Nos encontramos en la entrada de la mansión Crepúsculo, donde la diosa encargada de la familia estaba siendo cargada por un cráneo de Arg, solo que más grande.

Loki:¡Tráiganme mas alcohol!-Fue el grito eufórico de Loki.

Arg:Tranquilícese Loki-sama.-Pidio el cráneo un poco divertido por las reacciones de la diosa.

Riveria:Si, porque si no estarías en muchos problemas por el ruido.-Dijo la elfa alertando a las dos entidades, y si algo aprendió Arg en toda su estadía en la familia, era que no debía hacer enojar a Riveria por nada en el mundo.

Arg:¡Ho, R-Riveria-sama, qué gusto verla!-Saludo el ente en una forma demasiado nerviosa.-¡Le traigo a la descuidada Loki-sama, así que con su permiso, me retiro!-Dijo en una sonrisa, mientras Loki miraba al pequeño cráneo con enojo hasta que de la nada se esa mueca enojada se transformó en una de satisfacción.

??!:¿A donde crees que vas Arg?-Dijo una voz muy conocida para el cráneo.

Arg:T-Tio-na-sama, solo iba a nuestra habitación.-Dijo intimidado el ser por él aura que su maestra le daba, tanto es el mudo que no puede ni voltear a darle la cara a la pequeña chica.

Tione:Muy bien, vamos, ahí decidiré qué hacer contigo...-Dijo la chica con su típica sonrisa, pero eso solo alertó aún más al espíritu a querer desaparecer.

Arg:Ayuda...-Fue lo último que dijo el cráneo parlante mientras estaba siendo sujetado por la pequeña amazona se lo llevaba.

Todo bajo las miradas de las otras dos mujeres, las cuales veían siempre a la chica con una sonrisa casi angelical, con una inocencia demasiado pura, pero este momento representó que podía llegar a ser peligrosa, incluso más que una Riveria enojada.

Time skip.

Nos encontramos con una Aiz apenas levantada de su sueño, la cual se dirigía al comedor de la mansión mientras se tallaba el sueño de los ojos, pero al pasar frente a la habitación de Tiona, noto que la de Tione estaba entre abierta, así que como buena compañera se dirigió a cerrarla, pero al estar enfrente a la puerta vio como Arg estaba en el suelo sin dar señales de vida alguno, cosa que preocupó a Aiz, la cual rápidamente fue a revisar el estado del demi-espíritu.

Aiz:¿Estás bien?-Dijo la chica con una mirada demasiado preocupada.

Sin embargo Arg, lentamente fue prendiendo su pequeñas flamas así aliviando a Aiz.

Arg:¿Y-Ya se fue?-Pregunto con miedo el pequeño cráneo mientras miraba detalladamente la habitación, no encontrando a su maestra.

Aiz:Está en el comedor, esperando junto a los demás.-Le Contestó la pelidorada con una casi imperceptible sonrisa, creada por la actitud del demi-espíritu.

Arg:Oye, tal vez Tione-sama no tengo el mismo nivel que tú o Riveria-sama, pero nuestro contrato evita que realice ciertas acciones.-Le reprochó el cráneo a la chica la cual soltó un ligera risa, la cual desconcertó un poco al cráneo.

Aiz:Vámonos, nos esperan.-Dijo la chica mientras se retiraba siendo seguida por Arg.

Arg:(Entonces, ¿si tienes esa clase de emociones?, esto será entretenido)-Se Dijo mentalmente la criatura mientras caía suavemente en la cabeza de Aiz, la cual no le molestó.

Después de esa pequeña charla, Aiz junto a Arg el cual se encontraba encima de su cabeza se dirigían tranquilamente hacia al comedor, disfrutando del silencio qué se encontraba en los alrededores, aunque en cierta esquina, Arg sintió un presencia en la lejanía así, provocando que volteara hacia esa dirección.

Aiz:¿Sucede algo?-Pregunto la chica con algo de duda al ver el comportamiento del ser, ya que por muy fuerte que sea aquella criatura, Arg era 10 o incluso 100 veces más fuerte.

Arg:Siento una presencia mágica muy poderosa, tal vez tu o Lefiya no la sienta, pero para mí es como ver un elefante dentro de un auto.-Dijo el cráneo un poco serio, pero después se dio cuenta de la palabra que dijo al final, pero antes de corregirse Aiz preguntó.

Aiz:¿Auto?-Pregunto la chica ladeando la cabeza con la misma expresión neutral que a los ojos de la criatura, fue como tener 100 cachorros de animal agrupados.

Arg:No soy digno...-Dijo en un susurro el ente mientras se acercaba a Aiz, pero al caer en su cabeza delicadamente decidió explicar-Mira Aiz, ¿alguna vez pensaste en un carruaje sin necesidad de caballos?

Y así comenzó una explicación extensa a la chica la cual no sabía casi nada de lo que hablaba, pero era entretenido, pero aún así, Arg estaba preocupado por lo que sea que era ese ser con tal poder, pero aún con esa cantidad de poder, sabía que eso no iba a ser rival para el.