para ir en busca de Vader y el Emperador.

Solo esperaban no tener que encontrar a los Inquisidores en el camino o tendrán problemas.

-Señor, estamos arribando al sistema. -dijo Hera Syndulla desde su nave.

-Copiado, todas las naves salgan de la velocidad luz. -dijo el Almirante Ackbar.

La flota apareció frente a su mayor amenaza, como ellos esperaban, el Ejecutor era la única nave que estaba presente en el lugar.

-El Ejecutor esta indefenso, acabemos con el. -dijo Hera acelerando junto a su escuadrón.
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El Almirante Piett observaba todo desde el puente del super-destructor.

Su Emperador tenía razón, los Rebeldes aceleraron sus planes y ahora tendrán que pagar por ello.

-Desplieguen todos los cazas, artilleros, disparen a voluntad. -ordenó Piett.

La nave insignia de la flota imperial disparó sus enormes cañones contra la flota Rebelde.

Los TIE despegaron del hangar y entraron en combate directo con las fuerzas de ataque.

-Kanan, ustedes vallan a la estación, nosotros nos ocupamos de la situación aqui afuera. -dijo Hera por el comunicador.

-Nos veremos después. -dijo Kanan acelerando.
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El transporte que lleva a los Jedi aterrizó en la pista de aterrizaje.

-Andando. -dijo Cere combatiendo contra unos Stormtroopers que aparecieron apenas llegaron.

-¿Donde se encuentra el Emperador y Vader?. -preguntó Sa'Har noqueando a dos oficiales.

-En donde crees?. -dijo Kanan usando la fuerza para estrellar a diez hombres contra un muro.

-Entonces vamos para allá. -dijo Ezra entendiendo el mensaje de su maestro.

Un ser como Palpatine siempre esta en lo alto.

-Me temo que no puedo dejar que sigan avanzando. -dijo Cal Kestis interrumpiendo su avance.

-Vallan, me ocupare de Cal. -dijo Cere dando un paso al frente.

-Ya no son rivales Cere, fui entrenado por Vader y todos sabemos que un Inquisidor bajo la tutela de él, es más poderoso que todos ustedes. -dijo Cal seriamente.

-Rindanse y los dejaremos vivir. -dijo el Quinto Hermana apareciendo de entre la oscuridad.

-Última oportunidad, si dan un paso más, moriran. -dijo la Cuarta Hermana.

La frustración era visible en los ojos de los Jedi, nunca pensaron que ellos estuvieran aquí.

-Llamen a Hera, diganle que tenemos problemas. -dijo Kanan atacando al Quinto Hermano.

-No responde, solo de escucha pura estática. -dijo Sa'Har peleando contra la Cuarta Hermana.
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-Todas las naves, ataquen el núcleo de la estrella de la muerte. -dijo Hera maniobrando a través de la cresta.

Repentinamente los radares de proximidad sonaron.

-¡Destructores!. -gritó un piloto de X-Wing.

Toda la flota salió de la superficie del planeta para destruir a sus enemigos.

-¡Caímos en una trampa!. -dijo otro piloto de un Y-Wing antes de ser derribado.

Uno de los destructores persiguió al Fantasma, los enormes tubo-láser de la nave alcanzaron a dañar severamente la nave de Hera.

La Twi'Lek gruño, todo fue una maldita trampa desde el principio y ellos cayeron directamente en ella.

Decenas de cazas rebeldes fueron victimas de las defensas de los destructores.

Naves más grandes como loz cruceros quedaron atrapados en el fuego cruzado.

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(Puchale Play)

El silencioso lugar de batalla se vió interrumpido por pequeños destellos a lo largo de la sala.

Sonidos de disparos y risas malditas por la zona.

Respiraciones irregulares, gritos de furia y pasos veloces.

El metal crujiente provocaba una sensación de escalofríos, pequeñas llamas azules salían disparadas de un lado a otro.

Poco a poco el lugar se hiba despedazando, paneles de control destruidos, marcas de quemaduras en las paredes.

Y dentro de todo ese caos iniciado, vemos a siete sombras moviéndose constantemente con agilidad, elegancia, fuerza y destreza.

Apareciendo en un destello, Vader y Sidious colisionaron el rojo carmesí de sus sables de luz, todo en una lucha por la supremacía.

Vader tenía una abertura en su casco, más específicamente sobre su ojo derecho, moviéndose a la izquierda le cedió el paso a su esposa.

Padme giró varias veces para bloquear los ataques de Sidious y brincar unos centímetros para maniobrar el sable de luz de su esposo.

El lider de los Inquisidores aprovechó la avertura en su defensa y
lastimó a Sidious en el hombro izquierdo, ya que lo atravesó unos centímetros.

Padme cayó con elegancia, giro de derecha a izquierda el sable para desviar los disparos del Mandaloriano.

Obi Wan derrapo de rodillas por el suelo, dió un giró de noventa grados izquierda y logró cortar el costado izquierdo del cuerpo poseído de Maul.

Seguido de eso lo remató de un golpe que lo sacó volando.

Inesperadamente Windu apareció a espaldas de Obi Wan, Padme llegó para bloquear el ataque,  dió medía vuelta y cambió el sable de mano.

La batalla seguía aumentando de nivel, ninguno de los dos bandos retrocedía.

Estaban dandolo todo en la batalla.

Una fuerte explosión los sacó a volar, uno de los bombarderos de la Rebelión disparó contra su posición.

Ahora el lugar estaba disparejo, varios puntos muertos en donde si no pisas bien caeras al fondo y por ende la muerte.

Los escudos de emergencia se activaron, el oxígeno regresó.

Vader y Sidious corrieron en sig-sag usando viejos soportes para moverse.

Los dos se atacaron nuevamente, Skywalker como podía resistía, ya se estaba cansando.

Pre-Vizla confronto a Padme, la estaba acorralando.

En un movimiento rápido se inclinó a la derecha, dejó que la hoja azul del sable pasará por arriba de ella y dando un giró rápido decapito al sujeto.

-Abajo!. -dijo Obi Wan dando una doble patada en el pecho a Mace.

Rapidamente aprovechó y puso en práctica lo que aprendió de los archivos prohibidos de la orden Jedi.

Hizo levitar el cuerpo del Jedi y lo separó en muchas partes dejando expuesta el alma en su interior.

-Vamos, no te resistas. -dijo Obi Wan tratando de extraer el alma.

"Pre-Vizla" se levantó, como Anakin lo dijo, tienen que destruir el cuerpo o sacar el alma, mientras sigan de ese modo se van a terminar por cansar.

-Solo un poco más. -dijo Obi Wan poniendo toda su fuerza en esta técnica.

-Terminarás muy agotado, seguro de lo que estás haciendo?. -dijo Padme reflejando otro tiro.

-Es necesario. -dijo Obi Wan poniendo más de su parte.

Poco a poco el cuerpo poseído dejaba de moverse, los segundos parecían horas, el sudor recorría su frente.

Respiraba con rapidez, empeño mucho de su poder en lograr esta técnica que apenas aprendió a usar.

La esposa de Anakin se enfrentó nuevamente al Vizla, estaba desesperada, por más que intentaba no lograba acabar con él.

Sus movimientos ya no eran tan rápidos como antes, pero al menos mantenía su instinto al ritmo.

En un último movimiento giró el sable sobre su cuerpo y soltó una estocada directa en el estómago del Mandaloriano.

-¡Lo logré!. -dijo Obi Wan soltando el cadáver.

Lastimosamente no tuvo tiempo para descansar ya que Maul lo atacó.

-¡Por favor!. -se quejó Obi God pasando a la defensiva.

-¡Habla por ti!. -dijo Padme batallando con su enemigo.

Sidious le lanzó sus rayos de la fuerza a Vader, el mencionado tuvo que repeler ese ataque con su sable de luz, si dejaba que lo tocará sin duda sería malo para el.

-Tengo que hacer algo, no podré sostener el ritmo más tiempo. -dijo Vader tosiendo.

El Sith replicó la técnica de Palpatine, ambos señores oscuros demostraban el porqué son merecedores de ese título.

La risa de Sidious y la respiración irregular de Vader eran señal de poder.

No se hiban a guardar nada, uno de los dos ganará cueste lo que cueste.

Tres frentes de batalla se abrieron, tres bandos luchando por la misma meta.

Ganar la guerra de una vez por todas.
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Hasta aquí dejo el capítulo panas.

Espero que les guste.