cap 4: Ichirin no hana.
Narra Tiona.
Han pasado días desde que Arg entró en nuestra familia, no como un miembro de esta, sino como un familiar personal. Pero creo que simplemente es un poco tedioso, ya que no deja de seguirme a todos lados, pero eso entendible, si se separa de Riveria, Aiz, Loki-sama o de mi, cientos de espíritus menores vendrán por el para decorar un poco de su energía aunque es un poco gracioso verlo. Aunque no confíe todavía en los demás miembros ya se acostumbro a estar cerca de Aiz, ya que según el, le recuerda a su madre, aunque sabíamos que su nombre era un enigma, no tenía que escondemos un secreto, pero pensándolo mejor, debe tener sus razones, incluso cada integrante de la familia tiene sus secretos, Arg era uno de los míos.
Pero pensándolo bien, ¿dónde está Arg?, no he oído sus gritos desde hace unas horas.
Fin de la narración.
Arg:¿Porque?
Pregunto Arg, el cual se encontraba en la habitación de Aiz, siendo sujetado como una mascota en el regazo de Aiz.
Aiz:¿Porque que?
Arg:¿Porque me tratas como a un gato?
Aiz:¿Es malo?
Arg:No, es cómodo, pero me pregunto ¿porque tu adoptaste esa costumbre?
Aiz:¿Costumbre?
Arg:Olvidalo, has lo que quieras.
Aiz:Esta bien.
Dijo mientras empezaba a acariciarlo como un gato
Arg:Perdóname.
Aiz:¿Hmm?
Arg:Te confundí con Aria y Albert Waldstein, y peor aún, te llame copia de ellos, así que discúlpame.
Dijo completamente arrepentido de lo que hizo, ya que las personas antes nombradas lo ayudaron llevándole libros a la cueva que había en la mazmorra.
Aiz:Aunque me dolió que dijeras eso, o que conocieras una parte de la vida de mis padres que yo no conocí, yo no puedo culparte.
Arg:Entonces somos lo mismo, tanto tiempo solos con solo una meta.
Aiz:¿Meta?
Arg:Tu quieres matar al dragón negro, yo quiero acabar con los encargados de encerrarme en ese lugar durante mucho tiempo, vivir 15 años en un lugar así no es bonito. Lo segundo sería matar al dragón negro, no puedo dejar que tus padres hayan muerto así como así, eran amigos míos y eso no lo olvidaré. Tercero estaría recuperar toda la historia antes de que me encerraran, no recuerdo nada, incluso si tuve familia. Cuarto proteger a Tione-chan y quinto leer y descubrir toda la información del mundo.
Dijo enfocando su vista en una vela que estaba en la mesita de noche de Aiz. Pero eso sólo provocó algo, Arg dejo de hablar o moverse, si al caso a emitir el aura cálida que producía.
Arg:Me es extraño pensar que no estoy en esa habitación oscura, la cual era iluminada por una simple luz...es gratificante.
Aiz:Me he estado preguntando, ¿porque mis padres te visitaban a menudo hace diez años?, ¿y porque me llevaban contigo?
Arg:Hay posibilidades, pero no estaremos seguros hasta investigarlo, pero eso sería...algo muy peligroso y doloroso...
Dijo el cráneo mientras sus flamas se achicaban demostrando como se deprimía al pensar en ese tipo de cosas, pero fue sorprendió por una Aiz la cual empezó a acariciarlo lentamente, así dándole un sentimiento cálido a Arg, tan cálido que si estuviera en su cuerpo hubiera abrazado a Aiz lo más fuerte posible ya que no importaba lo que el destino ella iba a cumplir su meta y ahí fue cuando otra meta llegó, iba acompañar a Aiz en su travesía contra el dragón negro, y no solo por Aiz, sino que también por diversion propia.
Pero mientras estos dos se estaban conociendo mejor bajo la luz de la noche se podía apreciar a dos figuras sonrientes las cuales se dirigían a lo que parecía una iglesia en mal estado, los cuales apenas entrando fueron revividos por lo que parecía un chica de grandes pechos y dos coletas, era la diosa y matriarca de la familia de la hoguera y del hogar, la diosa Hestia.
Hestia:¡Bienvenidos!
???/???:¡Gracias Kami-sama!
Agradecieron los dos jóvenes dejando ver sus facciones, un chico y una chica, aparentemente gemelos debido a su tamaño y facciones, pero había algo que cambiaba, era el cabello, mientras que el chico era peliplateado con un mechón rojo en su fleco, la chica llevaba un cabello rojizo hasta la espalda baja con el mismo mechón que su acompañante solamente que este era plateado, en cambio sus ojos se podrían decir que era lo mismo, una heterocromia de un ojo verde en el lado derecho y un ojo gris en el izquierdo de parte del chico, mientras que la chica tenía el mismo tipo de heterocromia pero al revés de su hermano.
Hestia:¡Rápido entremos, deben estar cansados!
Dijo mientras tomaba la mano de los jóvenes para dirigirse a lo que parecía ser el sótano de la iglesia, sótano el cual se veía mejor que lo que se podía llamar iglesia. Todo esto visto por la diosa de la belleza desde una de las dos esferas, pero...¿porque dos?, fácil, en la otra esfera estaba observando a alguien o algo, el cual estaba descansando en el regazo de una Aiz dormida, como si de un gato se tratase, volteo justo en la dirección de donde lo estaba observando la diosa, para así sus flamas cambiarán por unos segundos a rojo, así sorprendiendo a Freya.
Freya:Ara, ara, si que tienes energía pequeñín.
Dijo la mujer, empezando a tener un sentimiento muy parecido a la exitacion, era el sentimiento de peligro que le producía esa simple criatura, esa mirada, ese fuego ondeante amenazando con quemar algo más que carne y huesos, quemar y derretir hasta lo imposible, este era el poder que ella percibía en él, y lo iba a tener cueste lo que cueste, pero grande fue su sorpresa que él empezó a hacer una expresión de como si sonriera, para empezar a crearse una sombra oscura por detrás de ella, cuando ella se dio cuenta de lo que sucedía fue demasiado tarde, ella había sido sometida bajo la figura de la criatura ente ella.
Su gruesa gabardina negra, ondeando por el aíre ejercido en el rápido movimiento, la camisa blanca finamente planchada debajo del chaleco negro, pero lo que más sorprendió y emocionó a la diosa, fue la sonrisa que llevaba.
Argo:Hola diosa Freya...
Fueron las palabras dedicadas a la diosa de pelo plateado, la cual iba a contestar hasta que el ser hablo.
Argo:Me gustaría decir que es un placer volver a vernos después de mucho, pero sería en vano, así que hagamos un trato, ¿vale...?
Muy bien mis perros, hasta aquí este episodio, si, lo sé, es corto, pero créanme que en mi cabeza no sucede mucho últimamente, es más, estuve concentrado en dibujar al Alfredo Mercurio, pero haré esto, estoy leyendo un elfo llamado Bell para ver qué nada se me pase, pero simplemente no quiero que las ideas se me vayan, tengo que tomarme un tiempo con eso, es más, es mi OVA a la reata, pero bueno, vamos con lo importante, les daré chance de que me digan que quieren para la historia o que creen que sucederá en mis historias, quien de en el blanco, le doy un abrazo psicológico. Muy bien, con esto dicho, nos vemos la próxima semana(Tal vez), ¡CHAU CHAU!.
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