Assasin se encontraba observando la escena sin moverse en lo más mínimo, aun después de ver como Archer dio una pequeña demostración de su noble phantasma, así como el momento en el que a Lancer se le ordeno ayudar a Berserker a eliminar a Saber, pero si tuvo una ligera reacción de curiosidad al momento en que vio como contenedores eran elevados en el aire y arrojados con una facilidad que lo inquieto.

Y no era él único, su master también veía todo a través de sus ojos con intriga, pronto el responsable de aquellos actos se haría visible, un hombre ligeramente alto, de cabello café y complexión esbelta, vistiendo un traje formal completamente negro, alzaba sus manos haciendo ligeros movimientos, al mismo tiempo que más contenedores eran elevados y arrojados contra sus oponentes.

La batalla se torno corta y destructiva, aquél hombre domino a ambos servant con una habilidad que no hizo más que incrementar la atención en él, en ningún momento pareció utilizar un arma o herramienta mágica, el servant y el master tuvieron el mismo razonamiento al momento de ligar dichas habilidades con el servant de clase Caster.

Para cuando la pelea termino, Kirei le ordeno a Assasin regresar mientras otros dos miembros seguirían a Saber y su master, tras dicha orden Kirei dejo de lado a su servant y presto su atención a su aliado Tokiomi, ambos hablan del desarrollo de esta primera batalla.

—Entonces los siete servant finalmente se han reunido —comento el sacerdote.

—Eso parece, pero siento que hay algo más... —respondió Tohsaka con cierta duda en su voz.

—Qué quieres decir.

—Nada en realidad, solo fue un presentimiento y ya, ignóralo, regresando a lo importante...

—Hay otros dos master que trabajan juntos en esta guerra.

—Correcto, ciertamente no era una opción sorpresiva, pero eso solo nos dice que las cosas podrían complicarse más adelante, has visto la fuerza de Caster y si lo que dices es verdad.

—Es muy probable que llegue hasta el final de la guerra.

—Eso es lo que temo, has visto lo "liberal" que es Archer, si se llegara a enfrentar a Caster podría destruir todo a su paso sin que le importe en lo más mínimo.

—Qué sugieres entonces.

—Por ahora continuar con nuestro plan original, pero siendo mucho más cautelosos.

—Comprendo, en cuanto tenga más información te contactare.

—Estaré esperando.

Tras esas ultimas palabras la comunicación se cortaría, Kirei se mostro pensativo tras los recientes acontecimientos, las cosas se podrían bastante interesantes tras ver quienes compiten esta vez por el grial, pero como había dicho Tokiomi, algo no parecía estar bien, como si no estuvieran viendo algo que deberían. 

Mientras tanto en otro lugar, en la parte más profundo de una viejas y abandonadas instalaciones, dos figuras también hablaban de la reciente pelea, se trataba de un hombre alto, cabello azul y largo, piel pálida, además de ser jorobado, vestido con un frondoso y llamativo tipo de abrigo de aspecto antiguo, este lloraba mientras veía la imagen estática de Saber que se proyectaba en una bola de cristal sostenida por un soporte especial, a su lado se encontraba un joven de aspecto vigoroso, saltando de emoción, vestía ropa casual, de cabello castaño.

Se trataba del servant original de clase Caster, cuya verdadera identidad es la de Gilles de Rais, un mariscal francés que luchó junto a Jeanne d'Arc(Juana de Arco) en la Guerra de los Cien Años, y su master Ryuunosuke Uryuu un asesino psicótico que únicamente busca algo con que divertirse.

—¡Eso fue increíble! ¡De verdad increíble! —expresaba un alegre Ryuunosuke dando vueltas alrededor de la esfera de cristal y su servant—. ¿Eh? ¿Por qué lloras? —cuestiono tras notal el llanto de Gilles.

—¡Es ella! ¡Es ella! ¡ES ELLA! —grito eufórico alzando la vista la cielo con los brazos extendidos—. Al fin, después de tanto tiempo finalmente a ocurrido y sin la necesidad del santo grial —expreso aun en llanto.

—¿Hablas de esa mujer?

—¡Así es! ¡No hay duda, su inmensurable valor, su determinación, su belleza, o mi amada, finalmente nos hemos reunidos, o mi santa Jeanne! —aclaro recuperando la compostura, pero aun con profunda alegría. 

—Oh, así que ustedes se conoces.

—Claro que nos conocemos, ambos fuimos separados por la injusticia de Dios, es ser despreciable que solo usa a los humanos como juguetes, se atrevió a separarme de mi amada antes de que pudiéramos estar juntos. 

—Entiendo.

—Esto hay que celebrarlo —comento mostrando un sonrisa retorcida, cosa que emociono a su master.

—Te refieres a que...

—Así es Ryuunosuke.

—¡Genial, genial!

Ambos se vieron con emoción, en especial Gilles, esa misma noche por la madrugada, 15 niños fueron reportados como secuestrados tras ser sustraídos de sus propias casas, incrementando el número de niños desaparecidos en los últimos dos días. 

Regresando al presente, a las afueras de la ciudad, se podía ver un auto clásico modelo Ford Vendome 1954 avanzar a gran velocidad por la carretera que rodeaba las montañas a las espaldas de la ciudad, dentro del auto se encontraban ambos servant y master, el trio se dirigía a una propiedad perteneciente a los Einzbern la cual se ubicaba en medio de un bosque.

De los tres, la más emocionada era Iris que era quien conducía, a su lado ocupando de copiloto se encontraba Saber que trataba de ocultar su nerviosismos ante la velocidad a la que se transportaban y la forma de conducir de Iris, mientras que atrás se encontraba Anakin que al igual que su master, se estaba divirtiendo por la velocidad que llevaban, pero por sobre todo el ex-jedi admiraba las increíbles "habilidades" de Iris al conducir.

Por su parte Iris conducía a toda la velocidad que podía, y con gran habilidad lograba realizar drifting en cada curva de la carretera, dejando huellas de neumáticos quemados a su paso.

—Irisviel, no crees que deberías ir con un poco más de sensates —comento Saber aferrándose a su asiento mientras pasaban por una curva cerrada.

—De que hablas, lo esta haciendo muy bien, jamás me imagine que tuvieras estas habilidades Irisviel —comento Skywalker con una sonrisa de clara diversión.

Soltando un risa corta —Gracias Anakin, a mi también me emociona esto, de todo los juguetes que Kiritsugu me ha obsequiado, este es mi favorito, pero solo he podido utilizarlo en el jardín del castillo, siempre quise sacarlo a dar una vuelta más allá.

—Ya veo porque —respondió el único varón presente.

—Verdad —apoyo Iris.

—Ustedes dos de verdad aman la velocidad —comento Saber con una gota de sudor en la frente y una expresión de clara preocupación.

—Claro que sí —respondieron ambos al unisonó.

Pero en ese instante tanto Saber como Anakin detectaron una presencia que provenía de más adelante de ellos, la rubia reacciono primero al ser la copiloto, alertando a Iris y tomando el control del vehículo para frenar en seco derrapando unos metros antes de detenerse. Las luces alcanzaron a iluminar la presencia frente a ellos, se trataba del propio Gilles que sonreía al verlos.

—¿Quién? —cuestiono la master.

—Un servant —respondió Saber.

—Mantente justo detrás de nosotros —hablo Skywalker serio. 

Los tres bajaron del vehículo yendo al frente de este, ambos serbant permanecieron alertas mientras la Iris permanecía a las espaldas de Anakin, Gilles se arrodillo en señal de respeto.

—He venido por ti, oh virgen santa —comento inclinando levemente la cabeza hacia Saber.

—¿Lo conoces? —cuestiono Iris.

—Jamás lo he visto en mi vida —respondió la rubia.

—Ese no parece ser el caso ya que él al parecer si te conoce —comento Anakin.

—Debe estar confundiéndome con alguien más —aclaro Saber.

—¡Oh, no! ¿Dices qué has olvidado esta cara? —expreso Gilles temeroso.

—¿Olvidado? Nunca te he visto en mi vida —respondió seria.

Caster entro en pánico tras la palabras de Saber —¡Soy yo! ¡Gilles de Rais! Mi único anhelo es el que revivas y pasado toda mi vida esperando que un milagro nos reúna —expreso en alaridos—. ¡Para hacerlo he tenido que venir hasta aquí! ¡Hasta el fin de los tiempo! ¡Jeanne! 

—¿Jeanne? —cuestiono Iris.

—Es obvio que te confunde con alguien más —comento Anakin.

—No conozco a nadie como él y tampoco tengo idea de quien sea esta Jeanne —respondió Saber un tanto confusa por la situación.

Tras esas palabras Caster entro en desesperación —No... No puedes haberlo olvidado... Tu antigua identidad...

Saber ignoro las palabras de Gilles y se presento —Me has dado tu nombre, de acuerdo a los códigos de caballería debo darte el mío, mi nombre es Arturia, heredera de Uther Pendragon, y rey de Gran Bretaña, participo en esta guerra con la clase Saber.

—No crees que le diste demasiada información —cuestiono Skywalker.

—No espero que entiendas el código de un caballero. 

Anakin entrecerró los ojos y guardo silencio, regresando su atención a Caster que temblaba y se había encogido antes de alzarse de golpe.

—¡Que desgracia! —grito viendo al cielo antes de empezar a llorar y golpear el suelo mientras maldecía a Dios por todo lo que le pasaba y como lo había separado de su doncella, dando un espectáculo lamentable como el de un niño haciendo un berrinche.

—Suficiente —hablo Anakin provocando que Gilles se detenga de golpe—. Por cuanto tiempo más planeas seguir con tu escena.

Gilles empezó a temblar mientras apretaba los puños de ira —¡Cállate! ¡Cállate maldito impostor! —grito señalando a caballero jedi.

—¿Impostor? —repitió confuso.

—¡Lo eres, no eres más que un maldito impostor que usurpo mi lugar en esta guerra, yo soy el verdadero clase Caster, yo soy el séptimo servant, no tú, tú no eres nadie, ni siquiera deberías estar aquí, encima de todo te atreves a acompañar a mi amada, estar a su lado en vez de mi, soy yo el que debería estar en tú lugar! ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué?! ¡Maldito usurpador! —grito a todo pulmón mientras volvía a golpear el suelo, pero ahora con más fuerza agrietando y hundiendo el concreto con cada impacto.

—Basta! Deja de humillarte así! —grito Saber ya enfadada.

—Despierta! —respondió Caster—. Deja de llamarte Saber, la guerra del santo grial ha terminado, la victoria mi pertenece a mí, sin necesidad de que tenga que luchar. 

—Qué quieres decir —cuestiono Anakin.

—Mi único deseo era la reencarnación de mi amada Jeanne, !y ya me lo ha concedido! 

De pronto una ráfaga de aire paso al lado de Caster con tal fuerza y velocidad que agrieto el concreto al mismo tiempo que se podía ver a Saber ya con su armadura puesta y extendiendo su espada, mientras reprendía al servant por burlarse de los deseos de los demás héroes escogidos. 

—Ya veo —hablo Gilles—. Tus memorias fueron selladas... Muy bien, si para hacerte recordar quien eres debo tomar medidas drásticas, así será, juro que te hare recordar Jeanne, liberare tu alma de la maldición de Dios... —viendo a Saber para después ver a Anakin—. Y juro también que te matare impostor —regresando su atención a Saber, haciendo una reverencia y desapareciendo en partículas de luz.

—Es difícil lidiar con alguien que no escucha tus palabras —comento Iris preocupada.

—La próxima vez atacare antes de que pueda hablar —respondió la servant—. La gente como él me enfurecen. Pero fue algo beneficioso, pude hacerme la idea de que tan fuerte era, y es más de lo que aparenta —regresando al auto.

—Entiendo... Tu que piensas Anakin —viendo a su servant.

Pero él no le respondió, Skywalker parecía estar en trance al mismo tiempo que una expresión severa se marcaba en su rostro, como si algo lo hubiera molestado.

—¿Anakin? —llamo de nuevo.

Finalmente reacciono —No es nada, me distraje un momento, regresemos al auto, debemos apresurarnos y llegar a nuestro destino.

Iris observo a su servant y asintió un tanto dudosa, luego de eso ambos regresaron al vehículo para ponerse en marcha de nuevo, al mismo tiempo que eran observados desde las sombras por dos miembros de Assasin que se movían entre las ramas de los arboles.

—Seguir a esos tres nos ha dado una inesperada sorpresa, ya sabemos como es la master de Saber.

—Y averiguamos algo que sin duda cambiara las cosas en esta guerra, el verdadero Caster a aparecido y tenemos a un octavo servant que no debería existir.

Tras ese intercambió de palabras ambos continuaron con su misión de seguir y rastrear al trio.

Mientras tanto el master de Caster se encontraba jugando con el cadáver de un niño cuando esté apareció, Ryuunosuke lo saludo de lo más normal ignorando por completo el cuerpo al frente suyo, Gilles se acerco y sin previo aviso aplasto el cráneo del cadáver mientras maldecía de nuevo a Dios.

Ryuunosuke le cuestiono el porque de su furia, a lo que Caster explico su situación con Jeanne, diciendo que Dios se niega a entregársela, y que probara que a Dios no le importa nada ni nadie, que puedes cometer el acto más depravado y blasfemo, y él no te castigara ya que no le importas, sugiriendo mostrarlo con cadáveres si hace falta, a lo que su master entendió, aceptando sin dudarlos mientras cuestionaba que harían, a lo que Gilles diría que realizarían un sacrificio con varios de los rehenes y se hacían falta más los conseguirían.

En otra parte, en el ultimo piso de un lujoso hotel, se vería a Kayneth, master de Lancer observar las noticias que hablaban sobre lo sucedido en el puerto, momentos después movería su atención a su servant que se encontraba descansando en un sillón a unos metros de él.

—¿Entonces, cómo fue que no pudiste contra Caster, y encima no pudiste eliminar a Saber? —cuestiono molesto—. Me fallaste no una, sino dos veces y me obligaste a usar un hechizo comando por tus ideales de honor, y ni así pudiste completar el trabajo. ¿Tan divertida estuvo tu pelea con Saber?

Lancer gurdo silencio por unos momentos antes de responder —No fue eso, juró por mi honor que te traeré la cabeza de Saber y eliminare a Caster, pero...

—¿Pero?

 —Caster, él, hay algo en él que me inquieta.

—Enserio... y qué sería.

—Él... se estaba conteniendo, pude sentirlo, no estaba usando toda su fuerza, es cauteloso, sabe que no debe mostrar mucho y mantener el misterio de que tan poderoso es.

—¿Cauteloso? Es una broma, llamas a destrozar media puerto ser cauteloso, a mi me parece que simplemente te confiaste y paso lo que paso —respondió Kayneth molesto.

Lancer desvió la mirada —No importa, te prometo que lo matare.

—¡No necesito esas promesas! Es tu obligación, hiciste un contrato conmigo por el santo grial, y me haces juramentos —expreso aun más molesto—. ¿Qué es lo que no entiendes?

—Al contrarío, eres tú el que no entiende, lord El-Melloi —comento una atractiva mujer que apareció yendo directo hacía ambos, de cabello corto rojizo, su vestuario consistía en una blusa blanca de mangas largas con un listón rojo en el pecho, unos pantalones color marrón y unas zapatillas rojas, su nombre era Sola-Ui Nuada-Re Sophia-Ri (Que nombre tan complicado)

—Sola-Ui... —llamo Kayneth.

—Lancer tiene un punto, no sabemos los alcances de Caster, es más, no sabíamos que estaba presente de no ser por tu estudiante, el cual por cierto logro invocar a un espíritu heroico sin problemas, y no cualquier espíritu, hablamos del hombre que casi conquisto el mundo en su momento. 

—Solo has venido a burlarte de mi.

—Bueno, fuiste tu el que cometió el error.

—Saber es un servant y oponente formidable, no podía dejar ir esa oportunidad de vencerla.

—Ya veo, desafortunadamente eso no paso, ¿verdad? Ahora que logro escapar y ya conoce las técnicas de Lancer, lo más seguro es que se prepare para no caer en su trucos una vez más, sin contar que si ella te preocupaba, porque no acabar con su master directamente. Te mantuviste oculto y observaste desde lejos, patético.

En ese momento Sola-Ui le recordaría que él tiene un ventaja, la cual consistía en usarla a ella como un master adicional que proporcionaba mana mientras Kayneth tenía los hechizos comando, todo tras una modificación al momento de realizar la invocación, tras eso seguiría burlándose de él por mantenerse escondido y dejar que Lancer asuma todo los riesgos, pero seria interrumpida por el propio Lancer que defendió a Kayneth, por una cuestión de honor de caballero y maestro, ella rápidamente se disculpo dejando entre ver que siente algo por el servant.

Los tres son interrumpidos por el sonido de las alarmas contra incendios, siendo contactados por el personal del hotel que les informaron sobre un incendio en los niveles inferiores, Kayneth reconocería las intenciones del incendio y creería que se trataba del master de Saber, por lo que le ordeno a Lancer ir en su persecución mientras ellos esperaban en la habitación protegidos por todo un laberinto mágico lleno de trampas mortales, solo para que le edificio sea demolido en abrir y cerrar de ojos, todo obra del propio Kiritsugu quien estaría trabajando con Maiya la cual tenía el misión de vigilar al master de Lancer.

Luego de que el edificio fuera derrumbado Kiritsugu llamaría a su compañera para indicarle el punto de reunión, pero en cuanto ella contestó se escucharon disparos, alertando al asesino de magos que corrió en su ayuda.

Al mismo tiempo, en la ubicación de Maiya, el cual se trataba de un edificio en construcción, ella había logrado esquivar el primer ataque en su contra el cual dejo su rifle de francotirador clavado al suelo, el responsable no era otro que el propio Kirei, ella lo reconocería y lo nombraría en un susurro, susurro el cual él logro escuchar por lo que supo que se trataba de una mujer solo por la voz.

Ella trataría de atacarlo, pero Kirei sería mucho más rápido y hábil logrando desarmarla y herirle la mano izquierda, esquivando también el ataque del sacerdote, él la felicitaría por lograr esquivar su ataque indicando que ella tenía entrenamiento, estando listo para eliminarla cuando una granada de humo es lanzada frente a él, oportunidad aprovechada por Maiya para escapar, el sacerdote no pudo verla por lo que tampoco seguirla, luego de que el humo desapareciera y viera la granada deduciría que alguien había venido en su rescate, algo que le serviría ya que supo que había un lazo emocional, por muy pequeño que fuera.

Mientras pensaba para si mismo, Assasin aparecería, esto molesto al sacerdote que les había ordenado permanecer ocultos a menos que fuera algo realmente importante.

 —Me disculpo master, pero hay algo que debe saber y créame que esto le interesara.

Kirei observo a sus espaldas por su hombro derecho, encontrando la imagen de Assasin arrodillado ante él, apoyado solo sobre una rodilla.

—Habla —ordeno.

Bueno gente, aquí otro cap de este fic, se que no pasa mucha acción, pero espero que lo hayan disfrutado, sin más hasta el siguiente capitulo.