Capítulo 34
Pov. Alexia
-Alexia, ¿te importaría leer las mentes de las personas capturadas? - me pide Alexander.
-De acuerdo, pero ten en cuenta de que yo leo mentes, no indago en los recuerdos, deberías hacerles algunas preguntas, y después yo te diría lo que pensaron.
-Está bien.
Él me indica que lo siga, y eso hago, por lo que me lleva a unas celdas subterráneas cuyo acceso se encuentra en este lugar, sigo diciendo que no pienso llamar casa a ésto, es demasiado grande para ser una casa. El lugar es bastante oscuro, se nota que los licántropos tienen mejor visión que los humanos o las brujas.
-¿No hay prisioneros? - pregunto al darme cuenta que todas las celdas están vacías.
-En la manada no suele haber problemas, y los que hay no son para encerrarlos, y a los que capturamos, como ahora, los matamos después de conseguir la información que queremos o cuando vemos que no hay forma de hacerlos hablar.
Asiento sin decir nada, no me gusta la violencia, mucho menos la muerte, pero entiendo que en estos casos no hay una opción mejor, tenerlos aquí por más tiempo del necesario, podría ocasionar problemas, no soy ingenua, o bueno, no tanto, me doy cuenta de las cosas, la vida es dura, la guerra más, y ahora mismo estamos en guerra.
-Aquí es, ¿prefieres entrar o quedarte fuera?
-Me da igual.
-Tal vez es mejor que entres, así si tienes alguna pregunta la puedes hacer.
-De acuerdo.
Alexander asiente y abre la puerta, dentro está uno de los hombres que capturaron, el cual está encadenado con lo que supongo son cadenas de plata, pero solo está él, entonces deduzco que iremos interrogándoles uno por uno. El sujeto al oír el ruido de la puerta alza la mirada y nos mira con odio, pero ni Alexander ni yo nos inmutamos.
-Vamos a hacerte algunas preguntas, y más te vale colaborar.
Será idiota, no pienso decir nada.
-¿Quién os envió?, ¿sois de la manada del alpha Miguel?
No, si te parece, somos del rancho de la tía Mónica - intento disimular mi risa con un ataque de tos.
-¿Te encuentras bien? - me pregunta Alexander preocupado.
-Sí, no es nada - no puedo permitir que el tipo se dé cuenta que puedo leer su mente.
-¿Por qué estabais con un grupo de brujas?, ¿cuál era el plan al aliaros?
Que alpha más tonto, pero en fin, mi alpha lo vencerá fácilmente y el beta recuperará a su hija, este tipo no tiene ni idea de lo que se le viene encima.
-¿Os dais cuenta que las brujas podrían tracionaros? - pregunto, a lo cual me manda una mirada fulminante.
¿Qué hace esta niñata aquí?, una bruja de pacotilla, ni que nosotros fuéramos estúpidos, ambos queremos destruir esta manada, es lo único que nos une, una vez que lo consigamos, no nos harán falta.
-¿No os dais cuenta que os estáis enfrentando a una de las manadas más poderosas del mundo?, por no hablar de la alianza que tienen con el gremio de cazadores y un pueblo entero de brujas, que estéis aliados con ellas solo da más motivos para que os maten - le sigo diciendo.
Por favor, ¿pretendes asustarme?, bien sé que ese pueblo de brujas son en realidad un pueblo de débiles brujas blancas, de seguro eres una de ellas, sencillamente patética, el aquelarre de Fátima acabará con vosotras, y los cazadores no servirán de nada esta vez, la victoria es nuestra.
-O sois muy estúpidos, o sois muy confiados, ningún plan que se os ocurra logrará tener éxito - le provoco.
Brujita de pacotilla, no sabréis por dónde os habrán atacado cuando llegue el momento, hoy habéis tenido suerte, pero más ataques como éste tendrán lugar, y cada uno peor al anterior, y cuando llegue el momento, estaréis tan débiles que no podréis con el ataque final.
-En verdad que eres idiota - le digo, me acerco, y le doy un puñetazo directo a su mandíbula - eso por lo de niñata, patética y brujita de pacotilla, capullo.
¿Cómo?
Él me mira desconcertado y yo le dedico mi mejor sonrisa condescendiente, tarde se da cuenta de mi don, ya sé todo lo que quería saber, lo único, me he quedado con ganas de darle otro puñetazo, en fin, tendré que contentarme con saber que dañé su estúpido orgullo y que pronto morirá sabiendo que la ha cagado a lo grande.
Los interrogatorios con los otros tres no fueron tan productivos, ya que ese capullo me dió casi toda la información, y los otros no fueron tan vanidosos u orgullosos, por lo que no pensaron tantas estupideces como el otro, la única información adicional que pude sacar fue por parte de una de las dos brujas, y es que Fátima pretende conquistar la otra manada nada más acabar con ésta, en verdad que es estúpido ese alpha.
-¿Y bien? - me pregunta Paula impaciente.
Alexander mandó llamar a todos para que contase todo lo descubierto, el único que no ha venido ha sido Axel, él aún sigue desaparecido, si no aparece después de terminar esta reunión, saldré a buscarlo, entiendo que necesite estar solo y desahogarse, pero ya lleva horas fuera, estoy preocupada por él.
-Es para hoy - se queja Paula.
-Paula, Alexia debe de estar pensando en cómo contarnos en unir todo lo que habrá leído en las mentes de esos tipos, dale tiempo - le regaña Aitana, a lo cual Paula regunfuña, no le gusta esperar.
-Su plan es bastante sencillo, varios ataques como éste con el fin de reducir nuestro número, y después un ataque final que acabe por completo con la manada, además, las brujas planean conquistar la otra manada una vez acaben conjuntamente con ésta.
-Son tan idiotas que no se dan cuenta de que las brujas les tracionarán después, por suerte para ellos no pasará, acabaremos con todos - asegura Paula con una sonrisa que no sabría concretar de qué es.
-Debemos estar preparados, sabemos sus intenciones, pero no cuándo atacarán - dice Alexander.
-Eso es fácil - dice John - Alexia puede hacer como hoy, estar pendiente para cuando se acerquen y así estar preparados.
-Usar el don muy seguido supone un desgaste considerable, lo mejor es hacer hechizos de avisos en los alrededores de la manada - dice Aitana.
Más gente se une a la conversación sobre qué se debería hacer, yo por mi parte me mantengo al margen, la verdad es que haber usado tanto mi don hoy me ha consumido bastante energía como bien ha destacado Aitana, pero no quiero irme a descansar hasta saber que Axel y Fenris están bien, por lo que decido desconectar hasta que se termine todo ésto para así poder ir después en su búsqueda.
Pov. Axel
Llevo un par de horas dando vueltas al rededor de la manada para asegurarme de que no haya nadie más cerca, a parte de despejarme un poco, no sé cómo podré mirar a mi familia cuando vuelva, le cedí el control completamente a Fenris y casi ocurre una desgracia, pero es culpa mía por permitirlo.
Exagerado, no fue para tanto.
Sí que lo fue.
Puf, nada que no hayan visto antes, están acostumbrados, y si es por nuestra mate, ya te he dicho que no te preocupes, no nos teme, deberías alegrarte, hasta me acarició.
Bien por ti.
Admito que tengo un poco de envidia, a pesar de ser novios desde hace un mes, no pasamos de un par de besos en la mejilla, se podría decir que el mayor acercamiento que hemos tenido ha sido éste, y fue con Fenris, no sé porqué ella es tan recelosa con el contacto, sé que no le gusta que la toquen, y que conmigo intenta ser más abierta, pero eso no quita que me duela su lejanía.
De repente siento un olor conocido y nada agradable, lo sigo y me encuentro con un lobo de tamaño considerable y pelaje amarillo cenizo, no puedo creer que esté aquí, ¿quién se ha creído?, le daré una lección y me aseguraré de que no se acerque a nosotros nunca más.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top