"Soñado"

"¡No, no, haga algo. Por favor!" Gritaba desesperado mientras veía convulsionar de dolor al joven, acostado sobre la camilla.

Sus ojos azules temblaban de la impotencia de no poder ayudarle, él quería sentir ese dolor en vez del joven, pálido, sumamente delagdo.

Le rogó tantas veces al Dios, que lo salvará de infernal sufrimiento. Sin embargo, por más que rogara sus plegarias no eran escuchadas y solo le tocó ver agonizar día, trás día, a ese hermoso joven que seguía sin perder su belleza aún, después de perder la esperanza de poder vivir.

—Señor, es mejor que salga.—Le sugieren los doctores.—Si sigue aquí solo impidiera que lo tratemos y calmemos su dolor.—Aprieta sus dientes.—Sé lo que está sintiendo en estos momentos, sin embargo no puede hacer nada.

El doctor sabía que eso era demasiado duro, sobre todo cuando podía ver el inmenso amor y desgarrador dolor en esos ojos azules.

—Bien—Salió de la habitación con una expresión negra y sus labios sangrado por verlos mordió sin importarle el daño causado a su cuerpo.

Quería poder sostenerlo en sus brazos y aunque lo pudiera hacer, no era precisamente él, quien lo estaría sosteniendo. Si era su cuerpo pero no estaba siendo comandado por él. Alguien más había usurpado su cuerpo y no podía hacer nada al respecto.

—¡Salvarlo, por favor!—Apretó con fuerzas sus puños.—Por favor....por favor salvarlo.—Cayo de rodillas al piso—Él necesita vivir una vida feliz, yo lo...

Esos ojos ámbar se abrieron de par en par, para luego suspirar con cansancio y a la vez un poco de tristeza. Otra vez había tenido un sueño de su vida pasada, algo que sigue sin poder olvidar porqué en sí, tiene muchos arrepentimientos con respecto a esa vida.

Gerald siente que pudo hacer más por esa persona, sin embargo por extrañas circunstancias solo le tocó ser un espectador en esa tragico romance dónde no podía intervenir una tercera persona.

—¡Maldición otra vez esos recuerdos que son más como una pesadilla!—Frota su cara.—Creí que había olvidado ese trágico romance que perforó mi corazón, pesé a eso volví a conocer a alguien que se le parece.

Gerald se levantó de la cama, su expresión es fría y trasnpirate por el sudor deslizándose por su cuerpo semidesnudo.

Volver a soñar con los sucesos de su primera vida lo ponen de mal humor, son recuerdos que le restriegan su ineptitud, por no poder haber hecho algo para salvar esa persona.

Ese alguien  que era muy importante para Gerald, una muerte que lo sacudió cómo nunca se lo hubiese imaginado, a pesar que esa persona jamás supo de la existencia de Gerald.

—Todavía me hace sentir sofocante el recordarlo de esa manera, ese chico era tan joven y murió joven.

Gerald abrio con fuerza la puerta del baño, quería tomar una ducha fría para así, poder despegar por completo su nublada mente.

—Era desesperante el no poder ayudarle cómo me hubiese gustado, todavía más impotente el verlo sufrir y que el no supiera mi existía, porqué a sus ojos solo podía verlo a él. A mi "supuesto primo." Aunque, por la anestesia en su sistema tampoco fue consciente que estuvo ahí con él, todo ese trayecto.

Suspiró con tristeza porqué tampoco se podía enojar con su primo, luego de leer las notas que siempre le dejaba tras tomar posesión de su cuerpo.

—Me enamoré de ese joven atraves de la mirada de otra persona, al principio fue aterrador y desconectarte el despertar y darte cuenta que tu cuerpo había sido poseído por alguien más.

El agua fría de la ducha ni siquiera hizo temblar de frío o incomodar a Gerald, el alfa solo cerro sus y disfruto de esa frescura. Ese tatuaje de su espalda se humedecía cada vez hasta el punto verse como si esas rosas azules entre los cráneos se estuvieran hundiendo en un río.

—Fuí un completo cobarde porqué aún sabiendo de su existencia, jamás fui a visitarle individualmente. No tuve ese coraje por lo tanto no merecía nada él. Y ahora me arrepiento profundamente, no obstante ya es demasiado tarde..

Gerald termino de ducharse, envolvió su cuerpo en un bata antes de salir de la ducha directamente a su cama, Gerald también se está quedando en los dormitorios de la universidad. No tenía esa necesidad de igual manera lo hizo.

No sentía que la vida de un profesor fuera mala al contrario, le estaba gustando ser un profesor. Todo fuera genial si no estuviera esa pequeña distracción llamada; Roshan.

Desde ese día que se besaron en la piscina, no a vuelto a suceder nada. Fue como si a Roshan le hubiese afectado esa agua y lo hizo reaccionar con respecto a lo que estaba haciendo no estaba bien.

Sobre todo luego de hablar con sus padres, eso le hizo recordar las enseñanzas que ellos, siempre la andado. Que no puede ser tan impulsivo y mucho menos andar besando a las personas, sin para el no significa nada. Y eso le estaba molestado a Gerald.

—¿Qué estará haciendo ese mocoso?—Se preguntó Gerald.—¿Actuará nuevamente como si no me conociera?—Frunce el ceño—Eso es un problema, no puedo permitir que esa cercanía retroceda, estoy muy cerca de mi objetivo.

Gerald por un instante se olvidó de eso y fue al pequeño armario a ponerse algo cómodo para trotar, tenía planeo dar unas cuantas vueltas por el campus. Algo que también haría otras dos personas más, aparte de él.

Desde ese día no he tenido la oportunidad de volver hablar con Roshan, agradecerle por haber ayudado a mi hermana menor, Larissa. Sin embargo, él siempre está rodeado de esas tres personas, ¿son amigos de infancia? Pero, ese tal Zuzen parece más un guardaespaldas.

También está eso relacionado con Larissa, ella dice que no recuerda exactamente qué pasó en el baño. Qué todo daba vueltas y solo quería quitarse la ropa con esperanza que ese calor dejara su cuerpo. Pese a eso, solo podía asegurar que todo se debió a un olor de feromonas en específico.

Mi papá se volvió pálido al escuchar esa confesión, tanto así que no quería volver a enviar a mi hermana, ha está Universidad. Intento cambiarnos de universidad, sin embargo está es la mejor entre todas las demás.

Le pregunté el porqué pero no quiso decirnos nada, en cambio mi padre, el comentó que debo estar más atento a la seguridad de mi hermana, y sobre todo encontrar a la persona que puso en ese estado a, Larissa.

Que teníamos conocer su familia para poder hablar lo más antes posible, pero no sé quién demonios sea y Larissa no sale de su dormitorio luego de asistir a sus clases o practicar con las integrantes de su equipo de béisbol.

Es por eso que quiero hablar con Roshan, preguntarle que olor de feromonas fue el primero que percibió al momento de entrar al baño de señoritas.

Aunque, no le edicho nada de esto a mis padres. Si ellos se enteran que tuve alguna clase de comunicación con Roshan Simmons Astor, pegarían el grito al cielo. Eso tampoco lo entiendo, no entiendo del por qué sienten cierta riña con esa familia.

Está prohibido mencionar a esas dos familias, lo cual me es confunde ya que, mi papá. El estuvo trabajado junto a Samuel Simmons Astor, hace unos años atrás. ¿Quizás se cayeron mal, o que paso?

—¡¿Roshan?!—Susurró.

Alonso detuvo su caminar al ver salir de los dormitorios al alfa de cabello rojizo, al parecer iba a trotar por el campus a estás horas de la manera, eran las 5:00 am.

Roshan tenía esa rutina diaria de ejercitarse todas las mañanas, solo que en está ocasión iba solo sin estar acompañado de Zuzen.

Zuzen no estaba preocupado por la seguridad de Roshan, porqué desde un principio fue a verificar que todo estuviera despejado.

No podía acompañar a su joven maestro, porqué tenía que preparar el desayuno para cuatro personas. Lana y Asha suelen ir a su dormitorio a desayunar.

Asha tampoco recordaba que había sucedido exactamente ese día, su mente sigue confusa por más que trate de recordar.

Por eso mismo sus abuelos por el momento prefiero callar, esperando la llegada de Kole y Hedoi para que tomen una decisión de si contarle o no. De que Larissa Vettel Wallet, podría ser el destino de Asha Astor Simmons.

—¿Uh?—Roshan se sorprendió que alguien más estuviera trotando aparte de el.—¿Creí ser el único que le gusta ejercitarse de está horas?

Llevo más de una semana haciendo está rutina y en nigún momento me he topado con otra persona, porqué es muy de mañana y algunos no tienen tiempo de hacer otra cosa por las tareas y diferentes proyectos.

—Suelo venir un poco más tarde.—Intenta mostrarse serio.—También estoy sorprendido de verlo.—Expresó mientras intenta mantener en ritmo de Roshan.

—Ya veo.

Con esa seca respuesta murió la conversación, ninguno de los dos volvió a hablar y Alonso tampoco sabía cómo preguntar lo quería preguntarle en primer lugar.

—¿No tiene planes de correr en la pista del este, el próximo mes que viene?—Preguntó de la nada.

No debí preguntar eso de la nada, creará que soy raro. No obstante, el silencio formado entre nosotros era muy incómodo.

—No lo sé.—¿Es un fanático?—Estoy ocupado con los estudios, sin embargo si tengo la oportunidad lo haré.—En nigún momento dejaría pasar tal oportunidad.

Puedo estudiar al máximo y dar lo mejor de mí en la competencia, hace tres semanas atrás que recibí la invitación. Solo que aún no les doy una respuesta, tengo que alinear mi horario y no chocar con mi entrenamiento.

—Comprendo.—Quiero pedirle su autógrafo.

—¿Te gusta ese deporte?—No del todo malo hablar con alguien sobre las carreras de auto.

—Sí—Sonríe.

Solo basto eso para que esa incomodidad entre ellos se esfumara, la conversación fluyó más relajada al hablar sobre todo lo que tenga que ver con autos.

Se estaba pasando bien cuando de presto esa mirada ámbar se notará a lo lejos irritada al ver la sonrisa genuina en los labios de Roshan. Gerald no quería darle importancia hasta ese grado de sentir un malestar en su estómago. Sin embargo, ese malestar seguía generándose más y más en la boca de su estómago.