Me pongo a pensar en retrospectiva que es todo lo que me ha llevado hasta este momento, no soy una persona muy lista aunque tampoco soy alguien con quien sea fácil tratar, me la paso envuelta en mi mundo pasando los días, añorando aquellos años donde era feliz y ni lo sabía. Mi padre siempre fue alguien bastante estricto pero su lado amable siempre salía a relucir más cuando el momento lo ameritaba, me enseñó muchas cosas respecto a la magia pero nunca fui lo suficientemente buena en el linaje de nuestra familia. Eso me molestaba demasiado, siempre quise seguir los pasos de mi padre y mi hermana, pero... Ellos ya no se encuentran conmigo, de hecho hay muchas cosas que no logro recordar de esos años, aunque siempre haya algo que recorre mi cabeza y es la presencia de un chico rubio muy bien parecido, de ojos verdes, por más que intento recordar quien es o quien fue no logro poder alcanzar esa memoria en mi mente. He pasado los últimos 10 años sola, si tengo amigos? No puede ser, alguien con mi actitud apática y asociado no se le es fácil socializar con personas que no entiendan la magia, doy a lo que llamarían una bruja. Ya sabes de esas que usan hechizos y magia negra, sacrifican animales en sus rituales y cosas de ese estilo. Y no, no volamos con nuestras escobas, no estamos en little witch academia, para empezar ni siquiera tengo escoba. Aun así no todo es tan malo, aunque aún no tengo el valor de matar a ningún animal para poder hacer los rituales necesarios para desenvolverme completamente en la magia, siempre termino usando mi misma sangre para los conjuros lo cual merma el poder de los mismos pero bueno, nunca he Sido una persona muy interesante así que ya debieron aburrirse de esto. Se preguntarán quién es esta y porque tanta importancia realmente ni yo lo entiendo pero si en algo estoy segura, el mundo comenzó a volverse un completo caos, las personas han comenzado a actuar diferente, Tokyo siempre fue una ciudad muy peculiar para vivir pero aun así su gente era bastante normal, hasta hace unos meses, podría decir que todo comenzó cuando el culto Shingon Tachikawa Eiten School se hizo conocido. Muchas personas se unieron al culto como si estuvieran hipnotizadas, caminando por las calles llegaba a ver a seguidores convenciendo a los transeúntes a unirse a sus filas, no los engañare a mí también intentaron convencerme pero había algo raro con todos ellos, siempre que observabas sus ojos carecían de brillo, como si... les hubieran robado el alma. Aun así todo era normal pero comenzaron a expandirse rápidamente como un culto virtual a través de internet, la verdad soy una bruja, la tecnología se me da fatal, lo había escuchado en el instituto, muchos de mis compañeros comenzaron a parlotear cosas sobre el culto a todas horas, después siguieron los maestros y subsecuentemente parecía que toda la escuela no podía dejar de hablar de ello, era como si todo Tokio fuese absorbido por eso. Pero eso no era motivo suficiente aun para alejarme de ahí hasta aquel martirico dia, todo transcurría normal en la escuela, ya se me había hecho habitual escuchar sobre una tal Kiara o algo así, por lo cual no les tome importancia hasta que unas compañeras se me acercaron buscando que me uniera a ellas, yo decline su oferta y seguí metida en mis asuntos cuando una de ellas abrió la ventana junto a mí, "vas a ser liberada" fue lo que escuche detrás de mí, cuando varias manos comenzaron a tomarme de todos lados bruscamente jalándome hacia la ventana abierta yo les gritaba que se detuvieran pero no, al contrario sus rostros retrataban un éxtasis horripilante, como si les excitara ver el sufrimiento que me causaban, una de ellas me abrazo fuertemente y se dispuso a lanzarse por la ventana pero un compañero mío Kyousuke (un chico desinteresado que no resaltaba normalmente) tomo mi brazo y me jalo fuertemente dejando caer a la chica por el 7mo piso muriendo al impacto, toda la clase estaba horrorizada pero ahí no había acabado todo, cuando me di vuelta a agradecer a Kyouske estaba pálido, la otra chica e había clavado un cuchillo en el costado del torso derribándolo en el momento, la chica comenzó a tocarse delante de todos nosotros y a orinar en el cuerpo inerte de Kyouske gritando como histérica "Lo he liberado Diosa Kiara!!!" por el pánico mis compañeros comenzaron a abandonar el aula y los maestros detuvieran a la chica. Lo último que supe de Kyousuke es que no logro sobrevivir en el hospital y la chica fue entregada a las autoridades. Por mi parte tome la decisión de abandonar Tokio, sabía que no era una decisión fácil pero era lo mejor, si el mundo iba a enloquecer quería estar lejos de una ciudad tan grande, por eso me mude a Fuyuki, una pequeña ciudad en desarrollo, mi familia es originaria de ahí. A pesar que el mundo se dirigía a un destino catastrófico nunca pensé que sería parte de ese cataclismo.
Pero esta no es solo mi historia mi nombre es Sajyou Ayaka y esta es la historia que comparto con un joven llamado Shirou Emiya.

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Hola ya vamos a volver a actualizar porque este JoseSanchez158699 ya entregó su tesis así que no se preocupen y como pago por esperar a que volviéramos les dejamos un adelanto del siguiente arco.
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