Capítulo 31
Pov. Alexia
No me puedo creer que ya haya pasado casi un mes desde aquella noche, el tiempo está pasando tan deprisa, pero a la vez tan lento, que me abruma e irrita en partes iguales, tal vez más lo segundo que lo primero, pero no se puede hacer nada, no existe ningún hechizo para controlar el transcurso del tiempo.
Este mes he estado muy centrada en dominar mi don y mi magia, sobre todo mi don, el cual se podría decir que anda como quiere, en momentos parece que lo controlo a la perfección, y en otros que no sé en qué cabeza me he ido a meter, y lo peor es que ni Esmeralda ni Peridoto me pueden ayudar, ya que ninguna de las dos comparten mi don, ni siquiera tienen uno.
Mi relación con Axel es un poco complicada, al parecer hicieron una apuesta él y su lobo, la cual ganó Axel, por lo que Fenris no podrá interferir en nuestra relación, creo que eso es bueno, siempre pensé que el lobo era mejor que el humano, pero en este caso es todo lo contrario, y a Fenris no hay quien le controle, ni siquiera Axel.
Paula parece que no ve el momento de enfrentarse a Nathaniel, el padre de Ariadna, y los pobres chicos que entrena están pagando su molestia. Ariadna por su lado, creo que es ajena a todo ésto, y en más de una ocasión ha concertado citas entre Aarón y Naiara, a lo cual le he ayudado en un par de cosas, y sospecho que también está ayudando a Axel con sus citas conmigo, sinceramente no me sorprendería.
Vanesa y Sofia han vuelto a la manada, ambas muy sonrientes, parece ser que sus vacaciones les fue divinamente, aunque no nos han dado detalles del viaje, dicen que quieren esperar para comprobar una cosa, aunque no sé a lo que pueden referirse, pero bueno.
La realidad entre mi hermano y Atenea va todo muy bien, el hecho de que Luis esté marcado les da ciertas ventajas, además de que ahora entrena con ella en lugar de con Aitana, por lo que Naiara está sola en las prácticas también, se podría decir que cada uno tiene clases particulares, solo que en el caso de Luis con besos y caricias incorporados.
Se podría decir que todo está bastante tranquilo en la manada, ninguno de los tres nos hemos unido oficialmente a la manada, pero todos saben quiénes somos, por lo que saben que soy la futura luna, lo cual ha sido un poco incómodo, por no hablar del hecho de que ahora estoy en algunos entrenamientos de Axel, en los que ser alpha se refiere, ya que tanto Alexander como Aitana consideraron que era una buena idea que fuera sabiendo del tema.
Ahora mismo en eso estoy, solo que realmente no estoy prestando atención, Alexander habla de un montón de cosas sobre la manada, pero la verdad es que no entiendo ni la mitad, como suele ocurrir, es por eso que la mayoría de las veces no le presto atención y más tarde se lo pregunto a Axel, así pasamos un rato juntos, y me entero mejor de lo que decía su padre, ya que él habla de las cosas como si fuera lo más normal y simple del mundo, y para alguien que no tiene apenas idea, no lo es.
Que quede claro, sé sobre la especie, no solo por los montones de historias que he leído, sino porque también he estado leyendo sobre la especie en la biblioteca que hay en la casa principal, pero lo que se refiere al funcionamiento interno de la manada, más allá de la jerarquía, no tengo ni idea, por eso le pido ayuda a Axel.
-Ahora iremos a los límites para que veáis el funcionamiento de las guardias - nos dice Alexander.
Intento de todas las formas posibles no bufar, prefiero mil veces mis prácticas con la magia, tengo que preguntarle a Aitana cómo no se durmió en el proceso de saber cómo funciona la manada y cómo ser luna, en verdad debe decirme ese secreto o algún día me quedaré dormida de pie en medio de una.
Ya que parece que ésto va a ir para rato, decido ocupar mi tiempo en practicar mi don, el cual por ahora solo es la telepatía, la telequinesis, o bien no la tengo, o no se ha manifestado todavía. Me concentro y al poco puedo oír los pensamientos de Axel, los cuales son básicamente las palabras de su padre, por lo que paso de su mente y me concentro en buscar cualquier otra mente cercana, tal vez la de algún guardia.
Ésto es muy arriesgado, está loco.
¡Que pensamiento más raro!, ¿quién podría tener un pensamiento así en medio del bosque?, ¿un joven que sigue a otro para gastar una broma? No, la voz del pensamiento parecía de un hombre ya formado, ¿un guardia? No, ¿a qué fin tendría ese pensamiento un guardia?, ésto es muy raro y no me gusta, mejor me concentro a ver si consigo captar los pensamientos de alguien más en los alrededores.
Mierda, no solo es él, es un grupo considerable de personas, y entre ellas hay brujas, ¿qué hace un grupo de licántropos y brujas cerca de la manada?, ésto no me gusta ni un pelo. Me fijo hacia delante y me doy cuenta que Alexander, Axel y un guardia están hablando y no parecen enterarse de nada, ¿en serio?
-Chicos - digo prácticamente gritando, ganándome la atención de los tres - hay un grupo considerable cerca de la manada, y estoy casi segura de que no vienen precisamente a tomar el té.
-¿Estás segura? - me pregunta Alexander, y yo le miro con cara de ¿en serio me lo estás preguntando? - avisaré a los guerreros.
-Y a mamá - dice Axel y Alexander asiente - ¿puedes saber exactamente lo que quieren? - me pregunta.
-Puedo intentarlo.
Me concentro y en seguida doy con las mentes de esas personas, pero mi don no parece querer ayudarme, ya que todos sus pensamientos se agolpan en mi mente y se me hace bastante difícil comprenderlos todos, por suerte puedo entender retazos de todos ellos y hacerme una idea de lo que pretenden.
-Quieren atacar por sorpresa, pues creen que un ataque a estas horas es menos predecible, lo que pretenden es dar un golpe inicial, menguar considerablemente las fuerzas de la manada para que el futuro ataque sea definitivo, al parecer licántropos y brujas se han aliado, al menos en este ataque, no he podido saber más, los pensamientos se mezclaban y no los entendía bien.
-Con eso basta, no se saldrán con la suya - dice Alexander muy serio.
Miro a Axel, y él parece estar igual que su padre, no quiero meterme en su mente por si acaso, bastante saturada tengo ya la mía con todos esos pensamientos, no pensé que sería tan duro controlar mi don, aunque ya Esmeralda y Peridoto me lo avisaron, la telepatía es uno de los dones más complicados e inestables que hay.
No pasa mucho tiempo antes de que los guerreros de la manada estén aquí, incluidos Noah, John, Mark, Vanesa, Sofia y Paula, la cual tiene una sonrisa que me indica que va a disfrutar mucho el combate, o que espera que Nathaniel esté ahí para poder matarlo, tal vez las dos cosas, con Paula una no puede estar segura.
Al poco llega Aitana, Aarón, Naiara, Atenea y Luis, y no estoy muy segura de que sea bueno que ellos estén aquí, pero ahora que lo pienso, yo estoy aquí y no pienso irme, por lo que es normal que ellos también quieran estar, lo sorprendente es que Axel no me haya dicho nada, yo pensé que él y Fenris me querrían lejos de la batalla, sin embargo no han dicho nada.
Entre Aitana, Atenea, Naiara, Luis y yo, creamos como un campo de invisibilidad al rededor de todo el mundo, así nadie externo sabrá que en realidad estamos aquí preparados para el ataque. No pasan ni dos minutos antes de que aparezcan los atacantes, y ahí empieza la batalla.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top