Jimin ayudó a Jungkook con la paciente como siempre, aunque fue muy incómodo ya que todo el tiempo sintió la mirada juzgadora del alfa, pero decidió no darle importancia, sabía que estaba molesto y sabía muy bien por qué.

Recordaba muy bien aquel convenio que tenían. Aún no entendía muy bien como habian acabado haciendo eso durante dos largos años.

💜⌛💛

Era un día de lo más tranquilo en la ciudad de Seúl, Jimin llevaba trabajando ya 1 año como asistente del doctor Jeon, rápidamente se hicieron amigos y parecía que el omega se adaptaba perfectamente a su trabajo y parecía que el alfa le tenía confianza pues siempre le platicaba sobre sus extrañas aventuras.

Ese día en especial Jimin se sentía un poco mal, de hecho quería faltar al trabajo pero no había avisado con tiempo además de que Momo no asistiría ese día, así que tenía que asistir si o si.

Esperaba que fuera un día tranquilo, según recordaba no habían agendadas muchas citas así que esperaba que el tiempo se pasara rápido.

Al llegar al edificio, verificó que llevara las llaves del consultorio en su bolso, saludó a todos como siempre y después entró en el consultorio para arreglar todo antes de abrir. Mientras organizaba la agenda y los expedientes sintió como el calor comenzó a inundar su cuerpo.

Mierda...

Así es con tanto trabajo y con los cachorros había olvidado por completo que su celo estaba por llegar, o más bien que ya había llegado, tenía que salir de ahí lo más rápido posible y eso hubiese sido lo mejor pero con lo que no contaba es con que Jungkook entrara por la puerta.

Cuándo el alfa sintió el golpe de feromonas de apareamiento llegar a sus fosas nasales, perdió todo el sentido de autocontrol que pudiese tener, bueno seamos realistas ese alfa no se podía controlar a la hora del sexo, así que de inmediato se abalanzó sobre Jimin.

El pequeño omega sólo sintió como era besado por Jungkook, el poco sentido común que aún tenía le pedía que lo detuviera y que saliera de ahí lo ante posible pero su lobo necesitado de amor y sexo le pedía quedarse y disfrutar lo que el alfa le estaba ofreciendo.

- ¡Hueles delicioso!

- ¡Argh! !Lunas!

Así que sí, Jimin comenzó a besar de igual manera al alfa, necesitaba ser tomado, llevaba casi dos años sin tener intimidad y la forma en la que estaba siendo besado y acariciado estaba nublando de más sus sentidos.

Jungkook cargó por los muslos al omega quien de inmediato enredó sus piernas en la cadera de este, comenzó a besar la mandíbula del alfa quien con la poca conciencia que tenía fue a cerrar con llave la puerta del consultorio, le estaba costando mucho concentrarse pues Jimin besaba su cuello con desesperación.

Mandó un mensaje a recepción dónde pedía que avisaran que el consultorio estaría cerrado por dos días por asuntos personales, luego tomó el celular del omega y mandó mensaje a la chica que se encargaba de los cachorros de Jimin para pedirle que los cuidara por dos días, que le pagaría el doble por hacerlo a lo que Yeji aceptó gustosa.

Con todo arreglado guió a Jimin a una de las habitaciones, ya podía imaginar las mil y un maneras de como tomaría al omega en todos los lugares posibles.

Al llegar colocó al omega sobre la cama, Jimin formó un enorme puchero por la distancia que existía ahora entre ellos pero el alfa necesitaba buscar un condón, bueno una caja, así que corrió como desesperado a su maletín y de ahí sacó lo que necesitaba.

Regresó encontrando al omega desnudo sobre la cama con las piernas bien abiertas dándole una hermosa vista de su entrada lubrica, estaba dándose placer, Jimin estaba completamente ruborizado, con algunas pequeñas gotas de sudor, gemia despacito mientras se masturbaba con desesperación.

- Santa mierda...

- ¡Mghm! ¡Alfa!

El pobre cerebro de Jungkook se desconectó, así que rápidamente de deshizo de su ropa, dejándo a la vista su cuerpo bien trabajado, con aquella manga de tatuajes en el brazo izquierdo, su abdomen bien marcado y un miembro exquisito, grande y grueso.

El omega por poco se corre al ver a semejante hombre frente de él, era un perfecto Dios griego que queria que profanara su pequeño cuerpo.

- Minnie, prepárate para recibir a tu alfa...

- ¡Ah!

Jimin dejó de masturbarse, llevó dos dedos de su pequeña mano derecha a su boca para chuparlos mientras jugaba con ellos con su lengua, Jungkook se estaba volvíendo loco con aquella vista, se imaginaba esos labios esponjosos y esa lengua travieso jugando así con su miembro.

Cuando Jimin sintió que su saliva escurría por toda su mano se colocó cuatro dejándo a la vista su precioso trasero bastante lubricado, solo necesitaría prepararse muy poco, lo cuál agradecía bastante pues ya quería que Jungkook lo llenara por completo.

El alfa obsevaba cómo aquel omega introducía sus pequeños dedos en su interior y se preparaba para recibirlo, Jungkook se masturbaba de lo más tranquilo, pero poco a poco fue perdiendo la paciencia así que tomó un condón y se lo colocó, entonces caminó hacía Jimin y quitó con cuidado la mano del omega.

Dejó un par de besos en las nalgas del castaño y dió una gran lamida a la entrada de este- ¡Mghm!- guió su miembro y sin pensarlo entró de una sola estocada- ¡Ah! !Lunas!- el alfa dió un inició a todo lo que cambiará su relación de ahora en adelante, embistió al pequeño omega como si no hubiera mañana, no se contuvo en ningún momento, lo único que es escuchaba en esa habitación era el ruido de las pieles chocando y los pequeños gemidos y grititos de Jimin.

- ¡Más rápido! ¡Más duro! ¡Alfa!

Jungkook enterró la cara del omega en la cama mientras aumentaba la velocidad de sus estocadas, Jimin apretaba con fuerza las sábanas y mordía con desesperación la almohada que estaba bajo su cabeza. Nunca había sentido tanto placer en su vida.

El alfa salió del omega y sin consideración alguna lo volteó para quedar frente a frente, le abrió las piernas lo más que pudo y entró en él de un sólo golpe, Jimin puso los ojos en blanco pues sentía un placer inimaginable, se abrazó a la fuerte espalda del pelinegro y enterró sus uñas mientras sentía cómo el alfa se encargaba de marcar su cuello.

Sin mucho cuidado Jungkook cargó el pequeño cuerpo del omega y lo pegó contra la pared más cercana, siguió entrando y saliendo de aquel pequeño lugar que a partir de ahora sabía que se convertiría en su debilidad.

Jimin no pudo aguantar más y se corrió entre sus abdomenes, era el mejor orgasmo que había tenido en muchísimo tiempo, el alfa dió un par de embestidas más y se corrió dentro del condón. Su lobo arañaba con fuerza su pecho pidiéndole que marcara a ese omega por que era su omega, pero el alfa sólo ignoró aquello y esperó pacientemente a que sus respiraciones se calmaran.

Jungkook llevó al omega a la cama y buscó algo para limpiarlo y limpiarse, se quitó el condón, lo amarró y lo tiró en la basura, después se acostó a un lado de Jimin, el omega rápidamente se acurrucó a su lado.

El alfa entonces con un poco más de conciencia pensó en lo sucedido, acababa de acostarse con Jimin, su asistente, y había sido el mejor sexo que haya tenido en toda su maldita vida. ¿Quería más de eso? Jodida mierda, que sí.

Se le ocurrió una gran idea, la mejor de todas. Siempre trataba de pasar sus celos sólo pues no tenía la confianza suficiente de pasarlo con alguien ya que para él su celo era algo muy íntimo, especial por así decirlo así que le haría una propuesta al omega, ambos saldrían beneficiados con eso. Jungkook ayudaría a Jimin con sus celos y el omega le ayudaría a él, todos saldrían ganando.

¡Nada podia salir mal! ¿Cierto?

Así que esperaría a qué el omega regresara a sus cinco sentidos y hablaría con él sobre el tema, aunque claro existía un 80% de probabilidad en qué Jimin se negara pero antes de que eso pasara disfrutaría del omega estos días.

Cuándo el celo del omega por fin terminó, Jimin regresó a la normalidad teniendo una crisis existencial que Jungkook se encargó de disipar, con toda la labia que tenía el alfa convenció al castaño de aceptar el convenio y cerraron el trato que cambió sus vidas.

💜⌛💛

Jimin regresó a la realidad mientras estaba sentado en su escritorio, recordar como empezó todo hizo que su cuerpo se calentara un poco.

Joder...

Tenía que dejar de pensar en eso, ya no volvería a acostarse con el alfa, nunca más, sabía que ese había sido un estúpido trato, debio negarse desde un principio. Aunque claramente disfruto cada momento que pasaron juntos aunque solo fuese para satisfacer a sus lobos.

¿Se arrepentía de lo sucedido? Para nada...

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Bueno, ya saben que está escritora es un poco sucia!! 🤭

¿Les gustó el primer cambio? 💕

Les quiero!!! 🥰