Capitulo 3
-Ay lo siento-dice alzando la mirada Brooklyn
-No pasa nada, discúlpame a mí por ir distraído, debí poner atención por donde camino- menciona el chico sonriendo al ver que Brooklyn era hermosa
-Qué pena mi primer día en la ciudad y ya tuve mi primer choque- menciona Brooklyn sonriendo y tocándose la cara por la pena que tenia
- Oooo eres nueva en la ciudad, por tu acento debes ser estadounidense, soy Lewis, Lewis Hamilton- dice Lewis estirando su mano para saludarla
-Si soy nueva llegue hoy en la madrugada, un gusto Lewis soy Brooklyn, Brooklyn Miller- hace el mismo gesto que Lewis y estrechan sus manos
-El gusto es mío Brooklyn, tienes un hermoso nombre, si me permites decirlo es igual de hermoso como la persona que lo aporta- menciona Lewis alagando a Brooklyn
-Gracias Lewis, el tuyo tampoco está mal- dice sonriendo
-Gracias-se queda parado sonriendo viendo a Brooklyn a los ojos
-Bueno me retiro llevo un poco de prisa-dice esta vez Brooklyn
-Claro adelante-reacciona Lewis
-Hasta luego supongo-dice Brooklyn
-Claro-vuelve a decir Lewis
-Adiós-menciona Brook
-Adiós-dice nervioso- disculpa... ¿crees que me puedas dar tu número de celular para quedar algún día en salir por un café y darte un recorrido por la ciudad? -dice mientras se toca la nuca nervioso
-Claro me encantaría salir a por un café y a dar ese recorrido contigo, mi número es...- le da Brooklyn su número a Lewis
-Gracias te mando mensaje o te marco, hasta luego-dice Lewis
-Hasta luego- se despiden y continúan su camino los dos
Después de caminar por unos largos minutos Brook llego a su casa y al entrar se pone cómoda un short blanco y una blusa de tirantes para empezar a desempacar sus cosas de las cajas donde las tenía, se la paso así al menos unas 3 horas, acomodando los muebles en su habitación, cuadros y resto de decoración que tenía para su habitación, al terminar salió a la sala y se quedó parada en el centro de la sala pensando en que necesitaba comprar los muebles de la sala como lo eran la televisión, el sillón, el mueble donde iría la televisión, una mesa de centro, un tapete y decoración para la sala al igual que un comedor ya que no tenía donde sentarse para desayunar y solo tenía la barra de la cocina, además de comprar más despensa para que tuviera al menos para unos meses y después volver a hacerla, pero después de tanto pensar se le vino a la mente el chico que había visto en la calle saliendo de su trabajo
PENSAMIENTOS DE BROOKLYN
Es realmente atractivo esos ojos azules que uff, pero su cabello y esa sonrisa que no puedo explicar
FIN DE LOS PENSAMIENTOS DE BROOKLYN
-Oh por dios Brooklyn deja esos pensamientos es solo un chico que acabas de conocer no es para tanto- dice en voz alta para ella misma
Al terminar de pensar y acomodar su habitación apaga las luces y se va a dormir para al día siguiente volver a su rutina laboral.
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