El brillo en esos ojos azul-violeta es a causa de ese hombre junto a él, que duerme placenteramente mientras utiliza el brazo del contrario, como una cómoda almohada.

La noche de ayer el joven de cabello rojizo fue muy insaciable, hizo suyo a esa persona mas de cinco veces hasta que no pudo mas y el alfa mayor cayó inconciente por el agotamiento en él.

Ni siquiera podía levantar un dedo y golpear al insaciable de su joven novio. Preocupado de si podrá aguantar el ritmo de su novio, en el futuro.

‹Fuí demasiado rudo la noche de ayer, debí de tenerme en la cuarta ronda pero como podría hacer eso, no cuando sus ojos ámbar me miraban de esa forma, pidiendo por más.

En ocasiones me preguntó si Gerald tiene doble personalidad, con ropa es alguien pulcro y evita decir malas palabras o obscenidades pero cuando está sobre la cama, desnudó, él se vuelve completamente otro. Aunque con timidez pero dice unas cuantas palabras lasciva.

Quizás solo es simplemente sinceró cuando está en la epifanía del placer, o es como los borrachos que solo dicen la verdad cuando están ebrios solo que; Gerald se emborracha pero de placer.› Planto un beso sobre la frente y mejillas de Gerald.

Roshan se sentía renovado y sin preocupaciones alguna, al despertar y ver a Gerald junto a él, le hizo desear poder despertar así todos los días. Sería el paraíso para sus ojos, corazón, el poder ver el rostro de Gerald al no mas despertar.

—Vas hacer un agujero en mi cara.—Comento al mismo tiempo que frota sus ojos, limpiando las lagañas en ellos.

¿Qué horas serán? Ayer me volví a desmayar tras llegar al clímax, eso fue un poco vergonzoso y es bueno que terminara de esa manera así Roshan no vería mi timidez.

—Buenos días.—Sonríe totalmente.—¿Sientes alguna incomodidad?—Las pociones que realizamos y experimentamos ayer podrían traer incomodidad el día de ahora.

—Estoy bien...eso creo.

No creí que fuera tan flexible, ahora que ya no estoy influenciado por los estímulos me aterrar recodar esas raras posiciones, de solo recordar siento que mi espalda se romperá.

—Si duele algo solo decírmelo.—Masaje al cintura de Gerald.

Roshan sonrió levemente al escuchar los ronroneos de Gerald, como un gatito feliz de ser acariciando de esa forma tan relajante.

—Ya dije que estoy bien.—Esto se siente bien, despertar así y ver su sonrisa en plena mañana es lo mejor...me encanta, Roshan me encanta tanto que quisiera tener el tiempo y quedarme en sus brazos.

Gerald se esconde en el pecho desnudo de Roshan, abrazando el cuerpo del contrario mientras se embriga con el olor del alfa menor. Toda la habitación olería mas a Roshan que a Gerald, este último no soltaba sus feromonas sino era para marcar a Roshan.

‹Quiero proteger este amor, ¿pero como lo protejo de las espinas que plante desde un principio y que camuflaje como rosas? Fuí tan estúpido en ese instante, por mi estupidez y por seguír en el pasado ahora corro el peligro de perder mi futuro junto a Roshan.›

Gerald agradecía tener su rostro oculto de la mirada de Roshan, de esa manera el joven no podría verlo y mucho preguntarle que pasa porque no tendría respuesta, tampoco querría decirle un mentira que fuera tan obvia.

—¿Pasa algo?

Así Gerald quisiera ocultar sus miedos no lo logró, Roshan se dió cuenta que estába pasando algo y no era necesario ver el rostro del mayor para darse cuenta de ello, solo bastaba sentir el tacto del otro.

—¿Hay algo que te está molestando?—Pregunte, acariciando su hermosa cabellera.—¿Es tan complicado como para no decirme?

—Es mi padre.

—¡¿Te hizo algo?!—Sus ojos brillaron sanguinarios.

—No, nada de eso.—Sonrió ligeramente, con solo escuchar eso se sintió alegre y protegido.—Toco mi puerta no hace mucho y desde entonces no ha querido irse.—Confesó.—No tenemos una gran relación que digamos...

—Puedo enviarlo a su país en una pieza o en un atún, ¿cual opción te parece mejor?—Preguntó seriamente.

Todo aquel que perturbe la comodidad de mi alfa, es mi enemigo y por lo tanto esas personas deberían de dejar rondar a nuestro alrededor.

—¿Te estás escuchando?—Sigue sonriendo.—¿Es tu suegro?

—Podra ser quien sea pero si te está causando preocupaciones no voy a tolerarlo.

—Podremos llevarnos mal pero no quiero que lo hagas desparecer.—Seguramente Roshan ya sabe de mí relación con mi padre, de como me envió a un lugar desolado tras entrar en coma.

—¿Seguro?—Pregunta esperando que le un sí.

Tendré que pedirle a Zuzen que investigue a fondo a ese hombre, tengo que encontrar algún secreto bien guardado para ponerlo en su lugar. También para hacerle entender que Gerald no hará nada que él no quiera, mi novio no tiene la obligación de seguir el negocio familiar si no lo quiere.

Y ese suegro mucho menos piensen en querer casar a mi Gerald por conveniencia, entonces sí lo voy a desaparecer camuflado con un terrible pero terrible accidente.

—Sí, estoy seguro. Yo me encargaré de él.

—¿Por eso salimos huyendo ayer del paquete de diversiones?

—Me disculpó por eso.—Sabia que se había dado cuenta de ello.—Aun no quiero que te conozca, ¿te lastimó con eso?

—No, la verdad es que no me importa.—Besa la frente de Gerald.—Ahora mucho menos que sé que a ti no te agrada.

‹No todos tienen la suerte de tener unos padres tan maravillosos como los míos... ahora que recuerdo lo sucedido en el parque de diversiones, ¿qué tengo que cambiar para que el accidente donde me veo envuelto no suceda? Ese accidente es lo que desatará muchas desgracias en cadenas.› Roshan perdido su color al recodar que en una de esas visiones del futuro vio la muerte de su padre, Dariel.

—¿Tú también estás pensando en lo que hablamos ayer?—Se aleja un poco del pecho del contrario para poder mirarlo a los ojos.—De ya me conocías mucho antes de que nos encontráramos.

‹Ya no puedo seguir callando si sigo alargado esto solo haré mas daño, Roshan no me querrá ver quizás... nunca. Pero lo tendré bien merecido por ser un hijo de mi madre, por acercarme a él con mentiras en ese entonces.›

—No te preocupes.—Abraza con gentileza el cuerpo de Gerald.—Estas aquí conmigo y eso me hace muy feliz.—Su mirada se encuentra con la de Gerald.—Me gustas tanto.

—Y tú a mí.—Vuelve a esconder su rostro en el pecho de Roshan.—En serio me gustas tanto...me encantas.

Mientras ellos están muy felices y dejan sus diferentes pensamientos a un lado, no se podía decir lo mismo de la familia Simmons, a la espera del chico que no llegó a casa lo noche de ayer.

Sentados en el sofá de la sala y con sus brazos cruzados sobre su pecho yacía dos personas, con su mirada fija en la puerta esperando que cierto hijo entre. No están para nada contentos de que se haya quedado durmiendo fuera de casa y no haya regresado aun cuando faltan cinco para las diez en punto de la mañana.

—Puede que el muy descarado vaya a la universidad antes de regresar a la casa.—Comentó Dariel, agregando mas leña al fuego.

De por sí Samuel ya estába lo suficientemente enojado por la desobediencia de Roshan, escuchar lo dicho por Dariel solo lo hizo enfurecer todavía más. Cuestionandose si fue lo correcto permitirle a su hijo el salir con Gerald, mejor dicho se estaba arrepintiendo de haber creído un poco en las palabras de ese alfa mayor.

—¿Buscó algo con lo cual castigarlo?—Pregunta mientras masajea los hombros de su amado Samuel.

Será divertido ver la desesperación en mi pequeño bribón, preocupado de que su papá no le permita ningún abrazo. Debo de darle las gracias por ponerme fácil el no compartir la atención de mi Sammy con él.